Un equipo SEAL (Tierra, Mar y Aire de la Armada de Estados Unidos) queda atrapado en una base secreta de la CIA con muchos terroristas encarcelados durante el ataque de unos insurgentes.
Sinopsis corta
El equipo del TENIENTE BLAKE HARRIS debe sacar a un importante sospechoso de terrorismo de una base secreta de la CIA situada en el mar Báltico. ZOE ANDERSON, una joven analista de la CIA, también participa en la misión.
De repente, unos insurgentes armados atacan la cárcel durante el traslado del prisionero, llamado Masu Mansur. El equipo del teniente Harris cree que Mansur tiene información sobre un atentado con bomba sucia que se llevará a cabo en Washington D.C. y hará todo lo que pueda para sacarle de la base con vida.
Sinopsis larga
El equipo del TENIENTE BLAKE HARRIS debe sacar a un importante sospechoso de terrorismo de una base secreta de la CIA situada en el mar Báltico. ZOE ANDERSON, una joven analista de la CIA, también participa en la misión.
Al llegar a la base los recibe el director JACK YORKE, un amargado veterano de guerra que luchó en Afganistán cuya esposa falleció en el ataque contra las Torres Gemelas el 11S. No le ha gustado nada recibir la orden de entregarle el prisionero MASU MANSUR a Zoe.
Harris y Zoe descubren que el equipo de Yorke ha torturado a Mansur, un empresario albano. A Zoe le repugnan los métodos que se utilizan en la cárcel y cree que Mansur tiene información sobre un ataque terrorista inminente que podría tener consecuencias tan trágicas como el 11S.
Unos insurgentes armados atacan la cárcel durante el traslado del prisionero. Los SEAL se quedan incomunicados, atrapados en el edificio principal, donde conocen al subdirector de la cárcel, TOM SHIELDS.
Shields quiere entregar a Mansur a los insurgentes, pero Zoe se niega a acceder a sus peticiones. Está convencida de que Mansur está al tanto de un atentado que se llevará a cabo en Washington D.C. Mansur niega la acusación. Dice que se radicalizó cuando su hijo fue asesinado en un ataque aéreo lanzado por Estados Unidos, pero no sabe nada de un atentado ni de una bomba sucia.
El enfrentamiento en la cárcel no da tregua y los SEAL reciben un mensaje por radio que envía Yorke desde el otro lado de la base. Les dice que pueden enviar una señal de socorro desde el sistema de comunicaciones de la base si alguno consigue llegar hasta allí. Antes de que pueda terminar el mensaje, los insurgentes toman la sala de comunicaciones.
Harris se presenta voluntario y consigue salir del edificio asediado por el conducto de ventilación. Según va atravesando la base ve que el líder de los insurgentes, un reconocido yihadista albano llamado SALLAH, interroga al personal de la cárcel y después los ejecuta. Sallah descubre que Mansur va a ser trasladado a Washington y cree que los ha delatado. Ordena a sus hombres que acaben con su vida.
Harris llega a la sala de comunicaciones y envía un mensaje de socorro. Yorke le rescata cuando le atacan los insurgentes.
Harris y Yorke consiguen volver al edificio principal, donde Sallah está preparando un ataque final contra los SEAL. Cegado por su sed de venganza, Yorke quiere torturar a Mansur durante el interrogatorio. Zoe no lo permite y exige que Harris intervenga. Dice saber cómo conseguir que Mansur hable, pero su plan solo funcionará si llega a Washington con vida.