En un pueblo solitario enclavado en una sierra mexicana, las niñas llevan cortes de pelo masculinos y se guarecen en escondrijos subterráneos. Ana y sus dos mejores amigas se instalan en las casas de los que han huido de allí y se visten de mujeres cuando nadie las ve. En su universo particular e impenetrable abundan la magia y la alegría. Entretanto, sus madres les enseñan a escapar de aquellos que las convertirían en esclavas o en meros fantasmas. Hasta que un día, una niña no llega a tiempo a su escondite.