Amaia (Laia Costa) acaba de ser madre y se da cuenta de que no sabe muy bien cómo serlo. Al ausentarse su pareja por trabajo unas semanas, decide volver a casa de sus padres, en un bonito pueblo costero del País Vasco y así compartir la responsabilidad de cuidar a su bebé. Lo que no sabe Amaia es que, aunque ahora sea madre, no dejará de ser hija.
Sinopsis larga
Amaia (Laia Costa) acaba de ser madre. Su pareja se ausenta durante meses y ella se ve desbordada, incapaz de atender a su bebé y recuperar su trabajo como traductora. Decide refugiarse en casa de sus padres con la esperanza de que estos cuiden de ella y su bebé en su hogar de la infancia, un bonito pueblo costero del País Vasco. Pero la vida tiene otros planes, su madre cae enferma y es Amaia quien tendrá que cuidar de todos. Se verá abocada a vivir la vida de su madre hace treinta años. Se convierte en un ama de casa, con una pareja ausente, al cargo de un bebé y una abuela enferma.
Los roles en la familia se invierten cambiando sus relaciones para siempre. La hija se convierte en la madre de todos. Amaia, que hasta ahora solo quiso a su madre, comenzará a entenderla.