Juntos en contra de su voluntad, el exsoldado estadounidense Jackson Briggs (Channing Tatum) y Lulu, una pastor belga malinois del ejército, recorren la costa del Pacífico para llegar a tiempo al funeral de su mejor amigo. En este divertido road-trip, juntos aprenderán a querer de nuevo y se darán el uno al otro la oportunidad de una nueva vida.
Sinopsis larga
Briggs vive una vida aislada después de sufrir una traumática lesión cerebral en una zona de guerra del Medio Oriente. Entrena duro para volver al ruedo en la seguridad privada, llega a fin de mes trabajando en una tienda de sándwiches. Para cambiar la mayonesa y el salario mínimo por primera clase y $200,000 al año, Briggs necesita una recomendación de su ex oficial al mando, el Capitán Jones. El problema es que Jones se niega a atender sus llamadas. Más tarde, Briggs recibe la inesperada noticia de que su compañero de equipo más cercano del Ejército, el Ranger K9 Riley Rodriguez, ha muerto al estrellar su moto contra un árbol.
En un bar, a las afueras de la base de Fort Lewis, Briggs se reúne con sus viejos amigos para celebrar la vida de Riley. Briggs acorrala al Capitán Jones y le ruega ayuda aunque obtiene la respuesta que teme: Jones no puede recomendar a Briggs sin tener una prueba de que su historial de convulsiones se ha resuelto por completo. A la mañana siguiente, en el parking desierto del bar, Briggs está durmiendo su resaca en su Bronco cuando Jones lo arrastra a la acera y le ordena que se presente ante el Batallón.
En el batallón, el guardia de la puerta no le permitirá el paso porque su identificación del ejército ha caducado. "¿Cuáles son las probabilidades de que yo sea del ISIS, hermano?" Jones llega en un Jeep y autoriza que le abra la puerta mientras Briggs saluda con un corte de mangas. Briggs sigue a Jones, pensando que éste ha cambiado de opinión y que finalmente obtendrá su recomendación. Sin embargo, Jones le pregunta si recuerda a Lulu, la perra K9 que tenía Riley. Su trastorno de estrés postraumático es tan grave que los veteranos del ejército se han dado por vencidos con ella; nadie se arriesgara con ella ahora que Riley no está. Eso significa que será sacrificada, un destino común que les sucede a muchos K9 de operaciones especiales retirados como Lulu. Así que Jones le ofrece un trato a Briggs: la familia de Riley ha pedido que Lulu acuda a su funeral. Es demasiado frágil para volar y el batallón está a menos de veinticuatro horas de salir hacia su próximo despliegue en el extranjero. Jones le dará a Briggs la recomendación que necesita, pero solo después de que él lleve a Lulu al funeral y después la lleve a una base remota del Ejército. Con el libro "I Love Me" de Lulu (registros y fotos que cada adiestrador guarda del servicio militar de su perro), Briggs acepta a regañadientes, mete a Lulu en una jaula en la parte trasera de su Bronco y emprende su misión.
En la carretera, Lulu no puede estar callada. Confinada en su jaula en la parte trasera del Bronco, ladra, hiperventila y, en general, molesta a Briggs. En un parking de un campo de armas, Briggs intenta dejar que Lulu salga de su jaula, pero ella no se fia de él. Dentro del campo, Briggs tiene problemas para mirar hacia abajo y le comienza una desagradable migraña. Al igual que Lulu, él también es un desastre de soldado, un caparazón de lo que era antes. Briggs se unas toma pastillas que siempre lleva con él.
De vuelta en el parking, Briggs encuentra a Lulu, fuera de su jaula, dándose un festín con los asientos de cuero del Bronco. Briggs pierde la cabeza. Unos minutos después regresa con algunos medicamentos para la alergia y perritos calientes para Lulu que le dejarán dormida.
En un bar en Portland mientras Lulu duerme en el Bronco, Briggs se pelea con una mujer tras otra. Para una bella de izquierdas, es un belicista derechista; y para la sexy intelectual es un cabeza hueca. Unos tipos tecnológicos super-cool hablan una versión del inglés que Briggs simplemente no entiende. Obviamente, no va a marcar esta noche.
En un callejón fuera del bar, Briggs le ofrece a Lulu, recién despertada, una ofrenda de comida por la paz. Pero Lulu no está dispuesta a coger nada de su mano. Más tarde, pasan dos mujeres, Zoe y Bella, y admiran dulcemente a Lulu mientras entablan una conversación con Briggs. Las mujeres revelan que son "Tantrikas" y explican que ayudan a sus parejas a liberar la energía bloqueada para que puedan experimentar todo el potencial del placer sexual. El trío se va conociendo poco a poco, primero con una pequeña charla, luego con algo de música y finalmente con... un masaje. Pero, Lulu (encerrada afuera en el coche) comienza a ladrar incesantemente, deteniendo la acción. Entonces, un vecino intenta romper la ventana del Bronco con una piedra para liberar a Lulu. Briggs le advierte que se detenga, pero es demasiado tarde. Tan pronto como la roca atraviesa la ventana, Lulu salta del Bronco y se agarra al brazo del vecino. Briggs intenta sujetarla mientras el vecino grita de dolor. Cualquier esperanza de un trío se ha ido para siempre.
De vuelta en la carretera, con una bolsa de basura pegada sobre la ventana trasera, Brigg explica a Lulu lo horrible que es como compañera de viaje. La conversación es bastante unilateral, pero de alguna manera, sentimos que se están comunicando. Lulu empieza a oler y gemir mientras avanzan por una preciosa carretera sinuosa, con árboles altos a ambos lados. Ella lucha, rápidamente se libera, salta a través de la bolsa de basura y sale por la ventana. Briggs se desvía hacia el costado de la carretera, y corre detrás de Lulu hacia un denso bosque de secuoyas. En el bosque, Briggs intenta seguir el rastro de Lulu. Cuando cree que la ha perdido para siempre, ve sangre fresca en el suelo; Lulu ha sido herida. Sigue su rastro hasta un invernadero aislado. Briggs entra lentamente, descubriendo que está en una casa escondida de cultivo de marihuana. De repente, un dardo tranquilizante le pica en el culo. Rápidamente lo saca, pero es demasiado tarde. Cae de cara al suelo. Más tarde, Briggs se despierta en un granero decrépito, atado a una silla. Un hombre gigante (Gus) aparece y comienza a interrogarlo. Le acusa a Briggs de ser un mercenario contratado por un productor rival. Briggs lo niega y suplica que le devuelvan a su perro. Gus amenaza a Briggs y se va, lo que le da tiempo a éste para liberarse y agarrar un hacha.
En una antigua granja, Briggs acecha a Gus en modo sigiloso. Justo antes de atacarle, ve a una mujer (la esposa de Gus, Tamara) que alimenta a Lulu de su mano. Lulu está
calmada, dejando que Tamara examine sus patas heridas. Briggs emerge de entre las sombras, sorprendiendo a Gus y Tamara, quienes instantáneamente revelan sus intenciones inesperadamente amables. Tamara dice que va a tratar la pata herida de Lulu, les da a Gus y Briggs algo para comer y les dice que salgan y hagan amigos. Fuera en el patio, Gus y Briggs miran el libro "I Love Me" de Lulu mientras Briggs describe las cosas que hizo Lulu en la guerra. Ella salvó innumerables vidas. Más tarde, Lulu, recién curada y Tamara se unen a ellos. Tamara dice de sí misma que es una médium de mascotas, y le da a Briggs su lectura sobre la condición de Lulu. Se pone nerviosa cuando menciona a la hija de tres años de Briggs, Sam. Cuando éste le pide a Tamara que se concentre en el perro, ella le cuenta que Lulu siempre ha soñado con dormir en una cama cómoda.
Más adelante, Briggs entra con gafas de ciego en un lujoso hotel de San Francisco, con un bastón en una mano y Lulu atada con una correa en el otro, con su chaleco de perro de servicio. De esta manera, Briggs consigue una suite en el hotel gratis, y la recepcionista agradece a Lulu por su servicio mientras Briggs el soldado ciego coquetea con ella descaradamente. Briggs y Lulu celebran su buena suerte en la lujosa suite del hotel, piden al servicio de habitaciones y se dan un baño. Más tarde esa misma noche, Briggs pasea con Lulu por el lobby del hotel para salir a pasear por la ciudad, pero Lulu detecta a un huésped, el Dr. Al Farid, que viste un thobe musulmán blanco, y sale corriendo tras él. Briggs lo persigue (el ciego que de repente puede ver) mientras todos corren de izquierda a derecha. Lulu se suelta de la correa, y las gafas de ciego de Briggs caen al suelo mientras éste ve a Lulu abordar violentamente al Dr. Al Farid frente a todo el hotel.
Detenido en una celda policial, Briggs le explica a un oficial que Lulu era una muy buena soldado que desafortunadamente estaba entrenada para rastrear a personas que se parecían al Dr. Al Farid. El policía resulta ser un ex policía militar que odia a los Rangers del ejército por la forma arrogante en que le tratan en el extranjero. Le dice a Briggs que estará en la cárcel el fin de semana y que tendrá que faltar al funeral. Pero, Briggs asume la responsabilidad de sus acciones, defiende el caso de Lulu como un héroe y le pide a quienquiera que esté detrás del cristal que la lleve al funeral de Riley. Conmovido, el Dr. Al Farid decide no presentar cargos. Briggs y Lulu siguen su camino no sin antes detenerse a despedirse del exmilitar. . . como en los viejos tiempos.
En Big Sur, Briggs lee más sobre Lulu en su libro "I Love Me". Aparentemente, Lulu tiene un hermano, Nuke, que vive con su adiestrador cerca de la playa en Los Ángeles. Briggs le dice a Lulu que él también tiene familia en Los Ángeles y le propone parar para ir a ver al hermano de Lulu, pero solo si Lulu se comporta.
En Los Ángeles, Briggs llama a la puerta del apartamento de su exnovia, Niki, con un unicornio de peluche en la mano. Cuando Niki abre la puerta, Briggs ve a su hija Sam, jugando con juguetes. Niki parece desagradablemente sorprendida de ver a Briggs y
rápidamente le dice a Sam que es solo un amigo. De vuelta en el Bronco, Lulu observa cómo Briggs, abatido, sale de casa de Niki con el peluche todavía en la mano. Briggs vuelve a subir al camión y le arroja el animal de peluche a Lulu. Ya hemos probado con mi familia, probemos con la tuya.
A las afueras de una casa pequeña en Santa Mónica, Lulu se libera de Briggs cuando percibe el olor de su hermano. Corre hasta la entrada y salta a los brazos del ex controlador de K9, Noah, luego juega felizmente con Nuke. En el patio de la casa, Briggs se entera de que Riley y Lulu se habían quedado con Noah, quien intentaba ayudarlos con su trastorno de estrés postraumático. Para los perros, dice Noah, la clave para curar el trauma es morder. Más tarde, cuando Noah y Briggs caminan hacia el Bronco para despedirse, descubren que han robado la camioneta y que las pertenencias de Riley (que se suponía que Briggs debía llevar al funeral) no están. Pero Noah sabe qué hacer. Le da a Lulu la placa de Riley y le indica que busque. Momentos después, Lulu y Nuke rastrean el aroma de Riley a través de las calles de Santa Mónica, y finalmente llegan a un campamento de personas sin hogar bajo el muelle de la ciudad, donde Lulu encuentra el equipo robado de Riley en una pequeña tienda. Mientras recoge las cosas de Riley, un hombre se acerca enfadado con el uniforme del ejército de Riley y dice ser un veterano. Briggs discute con el hombre, luego le quita a la fuerza el uniforme y lo deja retorciéndose en el suelo. Mientras regresan a casa, Noah le recuerda a Briggs la delgada línea que existe entre ellos y el hombre sin hogar. Mientras Briggs mete a Lulu en el Bronco, Noah le revela que Riley estaba gravemente deprimido y que es probable que se quitara la vida. Briggs no le da importancia, pero la noticia lo sacude profundamente mientras se aleja de allí.
En una carretera del desierto, el Bronco se estropea durante una tormenta. Briggs y Lulu encuentran un viejo cobertizo abandonado y entran para refugiarse. Los truenos y relámpagos tienen a Lulu absolutamente aterrorizada; ladra salvajemente y gruñe amenazadoramente a Briggs, a punto de atacarlo. Se siente impotente y enojado porque probablemente se perderán el funeral, Briggs camina solo bajo la lluvia, mira a Lulu agachada en una silla. Camina hacia ella y decide reproducir un DVD de Anatomía de Grey que encuentra en su libro "I Love Me". Los dos se acurrucan para esperar a que pase la tormenta. A la mañana siguiente, Briggs y Lulu abandonan el Bronco y parten a pie por el desierto. Cuando las piernas de Lulu fallan, Briggs la sube en su espalda.
Briggs y Lulu llegan justo a tiempo al cementerio. Lulu se acurruca junto a las botas de Riley a lado de los miembros de la familia en duelo mientras Riley recibe todos los honores militares por parte de una escolta del ejército. Se interpretan las salvas. Después del funeral, Briggs comparte un momento de condolencias con los padres de Riley, antes de que él y Lulu se vayan de nuevo. En un garaje al aire libre en el desierto, un mecánico repara el Bronco. De vuelta a la carretera, Briggs y Lulu se dirigen a White Sands cuando la realidad de la situación de Lulu comienza a pesar sobre Briggs. En un motel esa misma noche, Briggs se despierta en medio de la noche con una convulsión. Lulu está a su lado
protegiéndolo con amor, un amor que podemos decir que Briggs nunca había experimentado antes.
En la puerta del White Sands, Briggs se despide de Lulu y se la entrega a regañadientes a un cabo malhumorado que se la lleva atada con una correa. Lulu mira a Briggs, sin entender lo que está pasando. Mientras se aleja, Briggs mira por el espejo retrovisor y ve a Lulu luchando por volver corriendo hacia él. Se toma un tiempo para reflexionar, entonces da marcha atrás con el Bronco. En la puerta, Briggs corre hacia Lulu, la coge de la correa y rápidamente la monta de nuevo en el Bronco. Sin pensarlo, pisa el acelerador, despidiéndose de la promesa de su contrato de trabajo, y él y Lulu vuelven a la carretera. En el camino, Briggs y Lulu comparten un momento, intercambiado miradas de complicidad. Son un equipo.
Una serie de tomas: Briggs y Noah con Lulu, entrenando con el traje mordedor. Briggs y Lulu retozando en la playa mientras Lulu atrapa un frisbee. Briggs y Noah en un grupo de apoyo para veteranos con trastorno de estrés postraumático. En la casa de Niki, se abre la puerta principal mientras Niki y su hija juegan en el suelo del salón. Briggs entra y se sienta lentamente con ellos, observándolos jugar. Algo ha cambiado en él, para mejor.
En un acantilado con vistas al Pacífico, Briggs y Lulu observan la costa mientras Briggs escribe un poema para agradecer a Lulu por haberle salvado la vida.