En el París de 1981 se respira un aire de cambio y esperanza. Elisabeth acaba de separarse y deberá hacer frente a su nueva situación: mantener a sus dos hijos adolescentes y cuidar de sí misma. Consigue trabajo en el programa de radio nocturno “Los pasajeros de la noche” y allí conocerá a Talulah, una adolescente problemática y muy peculiar, a la que decide acoger en su casa. La influencia y el espíritu libre de la joven cambia la trayectoria de sus vidas para siempre.