Jennifer Lawrence es la productora y protagonista de SIN MALOS ROLLOS, una hilarante comedia de Gene Stupnitsky, director de Chicos Buenos y guionista de Bad Teacher.
Columbia Pictures presenta SIN MALOS ROLLOS, una producción de Saks Picture Company, Odenkirk Provissiero Entertainment y Excellent Cadaver. Protagonizada por Jennifer Lawrence, Andrew Barth Feldman, Laura Benanti, Natalie Morales y Matthew Broderick. Dirigida por Gene Stupnitsky. Producida por Alex Saks, Naomi Odenkirk, Marc Provissiero, Jennifer Lawrence y Justine Ciarrocchi. Escrita por Gene Stupnitsky y John Phillips. Los productores ejecutivos son Kerry Orent y John Phillips. El director de fotografía es Eigil Bryld. Diseño de producción de Russell Barnes. Montaje de Brent White. Vestuario diseñado por Kirston Mann. Música compuesta por Mychael Danna y Jessica Rose Weiss. Susan Jacobs es la supervisora musical.
SOBRE LA PELÍCULA
Jennifer Lawrence es una de las actrices más populares y aclamadas de su generación, aunque hay un género de cine que se le ha resistido hasta ahora. “Siempre he querido hacer una comedia, pero no encontraba la correcta”, dice Lawrence, que nos presenta la última comedia para adultos que se estrena en cines.
“Ha sido un placer poder hacer algo tan distinto, un género tan diferente”, confiesa Lawrence. “Me ha encantado rodar escenas tan divertidas con un diálogo tan absurdo. Ha sido muy divertido crear una película junto a un reparto tan brillante y gracioso”.
El proyecto se originó cuando Lawrence y su amigo, el director y guionista Gene Stupnitsky, hablaron sobre cuánto les apetecía trabajar juntos. Stupnitsky, antiguo guionista de The Office y director y guionista de Chicos Buenos, estaba justo buscando algo nuevo en lo que trabajar. Una noche mientas cenaban, Lawrence le preguntó en qué estaba trabajando, a lo que le respondió: “algo basado en un anuncio real de Craigslist (sitio web de anuncios clasificados) que encontraron los productores Marc Provissiero y Naomi Odenkirk”. Un padre sobreprotector publicó un anuncio buscando a una joven que sedujese a su tímido e inexperto hijo, aunque no solo para que tuviese su primera experiencia íntima, también con idea de transformarle en un joven universitario seguro de sí mismo. En el anuncio dejaba claro que el padre pagaría generosamente por un trabajo bien hecho.
“Me hizo reír a carcajada limpia, sobretodo porque estábamos tomando un martini”, dice Lawrence. “Le dije que me lo mandase cuando lo escribiese, y ha sido uno de los guiones más divertidos que jamás haya leído”.
“Creo que todo el mundo se siente identificado con las brechas generacionales”, dice Stupnitsky. “Hay algunos padres que hacen lo que sea con tal de que sus hijos salgan de casa y vivan experiencias reales”.
La productora Alex Saks ha sido de gran ayuda a la hora de desarrollar el proyecto. “Es el proceso creativo en el que más me he involucrado”, comenta Saks. “Cuando me sumé al proyecto ya habían escrito trozos del personaje de Maddie. Cada vez que leía una nueva versión del guion era como abrir un regalo. Gene y John se han esforzado por crear cada vez un personaje más complejo, gracioso, perspicaz y real. Por eso es un guion tan bueno, no se han conformado con algo que funcione, lo han llevado muchos pasos más allá”.
“Lo primero que me pregunté fue, ‘¿Qué tipo de padres harían algo como esto? ¿Cómo es la vida de una persona que responde a un anuncio así?”, dice Stupnitsky. Al escritor John Phillips se le ocurrió que podrían ser unos padres híper controladores, y entonces todo parece que tomó sentido. Stupnitsky y Phillips escribieron el personaje de Maddie con Lawrence en mente.
“Es una chica enérgica, con buen corazón, atrevida y divertida”, dice Lawrence. “Aunque también está desesperada. Quiere salvar la casa de su madre a toda costa, pero los impuestos no paran de subir y a la gente le cuesta cada vez más mantener su ritmo de vida con su sueldo”.
Esta oportunidad le surge justo cuando su situación económica está a punto de colapsar. Ahora Maddie tiene un verano para hacer que Percy salga de su cascarón o perderá todo lo que le importa. “Está intentando no perder su casa, la casa que pertenecía a su difunta madre”, explica Lawrence. “Le parece que es la única manera de no perder a su madre del todo”.
Stupnitsky y Phillips se estuvieron planteando qué rasgos debía tener el personaje de Lawrence, alguien antagónico a Percy. “¿Cómo sería esa energía tan distinta que Percy no tiene?”, dice Phillips. Aunque tras ver la interpretación de Lawrence en otras películas y su aparición en el show de Jimmy Kimmel lo tuvieron claro. “Nos dimos cuenta de que ella ya tiene ese tipo de energía. Su risa y sus reacciones son únicas. No tiene paciencia con gente chorra, es muy divertida de ver y tiene por momentos un aura agresiva. Hay algo intimidante de Jennifer que nos gusta mucho. Nos tiene aterrados a Gene y a mí. Ese es el tipo de cosas que hemos intentado introducir en el personaje de Maddie”.
“Gene es su amigo, así que conoce su increíble vena cómica, algo que nunca se ha visto del todo en cine”, dice Saks. “Es muy graciosa en persona. Gene quería que los espectadores conociesen la versión de Jen que solo han visto sus mejores amigos. Cuando ves su interpretación en el rodaje tienen todo el sentido, pero te aseguro que hasta ese momento Gene era el único que lo había visualizado”.
Aunque Lawrence es una actriz ganadora del Óscar y los guionistas sabían que además aportaría realismo y profundidad al personaje. “Las escenas cómicas no se sustentan por sí mismas”, explica Stupnitsky. “Es importante aprender cosas del personaje. Deben ir cambiando en cada escena. Maddie empieza siendo una chica egoísta, inmadura y enfadada, aunque al final vemos como encuentra cierto equilibrio y paz. Se ve forzada a conocer a Percy poco a poco y en el proceso aprende cosas sobre sí misma. En esta historia los dos crecen como persona”.
“Percy hace que Maddie se mire en el espejo y se dé cuenta de cómo trata a la gente”, dice Phillips. “La forma de tener citas actualmente, usando aplicaciones y demás, facilita que la gente se acabe ignorando. Eso es algo que nos ha interesado mucho explorar”.
Aunque no solo es Maddie la que ayuda a Percy. “En el refugio de perros en el que trabaja Percy hay un póster en el que pone, ‘¿Quién salva a quién?’”, dice Odenkirk. “Para mí ese es el tema principal de la película”.
Para el personaje de Percy, Stupnitsky y Phillips pensaron que debía ser alguien introvertido, un tipo raro que no sale de casa. “Es el alma de la película”, dice Stupnitsky. “Es un chico sobreprotegido que va a ir a Princeton, un chico muy, muy listo y muy sensible. Lo ha pasado mal en el instituto. Su vida social está en internet, como la de muchos chicos que hacen amigos en redes sociales y jugando a videojuegos. Básicamente vive en su habitación, así que necesita empezar a salir y conocer el mundo real”.
Cuando Maddie aparece en su vida no está buscando un lío pasajero, quiere una relación que signifique algo. “Es un idealista, un romántico”, dice Phillips. “Cree en el amor y necesita sentir una conexión antes de hacer nada con nadie”.
El problema de Percy es que lo lleva al extremo. Está tan obcecado sobre lo que debería ser una relación que no se da cuenta de lo que tiene delante. Stupnitsky y Phillips supieron desde el principio que Maddie no debía simplemente cumplir con su trabajo, ya que eso no es lo que Percy realmente necesita. Crean una Maddie que inicialmente piensa que tiene que enseñarle a ser guay, cómo ser un fiestero, cómo beber, cómo hablar con chicas y cómo tener sexo, aunque lo que Percy realmente necesita es confianza en sí mismo y la madurez para salir de su caparazón bajo sus propios términos.
Los cineastas sabían que encontrar al actor que pusiese cara a Percy sería difícil, y ciertamente lo fue, pero tras un extenso casting había un candidato que siempre sobresalía: la revelación de Broadway Andrew Barth Feldman. “Cuando Andrew entró en la habitación supimos de inmediato que él sería Percy”, dice Lawrence.
A Stupnitsky le impresionó desde el principio. “Conocimos a Andrew el segundo día y pensé al instante en lo bueno que era”, confiesa Stupnitsky. “Lo bordó. Su tono cómico y emotivo fueron perfectos. Vimos muchos otros actores, pero estaba tranquilo sabiendo que ya habíamos encontrado a Andrew. Estaba claro que él era el elegido”.
“Es un papel que me queda como anillo al dedo”, dice Feldman. “Gene no durmió muchas noches pensando en que no iba a encontrar a este chico. Para bien o para mal, yo soy ese chico”.
Feldman es también un consumado cantante; fue la voz principal de Dear Evan Hansen en Broadway. Stupnitsky ha echado mano también de estos talentos para crear el personaje de Percy. “John Phillips me mandó un vídeo de él interpretando, cantando y tocando el piano en Midtown”, dice Stupnitsky. “Pensé que debíamos introducir eso en la película. Es algo que complementa al personaje, es alguien que toca música pero solo en su habitación, nunca delante de nadie. Ayuda a entender su introversión y el caparazón que se ha creado. Cuando Percy le canta, se pueden ver muchísimas emociones en la cara de Jennifer. Es inesperadamente conmovedor y bonito. Es mi escena favorita de la película”.
Lawrence y Feldman tuvieron mucha química desde el principio y se fue acentuando a medida que avanzaba el rodaje. Es esta relación de confianza lo que ha propiciado interpretaciones tan intensas y atrevidas. “Tuvieron mucha química durante la audición”, dice Stupnitsky. “Tuvieron una dinámica que en el momento ni yo me di cuenta del todo. Han tenido mucha conexión desde el primer día. Ella salía y lo daba todo, lo que le forzaba a él también a darlo todo. Si ella le empujaba hacia un lado, él la seguía”.
“Jen está dispuesta a hacer cosas que a muchos otros ni se les pasaría por la cabeza”, dice Feldman, “cosas que me intimidan simplemente pensar en ellas. No podría hacer ni en mil años muchas de las cosas que hace en esta película. Incluso cuando una escena le asustaba, ha aparecido en el rodaje y se ha esforzado muchísimo hasta conseguirlo”.
Gracias al ejemplo de Lawrence, Feldman se ha animado a sobrepasar sus propios límites. “He tenido que hacer algo raro con mi cuerpo todos los días”, dice Feldman. “Cosas como que Jen bailase sobre mí. Hay otra escena en la que estoy sobre el regazo de Jen y ella me dice, ‘¿Eres mi bebé saltarín?’. Al principio le respondo que no lo sé, pero al final le digo que sí, que soy su bebé saltarín”.
En cada una de las escenas el reto ha sido crear una comedia alocada y salvaje y que siguiese pareciendo algo realista. “Percy vive en su mundo, pero le molesta la burbuja en la que sus padres le han criado”, dice Feldman. “Lleva una vida recluido jugando a videojuegos y enganchando al teléfono móvil. Lleva un estilo de vida compulsivo que le asusta abandonar. Cuando Maddie le conoce hace todo lo que está en su mano para romper esa burbuja”.
En un golpe de casualidad, el rodaje de SIN MALOS ROLLOS fue como volver a casa para Feldman. “Rodamos parte de la película en la misma calle donde está la casa de mis padres de Long Island, en Five Towns, Nassau County”, comenta. “Me he quedado en mi casa de infancia durante el rodaje. Solía ir de pequeño al sitio de pistolas láser que aparece en una escena. Nuestro campamento base lo pusieron donde dábamos todos los conciertos con el coro del condado. Ha sido muy extraño unir los dos mundos, pero también muy bonito. Ha sido como volver a casa de muchas maneras”.
SOBRE LOS ACTORES DE REPARTO
Los cineastas eligieron a Matthew Broderick y Laura Benanti para interpretar a los padres de Percy. “Hay espectadores de determinada edad que tienen una conexión emocional con Matthew Broderick por los papeles que ha interpretado”, dice Odenkirk. “Aquí interpreta a Laird. Él y su mujer son unos padres extremadamente ricos pero desconectados de su hijo que toman una decisión bastante cuestionable. Matthew está brillante en el aire paternalista que le da al personaje. Desde su punto de vista, ¿qué padre no haría lo que fuese por ayudar a su hijo?”.
“Tienen una forma desenfadada pero forzada de tratar a la gente y en realidad son muy controladores”, dice Broderick sobre los personajes que él y Benanti interpretan. “Se esfuerzan por parecer amigables y agradables, aparentar no ser dominantes, pero en realidad son extremadamente dominantes, y es muy importante para ellos obtener exactamente lo que quieren”.
Un buen ejemplo de las dos caras de Laird se puede ver en su pelo, para lo que Broderick se pone una peluca. “Laird quiere que el mundo sepa que todavía le gusta la fiesta”, dice Phillips, y eso lo consigue a través del peinado.
“Pensábamos que no iba a llevarla”, dice Phillips. “Estábamos seguros de que se la probaría y nos mandaría a tomar viento, pero le pareció genial. Esos fueron mis días favoritos de rodaje, no podía dejar de reírme con su pelo. Empezamos a escribir escenas alrededor de su pelo. Matthew estaba súper dispuesto a meterse en el papel de este esperpéntico señor de los Hamptons”.
“Creo que conozco a gente así”, dice Broderick. “Llevo una peluca tan grande que aunque estuviese fatal en la película la peluca mejoraría mi interpretación”.
Broderick y Benanti no se conocían antes de la película, pero encajaron desde el primer minuto. “Me siento muy cómodo con ella porque tenemos un pasado similar y los dos hemos trabajado en teatro”, dice Broderick. “Tenemos sintonía. Creo que es buenísima y muy graciosa”. Su conexión debe de ser real ya que acaban de protagonizar la producción más reciente de A.R. Gurney en Off Broadway titulada Love Letters.
Benanti es una actriz ganadora del Tony por su interpretación en Gypsy junto a Patti LuPone y saltó a la fama por su interpretación de Melania Trump en Late Night with Stephen Colbert. “Me encanta interpretar a personas muy muy ricas”, confiesa. “Aunque en la película he intentado crear algo creíble, real. La idea es que estas personas quieren tanto a su hijo que están dispuestas a hacer lo que sea. Hay que creerse que lo harían para poder entrar en la película y disfrutarla. He intentado por tanto darle un toque de realidad, pero al mismo tiempo parodiar a este tipo de personas, gente que se han olvidado lo que es vivir fuera de su burbuja”.
Benanti y Feldman tienen algo de historia en común. En 2018 Benanti presentó los Premios Nacionales de Musicales de Institutos, los Premios Jimmy, y Feldman recibió el galardón al Mejor Actor. “La conozco desde antes de que yo fuese conocido”, dice Feldman. “Fue muy amable conmigo cuando me introduje en la comunidad de Broadway con Dear Evan Hansen. Y ahora es mi madre en esta película”.
“Cuando Andrew y yo nos encontramos en la primera lectura de guion nos quedamos como, ‘¡Madre mía! ¿Te lo puedes creer?’”, dice Benanti. “Estuve a su lado en su primer salto profesional y vuelvo a estar en el siguiente”.
En el papel de Sara, la sarcástica mejor amiga de Maddie, y su marido Jim podemos encontrar a Natalie Morales y Scott MacArthur.
“Pienso en Jim como en un hombre de mundo que en realidad no ha viajado muy lejos de su hogar”, dice MacArthur. “Tiene una opinión para todo, pero ha aprendido más en el puerto y los bares que en la escuela, tanto para bien como para mal”.
“Sara está hasta la coronilla de su marido, pero ¿qué puede hacer? Está enamorada de él”, comenta Morales. “Sara y Jim tienen una relación funcional y disfuncional al mismo tiempo. Parece que se odian con cada palabra que se dicen, pero están claramente muy enamorados. Es un tipo de relación única, una muy divertida de interpretar”.
MacArthur, Morales y Lawrence han creado un triángulo perfecto. “Jennifer, Natalie y yo tenemos la habilidad de decir siempre el comentario más inapropiado y a rodearnos de gente que hace lo mismo”, dice MacArthur. “Por ejemplo, en una escena yo igual digo algo y Natalie me dice que me calle. Entonces Jen hace de árbitro mientras se pone de su lado y la escena entera funciona a la perfección. Cuando estás con tus amigos tiendes a hablar con más libertad y no importa si te metes con alguien, es fácil salir de ahí”.
“Han tenido una dinámica maravillosa entre los tres”, añade Odenkirk. “Scott, con esa voz tan grave, parece de verdad un tipo que trabaja en un barco pesquero, y Sara da la impresión de ser una mujer harta de lidiar con un tipo así. Es muy divertido de ver y ha sido genial que hayan sido la voz de la razón para Maddie”.
Podemos encontrar a lo largo de la historia otros conocidos intérpretes como Ebon Moss-Bachrach (de la serie The Bear), que interpreta a un conductor de grúa y ex de Maddie; Kyle Mooney en el papel de Jody, el sobreprotector antiguo cuidador de Percy; y Hasan Minhaj que interpreta a Doug Kahn, un antiguo compañero de clase de Maddie que se ha convertido en un agresivo agente inmobiliario.