Antonio Méndez Esparza (La vida y nada más) dirige la adaptación de la novela “Que Nadie Duerma” de Juan José Millás que ha coescrito junto a Clara Roquet (Libertad). El film está protagonizado por Malena Alterio (Vergüenza) en un registro en el que nunca antes la hemos visto, acompañada de Aitana Sánchez Gijón, Rodrigo Poisón, José Luis Torrijo, Manuel de Blas y Mariona Ribas.
QUE NADIE DUERMA está producida por Pedro Hernández Santos (Aquí y Allí Films), José María y Miguel Morales (Wanda Visión) y Que Nadie Duerma AIE en coproducción con la productora rumana Avanpost. El film cuenta con el apoyo de ICAA, Ayuntamiento de Madrid, Comunidad de Madrid, e Impulsa Castilla La Mancha, con la participación de Amazon, RTVE y TeleMadrid.
Antonio Méndez Esparza, tras estudiar Derecho en Madrid, se formó en dirección de cine en la universidad de Columbia, en Nueva York. Es profesor de cine en la Universidad Estatal de Florida. Tras ganar el Premio de la Semana de la Crítica en el Festival de Cannes de 2012 con su ópera prima Aquí y Allá, rodó La vida y nada más, primera película española en ganar el prestigioso Premio John Cassavetes en los Film Independent Spirit 2018. QUE NADIE DUERMA es su cuarta película.
NOTA DEL DIRECTOR (Antonio Méndez Esparza)
“Que nadie duerma” es una road-movie cañí por Madrid que se ha concebido desde un tono realista, directo y con el deseo de radiografiar el mundo de Lucía - encarnada por una magnética Malena Alterio - sus encuentros fortuitos con personajes de lo más peculiares. Un retrato generacional de una mujer que coge las riendas de su vida en un momento inesperado al volante de un taxi que frena y acelera entre la realidad y la ficción.
Rodada en su mayoría en el barrio de Usera, he co-escrito esta adaptación de la novela homónima de Juan José Millás junto a Clara Roquet. Esta novela es un cautivador relato que nos transportó desde la primera página a un Madrid realista, de diálogos precisos, cómicos y llenos de incertidumbre.
Después de veinte años viviendo en Florida, y después de tres largometrajes, ha sido emocionante rodar por primera vez en mi Madrid natal. Un Madrid vivo y diverso: unas veces delirante, otras trepidante, pero siempre auténtico.
“Algo va a suceder”, se repite constantemente el personaje de Lucía. Y sucede. Lucía renace, como tantas mujeres anónimas que caminan por las calles de Madrid y se deja llevar por la fantasía, la locura y la aventura. Ella que siempre hizo lo que se supone que tenía que hacer y que se pensaba invisible, ahora está decidida a que la vean.