Zahia Ziouani (París, 1978) es una de las directoras de orquesta más prolíficas de Francia, ha dirigido orquestas nacionales en multitud de países y es una de las pocas mujeres de renombre mundial dedicadas a este oficio. En su país ha recibido las más altas distinciones, es Oficial de La Orden Nacional del Mérito y Comendadora de la Orden de las Artes y las Letras de la República Francesa.
Pero el camino hasta aquí ha estado plagado de sacrificios y momentos duros. Zahia es una mujer y de origen argelino, dos realidades que desde joven le han obligado a multiplicar su esfuerzo.
Una historia real retratada por la cineasta y periodista Marie-Castille Mention-Schaar (A Good Man, La profesora de historia) que nos traslada al humilde distrito '93' francés del año 95, cuando Zahia y su hermana melliza Fettouma, con tan solo 17 años, ya soñaban con llevar su pasión, la música, a los lugares más inaccesibles.
Cumplieron sus objetivos: ella y Fettouma, reconocida violonchelista, viven de su pasión, pero además dedican buena parte de su tiempo a iniciativas y proyectos de sensibilización y promoción de la música sinfónica y operística contagiando su entusiasmo y dando oportunidades a los jóvenes con menos recursos.
Protagonizada por la ganadora del César a Mejor Actriz Revelación, Oulaya Amamra (Divinas, Fumar Provoca Tos) y Lina El Arabi (Brutus VS César) y producida por Easy Tiger y Estello Films. Galardonada en el Festival de Cine de Stony Brook (EEUU), el CINEMANIA Film Festival (Canadá) y seleccionada en el Festival Internacional de Cine de Odesa (Ucrania).
ENTREVISTA A LA DIRECTORA
P: ¿Cómo surge DIVERTIMENTO?
R: A diferencia de mis películas anteriores, que inicié y produje yo misma, Divertimento me la trajeron los productores Easy Tiger y Estello Films. Pensaron que la historia podría inspirarme, y tenían razón.
P: ¿Ya conocías a Zahia Ziouani y su hermana gemela Fettouma?
R: No, descubrí su historia al leer la primera versión del proyecto, escrita por Clara Bourreau. Me pareció conmovedor en muchos sentidos. En primer lugar, soy una apasionada de la música clásica, mi padre era pianista y director de orquesta, mi abuela era una gran violinista, ella fue quien me enseñó a tocar el piano. La música clásica y los conciertos formaron parte de mi infancia.
Luego, por supuesto, me atrajo el viaje de estas dos jóvenes de origen argelino que viven en el distrito "93", y todos los obstáculos que tuvieron que superar para alcanzar su meta. Me gustan las historias positivas. Ellas dan esperanza, son inspiradoras.
P: Todas tus películas tienen esta positividad en su esencia...
R: Eso es cierto. Hay gente que dice que tengo una visión utópica de la existencia. Es mi manera de ver la vida y al ser humano.
P: ¿Cómo se apropia alguien de un guion cuando una está, como tú, acostumbrada a ser quien origina la idea?
R: Necesitaba pasar tiempo con las personas cuyo viaje estaba siguiendo, ya que estaba escribiendo sobre ellas. Escribí sobre lo que aprendí de ellas. No invento mucho en mis películas, primero porque mi punto de partida es casi siempre una historia real, y segundo, porque la realidad es mucho más fuerte de lo que uno podría imaginar... Me conmueve que estas personas realmente hayan vivido y hecho estas cosas. Demuestra que son reales, que les pueden pasar a otros, que otros a su vez podrían hacer lo mismo y tener éxito. Pasé una cantidad considerable de tiempo con Zahia y Fettouma, así como con sus padres, y me basé en sus historias. Cualquier parte que sea pura ficción siempre estuvo arraigada en el ADN de mis personajes y lo que ellos habían vivido. La gente confiaba en mí compartiendo sus experiencias, su intimidad, y nunca querría traicionarlas.
P: La mayoría de los personajes de DIVERTIMENTO son muy jóvenes...
R: Me resulta estimulante, tanto para las generaciones futuras como para los mayores, mostrar el empuje, el coraje, el espíritu de lucha y el positivismo que tiene nuestra juventud.
P: Zahia y Fettouma parecen infatigables: todos los días viajan desde Stains a París para estudiar en el Lycée Racine, donde toman sus lecciones, una de violín, la otra de violonchelo. Imparten talleres en su pueblo. Zahia dirige su orquesta al mismo tiempo que se prepara para sus exámenes de dirección...
R: Tienen una fuerza de carácter y un coraje ejemplares. No estoy idealizando su historia; ¡Ellas simplemente no se detienen! La película no hace hincapié en las huelgas de 1995, cuando su padre las llevaba al colegio a las 3 de la mañana para evitar los atascos y llegar a tiempo. La película no muestra que ellas también iban caminando a casa desde la escuela todos los días durante ese período.
Sin embargo, eso no les impidió continuar compartiendo su pasión con otros en el Conservatorio de Stains. Ellas no solo lucharon por sí mismas; también querían que otros tuvieran éxito. Querían transmitir lo que sus padres les habían transmitido. La música clásica es algo especial: no la escuchas en todos los ámbitos de la vida. Zahia y Fettouma querían, y aún quieren, que todos tengan acceso a ella. "No va a cambiar el mundo", le dijo Zahia al alcalde de Stains, "pero puede cambiar a las personas".
Está esa escena en la que Fettouma crea un sistema con pegatinas de colores en las cuerdas de su violonchelo, para que Isabelle, una joven con síndrome de Down, por fin pueda aprender a tocar. ¡Isabelle se interpreta a sí misma en la película! Ella sigue siendo alumna de Fettouma a día de hoy, y este enfoque personalizado ha transformado su vida.
P: Además del sectarismo ligado al hecho de que las hermanas provienen de la banlieue y de que son de origen argelino, también deben lidiar con la misoginia de quienes ocupan puestos de poder. Incluso Sergiu Celibidache, el mentor de Zahia, empieza desalentándola: la dirección no es para mujeres.
R: Las humillaciones comienzan nada más llegar a la escuela: desde los alumnos, que se burlan de los pobres, hasta el director. Corté algunas escenas, pero se puede entender lo suficiente. Había un profesor de matemáticas que estaba sorprendido por las notas de Zahia: "¿Cómo puedes ser tan buena cuando vienes de Pantin?" Tenemos al director que mira a las gemelas y dice: "¡Sin zapatillas, señoras!" cuando todo el mundo a su alrededor las está usando. Vemos el terrible momento en que, después de que el jurado haya concedido por unanimidad a Fettouma una medalla de oro y un diploma, su profesor, un reconocido violonchelista, se opone a que los reciba o cuando el jurado del concurso de Besançon elimina a Zahia en primera ronda. Cualquiera de las dos hermanas se podría haber dicho a sí misma: "Tienen razón, renuncio". Celibidache es más ambivalente. Ha visto a mujeres intentar realizar estudios y fracasar después de dos semanas. Piensa que las mujeres no son lo suficientemente persistentes.
Sin embargo, Zahia lo deja atónito. Él es a la vez alentador y violento con ella. Probablemente él no cree que ella tenga la fuerza para continuar frente a todos los gritos y tanta irritación.
P: Divertimento, la orquesta sinfónica que Zahia Ziouani creó en Stains, reúne ahora a unos setenta instrumentistas de diversos orígenes y tiene como objetivo dar acceso a la música clásica al mayor número de personas posible. Como en LES HÉRITIERS (UNA VEZ EN LA VIDA), parece que la difusión de la cultura entre los más desfavorecidos está muy cerca de tu corazón.
R: Me llena de admiración esta joven que con diecisiete años logró unir a personas de tan diferentes procedencias como sus compañeros de Racines y sus amigos de Stains, para sumarse a este proyecto de locura. Admiro mucho su fe, su energía. La sociedad proyecta tanta autocensura: prohíbe a un gran número de personas interesarse por sectores que les parecen inaccesibles. El trabajo de Zahia, que muestra cuán innata puede ser la música, tiene algo de mágico.
P: En 1995, Pantin y Stains eran municipios comunistas. El gobierno local estaba muy involucrado en las artes.
R: Hicieron mucho por sus habitantes ofreciendo conservatorios, cursos de formación. Se ofreció una cantidad increíble de oportunidades a niños y a familias.
P: Volvamos a la película. En DIVERTIMENTO hay muchos actores, casi todos músicos. ¿Cómo hiciste para elegir a tantos?
R: Probablemente sea el casting más difícil que he tenido que hacer. Aunque las elecciones de Oulaya Amamra y Lina El Arabi parecían obvias, seleccionar a todos los músicos/actores que iban a acompañarlas fue un proceso largo y tedioso.
P: Lina El Arabi ya era una violinista sólida, pero Oulaya Amamra no tenía ninguna formación musical clásica...
R: Quería a Oulaya. Por supuesto, ella no sabía nada de dirección y muy poco de música sinfónica. Trabajó mucho con Zahia Ziouani, quien la entrenó antes y durante el rodaje. Lina no lo tuvo mucho más fácil porque tocar el chelo es muy diferente al violín. Con el fin de prepararse para la película, tomó muchas lecciones de Fettouma, quien continuó siguiéndola en el plató. Oulaya y Lina trabajaron duro durante meses para lograr el resultado que vemos en pantalla.
P: ¿Qué hay de los otros?
R: Quería que todos fueran músicos. Odio las películas en las que se ve que una escena está filmada y montada de tal manera que oculta el hecho de que no es el actor quien toca un instrumento; me saca del momento inmediatamente porque no me lo creo. Al mismo tiempo, tenían que ser capaces de actuar, lo que la mayoría de ellos nunca había hecho antes. Empecé viendo y escuchando cientos de videos, a veces pidiendo a sus creadores que grabaran otras canciones. Luego los recibía para las audiciones. Durante esta etapa, tengo mi propio método: me centro en la interpretación, por supuesto, pero también hago muchas preguntas sobre la vida de las personas que conozco, sus gustos, para saber quiénes son. Me inspiro en ellos. Los actores a menudo se sorprenden por la forma en que hago las cosas.
Después de este proceso de casting, reescribía escenas en base a un detalle, un gusto, una pieza musical que me había dado tal o cual candidato. Pensaba: "Esto podría ser interesante". Algunos de ellos habían estudiado en el Lycée Racine.
El otro desafío era, por supuesto, respetar la diversidad de los integrantes que iban a conformar la orquesta Divertimento.
Entre los músicos destaca un personaje en particular: Dylan, pianista y clarinetista, con quien Zahia ensaya para su audición como directora.
Lo interpreta Marin Chapoutot, ganador de "Prodigies" en 2016. Marin fue el primer clarinetista en ganar esta competencia. En ese momento, solo tenía trece años. Ahora tiene diecinueve años y ésta es la primera vez que actúa en una película.
P: ¿Cómo diriges a personas que nunca han actuado antes?
R: En primer lugar, les muestras mucho apoyo. Sienten que confías en ellos. Les damos herramientas para que puedan construir su personaje de antemano y sacar provecho de él durante el rodaje. A cada uno de ellos le pedí, como suelo hacer, que escribieran la vida y los gustos de su personaje. En 1995, ¿de qué hubieran disfrutado?, ¿qué hubieran visto y qué les hubiera gustado ver en el cine? Les pedí que leyeran sobre lo que estaba pasando política, cultural y socialmente en Francia durante esos años, para que pudieran alimentarse e inspirarse. Cuando tienen todo esto en la cabeza, están listos para improvisar.
P: ¿Improvisaste mucho con ellos?
R: Se trata de improvisación dirigida. En un momento dado sucede algo y les pido que reaccionen. Entonces voy construyendo a partir de su reacción. Es un método de trabajo que he desarrollado desde LA PROFESORA DE HISTORIA.
P: ¿Les hiciste ensayar antes de rodar?
R: Muy poco. Estoy muy interesada en lo natural, lo espontáneo. Pero a menudo filmo los ensayos, lo que mis técnicos no siempre aprecian. Me encanta: siempre surgen esos momentos que utilizo en la edición.
P: Cuéntanos sobre la elección de las piezas que interpretan.
R: "La Bacchanale" de Camille Saint-Saëns fue la elección obvia: es La pieza de Divertimento, y me gusta mucho. Mi prioridad era seleccionar obras que buscaran y encontraran al público, para captarlo. Era muy importante que evitara provocar el rechazo, que algunas obras pueden provocar en personas que no son amantes de la música. Entonces, por supuesto, el "Bolero" de Ravel y luego Schubert, Prokofiev... Obviamente lo discutí con Zahia. El objetivo era realmente elegir obras que correspondieran a la película y, espero, más específicamente a una película para el público en general.
P: Mencionaste los roles de entrenadores que jugaron Zahia y Fettouma. ¿Estuvieron permanentemente en el plató?
R: Estuvieron presentes durante casi todas las secuencias musicales. Era importante para Oulaya, que dirigía, y para Lina, que tocaba. Y, por lo tanto, era importante para mí.
P: Otro reto para la película fue rodar estas secuencias con sonido en directo.
R: Muchas personas me advirtieron: "Será demasiado complicado". Pero fue esencial para mí, aunque sabía que probablemente tendría que volver a grabar algunas de las pistas o mejorar algunas. Fue un gran trabajo para Guillaume Valeix, el ingeniero de sonido. ¡Y ensayamos mucho! Siempre estaré muy agradecida a los músicos por todo el increíble trabajo que hicieron.
P: ¿Tenías alguna referencia en mente al preparar la película?
R: Revisé algunas obras que trataban sobre la vida de una orquesta, incluida PROVA D'ORCHESTRA de Fellini, una película que descubrí gracias a Bertrand Tavernier. Es una película increíble. Mi enfoque fue identificar lo que no quería hacer y, al mismo tiempo, explorar ideas que me parecieron interesantes. Quería darle al espectador una comprensión de los aspectos de la dirección y las emociones que trae, que tal vez nunca hayan visto o sentido antes.
P: Naomi Amarger fue la directora de fotografía. La dirigiste cuando tenía dieciséis años en LA PROFESORA DE HISTORIA y dieciocho en EL CIELO ESPERARÁ...
R: Hasta ahora, he rodado todas mis películas con Myriam Vinocour. Ella y yo habíamos establecido una relación de trabajo muy sólida. Unos meses antes de que rodáramos DIVERTIMENTO, Myriam pasó a dirigir y yo ya no tenía director de fotografía. ¿Cómo podría conocer a uno nuevo en un proyecto que ya era tan complicado?
Se me ocurrió una idea loca: Naomi. Ella había estado en la escuela Lumière desde EL CIELO ESPERARÁ y yo había estado siguiendo su progreso desde lejos. Con ella había dirigido uno de los cortometrajes de la serie H24 de Arte. ¿Tenía y, sobre todo, sentía que tenía las habilidades para hacer un largometraje? La llamé: "Siéntate. Te voy a proponer algo y entenderé si te niegas porque es un desafío, tanto para mí como para ti. Pero sé que eres lo suficientemente honesta e inteligente para decirme si te sientes con ganas. Te enviaré el guion". Unas horas más tarde, lo había leído y me devolvió la llamada. Estaba a bordo. Trabajé con Naomi como si ya hubiera hecho largometrajes. Una vez más, se trata de confianza. No fue necesariamente fácil para ella, ya que me estaba conociendo bajo una nueva luz, con mis reflejos de directora y mis costumbres. Me cuidé de rodearla de un camarógrafo y un gaffer especialmente benévolos. Pensé que su edad -tiene veinticuatro años- también podría ser una fuente de ideas e impulsos que probablemente otro director de fotografía no tendría. Me limité a imaginar el potencial positivo de esta primera experiencia para ella. Y estoy muy feliz de haberlo hecho.
P: Hiciste lo contrario de lo que hicieron los profesores de Fettouma y Zahia. Te acercaste a ella.
R: Esta es parte de mi visión de la relación que debemos tener con la juventud. La gente confiaba en mí cuando era joven y, a veces, me daban responsabilidades enormes, y eso es algo que siempre he tratado de transmitir. Sea cual sea la edad, cuando tengo una intuición sobre alguien, la sigo. La falta de experiencia nunca me ha detenido.
P: En DIVERTIMENTO hay unas escenas muy bonitas en las que comprendes hasta qué punto cada sonido -el canto de un pájaro, el susurro de los árboles, incluso el paso de un tren- desencadena en Zahia un impulso hacia la música...
R: Para Zahia, la vida es música y la música es vida. Cuando lee sus partituras bajo las sábanas, cuando dirige una orquesta imaginaria en la azotea de su edificio, cuando escucha una sirena o coches pasando por un puente, los ruidos y sonidos se transforman en música. Quería que el espectador sintiera eso, a través de las imágenes, del montaje sonoro.
P: Cuéntanos sobre la edición.
R: Teníamos una cantidad enorme de material: el primer corte duró tres horas y cuarenta y cinco minutos. Pero tengo un editor maravilloso, Benoît Quinon, con quien trabajo desde LA PROFESORA DE HISTORIA. Esta película nos unió en nuestra manera de construir, de ver y de sentir las cosas. Incluso en los días en que nos dijimos a nosotros mismos que nunca lo lograríamos, progresamos
P: DIVERTIMENTO ofrece una mirada a la mujer que hoy no vemos tanto: resuelta y combativa, pero nunca hostil...
R: Mis películas son feministas desde BOWLING, donde busqué destacar a todas las mujeres que lucharon contra el cierre de su maternidad en Carhaix. También he apoyado a las mujeres durante años a través del "Círculo de Mujeres del Cine Francés" que fundé con otros profesionales del cine para permitir encontrarnos e intercambiar ideas y encontrar soluciones, transmitir información y construir, por primera vez en Francia, una red en un sector que antes había sido exclusivamente masculino.
Tengo muchos problemas con la violencia que gobierna cada vez más las relaciones entre géneros. Para mí, el feminismo debe ser constructivo, positivo. De esto se trata DIVERTIMENTO.
P: Has realizado siete películas desde tu debut en 2012. ¿Qué hay detrás de ese apetito?
Tuve el primer deseo de dirigir después de mi experiencia como guionista de MEET THE ELIZABETHS. Quería seguir escribiendo para luego dirigir lo que estaba escribiendo. ¿Me gustaría? ¿Sería capaz de hacerlo? Como productora, y porque había pasado mucho tiempo en el plató, había aprendido lo suficiente sobre la técnica para sentirme preparada. Lo que no sabía era la gran cantidad de relaciones que puede tener una directora con sus intérpretes. Cuando dirigí MY FIRST TIME, mi primer largometraje, sentí que había encontrado mi lugar. Y las ideas y deseos de películas nunca han dejado de llegar a mí.