Por esos tiempos, París prepara el gran concurso artístico del año. Además de obtener una gran suma de dinero, el vencedor sabe que tendrá asegurada una gran carrera artística. Hasta entonces, ni Picasso ni Modigliani quisieron nunca concursar. Pero Modigliani anda muy mal de dinero. Además, tanto Jeanne como él quieren salvar a su hijo. Por ello, por primera vez , acepta participar en un concurso. Picasso le imita. La noticia se extiende como la pólvora y todo París arde de impaciencia. Olga, la mujer de Picasso será su musa. Jeanne, la de Modigliani, Jeanne. El duelo se anuncia mágico.