Para poder entrar y salir de La Parra, tan sólo existe una puerta a la que no podemos acceder con la mirada.
Damián participa en un concurso televisivo donde premian la literalidad. Le han colocado su nombre en la camisa. Cuando el programa se va a publicidad, comienza la historia:
Érase una vez un hombre de mediana edad que vive de forma precaria en una gran ciudad. Al recibir la noticia de que su padre ha muerto, tiene que volver a Ferrol, su pueblo natal. Tras más de veinte años fuera, Ferrol se ha convertido en una ruina que todo lo atrapa.