CONFIDENCIAL (BLACK BAG), un relato de pasión, engaños y traición, está dirigida por Steven Soderbergh (Traffic, Contagio) a partir de un guion de David Koepp (Misión imposible, Parque jurásico). La película está protagonizada por Michael Fassbender (Shame, Steve Jobs), Cate Blanchett (Blue Jasmine, Carol), Regé-Jean Page (las series Los Bridgerton y Raíces), Marisa Abela (Back to Black, la serie Industry), Naomie Harris (Moonlight, Skyfall), Tom Burke (The Souvenir, Furiosa: De la saga Mad Max) y Pierce Brosnan (Fast Charlie, El secreto de Thomas Crown).

Los productores son Casey Silver (Emboscada final, Sin movimientos bruscos) y Gregory Jacobs (Al filo del mañana, la trilogía Magic Mike). La producción ejecutiva corre a cargo de David Koepp. AJ Riach (Sonic 3: La película, El último baile de Magic Mike) y Corey Bayes (Presence, KIMI) coproducen la cinta. El director de fotografía es Peter Andrews. El montaje es de Mary Anne Bernard. El diseñador de producción es Philip Messina (Ocean’s Eleven: Hagan juego, Madre!). Anna Lynch- Robinson (Los miserables, Wonder Woman) es la decoradora de sets. El diseño de vestuario lo firma Ellen Mirojnick (Oppenheimer, la serie Los Bridgerton). La diseñadora de peluquería y maquillaje es Frances Hounsom (El último baile de Magic Mike, The Crown) y la banda sonora es de David Holmes (Killing Eve, Ocean’s Eleven). Carmen Cuba (El aprendiz, Stranger Things) es la directora de casting.

Desde su primer encuentro hace 30 años, Steven Soderbergh y David Koepp se han convertido en dos de los cineastas más aclamados de Hollywood, con una sucesión de éxitos comerciales y de crítica al alcance de muy pocos. Su última película, CONFIDENCIAL (BLACK BAG), su tercera asociación como director y guionista, respectivamente, es un drama de espionaje poco convencional que lleva a los espectadores a descubrir los entresijos de la búsqueda supersecreta de un agente doble y la vida personal de dos espías de élite profundamente enamorados.

La clave de sus exitosas colaboraciones, según Soderbergh, es mantener entre ellos un perfecto equilibrio entre un saludable respeto y una cierta irreverencia. «Es obvio que a David se le da muy bien su trabajo y creo que, en líneas generales, le gusta cómo dirijo», nos cuenta. «Sabiendo eso, nos sentimos cómodos expresando nuestras críticas con honestidad. Ninguno de nosotros siente la necesidad de ofuscarse».

La idea de Koepp para CONFIDENCIAL (BLACK BAG) surgió mientras investigaba para la primera entrega de la taquillera saga Misión imposible. Entrevistó a varios agentes de inteligencia como parte del proceso de documentación y se sintió fascinado por sus vidas personales. «Todo lo relacionado con las técnicas y habilidades del espionaje era increíbles, y aprendí mucho más de lo que nunca hubiera esperado de aquella gente», asegura. «Una mujer me dijo que su trabajo era incompatible con mantener una relación. Una de las frases de la película está inspirada en mis conversaciones con ella. “Cuando puedes mentir acerca de todo, ¿cómo cuentas la verdad?”».

Esa idea le dejó huella. «Piénsalo», nos dice, invitándonos a reflexionar. «Si quieres tener una aventura, no podría ser más fácil. Basta con decir: “Me largo tres días y no puedes preguntarme dónde porque no tienes derecho a saberlo”. No puedes fiarte de la gente y la gente no se puede fiar de ti. Para George y Kathryn, esa información confidencial que no pueden compartir es parte de lo que ellos llaman su “black bag” o “bolsa negra”».

Soderbergh siempre anda a la búsqueda de guiones inteligentes y que tengan potencial para convertirse en películas comerciales protagonizadas por estrellas. «Me encanta lo inteligente que es el guion, como muchos de los suyos», afirma. «Y quiero que mi obra la vea la mayor cantidad posible de gente. CONFIDENCIAL (BLACK BAG) parecía presentar el mismo tipo de oportunidad que la saga Ocean’s».

Una de las mayores cualidades de Soderbergh como director es su decisión, a ojos de Koepp. «Si falta esa cualidad, puedes sumirte en un mar de posibilidades. No le asustan las contradicciones. En el mundo del espionaje, todo es ambiguo. Todo es un rompecabezas».

El cambio más significativo sugerido por Soderbergh durante el desarrollo fue trasladar la historia de Estados Unidos a Reino Unido, donde los principales personajes son empleados del NCSC. El NCSC, una división del Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (Government Communications Headquarters, GCHQ), se centra en la inteligencia de origen tecnológico, en oposición a sus entidades asociadas MI5 y MI6 (esta última famosa por ser la agencia de James Bond), que recaban información de la gente. «Me pareció una ubicación más novedosa para esta historia, aunque solo sea por la cantidad de series y películas ambientadas en el mundo de la inteligencia estadounidense», dice. «Londres me parece una ciudad muy cinemática. David coincidía conmigo en eso».

Al comienzo de la película, a George le dan una lista con cinco nombres, todos ellos sospechosos de traición. Se trata de integrantes de élite de la agencia. «Todos ellos saben de la existencia de Severus», dice Soderbergh. «Todos cuentan con autorización para acceder. No hay nadie más que esté al tanto. Son sospechosos por el mero hecho de estar al corriente».

«Hay un traidor infiltrado en las más altas esferas de la organización», dice Koepp. «Nadie está por encima de las sospechas. Lo llamativo es que uno de los sospechosos es Kathryn. Ahí surge una historia que yo nunca había visto. Quería saber cómo podían lidiar con aquello dos personas increíblemente entregadas la una a la otra».

Ambas partes de la pareja mantienen una actitud evasiva, tal vez incluso misteriosa en ocasiones, lo que alimenta el fuego de su pasión. «Es un contexto interesante para explorar la idea de la traición», asegura el director. «Gran parte de los conflictos del mundo se originan porque alguien se siente traicionado o porque se rompe la confianza. En esta situación, los dos personajes principales tienen una especie de carta blanca porque no están obligados a compartirlo todo y, de hecho, en determinados casos lo tienen prohibido».

El centro de la conspiración que a George le han pedido investigar es Severus, un malware capaz de desestabilizar por completo una instalación nuclear. «Severus es un compendio de trucos sucios que la agencia no quiere que salga a la luz», explica Koepp. «De hecho, muchos países ya han desarrollado software destructivo que se puede infiltrar en una estructura enemiga con resultados devastadores. Tal vez el más famoso hasta la fecha sea un gusano llamado Stuxnet que se introdujo en reactores nucleares iraníes y provocó el fallo de algunos de sus componentes».

Los thrillers políticos convencionales ponen a menudo un posible incidente a gran escala en el centro de la trama, tal y como Soderbergh señala. «Severus cumple la función de incidente provocador, pero lo más importante es que es una forma de conversar sobre lo que harías si crees que tu cónyuge está incumpliendo el acuerdo tácito existente en vosotros», añade.

Koepp admite sin reparos que las películas de espionaje son de las que más le gusta escribir. «La gente miente», dice. «Hay mucho en juego. No hay nada más divertido que escribir sobre eso. Tenemos toda la acción, el suspense y la tensión que el público espera de una historia de espías, y añadimos a la ecuación personajes atractivos e intrincados. En ocasiones, CONFIDENCIAL (BLACK BAG) se asemeja más a ¿Quién teme a Virginia Woolf? que a Misión imposible. Eso es una parte importante de lo que removerá al público. Me ha recordado a grandes películas de los 70 como Klute y Todos los hombres del presidente, con una gran dosis de paranoia y engaño. Ese sentimiento de que nos estuvieran mintiendo estaba muy presente en esa época y también cobra mucha fuerza en esta historia».


George y Kathryn
Elegantes, eruditos y muy, muy buenos en lo que hacen, George Woodhouse y Kathryn St. Jean sienten casi tanta devoción por su trabajo como el uno por el otro. El secreto del longevo matrimonio de George y Kathryn es muy sencillo, según Koepp. «Aunque suene cursi, se quieren de verdad», nos explica. «También ayuda que sienten una gran atracción física mutua, aunque tal vez lo más determinante sea que se entienden a la perfección como nadie. Ambos afirman que harían lo que hiciera falta para proteger al otro. ¿Quién no querría una relación así?».

Soderbergh cree que no solo es amor lo que les mantiene unidos. Además, se gustan realmente. «Con el tiempo, puede que eso sea más importante», opina. «Las escenas en las que están a solas juntos no abundan. Sin embargo, retratan a la perfección la relación porque toda la película, salga quien salga en realidad, trata en último término sobre el matrimonio de George y Kathryn. Ese es un buen ejemplo de la destreza de David como guionista. Es capaz de repartir lo que vas aprendiendo sobre ellos entre muchos otros personajes en escenas que van principalmente de otras cosas».

Fassbender y Blanchett son auténticas estrellas de cine en la cima de su profesión, en opinión de Koepp. «Tanto Michael como Cate despliegan un talento interpretativo excepcional, cosa que es fácil de decir, pero difícil de encontrar», señala. «Ambos entienden profundamente lo que es actuar en pantalla y cómo hacer más con menos. El trabajo de George implica ser contenido, frío. La actuación de Michael es una obra maestra del minimalismo. El papel de Cate es mucho más expresivo, pero, a menudo, te preguntas qué hay detrás de esa mirada».

Soderbergh trabajó con Fassbender en la película de 2011 Indomable y llevaba años queriendo repetir. «Siempre lo tengo en cuenta. Sabía que afrontaría sin miedo el reto de interpretar el mundo interior de George. Profundizó muchísimo creando a la vez una aparente calma que enmascara grandes turbulencias. Michael sabe dar a entender mucho sin grandes gestos».

Fassbender, según nos cuenta, también tenía ganas de volverse a poner a las órdenes de Soderbergh. «Me leí el guion y dije: “Me apunto”. Hablamos sobre detalles como qué clase de gafas llevaría George y si tendría una de esas cocinas de acero inoxidable. George es un personaje muy tradicional, muy chapado a la antigua y bastante obsesivo, así que las pequeñas cosas son importantes».

Aunque ninguno de los personajes de CONFIDENCIAL (BLACK BAG) esté basado en personas concretas, Koepp sí que tomó un detalle significativo del carácter de George del legendario espía de la CIA James Jesus Angleton. «En concreto, a los dos les gusta pescar lubinas», explica. «Para alguien que se dedica a cazar topos, pescar lubinas me parece la afición perfecta»,

A George también le gusta cocinar, lo que, tal y como Fassbender señala, es otra ocupación solitaria. «Ambas cosas le ayudan a recargar las pilas y centrarse a solas con sus pensamientos», dice el actor. «Pero Kathryn es su vida. Tiene esa facilidad para relacionarse de la que él carece y, al igual que él, es extremadamente inteligente. También es muy dominante. Su propósito en la vida es servirla y protegerla.

El primer paso en el plan de George es invitar a todos los sospechosos a cenar a su casa. «Organiza una especie de juego de verdad o atrevimiento para sus invitados», nos cuenta Fassbender. «Tiene los cinco sentidos puestos en todo el mundo menos en Kathryn. La información que recibe no está necesariamente vinculada a Severus, pero es bastante reveladora en lo que a sus relaciones respecta».

Kathryn es un personaje que requiere un toque de ese glamour de la vieja escuela de Hollywood, además de dotes de interpretación extraordinarias. «Cate justo tiene ambas cualidades», asegura Soderbergh. «A lo largo de los años, siempre se ha mantenido en contacto para ver si había algún proyecto que nos pudiera cuadrar juntos, y eso me halaga. Cuando surge algo, siempre conecta de inmediato».

Fassbender asegura que Blanchett se tomó muy a pecho una nota del guion que es esencial para el personaje. «Decía que allá donde se sentara, Kathryn siempre encabezaba la mesa. Pero Cate también aporta algo que yo no vi escrito sobre el papel. Hay mucha ambigüedad en su interpretación. Kathryn se ha forjado un muro exterior difícil de rascar incluso para George, pero en su interior también hay vulnerabilidad. Como asegura su colega Freddie, si algo es seguro es que esta pareja está dispuesta a hacer lo que sea el uno por el otro».

CONFIDENCIAL (BLACK BAG) supone el tercer proyecto de Blanchett a las órdenes de Soderbergh. La actriz asegura que ni siquiera leyó el guion antes de decirle que sí. «Solo le pregunté: “¿A quién interpreto?”. Era una película escrita por David y dirigida por Steven. Esa era toda la información que necesitaba. Steven tiene un estilo increíble y ha probado muchas cosas como cineasta. No es de los que se encasillan. Entiende la perspectiva externa de estos personajes, el modo en que se mueven por el mundo casi como panteras».

«David sabe cómo crear fabulosos dramas narrativos llenos de fuerza que, además, resultan muy entretenidos», continúa. «Entiende cómo jugar con las expectativas del público de un modo delicioso, y a continuación te ofrece algo aún más gratificante de lo que estabas esperando».

El guion no la defraudó. «CONFIDENCIAL (BLACK BAG) tiene una faceta de thriller muy gratificante», asegura. «Pero no se sirve de ningún truco ni se reserva información para capturar tu atención. El público descubre cosas rápidamente y de formas inesperadas. También es un estudio psicológico que te hará querer adentrarte en su mundo. Este tipo de matrimonio es algo inédito para mí. George y Kathryn matarían literalmente el uno por el otro, lo que es una gran premisa para una película, sobre todo si es de espías».

Pero Kathryn se guarda ciertos secretos, incluso de cara a George, según nos cuenta la intérprete. «Es una persona muy dueña de sí y una increíble observadora de la gente. No hace prisioneros ni comparte confidencias. Su matrimonio es para ella lo único sagrado. La emoción de su carrera profesional y la profunda confianza que se profesan son los verdaderos logros de su vida. Hay muchas cosas de las que no tienen que hablar, cosa que les viene de maravilla. Supongo que ambos podrían considerarse personas complicadas, pero tal vez muchos de los individuos que se dedican al espionaje lo sean. Son gente sin nada que perder».

Los cineastas pudieron contactar con espías reales del Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (Government Communications Headquarters, GCHQ), la organización matriz del NCSC, que aceptaron colaborar aportando determinados datos no clasificados de su trabajo. Ciertos miembros del reparto, entre ellos Fassbender, Burke, Abela, Brosnan y Page, quedaron con agentes del GCHQ y operativos del NCSC, la mayor parte de los cuales solo podían brindarles su nombre de pila (asumiendo que siquiera eso fuera un dato real).

Blanchett, quien trató de dar por su cuenta con una espía de verdad para que la aconsejara sobre su personaje, no dio con muchas candidatas dispuestas a ayudarla. «Supongo que si alguien como yo fuera capaz de dar con una fácilmente, la espía en cuestión no estaría haciendo demasiado bien su trabajo», apunta. «Pero Kathryn no está basada en nadie en concreto. Esto es más un retrato de su matrimonio, que resulta estar enmarcado en un entorno de espionaje».


Dentro de la agencia
Soderbergh ha arropado a sus estrellas con un elenco de reparto que incluye a algunos de los actores y actrices más destacados de Reino Unido, como Pierce Brosnan, Tom Burke, Naomie Harris, Regé-Jean Page y Marisa Abela. «Todos fueron fabulosos»; confiesa Fassbender. «Cada uno de ellos aportó lo mejor de sí y enseguida pudimos trabajar juntos. Tenía que ser así, porque Steven no es de los que hacen muchas tomas, así que es importante estar preparados desde la primera».

Los otros cuatro sospechosos de la lista de George son amigos y compañeros de profesión, y entre ellos está Freddie Smalls, interpretado por Burke. Freddie fue en su día una gran promesa, pero su desastrosa vida personal acabó por estancar su ascenso. Recientemente, lo han rechazado para un puesto que deseada mucho.

«La situación de Freddie se complica por el hecho de que es un bala perdida», dice Soderbergh. «Se trata de un personaje interesante; muy brillante, un poco autodestructivo, pero encantador. Tom irradia inteligencia en pantalla. Me fijé por primera vez en él en The Souvenir y llevo desde entonces siguiendo su progreso. Ha trabajado con George Miller y Joanna Hogg, así que le interesan los directores muy particulares, y fue divertido conversar sobre eso».

Con un problema con el alcohol y un abultado historial de novias jóvenes, Freddie se ha convertido en un peligro para la seguridad nacional. «Fue el personaje que más me divertí creando», confiesa Koepp. «Sabe perfectamente que su falta de autocontrol ha tenido mucho que ver con no conseguir un ascenso, pero aun así se siente ninguneado».

Para Freddie, la mentira se ha convertido en su respuesta por defecto, según Burke. «Lo cierto es que es espantosamente fácil caer en el hábito de mentir y muy difícil dar marcha atrás», observa. «Es parte del mundo en el que viven. Las historias de confianza y traición pueden ser deliciosamente enrevesadas».

Su larga relación de amistad con George y Kathryn también se ha complicado con el paso del tiempo. «Hay problemas de estatus», explica Burke. «Los límites son confusos. En ocasiones, se adivina un cierto nivel de inquietud y falta de confianza entre ellos. Steven y David conocen perfectamente este estilo y este género. Lo utilizan de un modo casi alquímico. Hay momentos de comedia inesperada y montones de sorpresas».

Freddie mantiene una relación romántica con su compañera de profesión Clarissa, que también es sospechosa. «Ha llegado al equipo después que los demás», dice Burke. «Ha tenido montones de novios en el pasado y el dato sale a la luz de una manera muy inesperada durante la primera noche que quedan a cenar gracias al jueguecito de George».

Marisa Abela, que interpreta a Clarissa, recibió toda clase de elogios en la industria cinematográfica por encarnar a Amy Winehouse en Back to Black, papel que le valió una nominación al BAFTA a la Mejor Estrella Emergente. «Sabía que se iba a estrenar Back to Black y me habían hablado muy bien de su interpretación», dice Soderbergh. «Cuando la vi, todo cuanto me dijeron quedó confirmado. Esta película suponía para ella una oportunidad de hacer algo completamente distinto. Podría decirse que su personaje tiene un nivel de emotividad del que los demás carecen. Clarissa es el personaje que más cambia en el transcurso de la película».

Clarissa es el personaje más joven e impresionable. «Es la que más reacciona como lo haríamos cualquiera de nosotros en ese tipo de situación», dice Koepp. «Cree en el trabajo, pero le impactan sus compañeros. Sabía que sería un mundo de secretos, mentiras y trucos sucios, pero nunca pensó que se encontraría con un puñado de personas que beben demasiado, que probablemente se droguen demasiado y que, desde luego, tienen relaciones sexuales con todo tipo de gente. Y el destino de la nación está en sus manos».

Para Abela, CONFIDENCIAL (BLACK BAG) ha supuesto la oportunidad de trabajar con artistas de talento a los que admira desde hace años. «El guion no se parece a nada en lo que yo haya trabajado con anterioridad», dice. «Clarissa se presenta como una persona fuerte y feroz, pero también es bastante sensible, posiblemente demasiado para ese mundillo. Le atrae, pero la brutalidad que descubre es impactante».

En su lugar de trabajo, se fomenta el salir con compañeros. «Si permaneces dentro del círculo, es menos probable que haya fugas», dice Abela. «Pero es difícil, sobre todo porque existe la condición previa de no contar toda la verdad. Ha sido increíble trabajar con Tom Burke. Aporta muchísima vida a todo lo que hace».

La importantísima escena de la primera cena se rodó el primer día de Abela en el set. «¡Fue sin duda un momento memorable de mi carrera profesional!», confiesa. «Miraba alrededor de aquella mesa y veía a artistas de un talento asombroso, y no paraba de pensar en la suerte que tenía. George tiene la esperanza de que alguien saque a relucir algo incriminatorio sobre su vida profesional. Pero, al final, lo que sale a la luz es más bien una gran dosis de trauma interpersonal y conflictos. En vez de hablar de Severus, acaban hablando de sus vidas privadas, lo que no es de gran ayuda para George».

Nominada al Oscar® por su interpretación en Moonlight, Naomie Harris comenzó su carrera profesional como actriz a los 11 años. «Llevaba mucho tiempo queriendo trabajar con Naomie», explica Soderbergh. «Esta era la oportunidad perfecta. Necesitábamos a alguien que transmitiera inteligencia y un carácter inquisitivo para interpretar a la psiquiatra de la agencia. Cuando su personaje hace preguntas, sientes que ve realmente el fondo de las personas. Los inspecciona y dispone de muchas herramientas».

El trabajo de la Dra. Zoe Vaughan es mantener a los agentes vivos, a salvo y centrados en sus misiones. «Su cliente es la agencia, aunque sea en realidad un compendio de muchos clientes», explica Koepp. «Kathryn sugiere que Zoe es muy entrometida, y da bastante en el clavo. Le atrae la faceta atractiva del trabajo de espía y escuchar todas esas cosas que se supone que no debería saber».

«La doctora hace todo lo necesario para cumplir con su cometido», nos cuenta Harris. «Es una mujer muy compleja. Es distante, manipuladora y depredadora en muchos sentidos, pero también sabe entender increíblemente bien a la gente».

La perspectiva de trabajar con Soderbergh y un pequeño reparto encabezado por Fassbender y Blanchett la atrajeron al proyecto. «Kathryn y George son los protagonistas indiscutibles, pero todos los personajes de la trama tienen un desarrollo completo; son únicos, complejos y fascinantes», dice. «Me aterraba un poco esa escena entre Cate y yo. Estamos solo las dos en el despacho de Zoe y hay muchas páginas de diálogo. Zoe siempre está absolutamente centrada en hacer que su paciente baje la guardia para sacarle la verdad. Sabe que Kathryn la está mintiendo y no duda en emplear todas las tácticas posibles para llegar al fondo del asunto».

Según Blanchett, nunca tuvieron ocasión de ensayar esa escena tan intensa. «La mayor parte de las veces hay que hacer como si fuese la primera vez, pero es que en ese caso concreto lo era», dice. «Lo que Naomie aporta en pantalla es de una gran riqueza. Como persona, es incapaz de mentir, y sientes eso con ella también en su faceta de actriz».

En el papel del coronel James Stokes, Regé-Jean Page es tanto un paciente de Zoe como su amante. «Como mucha gente, la primera vez que vi a Regé fue en Los Bridgerton», dice Soderbergh. «Me pareció que lo tenía todo para ser una estrella cinematográfica con su aspecto, su aura y su carisma, todo ello perfecto para este papel. Stokes es despectivo con el resto de la gente, probablemente incapaz de amar. Es todo un elemento. Cuando hablamos, lo primero que le pregunté fue: “¿Te parece bien interpretar a un auténtico capullo?”. Se río y me dijo que sería divertido. Supo entender lo que requería tanto el papel como la propia película».

Trabajar con Soderbergh fue un proceso inmersivo y extremadamente natural para Page, sobre todo porque el director a menudo se ocupaba personalmente de la cámara. «Steve observa cada detalle de cada escena como un auténtico halcón», dice el actor. «Eso le permite reaccionar a cualquier cosa que no tuviera planeada y capturar momentos inesperados muy visceralmente».

Los personajes de CONFIDENCIAL (BLACK BAG) encarnan papeles intensos, superhumanos, con los que la mayoría de la gente solo pueden soñar... o tener pesadillas, en opinión de Page. «Intentan aferrarse a su humanidad y hallar una intimidad y una honestidad reales. Pero el espionaje es un negocio sangriento».

Aunque el actor nunca calificaría a Stokes de tipo feliz, cree que se trata de un personaje de gran disciplina y todo un absolutista en el plano moral. «A su parecer, es un auténtico héroe», dice Page. «Pero no creo que mucha gente comparta esa opinión que tiene de sí mismo. Esa contradicción es parte de lo que hace que sea tan interesante».

George ha sido mentor y un modelo a seguir para Stokes, además de un competidor y un obstáculo. «Michael imprime muchísima intensidad a su personaje», dice Page. «Siempre es increíblemente generoso, como todos los integrantes del reparto. Sentarme a la mesa con ellos en la escena de la cena fue como competir en un torneo de tenis con Federer, Nadal, Venus y Serena. La escena evolucionó y creció porque todo el mundo generaba novedades y aportaba cosas nuevas entre tomas. Si te despistabas un instante, perdías el tren, que pasaba volando».

«CONFIDENCIAL (BLACK BAG) es un puzle que el público debe sacar de la caja y montar por sí mismo», añade. «Tiene un montón de capas y vamos pelándolas poco a poco hasta descubrir una espeluznante sorpresa en el interior. Esta gente vive en un mundo de puñaladas y subterfugios, con la constante amenaza de la violencia a punto de aflorar a la superficie. Tratar de averiguar quién es cada cual en oposición a quienes dicen ser mantendrá a los espectadores en la incertidumbre».

Arthur Steiglitz es un veterano hombre de estado de la agencia, un experto en espionaje con una extensa carrera a sus espaldas al frente del NCSC. ¿Quién mejor para el papel que Pierce Brosnan, el mismísimo James Bond? «Nos alegramos muchísimo de que Pierce aceptara», confiesa Soderbergh. «Dado su currículum, nos preocupaba que sintiera que ya había interpretado suficientes papeles en este universo. Por suerte, ni él ni yo veíamos el papel similar a nada de lo que hubiese hecho anteriormente. Aportó una energía increíble al set».

La oportunidad de trabajar con Soderbergh, Blanchett y Fassbender era demasiado buena para que Brosnan la dejara pasar. «El rodaje fue intenso», rememora. «En mi primer día, me reuní con Steven por la mañana. Me dijo que no me sentara, que íbamos a rodar una escena de seis páginas. Pensé: “Va a ser un día largo”. Pero a las 3 de la tarde ya habíamos acabado. Fluye como el viento».

«Arthur es del Servicio Secreto de Inteligencia hasta la médula», prosigue Brosnan. «Es muy culto, con un toque perverso, y su moralidad es cuestionable, pero va como un pincel con trajes a medida fabulosos. Sobrevive con un riñón y un ego gigantesco».

La tendencia de Soderbergh de dar libertad interpretativa a sus actores fue un soplo de aire fresco para Brosnan. «Como David Koepp ha hecho un trabajo increíble con el guion y el personaje está perfectamente plasmado sobre el papel, solo tuve que dejarme llevar».

Se cuenta entre los fans de sus compañeros de reparto en CONFIDENCIAL (BLACK BAG). Según sus propias palabras, «Cate Blanchett siempre es absolutamente impecable. Su belleza, su intelecto y su humanidad brillan con luz propia. También he visto muchas veces actuando a Michael Fassbender y siempre hace una labor asombrosa. Tom Burke, con quien estuve trabajando ayer mismo, nunca deja de asombrarme».

El propio Burke se quedó un tanto deslumbrado tras su primera escena con Brosnan. «¡Es nuestro M!», señala. «En la escena, no está nada contento con que se haya filtrado información. Yo estaba allí con Regé y Michael, y Pierce andaba de un lado a otro detrás de nosotros. Después, no pude evitar comentarles a mis compañeros que sentía como si hubiera estado en el despacho del director. Es brillante».

Brosnan está deseando que el público disfrute de CONFIDENCIAL (BLACK BAG). «Quiero que los espectadores sean incapaces de moverse de su asiento, deseosos de saber qué va a ocurrir», dice. «Espero que se sientan fascinados y embrujados por las interpretaciones y por la historia de amor a la que hemos dado vida dentro de un nido de víboras».


Casa de espías
CONFIDENCIAL (BLACK BAG) se rodó en Pinewood Studios y en localizaciones reales de la zona centro de Londres. El coproductor AJ Riach, que también había trabajado en la misma ciudad en El último baile de Magic Mike, se mostró encantado cuando se enteró de que el director regresaba a Londres para rodar una épica película de espionaje. «Comenzamos inmediatamente a unir las piezas del rompecabezas», dice. «Reclutamos al diseñador de producción Phil Messina, la decoradora de sets ganadora de un Emmy Anna Lynch- Robinson, la diseñadora de vestuario nominada al Oscar® Ellen Mirojnick y la diseñadora de maquillaje y peluquería Frances Hounsom, todos ellos ya con experiencia trabajando a las órdenes de Steven. Queríamos conseguir un look elevado, sofisticado y lujoso».

Soderbergh y Messina tenían en mente como hogar de George y Kathryn una elegante casa adosada en Londres, tampoco demasiado llamativa. Querían encontrar una casa de estilo georgiano despejada, sin recovecos donde esconder nada.

«George y Kathryn tienen buenos sueldos», dice Soderbergh. «No tienen hijos y están obsesionados con su trabajo, así que no cogen demasiadas vacaciones. Tiene todo el sentido que inviertan todo su dinero en su casa».

Al no encontrar un enclave que cumpliera con sus expectativas, Messina decidió diseñar una casa de dos pisos de verdad, de ladrillo y cemento, en un escenario protegido acústicamente en Pinewood. Desde la puerta principal, se puede ver hasta el fondo de la casa. Desde la cocina, es visible gran parte del piso de arriba. Es una casa donde es difícil mantener secretos. «Trabajar en Pinewood también nos brindó la posibilidad de crear el exterior de la casa y un decorado de calle visible desde la ventana», explica el diseñador. «En vez de un fondo, construimos toda una fachada en la acera de enfrente».

Messina y su equipo tardaron ocho semanas en construir la residencia. «Steven no quería paredes al aire», dice Riach. «Había que poner techos. Quería que transmitiera la sensación de una casa de verdad y que fuera operativa como tal. Podrías cogerla y ponerla en el centro de Londres, lo cual dice mucho de Phil y su equipo. El grupo de trabajo llegó a alcanzar nada menos que 100 operarios».

Incluso el exterior de la casa está creado para proyectar una imagen lo más realista posible. «Hicimos muchas fotos de tapas de alcantarilla y conexiones de gas natural a modo de documentación», nos cuenta el diseñador. «Todo estaba medido en localizaciones reales. Esculpimos los detalles de los arquitrabes. Las verjas son todas réplicas de una calle de verdad. Tratamos de imprimir toda la realidad posible a nuestro decorado».

«Luego le tocó a Phil darle a todo un toque de glamour», explica Soderbergh. «Comenzamos hablando del color de las paredes y fuimos avanzando a partir de eso hasta determinar cómo serían los tenedores de la mesa».

Messina equipó la casa con iluminación real. «Usamos elementos de iluminación reales porque a Steven le gustan más», dice. «Había unas 183 luces diferentes, tiras LED, apliques, arañas, de todo. Eso nos brindó muchas opciones para tenerlo todo integrado».

El diseñador aprendió hace tiempo que, en una película de Soderbergh, no hay rincón del set fuera del alcance con su característico movimiento sin barreras para la cámara. «Necesitaba abrir la perspectiva y darle muchas opciones en cuanto a ángulos. Nunca se arrincona con la cámara, a menos que esa sea su intención».

Messina sintió desde el principio que el comedor tendría que construirse específicamente para acomodarse al estilo de grabación de Soderbergh. «Muchas páginas del guion transcurren ahí», recuerda. «Dos de las escenas más cruciales tienen lugar en el comedor. Es donde la historia empieza realmente a burbujear. Pero seis personas sentadas en torno a una mesa suena letal para quien se encarga de mover la cámara».

Con eso en mente, Soderbergh decidió deshacerse del centro de la mesa para poder grabar a los actores desde ese punto de vista. «Steven era quien manejaba la cámara la mayor parte del tiempo», dice Blanchett. «Tenerla en el centro de la mesa le permitía rodar desde un ángulo muy particular y paranoide. La cámara podía moverse arriba y abajo, para poder ofrecer diferentes perspectivas en función de quién miraba a quién en un momento dado.

«Nunca rueda como piensas que va a hacerlo», prosigue la actriz. «Su forma de hacer cine es técnicamente inventiva, innovadora y siempre sorprendente. Juega constantemente con el punto de vista. Por ejemplo, decidió grabar mi personaje desde el punto de vista de la mirada de George desde el principio. Yo pude jugar con eso y luego tratar de subvertirlo según se desarrollaba».

El otro gran reto para Messina fue crear las oficinas del NCSC, el lugar de referencia profesional de George y Kathryn. El diseñador recorrió Londres en busca de un único edificio que pudiera acomodar los sets de dos plantas completas y un vestíbulo, pero acabó usando tres localizaciones distintas. «El vestíbulo está en realidad en el edificio del Financial Times», dice. «Utilizamos dos localizaciones más para las oficinas. Una es un edificio de oficinas vacío llamado The Rowe que tiene unas vistas fabulosas. Ahí es donde pusimos los escritorios de los analistas, la sala de monitorización por satélite y los despachos de George, Freddie, James y Zoe».

El NCSC invitó al equipo de producción a visitar su sede en Londres antes del comienzo del rodaje, una experiencia que sirvió como inspiración real para los sets. «Poder acceder a un espacio de trabajo real supuso para nosotros dar con una estética auténtica que dio unidad a los diferentes espacios», afirma Soderbergh.

Aunque el NCSC no participó en la creación de la trama, su consultor les aconsejó sobre la atmósfera y el aspecto visual de la película, como el relativo a parte del atrezo empleado. En el set solo tenían cabida elementos tecnológicos que existieran de verdad, por indicación de Soderbergh. «En esa visita guiada no podíamos hacer fotos, pero sí que tomé notas y utilicé montones de detalles del despacho personal de nuestro consultor», nos cuenta Messina. «Construimos espacios de trabajo personalizados. Todo debía tener una medida de 1,22 x 2,44 m para caber en el ascensor, así que todo era modular. Además, el NCSC me facilitó una bolsa de pequeños elementos de atrezo que repartí por el espacio, como una taza de café y el manual de historia del GCHQ».

La suite ejecutiva, donde Kathryn y Arthur tienen sus despachos, está situada en un edificio de Wood Street, en el distrito financiero histórico de Londres. «Se trata de un espacio diseñado originalmente por Norman Foster, el arquitecto británico ganador del Premio Pritzker», explica Messina. «Me encantaban sus líneas, aunque fuese una distribución difícil. Hay una pared con un ángulo de 45 grados y otra completamente curvada, lo que complicaba un poco las cosas. Fue un desafío divertido de resolver».

Los productores también invitaron el verano pasado a dos oficiales de inteligencia sénior del NCSC, Felicity Oswald y Paul Chichester, los equivalentes en la vida real a Stieglitz y Kathryn, para que echaran un vistazo al set. «A nuestro parecer, la representación que se hace en CONFIDENCIAL (BLACK BAG) de la sede del NCSC es una mezcla de precisión, como los matices rojos del exterior y las formas triangulares del edificio real, con un aire más cinematográfico», dice Sam. «Han sabido capturar la esencia del edificio y nos alegramos mucho de haber servido de inspiración para el set».

Messina eligió el lago Shardeloes Lake, en el condado de Buckinghamshire, como lugar de refugio de George; es el lugar donde pesca, se relaja y recarga las pilas en soledad. «Es un lago precioso en un entorno idílico», dice. «Además, cuenta con un cobertizo que se convirtió en una de las principales localizaciones del lugar».

Las escenas en el lago estaban entre las favoritas de Fassbender. «Revelan mucho del personaje», explica. «Iba mucho a pescar cuando era un chaval. Es genial cuando pica un pez, claro, pero tampoco importa mucho si no. La soledad y los rituales son lo realmente importante. George es un personaje muy paciente. Observa, siempre asimilando información y aguardando el momento preciso para atacar».


¿Cómo viste un espía?
Para la diseñadora de vestuario Ellen Mirojnick y la diseñadora de maquillaje y peluquería Frances Hounsom, recrear el encanto intemporal y refinado de Londres con un toque hollywoodiense era una prioridad. «Teníamos unos sets maravillosos», afirma Mirojnick. «Era imperativo que el diseño de maquillaje y peluquería estuviera a la altura. El objetivo era que ese mundillo irradiara un look distinto del de cualquier otra película de espías para elevar el género. Londres es un entorno glamuroso, con personalidad y novedoso para una de las historias de Steven. Teníamos que crear un mundo que inspirase. Había que alcanzar nuevas cotas».

La inspiración para el look clásico de Fassbender fue Michael Caine en torno al año 1970, en particular el que vemos en una película titulada X, Y & Zee: Salvaje y peligrosa, pero todo reimaginado para 2025. «La elegancia de Caine en esa película encaja a la perfección con Michael», dice Mirojnick. «George es un perfeccionista meticuloso y calculador. Su vestuario es de Dunhill, con líneas de caballero inglés, pero en ningún caso aburridas».

Dunhill también se encargó del vestuario de Brosnan y Page. «Fuimos capaces de dar con un estilo individual único para cada personaje», afirma Mirojnick. «Para Pierce, pensamos que James Bond siempre vestía trajes de una sola hilera de botones. La cosa es que sentíamos que este personaje debía llevar trajes de tres piezas y doble hilera de botones con estampado tradicional de cuadros Príncipe de Gales y raya diplomática clásica. Esa imagen y su magnífica cabellera canosa lo distinguían totalmente de Bond».

Puede que el rostro de Brosnan no les resulte tan familiar a sus fans en esta película. «Quería tener un aspecto un poco diferente para dar vida a Arthur», dice Hounsom. «Le creé una prótesis de nariz a medida que alteraba sutilmente su apariencia. Decía que también le ayudaba a dar forma a su personaje».

Soderbergh imaginó a Blanchett, normalmente rubia platino, con una larga melena oscura. «Tomamos la decisión desde muy al principio de diseñar una peluca para Cate», añade. «Kathryn se toca mucho el pelo; le encanta agarrar mechones, retorcerlos, jugar con ellos. Iba muy bien con el personaje. Trabajamos en estrecha colaboración con su equipo personal, Rick Findlater y Aurora Bergere, que son unos artistas de primera».

Para el vestuario de Kathryn, Mirojnick tenía en mente buscar el equilibrio entre feminidad y masculinidad, lo que, en su opinión, encaja a la perfección tanto con Blanchett como con el personaje. «Tuvimos la suerte de poder tomar unas cuantas prendas prestadas de la lujosa firma francesa Chloé», dice. «Su nueva diseñadora, Chemena Kamali, creó una colección de invierno que transmitía el aura perfecta. Nos dejaron las piezas más características de Kathryn, que son la chaqueta de cuero y culottes, además de una trenca. Y eso lo combinamos con otras prendas que creamos nosotros para ella».

Para Zoe, la diseñadora creó un look que resultaba profesional, pero que además dejaba adivinar sus formas. «No era la típica imagen estereotipo para una psiquiatra», subraya la diseñadora. «Transmite su fuerza. Queríamos que Naomie se sintiese cómoda de verdad cuando estuviera interpretando».

Abela mencionó que le gustaba lo que ella llamaba «estilo de chica francesa», informal pero chic por antonomasia. «Por eso imprimimos a su vestuario formas amplias y marcadas en los hombros, una silueta muy esbelta y ropa sencilla como un pantalón largo totalmente recto», explica Mirojnick. «Combinamos lo vintage y lo nuevo para crear un look único para ella».

«Marisa nos brindó la oportunidad de brillar como equipo de peluquería y maquillaje», asegura Hounsom. «Su personaje es sofisticado y profesional. La maravillosa forma de su mentón quedaba increíblemente bien con una fabulosa cola de caballo que le hicimos. Algo en lo que quizá la gente no se fije es en sus uñas. Tiene dos pequeños puntos pintados en las uñas inspirados en el código Morse, porque a su personaje le apasiona todo lo codificado».


El grupo de expertos
Trepidante, inteligente y sorprendentemente divertida, CONFIDENCIAL (BLACK BAG) debería ser ante todo entretenida, según sus creadores. «Cuando Cate vio la película, me escribió un correo electrónico», recuerda Soderbergh. «Lo primero que puso fue: “¡Me lo he pasado GENIAL!”. Me encantaría que la gente se lo pasara bien viéndola. Hacer una película de calidad e inteligente que además resulte divertida es un objetivo encomiable, pero no tan sencillo como suena. Mucha gente ha trabajado duro para ayudar a crear algo que pensamos que resultaría muy entretenido. Ese ha sido siempre nuestro objetivo».

Koepp espera que pique la curiosidad de los espectadores. «Me gustaría muchísimo que la gente saliera del cine preguntándose si el mundo del espionaje será así en la vida real», asegura. «En cuanto a mí, tengo motivos para pensar que sí. Todo el que haya trabajado en una situación de grupo sabe que la vida personal de la gente acaba saliendo a la luz. Y luego, claro, todos queremos hablar de cosas como quién se está acostando con quién».

Soderbergh subraya la importancia de contar con lo que él llama «un grupo de expertos» con los que colaborar. «Necesitas a gente que vaya a hablar abiertamente y a hacer preguntas», dice. «Llevo 30 años trabajando con el productor Greg Jacobs. Casey Silver, que también es productor, fue una de las primeras personas que conocí en la industria cinematográfica. Fue el primero que me encargó un guion».

Trabajar junto a Soderbergh siempre es una experiencia creativa apasionante para los productores. «Steven tiene tendencia de forma natural a ser considerado y reflexivo», nos cuenta Silver. «Está totalmente preparado, es absolutamente competente técnicamente hablando y puedes confiar totalmente en él. Su seguridad, debida a su experiencia, posibilita un productivo intercambio a la hora de resolver cualquier problema. Se relaciona sin problemas y de forma efectiva tanto con el reparto como con el equipo técnico».

Jacobs se muestra totalmente de acuerdo, y añade que «CONFIDENCIAL (BLACK BAG) es una película inteligente, elegante, entretenida y extraordinariamente bien interpretada. Con la amplia experiencia de Steven y la historia tan efectiva que teníamos, todo fluyó como la seda, como es habitual».

Personas como Jacobs y Silver ayudan a Soderbergh a asegurarse de que las ideas que hay tras la película desplieguen todo su potencial, según nos cuenta. «Hay mucha prueba y error que surge de conversaciones entre el grupo de expertos y que mejora continuamente la obra y aclara las cosas», dice el director. Siempre que termino una película, pienso en cómo empezamos y cuánto se ha transformado todo precisamente por esa clase de conversaciones. No me gusta pensar que es todo cosa mía. Quiero tener claro que he sopesado cada una de las opciones y explorado todas las posibilidades para mejorarla».