Pablo (Vito Sanz) está en crisis. Una mañana en la que toca fondo, su teléfono suena misteriosamente. Es Ana (Marina Salas), la chica que le rompió el corazón hace más de quince años. A lo largo de un día, Pablo podrá resolver cuentas pendientes y terminar de escribir ese capítulo de su vida. O puede que no…