Película de Cameron Crowe, protagonizada por Orlando Bloom, Kirsten Dunst, Susan Sarandon, Alec Baldwin, Bruce McGill, Judy Greer, Jessica Biel y Paul Schneider. Escrita y dirigida por Cameron Crowe, producida por Tom Cruise, Paula Wagner y Cameron Crowe. Productor ejecutivo, Donald J. Lee, Jr. Director de fotografía, John Toll, ASC. Vestuario, Nancy Steiner. Diseño de producción, Clay A. Griffith. Montaje, David Moritz. Música, Nancy Wilson.

"¿Cómo es posible despedirse de alguien si apenas le has dicho hola?". Esa es la pregunta que plantea el guionista y director Cameron Crowe en ELIZABETHTOWN. El director, que ganó un Oscar en 2000 al Mejor Guión Original por Casi famosos, vuelve a basarse en sus experiencias, concretamente en las emociones que se apoderaron de él con la inesperada muerte de su padre, para realizar un largometraje. ELIZABETHTOWN es la historia de un tranquilo diseñador de zapatos afincado en Oregon que conoce realmente a su padre y descubre sus raíces familiares después del fallecimiento de su progenitor. Le acompañan en su recorrido una optimista nata y toda una serie de parientes que están decididos a enseñarle lo que significa vivir de verdad.

Cameron Crowe dice que uno de sus objetivos al realizar esta película fue hacer una película de las que tanto gustaban a su padre, conmovedoras y con sentido del humor. "Una película que mezclara las lágrimas con la risa era su combinación favorita", nos dice el director. "De hecho, mi madre y él tenían un nombre para este tipo de cine, lo llamaban 'Pan y chocolate' por una película extranjera de la que se habían enamorado. Después, como realizador, también se convirtió en una de mis mezclas preferidas. La película debe tener personajes que parezcan reales, que consigan hacer participe de sus vidas al espectador y que, una vez terminada la película, les eche de menos".

La productora Paula Wagner nos dice: "Cameron Crowe, como uno de los grandes guionistas-directores del momento, sabe contar la verdad con una pizca de extravagancia, mucho encanto y un gran corazón. Permite que nos riamos de las debilidades humanas y, momentos más tarde, consigue sacarnos lágrimas. Emprende un viaje personal y nos invita a unirnos a él".

"Cameron tiene la habilidad de atrapar la vida y llevarla a la gran pantalla", nos explica Orlando Bloom, que interpreta a Drew Baylor, el protagonista. "Lo hace parecer todo tan real, tan humano. No hay más remedio que reírse y llorar al mismo tiempo".

Kirsten Dunst, que interpreta a Claire, la apasionadamente optimista azafata que cambiará la vida de Drew, está de acuerdo: "Esta película trata de la vida. No es una simple comedia, un simple drama o un romance, es la vida en sí. Habla de momentos íntimos entre las personas, se entremezclan varias historias. No es pretenciosa y, a veces, llega a convertirse en 'porciones de vida' debido a su realismo. Y si se mira de cerca, cada diálogo, cada movimiento tiene un significado. Es una película firmada por Cameron Crowe".

En 1989 acababa de estrenar su primera película como director, Un gran amor. La película se había lanzado con poca publicidad, pero su suerte cambió cuando una crítica de Siskel y Ebert la puso por las nubes. El padre de Crowe había ido a ver a unos familiares a Kentucky y estaba enseñándoles la importante crítica cuando murió inesperadamente de un infarto. Fue un terrible golpe para el joven cineasta que le marcaría durante mucho tiempo.

Pasaron varios años y la carrera del director siguió su curso ascendente con películas como Solteros, Jerry Maguire, Casi famosos y Vanilla Sky. Todos los guionistas de Cameron Crowe son muy personales y Casi famosos no fue una excepción. La película, basada en los años en que el director trabajaba para la revista "Rolling Stone", fue muy aclamada por la crítica y ganó el Oscar al Mejor Guión Original. Las interpretaciones eran de primer orden, y Frances McDormand en el papel de la madre es un auténtico homenaje a Alice, la madre del realizador. En esta película, Cameron Crowe homenajea a su padre.

Acerca de los personajes
Drew Baylor, el joven protagonista de ELIZABETHTOWN, empieza a conocer a su padre después de que éste muera. Le ayuda Claire, "la guerrera del optimismo", a la que conoce camino del funeral que se va a celebrar en Elizabethtown, Kentucky. La inesperada mezcla de comedia y drama hace que esta película sea diferente de lo visto hasta ahora. Es imposible no darse cuenta de que lleva el sello de Cameron Crowe.

"Recuerdo que pensé: 'Es una historia especial, conmovedora, con la que mucha gente podrá identificarse'", nos dice Orlando Bloom, que interpreta a Drew. "Cuando el espectador ve a un personaje que acaba por entender la vida y la muerte, el éxito y el fracaso, siente algo porque sabe que son emociones de las que nadie escapa".

El actor recuerda que Cameron Crowe le describió el personaje "con muchos detalles específicos, pero dejándome mucha libertad. Es increíble trabajar así. Lo tiene todo planeado".

Para el papel de Claire, Cameron Crowe tenía muy claro que necesitaba a una actriz radiante capaz de convertirse "en el alma de la película, en un mensajero del amor puro y simple". Al poco de empezar el rodaje, se alegró de que su instinto no le hubiera fallado. Según él, Kirsten Dunst es "muy receptiva e increíblemente instintiva". En cada nueva escena, crecía su aprecio hacia las aptitudes y la técnica de la actriz. "Fue fantástico trabajar con Kirsten, no hay nada superfluo en su interpretación".

La actriz recuerda: "Es uno de los mejores personajes que me han ofrecido para una mujer de mi edad. Está muy bien escrito. Para mí fue fácil comprender la descripción". Le atrajo la perspectiva vital de Claire. "Nunca se compadece de sí misma; es más, siempre ve el lado positivo. Está dispuesta a ayudar a la gente; puedo identificarme con eso".

Claire es azafata y se toma su trabajo muy en serio. "Quiere hacer feliz a la gente y ayudarles", nos dice Kirsten Dunst. No le fue difícil interpretar a una azafata ya que su madre realizó este trabajo en los años sesenta y setenta. "Lo llevo en la sangre", nos dice la actriz, riendo.

Para el papel de Hollie Baylor, la madre de Drew que acaba de enviudar, el director escogió a la veterana Susan Sarandon. En opinión de Cameron Crowe, la amplia gama de memorables papeles interpretados por la actriz, premiada por la Academia, la convertía en la intérprete perfecta para el papel descrito en el guión como "una mujer realista con inquietudes intelectuales, siempre en busca de la verdad y del conocimiento".

"Susan Sarandon es una estrella emblemática", nos dice el director. "Aporta mucho poder. Se ha hecho con el corazón del público. Encarna personajes que la gente nunca olvida, conectan con ella directamente".

La actriz dice que su papel requería fuerza y fragilidad a la vez cuando debe enfrentarse a la terrible noticia de que su marido acaba de fallecer. Al principio, Hollie se derrumba y pide ayuda a su hijo mayor para ocuparse de los detalles. Pero en el funeral, es capaz de recuperarse y enfrentarse a una vida sin Mitch.