Seleccionada por la Berlinale 2005 para Competir en su Sección Oficial.
Una comedia sobre los problemas de entendimiento lingüístico contada en siete idiomas (ruso, inglés, portugués, turco, alemán, francés y castellano) y con el fútbol como telón de fondo. "ONE DAY IN EUROPE" (Galatasaray-Dépor), ha sido rodada en ciudades de toda Europa (Moscú, Estambul, Berlín, Santiago de Compostela).
En su segundo largometraje, el director Hannes Stöhr nos ofrece una visión tierna, interesante y maravillosamente desenfadada de los europeos, de esas personas que se encuentran y no se entienden, que viajan, que vienen y se van (y que a veces acaban haciendo buenas migas). El reparto rezuma un espíritu positivo contagioso, con Megan Gay y Luidmila Tsvetkova (Moscú), Florian Lukas y Erdal Yildiz (Estambul), Péter Scherer y Miguel de Lira (Santiago de Compostela), y Rachida Brakni y Boris Arquier (Berlín) en los papeles protagonistas.
Al igual que las historias que narra, la propia película tiene un origen paneuropeo que, por otra parte, resulta de lo más natural. El equipo principal de rodaje, formado por Hannes Stöhr (dirección), Sigrid Hoerner y Anne Leppin (producción), Florian Hoffmeister (fotografía), Frank Kruse (sonido), Daniela Selig (vestuario), Andreas Olshausen (escenografía) y Simone Arndt (jefe de producción), lo completan otros cuatro equipos en Moscú, Estambul, Galicia y Berlín. Galatasaray-Dépor, de la productora berlinesa moneypenny filmproduktion, ha sido coproducida por workshop, la productora española Filmanova y el espacio "Das kleine Fernsehspiel" de la cadena ZDF en colaboración con ARTE y Televisión de Galicia.
Hannes Stöhr (el director)
Nació en Stuttgart en 1970 y se crió en Hechingen. Estudió derecho comunitario europeo en la Universidad de Passau de 1992 a 1995, y luego obtuvo una beca Erasmus en Santiago de Compostela. De 1995 a 2000 estudió dirección y escritura de guiones en la Deutsche Film- und Fernsehakademie Berlin (DFFB). Durante sus años de estudiante dirigió sus primeros cortos, como Biete Agentinnen, suche Europa (1995), Maultaschen (1996), Berlin Is In Germany (1999, premio al mejor corto en el FilmFest Potsdam) y el documental Gosh - Ein Zirkusporträt (1998). Su primer largometraje, Berlín está en Alemania (Berlin Is In Germany, 2001), le valió el premio Panorama Audience en el Festival Internacional de Cine de Berlín en 2001, el premio de la Asociación Alemana de Críticos de Cine, el Studio Hamburg's Newcomer, el New Faces 2002, la Luna de Plata del Festival de Cine de Valencia y el premio de los Críticos Alemanes de Cine (mejor protagonista: Jörg Schüttauf).
Comentarios del director
El tema de fondo de esta película está contenido en el propio título en inglés (One day in Europe, "un día en Europa"); puede referirse al presente, a hoy, a un día concreto en Europa, y también puede entenderse como "un día en Europa habrá...", en el sentido de "algún día, en el futuro...". Aquí es donde se encuentra la utopía. ¿Cómo hacer una película sobre Europa, sus gentes y sus distintas mentalidades? ¿Qué ciudades escoger? ¿Qué referencias? Como no sólo quería escribir el guión sino además dirigir la película, tenía que tener en cuenta aspectos muy prácticos. Yo vivo en Berlín, estuve un tiempo en Santiago de Compostela, tengo buenos amigos en Estambul y he visitado Moscú varias veces. Además, en una película sobre Europa tenía que incluir a Moscú. Pero, ¿qué relación hay entre estas ciudades? ¿Existe un estilo de vida europeo?
¿Qué pasaría si el Galatasaray de Estambul y el Deportivo de la Coruña jugaran la final de la Liga de Campeones en Moscú? El fútbol es sencillo, es algo que se ve en todo el mundo, y no entiende de religiones. El fútbol es como un inciso en la narración, me pareció algo poético. Y además es algo real, no una fantasía descabellada.
¿De qué tratarían las historias? ¿De saber idiomas o no saberlos, de dialectos y regiones, de viajes y viajeros en Europa? El planteamiento inicial nos resulta conocido a todos: llegas a un sitio, te roban y te ves envuelto en una situación complicada. Entonces te toca hablar, pero no conoces el idioma del país. A partir de ahí las cosas se vuelven difíciles... o graciosas.
De esta idea han surgido cuatro historias sencillas. Una británica en Moscú, dos alemanes en Estambul, un húngaro en Galicia y una pareja de franceses en Berlín. Quería hacer una película con escenas cortas, con situaciones parecidas a las que yo he vivido. Siempre me ha interesado la situación europea, la convergencia de varias mentalidades en Europa. Esta película habla del aquí y el ahora, pero al mismo tiempo de una utopía. Algún día, existirán unos Estados Unidos de Europa, en los que se incluya Estambul y también Moscú. ¿Y cómo nos entenderemos? ¿En denglisch o spanglish, en franglais o fralemand? Yo apuesto por el inglés europeo, aliñado con palabras como Leitmotiv y kaputt, mise en scène y siesta, ciao y chill-out, nasdorovie y merhaba.