Brian Yuzna (el director)
Se marchó a los Angeles en 1984 para hacer películas. Se jugó los ahorros de toda una vida y pidió dinero prestado para producir un clásico del terror: Re-Animator. Como un fan del horror y del fantástico de toda la vida, está orgulloso de haber contribuido como guionista, director o productor en algunos de los clásicos modernos del género, incluyendo Re-Sonator, Society y El Dentista.

Asistió al Festival de Sitges el año pasado donde, en una cena con Julio Fernández, Presidente de Filmax, surgió la idea de crear una línea de películas en Barcelona: la Fantastic Factory.

Nacido en Filipinas y criado en Nicaragua, Panamá, Puerto Rico y Atlanta (Georgia), Yuzna fue miembro de la generación de la contracultura de los sesenta y setenta. Después de la universidad y de trabajar en varias iniciativas en Carolina del Norte (que incluían ser artista, propietario de tienda, de restaurante y de la construcción), decidió dar rienda suelta a su pasión por el cine y trasladó la familia a Hollywood.

Allí aprendió a hacer películas. Aunque a Yuzna se le conoce, principalmente, por su cine de terror, su película de mayor éxito hasta hoy ha sido Cariño, he Encogido a los Niños. Este clásico de Disney está basado en una idea que tuvo de niño, en la que se imaginaba un mundo en el que él era lo suficientemente pequeño como para montarse en una hormiga y volar sobre la espalda de una abeja. Con su colaborador cinematográfico, Stuart Gordon, hablaron de hacer una película para sus hijos. Y así nació el clásico familiar.

Además de haber trabajado en California, ha producido y/o dirigido películas en Italia, Canadá, Méjico y Florida. En 1985 trasladó a su familia a Roma para producir Re-Sonator y Dolls. Diez años después estaba en Vancouver (Canadá) produciendo Crying Freeman: Los Paraísos, una adaptación con mucha clase del Manga japonés en género de acción. Yuzna ha tenido una larga asociación con compañías de cine japonesas, ha adaptado otros Mangas como The Guyver, una película de un monstruo super héroe y ha facilitado a directores, como Steve Wang y Shusuke Kaneko, sus primeras oportunidades para dirigir en Estados Unidos.

Como director, el trabajo de Yuzna más representativo es la satírica y desconcertante Society. En esta extraña versión de la lucha de clases dió, junto al artista de efectos Screaming Mad George, una daliesca visión a la que denominaron "psico-ficción". Otras terroríficas aportaciones de dirección incluyen los "zombie" Romeo y Julieta de El Retorno de los Muertos Vivientes 3, el paranoico secuestro alienígena de Progeny, y la inolvidable comedia negra de El Dentista.

Se trasladó a Barcelona en enero de 1999 para trabajar en el equipo de Filmax de Julio Fernández y crear la línea de producciones Fantastic Factory, la primera de las cuales será Faust: La Venganza está en la Sangre, que será dirigida por él mismo. A continuación, producirá películas que reunirán a los directores, actores y artistas internacionales más importantes del género con los de España. Espera que estas películas proporcionen a los cineastas españoles la oportunidad de hacer realidad sus propias visiones y también le brinden la oportunidad de seguir realizando las fantásticas películas por las que es tan conocido. Su última producción es Beyond Re-Animator.

Notas del director
BENEATH STILL WATERS es probablemente el proyecto más ambicioso de Fantastic Factory hasta la fecha.

Esta adaptación de una novela de terror de Matthew Costello nos ha planteado una serie excitantes desafíos, siendo quizás el más difícil el rodaje de varias escenas subacuáticas.

Lo que más me atrajo del proyecto en un principio fue la representación visual de una ciudad infectada por el mal, sumergida bajo un pantano creado por una presa y que ahora, cuarenta años después, resucita en todo su esplendor diabólico. Empecé a imaginar las escenas de submarinistas buceando por las calles de ese pueblo encantado e inmediatamente me enamoré del proyecto.

El libro tenía la estructura de una novela clásica de horror, con muchos personajes entrelazados que iban siendo afectados por un mal en apogeo. Y ese mal poseía múltiples facetas – un personaje oscuro y siniestro, un extraño e infeccioso hongo negro que empieza a crecer en la orilla del lago, la corrupción física y mental de los lugareños, entes resucitados que emergen de las profundidades, horribles visiones, y una fascinante tradición local de rituales satánicos. ¡Qué más puede desear un cineasta y fan del cine de terror como yo!

Había tanto material de hecho que, tras el primer par de versiones del guión, decidí regresar al libro y extraer de él las escenas más fuertes y terroríficas, intentando cortar todo lo que fuera demasiado explicativo o transitorio. Esto ha conllevado que el rodaje haya sido extremadamente divertido ya que cada día rodábamos escenas con elementos fantásticos y terroríficos. Por descontado, fue de locos rodar en Otoño e Invierno, dentro y fuera del lago, con los fríos días y las heladas noches de los alrededores de Madrid. Pero la suerte estuvo de nuestro lado y estoy muy contento con el material que hemos conseguido.

Se trata de una película que posee todo lo que gusta a los fans del cine fantástico y de terror. Cada personaje tiene una historia y un recorrido interesante y el excelente reparto con el que hemos contado hincaron bien los dientes, nunca mejor dicho, a sus personajes. Ha sido un gran placer trabajar con todos ellos. A su vez, ha sido estupenda la labor de los equipos de efectos especiales de maquillaje, maquetas, y efectos visuales, llegando a impresionarme hasta a mí por su febril imaginación y su talento. Todo el equipo técnico ha estado fantástico en el que no sólo ha sido uno de los rodajes más duros en los que he trabajado, sino también el más divertido.