Ganadora del Premio del Público en el festival de Sundance 2005, HUSTLE AND FLOW es una película producida por John Singleton y Stephanie Allain y escrita y dirigida por el debutante en la industria Craig Brewer.
Dice el guionista y director Craig Brewer: "Ésta es una película sobre la necesidad de hacer música por todos los medios necesarios. La música es nuestra pasión común, es nuestro lenguaje. Es la forma en que tomamos nuestro dolor, nuestra lucha, nuestros instrumentos y lo convertimos en algo que tiene ritmo, es auténtico, puro y sin filtros".
HUSTLE AND FLOW es la historia de DJay, un buscavidas que encuentra la forma de hacer realidad sus sueños. Es una historia universal ambientada en el mundo de la escena musical hip-hop de Memphis. Inspirada en los ritmos de esa ciudad, la película contiene música original de artistas innovadores que desafía las fronteras de los géneros musicales.
El productor John Singleton, director de películas de éxito como Los chicos del barrio, Shaft y la todavía inédita Four Brothers, cree que esta película tiene, en efecto, un tema universal que va más allá del mundo concreto que describe: "Hoy en día el hip-hop está presente en toda la cultura popular; ha llegado a ocupar el mismo espacio que antes ocupaba el rock and roll. Y Craig se conoce este mundo, en especial el hip-hop de Memphis, como la palma de su mano".
Dice Craig Brewer: "Ésta es una historia de Memphis, como lo fueron las historias de Elvis Presley o de Isaac Hayes. Esos tipos no tenían gran cosa pero eso mismo les sirvió para crecer y convertirse en lo que llegaron a ser, les sirvió para ser únicos en su campo, les sirvió para impulsarlos hacia la grandeza. La idea de hacer la película me vino de la vida misma. Mi padre acababa de morir, de forma inesperada, y yo empecé a pensar en mi propia mortalidad. Tuvo un ataque al corazón; no bebía y no fumaba pero un coágulo en la sangre le mató a los 49 años. Si eres hijo único y tu padre se muere con 49, piensas que a ti te pasará algo parecido; y dado que yo tenía 27 años, no podía evitar pensar que ya había gastado la mitad de mi tiempo...".
El personaje central de HUSTLE AND FLOW es DJay, un buscavidas que quiere reformarse. Tiene la misma edad que tenía su padre al morir y se encuentra en una encrucijada vital. Dice Terrence Howard: "Ya no quiere seguir siendo un buscavidas. DJay es un poco como un pastor que tiene que conducir su rebaño. Las chicas son su familia, él es la figura paternal y cuando viven momentos oscuros, es él quien debe encontrar una salida".
Howard prosigue, señalando que la película muestra un aspecto de la vida que no suele mostrarse en la pantalla: "La película no idealiza a DJay. Le rompe el corazón mandar a sus chicas a hacer las cosas que tienen que hacer. Busca una forma de vida mejor, para mantener su salud mental".
Brewer comenta: "Este personaje es más interesante que el tipo de chulo habitual que suele verse en el cine, recubierto de joyas y adornos de oro, porque DJay es más bien el buscavidas clásico de Memphis. Lo que más hace es hablar por los codos. Y es ese don con la palabra lo que le permite convertirse en rapero".
La persona que inspira a DJay a darle un vuelco a su vida es Key, un ingeniero de clase media que se gana bien la vida pero que también sueña con cosas mejores. Dice Anthony Anderson: "Key es un soñador. Tiene una frase de diálogo en la que dice, 'Le vendí a mi mujer mi sueño de tener un estudio propio, de triunfar en la industria musical, pero ahora me siento como si lo único que hiciera fuera trabajar para pagar el alquiler'. Para Key no hay nada peor que un sueño desvanecido".
D. J. Qualls es Shelby, músico de vocación y maestro de la caja de ritmos. Dice Brewer: "Qualls aporta autenticidad al personaje. Es de Nashville y siempre he querido verle hacer papeles que fueran algo más que un chiste. Es un sujeto interesante, maduro y reflexivo. El público se siente a gusto con él, creo yo, le ven y dicen, Conozco a este tipo, es gracioso, le he visto por ahí a menudo".
Dice Qualls: "Lo que me atrajo de este proyecto es que da una imagen verdadera de lo que es el Sur. El cliché sobre el Sur es que es un lugar racista pero aquí hay tanta pobreza -y la pobreza es algo que iguala a todos- que seguramente es uno de los lugares menos racistas que existen. No tiene sentido odiar a la gente cuando estás luchando por alimentar a tu familia. Yo ahora vivo en Los Angeles y es un lugar lleno de soñadores. Todo el mundo quiere ser algo más de lo que realmente es. Yo recuerdo lo que sentía cuando estaba en Nashville, deseando ser actor con todas mis ganas y sin saber cómo conseguirlo. De eso es de lo que trata esta película".
Nola (Taryn Manning) es una de las chicas de DJay. Joven e ingenua, DJay es lo único que tiene en el mundo: "Nola arrastra consigo la ignorancia de ser una chica huida y vagabunda de Arkansas o Chattanooga o del Mississippi. No es muy consciente del hecho de que la están explotando. De repente todo el mundo tiene algo que hacer en la casa menos Nola, porque que ella sepa no hay nada que sea capaz de hacer... pero eso es sólo porque nadie le ha pedido nunca que haga nada. La relación entre mi personaje, Nola, y DJay es compleja. No hay sexo entre ellos, es más bien como una relación entre hermanos. Ella le admira profundamente, se cree todas sus palabras a pies juntillas. La cosa va demasiado lejos, porque DJay se acaba aprovechando de ella. Al final ella madura, no volverá a dejar que la utilicen".
Sobre la música dice Brewer: "He viajado mucho y la música ha sido siempre lo que me ha conectado con mi hogar en Memphis. Y cuando volvía a casa, la música jugaba un papel muy importante. Me crié escuchando a Otis Redding y Sam & Dave, Muddy Waters y Howlin' Wolf y Buddy Guy y Elvis Presley y Jerry Lee Lewis... Luego empecé a hacer películas y les ponía música de rap; y me di cuenta de que los raperos de Memphis estaban siguiendo la tradición de las grabaciones de Sam Phillips para los estudios Sun. Hacen música con los medios que tienen a su alcance y a veces esa actitud es la que acaba influyendo en la cultura".