Basada en la novela del mismo nombre con la que Antonio Soler ganó el Premio Nadal en 2004.

Nota del director
Mirar atrás no es sólo revisar el pasado, sino reconocer lo que eres a través del camino que recorriste para serlo, por eso me daré permiso para volver al camino de la memoria, de las pasiones tempranas y de las preguntas sin respuesta, por eso les invito a que nos demos una vuelta por El camino de los Ingleses, donde la incertidumbre y el vértigo dejaron huella en la búsqueda de una madurez tan deseada como temida.



Los caminantes
Miguelito (Alberto Amarilla)
"Miguelito es un personaje que mira", explica Alberto Amarilla. "Durante toda la película le pasan cosas, pero él juega a no sentir. Es un chico de provincias que tras una operación conoce en el hospital a una persona que le habla de la poesía, de otros mundos, de cosas que no conocía. Y decide ser poeta. A partir de ese momento empieza a ver la realidad de otra forma".

"Alberto Amarilla ha hecho un trabajo magnífico, de una disciplina férrea, el más duro de toda la película. Es un actor que trabaja muy bien en los lugares cercanos a la emoción. A esos picos altos que suelen ser muy difíciles para la mayoría de los actores, él llega con mucha facilidad: al llanto, a la emoción pura. Y también trabaja la zona baja, las depresiones, la distancia con el grupo. Ha sido un trabajo de orfebrería, de un tremendo sacrificio", señala Antonio Banderas.

Luli Gigante (María Ruíz)
"Luli es el personaje con más energía y con más ganas de conseguir sus sueños, de salir de la realidad que la rodea. Quiere dedicarse al arte, quiere ser bailarina por encima de todo. Es una chica solitaria, que quiere viajar y conocer mundo", asegura María Ruíz. "Es un personaje muy duro, aparentemente muy puro y luego muy complejo".

"En realidad con el personaje que me identifico más es con Luli. Hay algo en ella, en su afán de salir, de volar… Es un ser ambicioso y al mismo tiempo muy puro, pragmático, es un espíritu libre", dice Banderas. "Quizá por eso elegir a María pronto marcó la pauta de todo el grupo de actores. La ví en la pantalla de un ordenador entre 300 aspirantes y antes de que hablara, ya sabía que era Luli. A partir de esa piedra edifiqué el reparto".

Babirusa (Raúl Arévalo)
Según Raúl Arévalo: "Babi es un punki auténtico. No sabe lo que es la moda punki, pero cada gesto que tiene en la vida diaria (cortarse las patillas, ponerse una gorra…) lo demuestra. Sueña con tener un padre y una madre, porque no ha disfrutado de una infancia ni de referentes paternos. En esta historia a Babirusa le han tocado las sombras. Es un personaje con mucha luz, pero va de la luz a la sombra".

Paco Frontón (Félix Gómez)
"En este grupo tan ecléctico, Paco es un macarra de buena familia que quiere escapar de los rígidos esquemas familiares. Es un pobre niño rico de veintiún años que ha repetido C.O.U. tres veces por pura rebeldía. Se enfrenta continuamente a su padre, posiblemente porque son dos personas demasiado parecidas con planteamientos opuestos sobre la vida", dice Félix Gómez. "Él dice que lo que quiere es comprar una casa en el campo, sembrar cosas y vivir allí con La Cuerpo. ¡Que estudie derecho su padre!, piensa. Pero a Paco le sale el lado oscuro con el alcohol: beber le empuja a la agresividad, a ser como es su padre".

La cuerpo (Marta Nieto)
"A La Cuerpo la llaman así porque es una de esas chicas a las que le sale todo muy rápido, que se desarrollan muy pronto. Proviene de una familia humilde y trabaja en una zapatería", explica Marta. "Tiene sueños muy básicos, pero sobre todo está completamente enamorada de su Paco. Piensa que el amor existe y que ella lo ha encontrado. Y quiere mucho a Luli porque le divierte su lado de lolita, su punto divertido, pícaro".

Moratalla (Mario Casas)
El actor Mario Casas ve así a su personaje: "Moratalla es el más joven, tiene que dar vida al grupo. No tiene problemas, siempre se lo pasa bien. Está en su mundo, se lo pasa bien viendo a los demás. Todo el mundo a los 17 o 18 años es Moratalla, porque mi personaje es la vida. Moratalla ve que sus amigos tienen problemas pero él, en cambio, se siente bien. Sólo quiere sexo y estar con mujeres. No tiene sueños".

El garganta (Fran Perea)
"Le llaman El Garganta porque le gusta jugar con su voz. Es un chaval que quiere trabajar en la nueva radio que está empezando, esa radio que empieza a abrirse a más gente. Quiere hacer un programa de noche, aspira a ser el locutor nocturno y plasma la historia de los chavales en la película de una manera un poco poética. Establece una relación distinta con el espectador. Él separa la realidad de lo que no es realidad dentro de la película", explica Fran Perea.

Antonio Banderas todavía se sorprende cuando ve a Fran en su película. "Es un trabajo lleno de detalles, con pequeñas sonrisas y entonaciones misteriosas que le dan otra dimensión al personaje y a la historia. Fran creó su personaje físicamente. Llegó y me pidió hacerlo así: se había buscado las gafas; se puso el pelo a un lado; el bigote medio hormigueao; hasta cambió la manera de andar. No le reconocí la primera vez que me lo crucé por un pasillo con la caracterización. Creo que es un actor cojonudo. Además de un chaval muy comedido, muy buen compañero, un gran profesional en el set".

La señorita del casco cartaginés (Victoria Abril)
"Es la profesora que todos hemos tenido, a la que mirábamos con miedo y un punto de admiración. Miguelito no es su alumno, es alguien con quien tiene citas", dice Victoria Abril. "Antonio lo ha hecho mitad real, mitad fantasía. Todo el mundo durante el paso de la adolescencia a la madurez busca a su Beatrice. La señorita del Casco ayuda a Miguelito a comprender que la inspiración no hay que buscarla fuera, que está dentro de él. Es importante que alguien te ayude en ese momento en el que somos todo preguntas y ninguna respuesta. A Miguelito las respuestas le vienen de la mano de La señorita del Casco con mucho glamour y mucha comprensión".

El director explica esa mezcla de ficción y verdad de la siguiente manera: "La Señorita –por poner un ejemplo muy gráfico- está saliendo del tubo en el que están entrando Miguelito, Luli y el resto de los chicos. La Señorita se agarra a la mano de Miguelito para quedarse dentro del tubo un poco más. Mientras que Miguelito se acerca a ella porque necesita cuatro coordenadas para centrarse, porque él actúa –básicamente- de error en error. Como El Garganta, también La Señorita del Casco Cartaginés es un personaje muy etéreo, que aparece merodeando en la historia del grupo de chavales".

Don Alfredo (Juan Diego)
"El suyo es un personaje con una historia muy particular, que vive una relación de amor muy específica dentro del mundo de lo prohibido. Pero además él es muy importante por su influencia en Paco Frontón, con el que mantiene una relación paternal muy posesiva, dominante, incluso fascista. Don Alfredo impone una forma de vivir a toda la familia, mientras que él hace lo que le da la gana. Es importante conocerle para comprender por qué Paco acaba la película como la acaba", asegura Antonio Banderas.

Entrevista a Antonio Banderas
Antonio Banderas habla de su segunda película como director, pulsa aquí.