Retrato de una abuela y de su nieta que conviven en una modesta casa del poblado alicantino de San Vicente del Raspeig. Una empresa ha comprado el terreno y se propone el derribo del edificio y la construcción de un nuevo bloque de viviendas. Abuela y nieta no viven la mudanza forzosa de la misma manera.
La película indaga en la peculiar relación que Marina, (una niña de 6 años, impulsiva e irreverente) tiene con su abuela de 75 años.
La rancia educación a la que es sometida por su abuela, provoca que Marina se rebele contra ella y contra todo aquél que intente corregir su comportamiento, aunque progresivamente la actitud de Marina evolucionará hasta un carácter más maduro y reflexivo.
A lo largo de varios años nos adentrándonos en la vida y costumbres de un pueblo, descubriendo lentamente en el conflicto que supone para la abuela ver derrumbarse y desaparecer la casa donde ha vivido toda su vida.