Basada en la historia real de Vince Papale (Mark Wahlberg), un hombre que no tenía nada que perder y desafiando a lo establecido consiguió hacer su sueño realidad.
La historia arranca cuando el nuevo entrenador (Greg Kinnear) del equipo de fútbol local de Filadelfia decide hacer una jornada de puertas abiertas a la que puede presentarse cualquiera que quiera intentar entrar en el equipo. Con ello pretende encontrar un nuevo fichaje que aporte frescura al conjunto, que arrastra una temporada de resultados negativos. Todo el mundo piensa que es una pérdida de tiempo y que será imposible encontrar a alguien tan bueno como para jugar en una liga profesional. Papale es un fracasado de 30 años, que malvive como profesor sustituto y camarero a tiempo parcial y que ni siquiera había jugado al fútbol universitario, pero que juega con sus amigos y es un hincha fiel del equipo. Contra todo pronóstico Papale consigue superar la prueba y alcanzar el sueño de cualquier aficionado: pasar del asiento más barato de la grada al campo como jugador profesional.