Protagonizada por Ethan Hawke (candidato en dos ocasiones a los Oscar: Actor de reparto por DÍA DE ENTRENAMIENTO, 2001; Guión adaptado por ANTES DEL ATARDECER, 2004), Willem Dafoe y Sam Neill. Los efectos de maquillaje han corrido a cuenta de WETA Workshop. Los hermanos Spierig han escrito y dirigido DAYBREAKERS.
Tras sumergirse en el mundo de los zombies en su exitosa película de debut LOS NO MUERTOS, los directores/guionistas Peter y Michael Spierig decidieron probar suerte en el género de los vampiros con un thriller de ciencia-ficción titulado DAYBREAKERS. En este filme, los Spierig se han alejado de los manidos caminos del goticismo de Bram Stoker o Anne Rice para llevar a los vampiros a un futuro elegante y no demasiado lejano en el que todos, desde los colegiales a los mandatarios, son chupasangres. "DAYBREAKERS cuestiona cómo nos adaptaríamos si todos nos convirtiéramos en vampiros el día de mañana", comenta Michael Spierig. "Nuestro largo rechaza las reglas de las típicas películas de vampiros sin olvidarse de de lo que más nos gusta del género".
El ingenio y el astuto sentido del humor de los Spierig aparece ya en la primera escena de la película: los vampiros van al trabajo en trasporte público y hace cola en Starbucks donde sirven tazas de sangre. "En vez de estar recluidos en cuevas, castillos o los tradicionales hábitats subterráneos, los vampiros se han apropiado del mundo y viven en la superficie", dice Peter Spierig. "El día a día se ha convertido más bien en noche a noche, con algunas modificaciones vampíricas".
Los seres humanos están en la punta de la pirámide alimenticia, lo cual es muy peligroso. La única fuente alimenticia de los vampiros componen únicamente el 5% de la población terrestre y las cifras están cayendo a un ritmo vertiginoso. La situación de pánico global que surge entre una población que ha agotado prácticamente unos recursos antaño abundantes es un reflejo directo de la situación que se vive en el mundo actual. "DAYBREAKERS es como las clásicas películas de ciencia ficción de los años cincuenta que hablaban de lo que ocurría en el panorama político de la época", apunta el productor Chris Brown. "Si bien antes las preocupaciones eran el comunismo y la bomba atómica, ahora DAYBREAKERS recoge ese listón y lo actualiza. Hay sangre y violencia para que los fans del género disfruten, pero la película tiene un claro mensaje".
"Las películas de terror clásicas son un poco punk rock y esa definición creo que puede aplicarse también a DAYBREAKERS", comenta Ethan Hawke, que da vida a Ed Dalton, hematólogo y vampiro. "Tiene un claro filón contracultural".
"Nos encanta este género, crecimos con él", declara Michael Spierig. "Desde que tengo uso de razón, las películas de ciencia-ficción/terror nos han fascinado y encantado, no sólo por la diversión visceral que puede provocar una buena peli de terror, sino porque las posibilidades creativas son, simple y llanamente, infinitas".
Tras vender un tratamiento de 16 páginas de DAYBREAKERS a Lionsgate, Michael y Peter Spierig tardaron dos años en desarrollar el guión para la empresa. El productor Chris Brown quedó impresionado con el primer borrador que leyó. "Me pareció una idea muy original. Las películas de género son geniales pero lo que hace tan especial este guión es que presenta una nueva interpretación de un tema muy manido". Desde que se conocieron, Peter y Michael Spierig sintieron que con Brown habían dado con el productor ideal. "Compartimos todas las referencias, habíamos visto las mismas películas", dice Brown. "De hecho, creo que incluso puede que yo haya visto más películas de terror que ellos. Los tres somos muy fans de las películas de ciencia-ficción/terror, ¡así que nuestra primera reunión fue como una convención de freaks!".
Cuando hubo que escoger al actor que daría vida a Ed Dalton, los hermanos soñaban con poder trabajar con Ethan Hawke ya que escribieron el papel con el actor en mente. "Siempre nos han gustado las elecciones de Ethan como actor", explica Michael Spierig. "Ha trabajado en largos muy interesantes. Es inteligente, vulnerable e interesante. No sabíamos si querría participar o no, pero era el intérprete que queríamos".
Hawke admite que en un principio no quiso comprometerse a rodar una película de género, pero le cautivó la complejidad temática del guión. "Lo leí sin tener ninguna esperanza de que me gustara", recuerda. "Decidí que me leería diez páginas para quedar bien, pero cuando llevaba sólo cinco ya sabía que quería rodarla. Supe en seguida que la historia era única y divertidísima. Espero que la película le guste a la gente que no suele ser fan de las películas de ciencia-ficción/terror, como yo, porque sé que a los amantes del género les encantará".
El insólito héroe de DAYBREAKERS, Ed Dalton es un vampiro hematólogo que trabaja a contrarreloj para dar con un sucedáneo para la sangre antes de que se extinga la población humana y los vampiros mueran de hambre. Dalton se diferencia de la mayoría de sus iguales porque batalla con un conflicto interno. A pesar de que desea la sangre humana, se niega a beberla y se alimenta de sangre animal, considerada sangre de segunda, a pesar de que con ello se debilita gradualmente. "Creo que Peter y Michael dirán que la historia de Ed es como la leyenda del Fénix", comenta Hawke. "Está muerto y renace de sus cenizas. Su paso de muerto viviente a ser humano consciente y vivo es una alegoría pertinente aplicable a todos nosotros".
En el plató, Peter y Michael Spierig quedaron encantados con todo lo que Hawke contribuyó al proceso. "Ethan no llega y suelta las frases del guión", explica Peter. "Tiene ideas brillantes, porque es director y guionista además de actor, así que entiende tanto el personaje como la historia".
Hawke comenta que DAYBREAKERS ha sido la primera vez que ha trabajado con dos directores de manera simultánea y que el proceso le ha parecido inesperadamente agradable. "Siempre he creído que en las películas rodadas por dos directores, uno ejercería de director y el otro hacía de guionista, pero tanto Peter como Michael ejercen claramente directores. El primer día uno me dijo, Sabes, me ha encantando cuando te has tocado la oreja, y el otro me dijo ¡Déjate la oreja!. Me di cuenta de que no había una manera correcta de hacer algo, simplemente es cuestión de gustos y eso me dio bastante libertad".
Tras fichar a Hawke, los hermanos se pusieron en contacto con un actor que ha interpretado una gran variedad de personajes al que admiraban mucho para interpretar a Elvis: Willem Dafoe. "Siempre estudio el personaje y lo que hace y luego me pregunto si es el tipo de aventura en la que me apetece meterme como actor", comenta Dafoe. "A veces en este tipo de películas de género los realizadores están más interesados en los efectos especiales que en los actores, pero los hermanos Spierig son directores muy personales. Para rodar su primer largo agotaron el crédito de las tarjetas del banco y filmaban en el jardín de casa como podían. No son trepas, sienten un verdadero amor por el cine y éste es el idioma en el que lo expresan".
Sam Neill nunca había dado vida a un vampiro pero no dudó en aceptar el papel de Bromley, el corrupto presidente de una empresa que cría humanos para aprovechar la sangre. "Lo que me hizo mucha gracia y me animó a leer el resto del guión fue imaginarme a los vampiros haciendo cola en el Starbucks para pedir sangre. Parecía un universo ridículamente cool. Me lo he pasado genial interpretando a este personaje", apunta Neill.
La hija humana de Bromley, Alison, es la recién llegada Isabel Lucas, conocida entre el público australiano por su trabajo en la serie "Home and Away". "Michael y yo no habíamos visto la serie de Isabel", admite Peter Spierig, "pero nos convenció con su audición. Transmite honestidad y vulnerabilidad a su personaje". Lucas da vida a una chica que lleva diez años viviendo con rebeldes humanos y se encara a su padre vampiro en un enfrentamiento familiar escalofriante. "Fue un placer ver a Isabel con Sam", comenta Michael Spierig. "No se achantó para nada y, dado el destino de su personaje y las elecciones que tiene que tomar, Isabel se metió en el personaje al 100%".
Los actores australianos Claudia Karvan y Michael Dorman completan el reparto principal. "Claudia es muy conocida por su trabajo televisivo en Australia pero no es muy famosa fuera de su país", explica Brown. "Creo que va a ser una gran revelación. Tiene mucha experiencia y ha funcionado muy bien con Ethan y Willem. Michael es un joven actor muy interesante. Cuando buscábamos a alguien para interpretar al hermano de Ethan vimos su prueba y nos dejó de piedra. Fue genial".
Los directores admiten que en un principio se sintieron algo intimidados al pensar en trabajar con actores con tanta experiencia como Ethan Hawke, Willem Dafoe y Sam Neill, pero sus miedos se desvanecieron rápidamente. "Sentí pavor durante unos cinco minutos", se ríe Michael Spierig, "y luego me di cuenta de que el tiempo corre y el presupuesto crece cada día y no queda otra opción más que ponerse manos a la obra. Todo el reparto se ha llevado genial, son todos muy abiertos, así que fue muy fácil trabajar con ellos. Todos vinieron con muchas ganas de trabajar".
La meticulosa preparación que realizaron los hermanos también ayudó mucho a que el rodaje, que comenzó en 2007 en Queensland, Australia, fuera lo más sencillo posible. "Sabían lo que querían conseguir con la película y no lo cambiaron un ápice desde el primer día que hablé con ellos", comenta Brown. "Tenían muy claro qué escenas querían rodar, tenían storyboards de todos los encuadres e hicieron sus propios efectos especiales, y eso sólo para el tema técnico. También habían escrito el guión así que sabían cómo querían que fueran los personajes y siempre transmitían sus ideas con gran claridad".
El diseñador George Liddle trabajó de diseñador de producción y diseñador de vestuario de DAYBREAKERS, lo cual le permitió crear una estética propia para toda la película. Liddle dice que decidieron alejarse del estilo gótico que suele usarse en las historias de vampiros tradicionales. "Queríamos un mundo que nos resultara propio y reconocible con algunos toques futuristas", dice, "así que pasamos mucho tiempo mirando fotos y libros en busca de referencias. En nuestro mundo vampírico hace mucho frío y los colores predominantes son el gris, el blanco y el negro, como se ve en el vestuario. Los decorados son modernos y de vanguardia, con bloques de gris y negro con luces fluorescentes. El mundo humano, por el contrario, es más cálido y colorista".
El Director de fotografía trabajó mano a mano con Liddle para diseñar una iluminación que saliera de los propios decorados sin tener que recurrir a fuentes de luz externas. Según Nott, "La relación entre el cámara y el director de producción es de suma importancia para el resultado de la película. El trabajo de George es fantástico y me ha encantado haber tenido la oportunidad de trabajar con él".
De nuevo saliéndose de la norma, Nott y los directores tomaron la decisión estética de rodar la película en digital con el sistema Genesis. "Nos pareció que la esterilidad que se consigue rodando en digital transmitiría muy bien el mundo vampírico", explica Nott. "Es un mundo bastante hedonista en el que fuman y beben sin pensar en las consecuencias. Queríamos que su mundo fuera bastante gris e incoloro así que trabajamos con una paleta fría y monocromática".
Uno de los mayores retos de la producción recayó en el diseñador de efectos de maquillaje Steve Boyle: había que crear un ejército de vampiros y varios "infraseres" vampiros que se han alimentado de la sangre de otros vampiros y se han convertido en criaturas desquiciadas con aspecto de murciélagos. Según Boyle, "Peter y Michael me dijeron que pensara en todas las películas que había visto
¡y que las olvidara todas! Querían que me centrara en la humanidad de las criaturas. Los "infraseres" son como enfermos, como drogadictos terminales. Tienen marcas de mordiscos en los brazos porque se han alimentado de su propia sangre, además de alas y chepa".
Para crear a los "infraseres" Boyle diseñó un cuerpo prostético entero de espuma de látex y silicona y el actor tenía que aguantar once horas en el departamento de maquillaje antes de estar listos. "El actor se colocaba completamente desnudo y le poníamos un arnés y le pegábamos el traje. No había cremalleras. Luego le poníamos alas, lentes de contacto, dientes. La única parte del cuerpo en la que no llevaba nada pegado eran los talones y la parte interior de las orejas. Fue un proceso larguísimo pero muy efectivo. El mayor reto fue hacerlo a tiempo".
Boyle también diseñó más de 250 pares de colmillos y 250 pares de lentes de contacto. "Cuando fichamos a los actores hacíamos pruebas de ojos y les diseñaba lentes para tres fases: vampiro sano, vampiro enfermo e "infraser", que es cuando los ojos se quedaban completamente ensangrentados", explica Boyle. "Decidimos que los dientes de los vampiros sanos fueran bastante sutiles y los hicimos más agresivos cuando se ponían enfermos hasta pudrirse cuando se convertían en infraseres".
Boyle comenta que Peter y Michael le ayudaron mucho y le permitieron mucha libertad creativa. "Sabía que los directores se encargarían de filmar mis creaciones como era debido", apunta. "Entienden el proceso y saben cuánto tiempo hay que dedicarle y qué se puede esconder y qué no".
"Nos sentimos muy afortunados de haber tenido la posibilidad de hacer realidad el mundo que vivía en nuestra imaginación", comenta Peter Spierig. "Hemos querido contentar a los fans dándoles todo lo que esperan de una película de género, pero lo hemos presentado todo desde una nueva perspectiva. Creo que hemos conseguido nuestro objetivo".