Gritos en el pasillo es el primer largometraje protagonizado enteramente por cacahuetes. Dirigida por Juanjo Ramirez, es una producción de dos jóvenes productoras españolas Perro Verde Films y Producciones Bajo La lluvia.

Acción y terror con pocos medios. Una película rodada casi íntegramente en Fuerteventura por dos amigos: Juanjo Ramírez (Guionista, Director) y Alby Ojeda (Director de Fotografía) que con tan solo 24 años se embarcaron en esta aventura a la que se han acabado uniendo muchos otros profesionales, conscientes de su singularidad y su potencial, hasta convertirse en un equipo de treinta personas.

Si bien el rodaje duró cinco intensos meses, se ha tardado casi dos años en acabar la película, porque todo ha dependido del escaso tiempo libre que podían ofrecer instalaciones y profesionales. También porque se ha invertido todo ese tiempo en obtener el mejor acabado posible.

La producción corre a cargo de Alberto López Garrido y Manuel Cristóbal (Productor Ejecutivo de El Bosque Animado y El sueño de una noche de San Juan) con las empresas Perro Verde Films y Producciones Bajo La lluvia.

Lanzamiento day & date release, un término usado para definir un estreno simultáneo en todas las ventanas de explotación: Cine, televisión, DVD y descarga legal al mismo tiempo, en este caso será casi simultáneo, el DVD se retrasa unos pocos días.

La génesis de "Gritos en el Pasillo" se remonta al otoño del año 2002 cuando Juanjo Ramírez presenta un primer guión de mediometraje como proyecto de fin de carrera en la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid pero al final no se lleva a cabo.

En mayo 2003 es cuando a propuesta de Alby Ojeda se decide retomar este proyecto tan singular… con una duración de largometraje y una factura más profesional. Tras varios años de experiencia en el mundo del cortometraje y la escritura, Juanjo Ramírez y Alby Ojeda, cansados de las dificultades de rodar con actores, deciden embarcarse en la producción de su primer largometraje. El proyecto elegido es "Gritos en el Pasillo", ya como largometraje, una película de acción y terror con marionetas que son frutos secos, cacahuetes para los humanos, nueces para los perros y pipas para los pájaros. El gran paso está dado.

La producción se traslada a Fuerteventura, donde los dos residen, y se va suscitando el interés de empresas y organismos de la isla. Se incorpora también Alberto López Garrido como productor y aporta al proyecto dirección artística, diseño gráfico y producción asociada. De esa manera, comienza la andadura del primer largometraje realizado en la isla de Fuerteventura.

En septiembre 2003 se inicia la preproducción y simultaneamos la búsqueda de financiación con la construcción de los decorados de la peli. El Ayuntamiento de Puerto del Rosario nos ayuda a traer a la isla a Raúl López Serrano, director artístico de "Gritos en el Pasillo". Iniciamos el proceso de creación de todo un mundo en miniatura, adoptando una política de optimización y reciclaje. Aprendemos a sacar el máximo partido a los materiales más baratos y cotidianos, algunos de ellos escrupulosamente rescatados de vertederos y contenedores de basura. Meses de trabajo y unas cuantas dosis de imaginación enfermiza hacen el resto.

En enero 2004 el Cabildo de Fuerteventura aporta al proyecto una pequeña ayuda de 5.000 € que da un nuevo impulso a la película. De forma paralela, el Centro de Arte Juan Ismael cede de manera temporal un taller de trabajo. En ese taller se finaliza la fase de construcción de decorados, se realizan las primeras pruebas de cámara y Juanjo Ramírez y Alby Ojeda se disponen a afrontar la tormenta del rodaje.

Paradojas del destino, la película se va a rodar en el Centro de Arte Juan Ismael. El edificio era antiguamente el Cine Marga, el único cine de la isla en los años de infancia de Juanjo Ramírez y Alby Ojeda.

En julio 2004 tras un año de duro trabajo, comienza el rodaje. Con un presupuesto mínimo, un equipo fijo de sólo dos personas formado por Juanjo Ramírez y Alby Ojeda, y la esperanza de contar con colaboradores esporádicos para los planos más difíciles, se embarcan en la empresa más arriesgada de su breve carrera artística.

Durante el rodaje surgen todos los obstáculos previstos y muchos otros que no se habían tenido en cuenta en un principio. La carencia de las dos "pes" (personal y presupuesto) retrasa el rodaje e incluso llega a paralizarlo en varias ocasiones. A pesar de ello, la calidad de las imágenes que se están obteniendo infunde nuevos ánimos en el equipo. Lo que algunos que se hacían llamar expertos consideraban inviable, comienza a ser una realidad.

Tras cinco meses de luchar contra natura, se han rodado los casi mil planos que compondrán el film. Algunas secuencias se han enriquecido enormemente durante el proceso y hay peleas de karate, persecuciones, efectos de luz, planos subjetivos, etc, vamos…como en una peli.

El resultado de trabajar con tamaños imposibles, forzando cámara, luces y decorados hasta límites insospechados, es el nacimiento de un universo nunca visto, ¡y que gusta!. En noviembre 2004 finaliza el rodaje. Parecía imposible, ¡pero no lo era! "Gritos en el pasillo" ya está rodada.

Se ha conseguido tras reunir un poco menos de 6.000 euros de presupuesto, un poco más de año y medio de trabajo, un par de toneladas de sudor, algunas lágrimas, rellenar varias instancias, la pérdida de varias dioptrías, darse un par de cabezazos contra un par de paredes (sin acolchar) y un largo y escalofriante etcétera.

Ahora, se guardan las más de treinta cintas de material, Juanjo Ramírez se traslada a Madrid e inicia un largo e infernal proceso de post-producción con el apoyo de HD STUDIO ONLINE y FREAK LEVEL.

En enero 2005 se inicia la postproducción que durará has abril 2007. El proceso de post-producción es lento, pues la falta de medios obliga a abusar del tiempo libre de los profesionales encargados. Al tratarse de buenos profesionales, ese tiempo libre es escaso pero se aborda el trabajo con gran ilusión y confianza en el proyecto, que sorprende hasta al equipo.

A lo largo de dos largos años, se llevan a cabo labores que hacen crecer la película de una manera increíble. Se realiza el montaje de los mil planos en HD STUDIO ONLINE, contando con un acabado mucho más profesional de lo que el equipo se había atrevido a soñar. Se realiza el doblaje definitivo de la película con dobladores que afrontan ese trabajo con profesionalidad y cariño. Con ello, los personajes terminan de cobrar vida, adquieren personalidad y consiguen que la película sea el doble de entretenida.

Andrés de la Torre y Javier López Vila componen una banda sonora increíble para la película. Hay algo en esa música que la hace distinta, el toque mágico de nuestro dúo de freaks de la corchea, demostrando día a día, nota a nota, que entienden de qué va este proyecto… y que entienden también de qué va esto de hacer buena música. Contemplando las imágenes con esas melodías, con ese todo…se empieza a creer que tenemos una película de verdad. ya la sensación de tener entre las manos una película de verdad.
Víctor Puertas y Juan Luis Cordero trabajan en el sonido de la película. Meses y meses de trabajo duro en el estudio de sonorización. Un torrente de creatividad e ideas y gracias al tratamiento de sonido, el universo de "Gritos en el Pasillo" se hace más creíble. Es alucinante lo que es capaz de hacer un buen sonido.

Tras un sin fin de problemas técnicos, "Gritos en el Pasillo" es una realidad. Estamos en julio 2006.

A partir de este momento, la suerte poco a poco empieza a sonreír. Se pone una primera versión del montaje en el Festivalito de la Palma y el proyecto es recibido con un cariño que emociona a todo el equipo.

Ya en Madrid, aprovechando un pase para el equipo de la película se invita a Manuel Cristóbal, de Perro Verde Films, y Productor Ejecutivo de los largos de animación El Bosque Animado y El sueño de una noche de San Juan. Manuel Cristóbal sintoniza con el proyecto al instante, y a la mañana siguiente Juanjo Ramírez y Alberto López Garrido se reúnen con él. Manuel Cristóbal les propone coproducir "Gritos en el Pasillo", y ofrece a Juanjo Ramírez dirigir una segunda película de animación, ahora con marionetas, Zombie Western: La leyenda del carnicero oscuro.

Esto hace que "Gritos en el Pasillo" crezca mucho más de lo que se había esperado y ahora el equipo afronta su estreno con ilusión, la primera ilusión que les llevo a embarcarse en este proyecto tan increíble.