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  Sueños del desierto  (Hyazgar)
  Dirigida por Zhang Lu
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Berlinale 2007 Competición oficial.


Reparto
Bat-ulzii, Seo Jung, Shin Dongho, Munkhjiin, Enkhtuul, Bayasgalan, Nomin, Bakchul, Myagmarnaran.


Notas de producción
La película se rodó íntegramente en las estepas de Mongolia con un presupuesto de un millón de euros. El director chino de ascendencia coreana Zhang Lu, ex escritor que enseña Literatura en la Universidad de Yanbian, empezó a escribir el guión después de visitar Mongolia por primera vez en 2005.

El rodaje de SUEÑO DEL DESIERTO duró 28 días repartidos entre julio y agosto de 2005, pero el realizador y su equipo, formado por actores y técnicos coreanos y mongoles, vivieron dos meses en las estepas.

"Todo el equipo, las cámaras, etcétera, se rompió en algún momento por culpa del terrible viento y de las tormentas de arena", recuerda el director. "Encima, todos sin excepción cayeron enfermos excepto yo. De noche, los lobos se acercaban a nuestro campamento y nos miraban. Al principio nos dieron miedo, pero se limitaban a observarnos. No se comieron a nadie".

Y añade: "En Corea, el equipo tiene un día libre a la semana, pero me bastaba con preguntar si querían volver a Corea lo antes posible para que nadie quisiera descansar. Además, no podían ir a ningún sitio ni huir aunque quisieran, estábamos rodeados de lobos".


Entrevista con el director

P: ¿Cómo se le ocurrió introducir a dos personajes coreanos en la historia de un mongol que planta árboles en una estepa desértica?

R: Hay muchos refugiados norcoreanos en China, y me dijeron que también había en Mongolia. Cuando me enteré, intenté imaginar el viaje que hacen algunas personas para llegar hasta Mongolia. Desde Corea del Norte, es necesario cruzar todo el noreste de China, una distancia enorme. Me dolía el corazón solo con pensar en el esfuerzo necesario. Le sugerí a mi productor que rodáramos una película en Mongolia, país al que nunca había ido. Nos desplazamos hasta Mongolia y hablamos con la gente de allí; así nació la historia.


P: ¿Qué significa la relación entre Hungai y la madre y el hijo coreanos?

R: Hungai decide quedarse en el desierto a pesar de que todos se van. Está decidido a salvar la estepa plantando árboles. Al contrario, la madre y el hijo norcoreanos se van. Se marcharon de su ciudad, de su país; deben seguir adelante. Quería mostrar la diferencia entre los que se quedan y los que se van.


P: La película puede verse como una fábula y una crítica política. ¿Cómo se le ocurrió mezclar dos elementos aparentemente tan dispares?

R: La historia habla de un hombre que no puede desarraigarse y de dos personas, una madre y un hijo, que representan el desarraigo permanente. Las dos situaciones me parecen igualmente dolorosas. En ningún momento intenté hacer un comentario político; no era mi intención criticar al régimen norcoreano. No tengo bastante información acerca de la situación política de ese país para hacerlo. Solo quería describir a dos personas cruzando un país que desconocen, por eso la película solo se ocupa de su viaje después de su huida de Corea del Norte.


P: Los personajes tienen muchas dificultades para comunicarse ya que no hablan el mismo idioma. ¿Fue difícil rodar con actores mongoles?

R: Trabajé con un intérprete durante el rodaje. Pero intenté sentirme como un refugiado norcoreano a la hora de dirigir a los actores. El idioma es una maravillosa herramienta de comunicación, pero también es posible comunicarse sin palabras, usando el corazón. Entonces la comunicación es más directa, más simple y más humilde que cuando usamos un idioma.


P: Antes de ser realizador de cine, fue escritor. ¿Su experiencia como escritor ha influido en sus películas?

R: Para nada. No creo que haya una relación entre el cine y la literatura. El cine es cine, la literatura es literatura. A veces, cuando se me pregunta eso, digo, riendo: “Me divorcié de la literatura, ahora vivo con la imagen. No me pregunte por mi ex mujer, mi nueva esposa lo lleva muy mal”.


P: ¿Tiene algún proyecto en mente?

R: Ya he empezado a trabajar en una nueva película, el proyecto “Río Dooman”. Rodaremos en una ciudad surcoreana, en la provincia de Jeolla.

El guión no es mío, me han pedido que lo dirija. De momento, lo estoy retrabajando. Hemos tenido suerte, el Consejo Cinematográfico de Corea ha concedido una ayuda al proyecto, así que no tardaremos en empezar a rodar.