Es cierto que Hans Christian Andersen no tenía un "Yo" en su inolvidable cuento, pero esto es algo más que el simple cuento del Patito Feo.

Esta es la historia del Patito Feo y su madre, Ratso. Así es como el patito feo le llama; aunque en realidad es su padre. Bueno, para ser del todo sinceros, Ratso no es ni su padre.

Ya veis, la pobre rata se encontraba justo allí cuando el patito rompió el cascarón y se vio en la obligación de hacerse responsable. ¿Y qué clase de padre sería si se negara a ser la madre de su propio hijo? ¿Confundido? Pues bien, precisamente así es como estaba Ratso.

Y no es que no pudiera acarrear con ello. Pero es que pasar el día escapando de una banda de asquerosas ratas de ciudad y rodeado de pollos hostiles en un campo poco hospitalario tiene su miga. ¿Hemos mencionado su relación con un gato que recibe órdenes de una marioneta de mano?

La vida no es fácil, eso os lo dirá cualquiera que haya criado a un patito.


Los personajes

Ratso
Es un tipo que se cree que está en el showbusiness, un quiero y no puedo de los espectáculos, un manager del tres al cuarto. Cree que todavía no se ha realizado en su vida y busca la gran respuesta, ¡el gran éxito! Es animal callejero, un tipo de ciudad. Y nos lo encontramos huyendo de una situación del pasado. Pero de repente se encuentra con un huevo y tiene que hacer de padre de un patito feo. Nada contento con las circunstancias, intenta escabullirse de los retos que le ha marcado la vida. Ratso es divertido y de corazón cobarde, es un seductor desastroso pero no podemos evitar encariñarnos con él. En el fondo es un bonachón, y aunque actúa de forma egoísta es el personaje que pasa por el arco emocional más amplio, al establecer un verdadero lazo de unión con Feo y encontrarse con el espectáculo más importante de su vida: la paternidad.

El Pequeño Feo
Es la voz inocente de la película. Siempre está cuestionando y buscando la aprobación de Ratso. Naturalmente, es como todo bebé que empieza a andar, que no solo es encantador, sino que también tiene su personalidad. Y esto es importante, como cuando rechaza hacer el show.

Como no puede ser de otra manera, Pequeño Feo es una ricura, pero también es un animal decidido. Quiere encontrar un padre en Ratso. Necesita un padre en Ratso. Exige un padre en Ratso.

Al llegar a la adolescencia, Feo se convierte en la voz inocente del descubrimiento, asumiendo los desafíos de hacerse mayor, y siente y actúa con torpeza, como la mayoría de adolescentes. Sufre continuos cambios de humor. Quiere demostrarle a Ratso que puede triunfar en nombre de los dos pero en un momento determinado se siente traicionado por Ratso. Con Jesse siente el fervor del amor en la juventud pero rechaza el sentimiento porque cree que él no es especial para nadie, y mucho menos para Ratso, por el hecho de ser feo. Feo es un ser emocional y habla siempre con la verdad por delante. Al final demuestra su lealtad, reconociendo que la familia es mucho más importante que ser guapo o que ser especial, ¡aunque tengas a Ratso de padre!

Ernie / William
Primo de Ratso (aunque sea un gato), representa el show como mediocre monologuista/ventrílocuo en el carnaval. Su marioneta y alter ego es William. Ernie es un tipo grande y bonachón, sincero y cariñoso. Tiene una forma de ser gentil y suave, lo que contrasta de lleno con el histérico y gruñón de William.

Jesse
Es el primer amor de Feo. Posee una arrogancia juvenil muy especial, algo pícara pero sin ninguna maldad. Es muy decidida y con un sentido muy claro del bien y del mal. Esto lo vemos en cómo ella es la única que realmente se encara con Ratso. Tiene los pies en el suelo, es atractiva, llena de autoconfianza y con una gran energía. Un inmenso pero beneficioso contraste con Feo adolescente.

Phyllis
Phyllis es un mal bicho. Lo que ella quiere, lo tiene. Y quiere a Ratso. Y acosa tanto a sus hermanos como al propio Ratso. Todos le temen. Sin embargo, no es tan mala como todos creen. Al final, todos ven que su mal carácter se debe a su neurosis y obsesión por casarse.

Frank
Es hermano de Phyllis. Un tipo de complexión robusta, forzudo, listo y urbanita. Phyllis le hace la vida imposible.

Wesley
Un gusano. Un actor insatisfecho que va de quintaesencia del teatro, un divo que cree que está desaprovechado y nunca está contento con el papel que le toca. Es un incordio, pero también es divertido.

Daphne
Es sincera, fuerte, lista, honesta y valiente. Posee un buen sentido del humor, aunque enseguida ve las intenciones de Ratso, quien pierde el mundo de vista por ella.

Esmeralda
Intimidante –regenta el espacio de los patos–, es mejor no meterse con ella. Nadie le puede. Es grande y fuerte, marcada por la rudeza del campo.

Stan
El hermano pequeño de Phyllis, más tonto que Frank, siempre sale con la pregunta menos adecuada y siempre va uno o dos segundos por detrás de Frank –nunca sabe cuando a Phyllis está a punto de darle una rabieta.

Olga la bocazas
Es una voz irritante que no deja de meter la pata hablando demasiado y empeorando las cosas intentando arreglar lo que dice. Lo único que quieres es que se calle.