Un polvoriento bar de carretera en el desierto de Mojave se convierte en la zona cero del último conflicto que tendrá lugar en la Tierra. Mientras la humanidad se autodestruye con gran violencia, un pequeño grupo de personas atrapadas en medio de ninguna parte, se prepara para la última ofensiva con la ayuda de un misterioso y poderoso desconocido.
Sin ser conscientes del caos que se despliega alrededor del planeta, Bob Hanson (Dennis Quaid), propietario del remoto bar de carretera, y su socio Percy (Charles S. Dutton) se ocupan de su negocio como un día cualquiera. La bella camera del restaurante, Charlie (Adrianne Palicki), que está en su último mes de embarazo, sirve el desayuno a Sandra y Howard, una acomodada pareja de una zona residencial (Kate Walsh and Jon Tenney) que junto a su hija Audrey (Willa Holland), esperan a que el hijo de Bob, Jeep (Lucas Black), les repare su coche.
Cuando la emisión de televisión se ve interrumpida y la línea telefónica se cae, el grupo se da cuenta de que han perdido la comunicación con el mundo exterior. Mientras intentan comprender qué está ocurriendo, ya sea por un terremoto o un ataque terrorista, una mujer mayor (Jeannette Miller) llega y pide candorosamente un filete a Charlie. Cuando le sirven su comida, empieza a escupir algunas obscenidades que dejan boquiabiertos a los allí presentes. En un abrir y cerrar de ojos, la frágil anciana desarrolla una fuerza sobrenatural y ataca brutalmente a Howard dejándole gravemente herido.
Su intento desesperado de conseguir ayuda médica, se ve interrumpido por una densa nube de insectos voladores que convierten al bar en el único lugar seguro en muchos kilómetros a la redonda. Al tiempo que asimilan la horrorosa situación en la que se encuentran, un desconocido (Paul Bettany) se une a ellos con un arsenal de armas robadas. Este informa a Charlie de que el bebé que espera es la única esperanza para la humanidad y que está dispuesto a hacer todo lo que sea necesario para mantenerlo a salvo.
El mundo está a punto de convertirse en una auténtica pesadilla para el último bastión de la humanidad, cuando empiezan a llegar caravanas de enloquecidos asesinos en búsqueda de carne fresca, seguidos muy de cerca por un batallón de ángeles guerreros que se proponen destruirlo todo, en una única y aterradora visión del Final de los Días.