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  La chica danesa  (The danish girl)
  Dirigida por Tom Hooper
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Basada en el bestseller homónimo de David Ebershoff.

Una producción de Working Title/Pretty Pictures, en asociación con ReVision Pictures y Senator Global Productions. Una película de Tom Hooper, protagonizada por Eddie Redmayne y Alicia Vikander, LA CHICA DANESA, con Ben Whishaw, Sebastian Koch, Amber Heard y Matthias Schoenaerts. Casting, Nina Gold. Música, Alexandre Desplat. Maquillaje y peluquería, Jan Sewell. Vestuario, Paco Delgado. Montaje, Melanie Ann Oliver, ACE. Diseño de producción, Eve Stewart. Fotografía, Danny Cohen, BSC. Coproductores, Jane Robertson, Ben Howarth, Nina Gold. Productores ejecutivos, Linda Reisman, Ulf Israel, Kathy Morgan, Liza Chasin. Basada en la novela de David Ebershoff La chica danesa. Guión, Lucinda Coxon. Producida por Gail Mutrux, Anne Harrison, Tim Bevan, Eric Fellner, Tom Hooper. Dirigida por Tom Hooper.


Acerca de La chica danesa
La terminología
Cisgénero (o simplemente "cis"): Una persona cisgénero es aquella cuya identidad de género (es decir, su sensación interna de ser hombre o mujer) se corresponde con su sexo al nacer. "Cis" es un prefijo latino que significa "del mismo lado", y es antónimo de "trans". También puede llamarse "cisexual".

Transgénero (o simplemente "trans"): Una persona transgénero es aquella cuya identidad de género (es decir, su sensación interna de ser hombre o mujer) no se corresponde con su sexo al nacer. Transgénero es un adjetivo, no un sustantivo, por lo que siempre acompaña a este último.

Transición: Se trata de un proceso complicado que se desarrolla durante un largo periodo de tiempo y al que se someten las personas transgénero para que sus cuerpos y su expresión sexual estén en concordancia con su identidad interna. Se compone de todos o parte de los siguientes pasos personales, médicos y legales: contárselo a la familia, los amigos y los compañeros de trabajo; usar un nombre y un género diferente; vestir de forma distinta; cambiar de nombre y/o de sexo en todos los documentos legales; terapia hormonal, y posiblemente (aunque no en todos los casos) someterse a una o varias operaciones. Los pasos de una transición difieren con cada persona.

Cirugía de confirmación de género: También llamada cirugía de reasignación de sexo. Es un procedimiento al que se someten algunas personas transexuales. Es preferible usar este término al obsoleto "cambio de sexo".

LGBTQ: Lesbiana, gay, bisexual, transgénero y queer/comunidad que se cuestiona.

Tal como se ve en LA CHICA DANESA, la identidad de género de Lili Elbe era femenina, pero al nacer era de sexo masculino. De acuerdo con la terminología actual, era una mujer transgénero, por lo que no debemos referirnos a ella con un pronombre masculino. Cualquier referencia antes de su transición se hará como sigue: "Antes de su transición, Lili vivía como Einar Wegener". Sería un error hablar de ella como de un hombre o llamarla un hombre trans, ya que Lili se veía a sí misma como mujer.


Hablan de LA CHICA DANESA
- Lucinda Coxon, guionista
- Paco Delgado, diseñador de vestuario
- Amber Heard, actriz (Ulla)
- Tom Hooper, director y productor
- Eddie Redmayne, actor (Lili Elbe)
- Jan Sewell, maquillaje y peluquería
- Michael Standish, decorador
- Eve Stewart, diseñadora de producción
- Alicia Vikander, actriz (Gerda)
- Ben Whishaw, actor (Henrik)


Eddie Redmayne: Es un relato de autenticidad, identidad y valor, pero también es una historia de amor. Habla del valor que hace falta para encontrarse a sí mismo, para ser uno mismo.

Tom Hooper: Creo que LA CHICA DANESA comparte algo con El discurso del rey, me refiero al muro que se levanta entre nosotros y una versión mejor de nosotros, y a cómo podemos superar esa barrera.

La película cuenta la extraordinaria vida de Lili Elbe, una de las primeras personas que se sometió a una cirugía de confirmación de sexo en el mundo, y la poderosa historia de amor de las dos personas que harán juntas el recorrido de Lili. Es el conmovedor retrato de un matrimonio que pasa por una profunda transformación.

Eddie Redmayne: Trata de los obstáculos de la vida y de cómo se superan siendo dos.

Alicia Vikander: Las dos personas que protagonizan LA CHICA DANESA son lo más parecido a dos almas gemelas.


La chica danesa fue la primera novela de David Ebershoff. Publicada en 2000, ganó el Premio Literario Lambda de Ficción Transgénero, entre otros honores. Ha sido traducida a unos veinte idiomas. Las productoras Gail Mutrux y Anne Harrison, así como la productora ejecutiva Linda Reisman, empezaron a trabajar en el proyecto hace casi una década. Gail Mutrux compró los derechos de la novela en 2000 y empezó a desarrollar la versión cinematográfica. Linda Reisman se unió a ella en 2003. Anne Harrison se asoció como productora en 2005 con el objetivo de conseguir un guión, para lo que contrató a Lucinda Coxon.


Lucinda Coxon: Gail y Anne me hicieron llegar la novela. Al leerla, comprendí que la notable historia de Lili había sido engullida por la marea de la historia. Su vida fue absolutamente increíble, sin embargo, nunca había oído hablar de ella. Leí la novela y empecé a documentarme. Era la historia de un matrimonio, la historia de amor entre dos artistas valientes e imaginativas, y eso es lo que más me sorprendió. También me atrajo la idea de contar una historia universal a través de un relato muy particular.

Por ejemplo, cuando Gerda y Lili – esta última todavía como un hombre - deciden irse de Copenhague a París, lo hacen en busca de una sociedad más abierta y también porque, como cualquiera que crece, ha llegado el momento de cambiar el hogar por el gran mundo.

No solo las imaginé como una pareja que se quería, sino como dos artistas que creaban juntas. Siempre se esforzaban en liberarse mutuamente y llegaron al límite de los cambios que una pareja puede asumir.

Alicia Vikander: El guión es muy directo; se atreve a mostrar que no siempre se dice lo que se debe.

Eddie Redmayne: Está magníficamente escrito.

Lucinda Coxon: Para adaptar una novela a la gran pantalla, hay que enamorarse del original desde el principio, pero más tarde hay que hacerse con el material, apropiárselo. Me alejé de la novela de David para acercarme más a la historia original, pero creo que he mantenido la esencia del libro. David había desarrollado y construido magníficos personajes en la novela, y eso me ayudó muchísimo.

Entre las dificultades está el hecho de que empieza como una historia muy íntima entre dos personas que se expande en enormes ramificaciones. Al principio viven aisladas, pero luego cambia completamente.

Paco Delgado: Es una historia muy íntima entre dos artistas que optan por tomar rumbos inesperados. Es lo que sentí al leer el guión. El lector se ve obligado a adaptarse a ambos puntos de vista a medida que la valiente Lili toma una decisión tras otra.

Ben Whishaw: Al leer el guión, mi reacción fue instintiva, completamente emocional. Lo leí de una sentada, casi dejé de respirar. Luego, al reflexionar, me di cuenta de que trataba de un tema que no suele tocarse en las películas comerciales. Trata de una relación y de una persona en particular que no solo se esfuerza en ser auténtica para sí misma, sino también para su pareja.

Me pareció una historia muy fuerte y muy emotiva que se atrevía a estudiar qué ocurría cuando una mitad de la pareja dice: "Necesito cambiar". El guión de Lucinda es generoso, esperanzador y sensible, pero nunca cursi.

Amber Heard: Lucinda ha hecho suyo un relato cautivador. Ha gestionado con maestría la difícil tarea de contar una historia única para hacerla totalmente cercana. Me tocó el corazón. No me he identificado con uno de los personajes, he conectado con todos.

Lucinda Coxon: Realicé un viaje de descubrimiento personal con Lili y Gerda, y espero que el espectador pueda hacer lo mismo. En muchas ocasiones tuve que esforzarme para no perderlas.

Eve Stewart: Me sorprendió la ternura con que se trataba a los personajes. Es interesante mostrar la obra artística de la pareja y ver hasta qué punto influyó en su entorno.


El director Tom Hooper leyó el guión después de que la directora de casting Nina Gold se lo recomendara, y se apuntó al proyecto.


Tom Hooper: Nina me dijo: "Voy a pasarte un guión genial, no tienen a nadie". Me enamoré del guión nada más leerlo. Fue en 2008, cuando estaba preparando El discurso del rey. Nunca había leído algo tan bueno. No soy nada sentimental, pero lloré en tres ocasiones mientras lo leía. Desde ese momento quise hacer la película.

Alicia Vikander: Tom siempre cuenta historias basadas en un delicado equilibrio entre inteligencia y emoción. Si alguien podía contar esto, no me cabe duda de que era él.

Lucinda Coxon: En cierto sentido, tuvimos suerte de que nadie hiciera la película antes que nosotros. Tom es un director increíblemente atrevido, y quería realizar una película que conectara con el público. Como guionista, siempre luchas para defender el guión, pero tuve compañeros con instintos tan fuertes como auténticos. Ha llegado el momento de que el público vea la película.

Paco Delgado: Todavía hay países que, culturalmente, no están preparados para aceptar el recorrido de esta pareja. La película es un homenaje a una persona asombrosa y también a los valientes que hoy en día optan por ese mismo camino.

Amber Heard: Imaginen lo que estaba en juego para Lili. Todavía hoy, en Estados Unidos, se puede despedir a alguien legalmente en unos veinticuatro estados por ser LGBTQ. Lili fue una heroína para el individualismo al escoger algo nuevo. Cada vez lo hacen más personas, pero me parece muy triste y aterrador que siga habiendo tantos riesgos.

Eddie Redmayne: Me parece asombroso que, casi cien años después de Lili, un derecho civil haya progresado tan poco.

Alicia Vikander: Me siento muy orgullosa de que contemos esta historia en un momento que pueda ser útil para el movimiento,

Eddie Redmayne: Queda muchísimo por hacer.


Eddie Redmayne se comprometió a encarnar a Lili mucho antes de que la película recibiera "la luz verde" por parte de Tim Bevan y Eric Fellner, los productores de Working Title Films.


Tom Hooper: Desde que leí el guión, pensé en Eddie para el papel. Se lo dije a Gail Mutrux: "Quiero hacer la película con él". Ya habíamos trabajado juntos en la miniserie "Elizabeth I". Pero no le pasé el guión hasta que rodamos Los miserables con Working Title en 2012.

Eddie Redmayne: Estaba en las barricadas de Los miserables y Tom me dijo: "Me gustaría que leyeras algo". Me dio el guión y lo leí, no tenía la menor idea de qué iba. No solo me conmovió profundamente, me quedé atónito. La pasión era extraordinaria, auténtica. Le dije a Tom que quería ser parte del proyecto.

Tom Hooper: Se comprometió a hacer la película conmigo si el proyecto se consolidaba.

Eddie Redmayne: ¿Si me sentí intimidado? Pues sí. Todo me intimida. Pero he empezado a entender que el miedo a no hacer justicia a un personaje o a una historia es electrizante, me obliga a ir hacia adelante y a esforzarme más.

Lili Elbe fue una mujer valiente. Era complicada, extravagante y vibrante. He intentando sumergirme en su mundo, he intentado vislumbrar por lo que pasó. Lo mejor de ser actor es que uno profundiza más en sí mismo con cada personaje.

Lucinda Coxon: Me sentí muy feliz y fue un enorme alivio saber que Eddie quería hacer el papel. Es un papel transformador, que debe ser concebido con inteligencia, delicadez y profesionalismo. Entendí de inmediato que todo iría bien, que Eddie sabría cuidar del personaje y que se convertiría en una asombrosa Lili. Eddie es sumamente riguroso y disciplinado. Se documentó muchísimo acerca de la historia y de la vida de los transexuales.

Eddie Redmayne: Para mí, lo más importante fue conocer a miembros de la comunidad trans, escuchar sus historias, su lucha, su realidad. Lili se sometió a una operación de confirmación de género hace casi cien años; hoy en día, las personas que consideran una operación semejante saben mucho más del tema que ella. Al hablar con los miembros más mayores de la comunidad, me enteré de lo que significaba la experiencia transexual hace 40 ó 50 años.

Muchas de las mujeres transexuales con las que hablé me dijeron que, antes de la transición, para poder sobrevivir en la sociedad, desarrollaron formas de vivir con su sexo de nacimiento, y esto incluía toda una infraestructura.

Cada transexual tiene una historia única e individual, no hay una experiencia transexual general. Pero todas las personas con las que hablé me dijeron que sabían desde una edad temprana que su sexo de nacimiento era diferente de su identidad.

Tom Hooper: Para Eddie y para mí, la excepcional y magnífica autobiografía de Jan Morris, El enigma, fue una inspiración.

Eddie Redmayne: Tom y yo despedazamos el guión juntos durante el proceso de preparación. Saqué mucha información del libro de David Ebershoff, y con eso empecé a mirar en mi interior para ver qué podía encontrar, pero las decisiones fueron mías.

Lucinda Coxon: Eddie Redmayne contó con la ayuda de Julia Wilson-Dickson (asesora de dicción) y de Alex Reynolds (coreógrafa), que ya había trabajado con él en La teoría del todo.

Eddie Redmayne: Alex posee un maravilloso sentido del movimiento y sabe perfectamente lo que soy capaz de hacer. Me enseñó a liberar ciertas partes de mi cuerpo. Aunque el movimiento es externo, también fue un proceso interno: me liberé dentro de mí para acceder a un lugar que me permitiera sentir la historia de Lili con el mayor realismo posible.

Siempre me gusta estudiar el lado físico de un personaje porque representa una enorme parte de lo que somos. Me interesa el uso de las manos. Quería mostrar destellos del verdadero sexo de Lili incluso cuando vivía como Einar. Podía ser la forma en que dormía, y estudié las posibilidades.

Tom Hooper: Necesitábamos hacer uso de las pequeñas cosas en el lenguaje corporal que indican un cierto encubrimiento del verdadero yo. Muchas de nuestras conversaciones giraban en torno al hecho de que Lili es una mujer, pero vive como Einar al principio. Queríamos seguir un proceso de búsqueda del verdadero yo en vez de construir una nueva identidad.

El trabajo que Eddie realizó con Alex le permitió acceder a las emociones del personaje.

Eddie Redmayne: Jan Sewell (maquillaje y peluquería) y yo nos conocimos en La teoría del todo. Jan es muy sensible, muy matizada en su trabajo. Empezamos a explorar las posibilidades físicas para Lili casi un año y medio antes del rodaje.

Jan Sewell: Era fascinante por la cantidad de pequeños cambios que podían incluirse durante la transición de Lili. Hay momentos un poco burdos, antes de que sea realmente Lili. Empezamos con unos toques de maquillaje para que fuera más femenina, como el rímel, por ejemplo. También lleva el cabello algo más largo, con ondas. Eddie y yo escogíamos detalles que quizá no se vean, pero que marcan la diferencia.

Eve Stewart (diseñadora de producción) empezó muy pronto a preparar la película. Paco Delgado y yo tuvimos acceso a todas las imágenes que había usado. Así debe ser un departamento artístico, colaborador.

Eve Stewart: Paco y yo lo pasamos realmente bien. Fue un placer llevarle a ver los decorados en Dinamarca para descubrir la luz de allí, y trabajar con colores y texturas.

Tom Hooper: Tuve mucha suerte de contar con Eve para LA CHICA DANESA. Es nuestro quinto trabajo juntos. Lo maravilloso de las relaciones profesionales duraderas, como la que mantengo con la brillante montadora Melanie Ann Oliver, este es nuestro sexto proyecto, es que la colaboración se asemeja a una conversación cada vez más profunda. Cuantas más veces trabajamos juntos, más atrevidos somos. Hemos comprendido que si no hacemos una declaración de intenciones, es como si no hubiéramos dicho nada.

Michael Standish: Trabajé por primera vez con Eve en 1998, en Topsy-Turvy. Eve dirige el departamento artístico, y una vez que ha decidido algo, debe de ser perfecto. Sabemos exactamente qué objeto se colocará en qué lugar.

La documentación es vital. No me refiero solo a documentarse con imágenes, a las referencias visuales para cada decorado, sino a hablar con la gente y llegar a captar la sensación de la época. Para las escenas del quirófano, Eve fue a la clínica de Dresde que se edificó en el solar donde estaba el Hospital de Mujeres. El archivero del Instituto de Medicina de la Universidad Tecnológica de Dresde le enseñó todas las fotos de la época, lo que nos permitió replicar el quirófano del Dr. Warnekros.

Eve Stewart: Para el Hospital de Mujeres, usamos un blanco muy fresco, casi celestial.

Michael Standish: Lo hablamos todo: ¿Qué sensación comunica? ¿A qué nivel? ¿Qué colores son los mejores? Escogimos una gama de colores y la aplicamos en toda la película para que hubiese una cohesión.

Jan Sewell: Los diseñadores de maquillaje dividimos el guión en un programa, y el mío es muy detallado, para cada personaje. Hacemos fotos del maquillaje de cada día, hasta el punto de acabar con una versión fotográfica de la película.

En el plató, mientras le maquillaba, Eddie repasaba las fotos para acordarse de cada momento. Además, su guión estaba lleno de anotaciones.

Eddie se apasiona, se prepara y es muy preciso, algo que me encanta. Quiere ver todas las posibilidades. Un día estaba sentada a su lado y decidió que aprendería a sentarse como yo para la película. Y lo consiguió.

Paco Delgado: Eddie se toma su trabajo muy en serio. Colabora muy de cerca con todos los departamentos. Se preocupa por el personaje, no por él. Nos ayuda a conseguir lo que buscamos.

Alicia Vikander: Ver a Eddie esforzarse para hacer justicia a Lili contagió a todos los que trabajamos con él.

Jan Sewell: Siempre está la sensación de que no se ha hecho todo, que podría hacerse algo más.

Eddie Redmayne: La interpretación es empeñarse en llegar a la perfección, aun siendo consciente de que jamás se conseguirá.

Tom Hooper: La preocupación de Eddie es una especie de combustible que le empuja a alcanzar niveles increíbles de concienciación y de trabajo. Es maravillosamente libre cuando actúa. Es una de las cosas que le hace destacar como actor, la habilidad de superar completamente la ansiedad en el momento en que la cámara rueda.

Eddie Redmayne: Si un actor tiene la oportunidad de interpretar a Lili Elbe y de contar su historia, debe darlo todo de sí mismo. Es un gran privilegio, pero también una gran responsabilidad.

Lucinda Coxon: Eddie debía interpretar tres periodos. El primero, Lili antes de su transición, y el tercero, la verdadera Lili, pero el segundo era el más complicado.

Alicia Vikander: Eddie supo indicar con extrema delicadeza que Lili no podía expresarse a sí misma antes de su transición. Estaba encadenada.

Eddie Redmayne: Si pienso en la parte física, estaba Lili viviendo como Einar, y luego estaba Lili descubriéndose, derribando los muros que la rodeaban.

Paco Delgado: Queríamos ver a una mujer de verdad al final, no a un ser artificial, y apenas debía estar maquillada. Para no caer en la caricatura, experimentamos con formas, colores y peinados. La misma Lili tuvo que experimentar con su imagen, encontrar lo que mejor le sentaba. ¿Qué realza más la figura de una mujer? Al principio puede que haya una hiperfeminización, y a medida que se va sintiendo segura, se inclina más hacia lo natural. La secuencia en el salón de baile es su primera prueba con un traje de gala, pero poco a poco se hace con él. Fue nuestro modo de enfocar todo el vestuario y los peinados.

Eddie Redmayne: La hiperfeminización fue algo que me describieron algunas mujeres transexuales. Al principio de la transición visten con la ropa de su verdadero sexo. Algunas lo describieron como una adolescencia en la que se expresan maquillándose demasiado o llevando pelucas llamativas. Deben probar hasta encontrar su identidad. Hablé mucho de eso con Jan.

Lucinda Coxon: Lili no tenía por qué acabar siendo una mujer guapa. Da la casualidad de que Eddie es una Lili preciosa, pero para eso tuvo que meterse en su cabeza y encontrar el ingenio, el humor y la vulnerabilidad. Lo más bonito fue verle articular las dificultades que supone emerger en otro yo, regresar a la adolescencia, en cierto modo.

Eddie Redmayne: Cuando Gerda le ofrece la oportunidad de vestirse con ropa de mujer, Lili ve la luz. Y cuando van al salón de baile, siente el nerviosismo que un amigo describe como la emoción de fundirse en el ambiente, pero también la emoción del juego, sobre todo cuando conoce a Henrik.

Ben Whishaw: No solo es liberador para Lili, también lo es para Henrik. La ternura que nace entre ellos se debe a que ninguno de los dos podía expresar abiertamente lo que eran ni lo que sentían. En esa época, los miembros de la comunidad LGBTQ debían encontrar maneras indirectas de comunicarse, incluso hablar en código.

Eddie Redmayne: Algunas mujeres transexuales me dijeron que no sienten la necesidad de fundirse, de pasar desapercibidas. Pero en nuestra historia, Lili sintió esa necesidad en algunas ocasiones. Va al baile porque está progresando.

Ben Whishaw: A medida que avanza la historia, queda claro que Lili y Henrik quieren cosas muy diferentes.

Ahora entendemos mejor estos temas, pero no quisimos que las percepciones actuales entraran en la historia, quisimos ser fieles a la época.

Eddie Redmayne: Al final de la película, Lili ya no lleva la peluca pelirroja del baile. Se ha dejado el pelo largo, y su maquillaje es mucho más discreto. Se nota que se siente mucho más cómoda consigo misma.

Soy cisgénero, no soy transexual. La primera vez que entré en el plató como Lili, noté cómo me miraban, incluso juzgaban. Estaba en un ambiente totalmente protegido, pero llegué a sentir un poco lo que debe ser para las personas transexuales, para aquellos que no se conforman con su sexo.

Empecé con esto desde la más profunda ignorancia. No sabía que el género y la sexualidad no estaban relacionados. Tampoco entendía la noción de fluidez entre ambos géneros y la sexualidad. Durante el proceso, aprendí algo nuevo cada día.

Las personas que he conocido, las experiencias que han compartido conmigo, me han cambiado, y les estoy muy agradecido por haberlo hecho.

Amber Heard: Eddie se quedó desnudo, pero a la vez empezó a añadir capas. Fue asombroso descubrir, desde los ensayos, la textura y pureza de todos los detalles y matices físicos del personaje. Ningún esfuerzo era demasiado para intentar entender los rincones emocionales de la feminidad.

Ben Whishaw: Eddie se hizo con Lili a base de honradez y esfuerzo. Estudió cómo moverse, cómo estar de pie. En mis escenas con Eddie, noté que su interpretación venía de muy adentro.

Alicia Vikander: Frente a Eddie, podía perderme intentando conocer a Lili, era real. Fue un placer trabajar con Eddie porque nunca sabía adónde nos llevaría la siguiente toma; le escuchaba y le seguía para que fuéramos un equipo.

Paco Delgado: Es una película acerca de alguien que se convierte en quien quiere ser. Alicia Vikander se ha metido en la piel de Gerda, nos enseña cómo ayudó a Lili. También pisa un terreno desconocido. Gerda volvió a encontrar el amor, pero perdió el amor de su vida.

Eve Stewart: Apoyó a su gran amor de principio a fin, y demostró su lealtad y cariño.

Tom Hooper: La película explora el amor incondicional, un amor de una generosidad y compasión poco comunes. Durante el rodaje, el estándar de compasión de Gerda fue el principio que nos guió, perfectamente representado en el guión de Lucinda.

Alicia Vikander: Gerda era consciente de que su relación podía cambiar, de que posiblemente no volvería a ver a quien amaba por encima de todo. Es maravillosa la forma en que Gerda anima a Lili para realizar la transición.

Amber Heard: Gerda demuestra lo que significa el verdadero amor. Alicia tiene mucho talento, me gusta trabajar con ella.

Eddie Redmayne: Alicia es enormemente talentosa. Ha encarnado a un extraordinario ser humano con toda su vivacidad y vitalidad.

Tom Hooper: Alicia tiene un gran corazón y lo entrega del todo en LA CHICA DANESA; espero haberlo captado.

Eddie Redmayne: Jamás olvidaré la prueba que hicimos juntos. Al final, me volví hacia Tom y vi que estaba llorando. Pensé: "Perfecto". Unos seis o siete meses antes de empezar a rodar, Alicia, Tom y yo empezamos a reunirnos regularmente para hablar de los personajes, y de los libros Man Into Woman y La chica danesa.

En general se piensa en Alicia en relación a su educación como bailarina, a su elegancia y desenvoltura, pero expresa emociones tan fuertes que dejan sin habla.

Tom Hooper: Su experiencia como bailarina la ayuda a ser fuerte y disciplinada.

Jan Sewell: Gerda era espléndida en el guión, pero Alicia se apoderó del personaje, lo hizo suyo. En la realidad, Gerda era bastante grande, y Alicia no lo es; sin embargo, supo mostrar la tremenda fuerza de Gerda.

Alicia Vikander: Gerda ama a Lili hasta el punto de sacrificarse. Aunque para ella no es un sacrificio, sencillamente es amor.

Tom Hooper: Gerda es la fuerza del amor que hace posible el cambio.


El rodaje empezó en febrero de 2015 en los estudios Elstree Film del Reino Unido, donde se recrearon los interiores en platós, el piso parisino de la pareja entre ellos. Los exteriores se rodaron en diferentes zonas de Inglaterra, así como en Copenhague y Bruselas.


Tom Hooper: En Copenhague trabajamos con un equipo de primera y una infraestructura que ofrecía todo lo que necesitábamos. Es una ciudad extraordinaria, muy bien conservada. Nos pusimos a trabajar nada más llegar y pudimos rodar al mismo ritmo y con la misma calidad que en Londres.

Eddie Redmayne: El equipo danés nos enseñó mucho. Estaba encantado de rodar allí porque tuve la oportunidad de conocer a alguien de la familia de Lili. Adoro Copenhague; es una ciudad bella y tranquila, con una luz única.

Jan Sewell: El director de fotografía Danny Cohen ha iluminando y filmando a Lili a la perfección.

Tom Hooper: Copenhague desprende una sensación de austeridad que me ayudó a entender dónde estaba Lili cuando vivía como Einar.

Pero la mejor sorpresa fueron los actores daneses, los figurantes. En Copenhague hay muchos actores esperando ser descubiertos. Todos actuaron de maravilla durante la secuencia del baile, rodada en el palacio Chalottenborg.

Jan Sewell: Los figurantes iban impecablemente vestidos, y eran muchos.

Tom Hooper: En la película hay figurantes transexuales y actores transexuales.

Me sorprendió descubrir lo intacto que se mantiene el centro de Copenhague y la cantidad de zonas donde pudimos rodar. Mi favorita probablemente sea el puerto, que recreamos en toda su gloria durante los años veinte, con los veleros, las pescaderas y sus gorros hechos de papel de periódico.

También me gustó mucho la Real Academia de Bellas Artes, construida a orillas del canal Nyhavn. Me alegró rodar en la escuela donde estudiaron y se conocieron Lili y Gerda.

Michael Standish: La pintora Susannah Brough se encargó de la enorme tarea que suponía realizar los cientos de cuadros que aparecen en la película. La creación de las pinturas fue especialmente compleja. Era un poco como seguir un río de mucha corriente y numerosos meandros porque hasta que empezamos, no teníamos mucha idea de cuál sería el resultado final. Sentimos una intensa conexión emocional con los artistas originales.

Eve Stewart: Los conocimientos artísticos de Eddie nos ayudaron mucho. Tanto Alicia como él se esforzaron en aprender a pintar.

Alicia Vikander: Nunca había aprendido a dibujar. Esta vez, unos pintores me guiaron con ejercicios al carboncillo. Estaba aterrada, pero empecé a disfrutar. Aparte de actuar, lo genial del cine es aprender a hacer cosas que nunca probarías.

Michael Standish: Susannah recreó los colores y contratamos a diversos pintores para realizar los cuadros. Tuvimos que adaptarnos cambiando el cuadro con el que empieza la película para que se ajustara a los deseos de Tom. Cuando estuvieron acabados, era emocionante verlos colgados todos juntos.

Paco Delgado: Tom siempre dice lo que quiere para los personajes, pero en vez de limitarse a "Quiero que vaya de rojo, con una blusa y una falda", aporta ideas muy concretas.

Amber Heard: Nada más conocernos, hablamos de una escena en concreto. Nunca mencionó qué debía llevar el personaje, solo me indicó lo que pensaba el personaje.

Ben Whishaw: Las escenas evolucionaban constantemente, incluso en el plató. No me sorprendió la atención al detalle que demuestra Tom, pero me maravilló.

Paco Delgado: Con Tom es un proceso intelectual; le interesa qué tipo de persona es el personaje, el porqué y el cómo. Eso nos obliga a crear más y mejor, a esforzarnos.

Eddie Redmayne: Tom es muy riguroso. Estudia todas las opciones, pero al mismo tiempo da mucha libertad. Se basa completamente en su instinto.

Jan Sewell: Tom es muy visual y quiere verlo todo antes de rodar. Sinceramente, debería ser así siempre. Si no puedo mostrarle al actor en carne y hueso, hago fotos y se las enseño.

Eddie Redmayne: Para ser un buen actor hay que estar relajado porque la cámara lo ve todo. Sin embargo, un rodaje no es precisamente relajante. Por lo tanto, para trabajar bien, debo sentir que si meto la pata, no pasa nada; que puedo probar con algo y equivocarme. Algunos directores no lo permiten, pero Tom me da esa libertad y más. Eso sí, tiene una mirada agudísima. Ve todo lo que haces; y puede estar en contra o animarte.

Amber Heard: Tom lo ve todo: "¿Tenías planeado hacerlo?"

Ben Whishaw: "¿Qué pasa con ese diálogo? No te sigo", y entonces me doy cuenta de que yo tampoco. No todos los realizadores son tan puntillosos porque tienen muchas cosas en las que pensar, pero Tom es capaz de concentrarse totalmente.

Alicia Vikander: Tom no solo es consciente de la logística que representa hacer una película, también se basa en su inteligencia emocional.

Eddie y yo nos perdíamos a veces intentando llegar a un punto. Tom es un director maravilloso, nos daba la nota exacta que necesitábamos para cambiar el curso de la escena. Nos ocurrió un sinfín de veces y bastaba con una palabra suya para que pudiéramos seguir. Siempre tiene todo el conjunto en mente y sabe cómo llevarnos en la buena dirección.

Amber Heard: Es un perfeccionista que nos ayuda a dar lo mejor. Prefiero trabajar con un perfeccionista. Conoce los aspectos técnicos de la dirección. Su talento es inmenso contando historias sin perder nunca de vista a los personajes. No se trabaja con alguien así todos los días, y cuando ocurre quieres estar a la altura.

En el libro, Ulla es una cantante de ópera, pero en el guión es una conocida bailarina. Soy actriz, no sé nada de ballet, así que hice ballet seis horas diarias durante unas cuantas semanas. Georgina Connolly es una bailarina increíble que me hizo pasar de ser una patosa total a alguien que más o menos podía colar. Me gustó la disciplina y también tener una conexión física con mi personaje. Además, se duerme muy bien después de bailar durante seis horas.

Lucinda describió a la perfección a Ulla, que representa la naciente era del jazz. Ulla encarna la energía, la diversión, la vida. Siempre se divierte y lo hace todo de corazón. Me enamoré de ella cuando leí el guión y espero que al público le pase lo mismo cuando la vea en la pantalla.

Es fácil entender por qué Lili y Gerda la quieren. No juzga a Lili. Su afecto es constante, las acepta tal como con.

Alicia Vikander: En la historia hay partes que me gustan más, y esta es una de ellas, formar parte de ese movimiento cultural, conocer a Ulla y quererla.

Eddie Redmayne: Amber aporta una tremenda energía a un personaje muy atrevido. Tuve charlas muy interesantes con ella.

Amber Heard: Ulla aparece con ropa algo diferente y joyas un poco llamativas; forma parte de la recién nacida cultura bohemia europea que rompe con las normas y se salta las reglas. Para las mujeres, no solo era cuestión de cambiar la moda - talle más bajo, dobladillo más alto -, sino lo que esperaban de la vida, la forma de verse a sí mismas y el trato de la sociedad.

Con la ayuda de Paco Delgado, intenté asegurarme de que Ulla demostrara haberse adelantado a su época. Era famosa y tenía acceso a muchas cosas, podía hacer lo que quería. Recuerdo que Paco me puso un echarpe para ver qué tal quedaba el color y se quedó como parte del vestuario.

Alicia Vikander: Gerda no se preocupa mucho por la ropa, aunque es muy femenina. Me gusta que se vista con lo más cómodo para el momento. No creo que se molestase por no llevar los zapatos más elegantes.

Paco incluyó en el vestuario de Gerda todo lo que le conté acerca de mis sentimientos hacia ella. El vestuario perfecto es una de las herramientas que más ayuda a un actor.

Jan Sewell: Los colores de Paco eran deslumbrantes. En los años veinte, la ropa de las mujeres era más libre, y así empieza el personaje de Gerda. Después, cuando Gerda se corta el pelo, Alicia lleva una peluca. Es la época en que se hace más famosa.

Tom Hooper: Además de cuadros, Gerda también ilustraba revistas de moda en París. Por las fotos que vimos, estaba muy por delante de su época, y creo que Paco ha conseguido reflejarlo en el vestuario.

Alicia Vikander: Al llegar a París, Gerda experimenta. Está en una ciudad que anima a la gente a expresarse, y su ropa empieza a reflejar sus cuadros.

Eddie Redmayne: Durante el periodo de entreguerras, la gente quiso divertirse, descubrir. Después de ver tanta muerte y darse cuenta de lo breve que es la vida, queda patente que solo se vive una vez. ¿Y cómo hacerlo? ¿Debajo de mucha ropa, escondido, o con más autenticidad? Los artistas encabezan a menudo los cambios a través de la experimentación y la libertad.

Paco Delgado: Al principio de la película son una pareja casada en una sociedad bastante reprimida como es la danesa y ese hecho se ve reflejado con modelos de tipo eduardiano. Al llegar a París, el color lo invade todo.

Michael Standish: La gama de colores se vuelve más viva en París, sobre todo después del éxito que consiguen los retratos de Lili realizados por Gerda. Puede compararse a una planta en pleno florecimiento.

Eve Stewart: En París aparecen colores pastel, más cálidos. También pensé que en París, el piso del matrimonio debía ser más femenino y me inspiré en el Art Nouveau parisino.

Eddie Redmayne: Si la arquitectura de estilo Art Nouveau es femenina, quizá se deba a una reacción a la Gran Guerra. París había cambiado mucho desde finales del siglo XIX. Los sexos ya no estaban tan definidos.

Paco Delgado: El descubrimiento personal de Lili la dirige hacia una sociedad más abierta. La sociedad de Copenhague, a pesar de tener un núcleo bohemio, no le permite expresarse. Esto también nos marcó el camino estéticamente hablando.

Michael Standish: En las escenas de Dinamarca, la gama de colores es minimalista, sobre todo en interiores. Lili, en su vida como Einar, trabaja en un espacio más oscuro.

Alicia Vikander: Son dos personas presas de emociones muy intensas detrás de puertas cerradas. La sensación es bastante claustrofóbica. Eddie y yo estábamos realmente en espacios pequeños en el estudio, escarbando en nuestra relación.

Paco Delgado: Tom quería que Lili fuera más reservada cuando vivía siendo un hombre, de ahí la imagen de Einar entrando en una habitación vestido con traje y un cuello alto y duro.

Eddie Redmayne: Era la moda de la época, cuellos almidonados y trajes muy ceremoniales. El vestuario me ayudó a comunicar la rigidez de Lili al principio.

Paco Delgado: El traje es casi el equivalente a una armadura. Protege del mundo, pero también encarcela a las emociones.

Lili explica que siempre supo que algo pasaba, sobre todo en su infancia, pero lo reprimió. Supongo que fue un mecanismo de defensa.

Lucinda Coxon: Basta con mirar los cuadros. Cuando pintaba como Einar, eran obras muy controladas, incluso distantes.

Tom Hooper: Temas poco variados, severos. Vivía un proceso en el que constantemente escondía algo, encerraba algo.

Alicia Vikander: Son muy precisos y difieren mucho de los que hace Gerda, aunque no tanto al principio, cuando Gerda se dedicaba a los retratos.

Eve Stewart: Para las escenas en Copenhague, me basé en los colores que Lili usaba en sus cuadros antes de la transición, y también en los cuadros de un pintor danés llamado Vilhelm Hammershøi.

Tom Hooper: La paleta de Hammershøi cubre una gama de azules y grises. Basta con meterse en su mundo para descubrir la riqueza de estos colores; son de una belleza ilimitada.

Eve Stewart: Son colores fríos y algo solitarios. El pintor deja mucho espacio alrededor del sujeto principal.

Tom Hooper: En Dinamarca se realizaron muchas obras pictóricas en esa época. Me ayudaron a encontrar el tono adecuado para la primera parte de la película.

Alicia Vikander: Se conocieron en la Escuela de Bellas Artes, las dos son pintoras, pero al principio Gerda tuvo que luchar para hacerse un hueco en el mundo artístico. De acuerdo con las convenciones de la época, era impensable que una mujer pintara tan bien como un hombre. Cuando Lili se convierte en su modelo, Gerda encuentra la inspiración, se expresa, tiene voz. Por fin puede ser la artista que siempre quiso ser. Los cuadros reflejan el estado de ánimo de los personajes durante su vida.

Eddie Redmayne: Si se observan los obras de Lili antes de su transición, son cuadros muy ordenados, muy clásicos, pero tuvieron mucho más éxito que lo que pintaba Gerda. Las obras de Gerda son más llamativas, más llenas, más vivas. Lili pinta meticulosamente, como si no se atreviera a lanzarse.

Alicia Vikander: Debe de ser una auténtica revelación descubrir que una puede quererse a sí misma, que puede ser lo que realmente quiere, y que una parte ha estado encarcelada tanto tiempo.

Lucinda Coxon: Eran auténticas compañeras, dos artistas que se apoyaban mutuamente. Gerda se adelantó a su tiempo en muchos aspectos y fue un auténtico modelo para las mujeres de la generación siguiente.

La relación de Lili con Gerda es muy libre, intensa, apasionada, no necesariamente sexual.

Si Lili llega a nacer veinte años antes, dudo que hubiera podido hacer la transición. Las investigaciones que se llevaban a cabo en Alemania en torno a la sexualidad y a los géneros en esa época lo hicieron posible. La medicina había avanzado mucho durante la I Guerra Mundial y se realizaban operaciones complicadas. Después de Lili, los médicos de Dresde dieron pasos de gigante.

El libro Man Into Woman se cree que es una autobiografía escrita por la propia Lili, aunque personalmente creo que lo redactaron varias personas y que más bien es una novela.

Eddie Redmayne: Hablamos con varios historiadores que fueron muy específicos acerca de Man Into Woman. El libro reúne los escritos de Lili, pero se han cambiado muchos nombres y fechas. Es difícil saber realmente cuándo habla Lili o cuándo habla el editor.

Lucinda Coxon: Pero siempre dejó claro que era una mujer, lo que iba mucho más allá de la libertad de expresión. Era incendiario.

Cuando Lili, todavía en la piel de Einar, es la modelo de Gerda, se siente cómoda con ropa de mujer. Es el principio del cambio, pero no quise convertirlo en un momento revelador. Preferí que fuera parte del espacio que han creado en su relación, y así es hasta que dejan de controlarlo. ¿Por qué intentan reprimirlo al principio? Porque en la década de 1920 no existe el término "transgénero" ni nada parecido, y Lili no encuentra ninguna imagen en la que basarse.

Alicia Vikander: Gerda vive todo esto con Lili como pareja sin un solo punto de referencia.

Eddie Redmayne: No sabían si alguien más había pasado por lo mismo.

Paco Delgado: La ropa se asigna según el género, es lo primero que se ve, está hecha para definirnos. Las medias son algo femenino. El lugar común dice que los hombres no deben tener contacto con algo tan delicado; ellos usan ropa de telas más bastas porque podría estropearse. Creo que algo hace "clic" en la cabeza de Lili cuando Gerda trae el vestido, las medias y los zapatos.

Alicia Vikander: En esta escena llega el primer atisbo de conciencia. Las dos ven a Lili por primera vez.

Lucinda Coxon: Antes de que Lili sea ella misma, deben superar el mito que ella - como Einar - y Gerda han creado. En los cuadros de Gerda se ve a Lili como una mujer idealizada, no es una persona real. Poco a poco se dieron cuenta de lo que representaban como legado para las futuras generaciones.

Me costó escribir la secuencia del baile. Lili iba por fin a un acontecimiento como Lili, aunque algunos quizá no lo vieran así. Al principio solo es una travesura por parte de la pareja, pero luego viene el miedo a la catástrofe y todo llega más lejos de lo que ninguna de las dos esperaba.

Ben Whishaw: Es el momento en que aparece Henrik, mi personaje. Me atrajo la idea de que no se sabe realmente lo que piensa. La atracción entre Henrik y Lili es muy ambigua.

Alicia Vikander: Al hablar con Lili a la mañana siguiente, Gerda comprende la gravedad e importancia de lo que están viviendo juntas.

Lucinda Coxon: Las historias ancladas en la realidad, como la de Lili, nunca son solo heroicas o trágicas. Queríamos contar toda la historia, y por eso enseñamos lo que ocurrió con Lili y Gerda. LA CHICA DANESA es una historia heroica en todo el sentido de la palabra, pero se trata de personas adelantadas a su tiempo, lo que se ve reflejado en el progreso médico de la época. La tragedia no se debe a que alguien se extralimitara.

Alicia Vikander: Gerda sabe que Lili quizá no sobreviva, pero también es consciente de que la persona a la que ama por encima de todo está cayendo en la peor y más oscura espiral emocional, de que está sumida en el dolor y la ansiedad, y de que debe hacerse algo.

Lucinda Coxon: Algunos creen que al Dr. Warnekros le guiaba una ambición sin límites o que imaginaba poder hacer más de lo que era capaz. Fue un pionero. No disponía de todos los componentes necesarios ni de todos los conocimientos. Siempre tuve presente que si Lili no hubiera podido convertirse en sí misma, se habría suicidado. En cierto modo, Warnekros la salvó.

Tom Hooper: No exagero cuando hablo de la valentía de Lili al someterse a estas operaciones en la época. Aún no había antibióticos, ni penicilina; los riesgos de infección eran enormes y los tratamientos, sumamente peligrosos. Lili demostró un gran valor enfrentándose a tantos riesgos.

Eddie Redmayne: Su valentía es inimaginable. Un amigo mío lo resumió diciendo que Lili era capaz de darlo todo con tal de vivir su verdadera vida.

Lucinda Coxon: Es un honor ofrecer esta historia a un público más amplio, sacándola del olvido.


El rodaje de LA CHICA DANESA finalizó en abril de 2015, y la posproducción se completó en septiembre de 2015, después de un recorrido de 15 años.


Alicia Vikander: Estoy convencida de que, después de ver la película, nadie saldrá del cine sin sentirse conmovido por el recorrido de Lili. Es la historia de amor de una pareja, pero sobre todo es la historia de cómo quererse a sí mismo.

Eddie Redmayne: Aunque sea una historia muy específica sobre una mujer en concreto durante su recorrido para ser ella misma, creo que delante de todos nosotros se levantan muros. ¿Nos enfrentamos a ellos? ¿Nos deshacemos de ellos? O, en el peor de los casos, ¿vivimos con ellos? No se debe subestimar el valor que hace falta para ser uno mismo.