Declaración del director
La primera vez que leí el guión de Will Fetter, Recuérdame (por entonces titulado Memoirs - Memorias), tres de sus numerosas cualidades me afectaron especialmente: en primer lugar, presentaba la ciudad de Nueva York en un momento especialmente importante de su historia. Como neoyorkino, estaba deseando gozar de la oportunidad de retratar fielmente ese momento de la historia de esa ciudad que tan bien conozco y que durante tanto tiempo he querido. En segundo lugar, presentaba una historia de amor juvenil sincera y sin adornos, un tema que me interesaba llevar al cine desde hacía muchos años. Y, en tercer lugar, desde la primera escena, el guión estaba imbuido de un tema coherente y muy oportuno, a saber: ¿qué sucede cuando un hecho imprevisto choca con nuestro mundo perfectamente organizado y lo hace añicos? ¿Cómo se puede sobrevivir a sus consecuencias inesperadas e inexplicables? ¿Y cómo nos cambia eso como seres humanos?

Sencillamente, aunque Recuérdame era tanto una íntima historia del amor que surge entre dos jóvenes como un preciso retrato de cómo dos familias distintas se ven afectadas por su propia versión particular de un suceso repentino y trágico, el guión acabó convirtiéndose en última instancia en una exploración de los grandes temas del amor, la pérdida y la fugacidad de la vida.




Acerca de la producción
El verano que precedió al 11 de septiembre de 2001 está considerado como un tiempo de inocencia para todos los norteamericanos. Y es precisamente entonces cuando se ambienta el drama romántico RECUÉRDAME. La película, emocionante y sincera, está protagonizada por Robert Pattinson (Tyler) como un rebelde estudiante de la Universidad de Nueva York, que se debate entre sus creencias sobre la vida y el amor y las realidades y complejidades de la propia vida. Es algo que se hace evidente en su difícil relación con su padre (Pierce Brosnan) y el inesperado consuelo que encuentra en Ally (Emilie de Ravin), una chica a la que conoce a través de una apuesta de mal gusto que hace con un amigo.

Pattinson aporta al papel un duro exterior, una sincera profundidad emocional y un espíritu de rebeldía, fruto de la situación en al que un joven trata de salir de la sombra de su padre, al mismo tiempo que intenta conectar con él.

Poco después de empezar la película, se descubre que tanto el personaje de Pattinson como el de Ravin han sufrido ambos una profunda pérdida, una pérdida que los une. A medida que se desarrolla la historia, tenemos ocasión de conocer sus vidas familiares a través de las estelares interpretaciones de Brosnan, Lena Olin, Ruby Jerins y Chris Cooper. Se hace evidente que, en cada familia, la susodicha pérdida ha cambiado la dinámica, estrechando los lazos entre algunos miembros, pero distanciando a otros. A través de todo ello, RECUÉRDAME se convierte en una inolvidable historia sobre el poder del amor, la fuerza de la familia y la importancia de saber apreciar cada día de tu vida.

Para describir la película y a su autor, el director Allen Coulter explica: "Will Fetters ha escrito un guión increíblemente conmovedor. En su forma más simple, RECUÉRDAME es la historia de dos jóvenes, ambos con una tragedia en su pasado, y del amor que surge entre ellos. Él es de una familia acaudalada, mientras que ella es de una familia obrera, pero los une un vínculo no expresado ni reconocido, que va tomando forma a medida que se van conociendo. Está lleno de toda clase de humor y dramatismo, un tapiz muy rico. Es una historia de amor muy hermosa".

"La película trata del amor y la pérdida", observa el productor Nick Osborne. "Trata de intentar descubrir qué hacer con tu vida y por qué ocurren ciertos acontecimientos, y, aunque es posible que no se encuentren respuestas, al menos se aproximan a alguna".

"Creo que son cuestiones con las que todos tratamos hasta el final de nuestros días, pero muy especialmente cuando llegamos a la veintena".

Robert Pattinson describe a su personaje, Tyler Hawkins, como "un joven que está algo perdido. Tiene padres muy ricos, pero se cree por encima de todo, aunque está un poco echado a perder. Cree, como muchos otros veinteañeros, que lo sabe todo, y mejor que todos los demás, pero no siente la necesidad de demostrarlo en modo alguno. Y entonces conoce a una chica que le enseña, de una forma un tanto indirecta, a madurar".

"No es la típica historia de amor", asegura Emilie de Ravin (Ally Craig). "Estos dos personajes, Tyler y Ally, se conocen en circunstancias inusuales y ambos han pasado por experiencias muy traumáticas. Su relación se forma de una manera muy hermosa y realista, y la película gira en torno a ello. Profundiza acerca de lo que verdaderamente sienten las personas unas por otras y la realidad del tema, no sólo el aspecto más superficial de las relaciones, sino lo que sucede realmente".


Encontrar el guión
Osborne recuerda: "Trevor Engelson leyó el guión hace cuatro años y me dijo: ‘Creo que aquí podríamos tener algo, deberías leerlo’. Y así lo hice. El primer borrador de Will Fetters me dejó impresionado. Me dejó absolutamente conmovido, así que llamé a Trevor y le dije: ‘Tenemos que hacer esta película’".

"Se lo llevamos a muchos financieros", prosigue, "se lo llevamos a un actor que quería hacerlo, pero que después tuvo que abandonar el proyecto. Y, después, en determinado momento, se lo llevé a Allen Coulter. Y Allen y yo trabajamos un tiempo en él con Will. Entonces se sumó Rob al proyecto, lo que resultó de gran ayuda. Aunque fue justo antes de Crepúsculo, así que fue muy extraño. Leyó el guión antes de tener ninguna ‘fuerza’, por así decirlo; antes de que su nombre fuera conocido en la industria".

El productor Nick Osborne explica lo que Will Fetters, guionista de RECUÉRDAME, supuso para la producción: "Sin Will, no tenemos nada. A él se le ocurrió esta historia y hacia dónde iba, y, cuando Allen, Rob y yo la leímos inicialmente, todos sentimos que era algo con lo que nos íbamos a comprometer y no pensábamos abandonar. Porque hoy en día no es fácil conseguir sacar una película adelante en Hollywood y es especialmente difícil si se trata de un drama. Los dramas son los que más cuestan".

"Lo interesante es que Will era Tyler cuando escribió el guión. Era un joven furioso que buscaba su lugar en el mundo. Pero no sabía cómo hacerlo y cómo llegar allí. Tenía ideas profundas y una especie de angustia... Creo que lo que se desprende de Tyler Hawkins es cómo se sentía Will en ese momento. Y por eso se nota que es auténtico".

Fue la propia fuerza del guión la que logró que se aglutinaran todos los aspectos preliminares importantes de la producción. Según explica Osborne: "Lo que Will puso de sí mismo ha quedado reflejado en la calidad del guión. Así, conseguimos los actores que queríamos, conseguimos el director que queríamos y hemos seguido construyendo el proyecto a partir de esas bases. El resultado es una película extraordinaria".

Pierce Brosnan asegura que el guión le proporciona un papel estupendo para un actor y que "Will Fetters ha creado personajes con auténticas dimensiones y auténticas emociones atrapados en el conflicto de la vida. Y, cuando llegas al final, te causa un gran impacto emocional. Estoy muy agradecido por este papel. He llegado a un punto en mi carrera en el que puedo hacer lo que quiera. Este es un papel realmente excelente, en manos de un director muy bueno y con todo un reparto que encaja perfectamente con sus respectivos papeles", agrega.

Allen Coulter observa: "Todo el que leyó el guión, prácticamente hasta la última persona, quedó conmovido con él y se sintió atraído por él. Todo gracias a que Will Fetters tuvo esa inspiración. Cuando me apunté al proyecto, lo único que realmente quería era lograr que la historia quedara tan auténtica como yo sabía que podía plasmarla".


Una carta de amor a Nueva York
Tanto el director Allen Coulter como el productor Nick Osborne sentían que rodar en la propia Nueva York aseguraría que la ciudad se convirtiera en un personaje en sí misma.

Coulter comenta: "Como persona que vive aquí, siempre me siento muy afortunado al encontrar cualquier cosa que se desarrolle en Nueva York. Es una especie de broma recurrente que tengo con mi mujer, si en la primera página dice: ‘Empezamos en Nueva York’, yo digo: ‘Me gusta este guión’, incluso antes de haber leído el resto del mismo".

"Miramos mucho las localizaciones en las que queríamos rodar. No queríamos rodar en lugares ridículamente típicos, pero al mismo tiempo queríamos darle un aire auténticamente neoyorkino", explica Osborne.

"Naturalmente, siempre hay obstáculos que salvar al rodar en la ciudad, pero esta vez fue especialmente difícil por la enorme popularidad y fama de Rob".

"Ha sido un poco de locura, con los paparazzi siguiéndonos por todas partes", señala Coulter. "Algunos días teníamos treinta paparazzi, otros días teníamos tres o cuatrocientos fans en los lugares de rodaje. Pero conseguimos hacerlo y creo que ha quedado precioso. Jonathan Freeman, el director de fotografía, es fenomenal y creo que puede apreciarse en lo que hemos rodado. Pero es una historia de Nueva York y una especie de carta de amor a Nueva York, así que merece la pena, porque la ciudad... es irreemplazable".


La selección de actores: Un reparto asombroso
Allen Coulter y Nick Osborne estuvieron ambos sumamente implicados en el proceso de selección del reparto desde el primer momento. Recuerda Coulter: "Tuvimos una reunión con Rob Pattinson después de que Summit expresara cierto interés. Almorzamos con y nos gustó, nos interesó de inmediato, y a él también le interesó, así que eso sirvió para poner más o menos en marcha el proceso".

Para un director, un buen reparto es una de las principales bazas con las que puede contar y Coulter es de los que necesita tomar parte en todos los pasos del proceso de selección. "No concibo trabajar en un proyecto en el que no me implique cuanto pueda en la selección del reparto", asegura Coulter. "Solamente estábamos Nick Osborne y yo, trabajando con Joanna Colbert y Rich Mento, y luego intervino Summit, aunque la verdad es que únicamente lo hizo en dos o tres de los papeles principales. Acabamos con un reparto con el que tanto Nick como yo estábamos encantados. Creo que es difícil buscar un único calificativo que defina a todo el reparto, porque es muy ecléctico. Tiene elementos que podría decirse que pertenecen al cine de grandes presupuestos y otros elementos salidos más bien del cine independiente", explica.

"Es una interesante amalgama de gente, desde Pierce Brosnan, a quien consideramos un actor con cierta reputación, a Chris Cooper, que procede de otro tipo de cine completamente distinto, pero ambos son excelentes actores. A ellos les sumas Lena Olin y Rob Pattinson, y resulta una mezcla ciertamente ecléctica", observa Coulter.


Acerca de Robert Pattinson como Tyler Hawkins
Allen Coulter comenta: "Nick y yo sentíamos que Robert podía encarnar a un joven lleno de complejidades, su ira, su culpa por las circunstancias de la historia, su frustración por su relación con su padre y su impotencia para cambiar su situación; un joven que se siente perdido y que, en última instancia, no sabe quién es".

Pattinson ve a su personaje como un joven que aún tiene que madurar, lo que en ciertos aspectos reflejaba su propia experiencia real, y explica que "buena parte de las razones por las que quería hacer la película es porque Tyler se encuentra en un punto, al llegar a la veintena, en que deja de ser tan, por decirlo así, existencial, como sueles ser durante tu adolescencia, y empieza a sentirse menos como una isla. Puede creer realmente que sus sentimientos son sinceros. Y puede confiar un poco más en sí mismo. Está madurando y supongo que creo que eso es lo que me está pasando a mí, más o menos. O lo era, en ese momento".

Al personaje de Pattinson le aflige una especie de hastío, un estado de desarrollo emocional atrofiado: "Tyler guarda desde hace años y años toda una serie de rencores y agravios, que ni siquiera es que estén a punto de estallar, son simplemente antiguos, sin más. Charles y él han tenido las mismas discusiones una y otra vez, y a todos los demás les parece ya algo muy visto. Incluso el propio Tyler está harto de tener los mismos ataques de furia", explica.

Pierce Brosnan describe a Pattinson como "un joven que acaba de saltar al estrellato y, por lo que yo he visto, me parece que se desenvuelve estupendamente. Puede verse que es de buen corazón. Tiene la humildad y el valor para buscar un proyecto como éste, sabiendo que le espera la saga Crepúsculo, y sabes que va a depender de él salir a buscar este tipo de películas entre cada una de esas superproducciones que tiene por delante".

Brosnan prosigue: "Es muy atractivo y está en contacto con sus propios sentimientos, su intuición y su instinto. Acaba de empezar, lo que es estupendo, porque es maleable, pero también muy selectivo. Sé que ha sido decisivo para que pudiera hacerse esta película y es algo magnífico de ver en un joven. Sientes cierto instinto de protección por alguien así. Quieres que tenga lo mejor. Quieres verlo triunfar por todo lo alto".

Emilie de Ravin explica que Tyler es un personaje complejo con un pasado dramático, al igual que su propio personaje, y que Robert le aportó "toda una serie de minuciosos detalles, hasta el punto en que pensé: ‘¿Cómo se le ocurren esas cosas?’. Convirtió el personaje de Tyler en alguien único".

Osborne aprecia la inusitada lealtad de Pattinson para con el proyecto, y comenta: "Crepúsculo acababa de estrenarse y, a menudo, cuando un actor se convierte en alguien conocido, su agente llama para decirte: ‘Lo siento, pero ya no puede hacer vuestro proyecto’. Pero Rob siguió adelante. Su ayuda ha sido decisiva para lograr que se hiciera la película. Se ha tenido que aventurar para poder interpretar este personaje. No imaginé que sería tan bueno como resultó ser. Es increíblemente desinteresado, increíblemente poco exigente. Pero también piensa mucho. Es muy curioso. Se adueñó de ese personaje y lo sacó adelante".

Osborne recalca el compromiso de Pattinson con el papel: "Mientras trabajábamos en el guión, hablábamos por teléfono con Rob para que nos aportara sus ideas. Hablábamos largo y tendido sobre lo que estábamos haciendo, así que estuvo muy implicado en la película y ha sido maravilloso. Está en casi todas las escenas, ha estado allí todos los días, sé que ha tenido que trabajar muy duro. Vino directamente del rodaje de una película, La Saga Crepúsculo: Luna Nueva, a la nuestra".


Acerca de Emilie de Ravin como Ally Craig
Osborne considera que la relación de Tyler con Ally es distinta, ella aporta calma a su vida: "Es la primera persona que entra en su vida y no se traga su numerito. Se trata de un tipo que no tiene problemas en conseguir que jovencitas se enamoren de él o se vayan con él a casa, pero Ally es la primera que se le resiste. Ella va pelando las distintas capas de protección con las que se ha envuelto Tyler, hasta llegar a su verdadero ser".

"Es gracias a ella", agrega, "que es capaz de empezar a arreglar todas esas otras relaciones de su vida y, con suerte, encontrar un modo de conseguir algo de paz en su propia vida".

"Emilie personifica todo lo que considero que es Ally", opina Osborne, "una chica de clase trabajadora que ha tenido que tratar con una tragedia terrible en su vida, que está en cierto modo casada con su padre de una extraña manera, porque se aferran el uno al otro. Nunca se ha divertido realmente en su vida. No ha levantado la cabeza, le va bien en sus estudios, conseguirá un buen trabajo... Pero entonces entra ese tipo en su vida que es como un rayo de luz y le muestra otro aspecto de la vida y la hace pensar de otra forma y Emilie ayuda mucho a condensar todas esas cualidades".

El equipo tuvo que emprender una larga búsqueda para hallar a la joven perfecta para interpretar el papel de Ally Craig. "La verdad es que vimos algo así como a 180 jóvenes", afirma Coulter. "Era algo bastante peliagudo. Queríamos encontrar a alguien que encajara bien con Rob en lo que se refiere al aspecto romántico, pero también necesitábamos a alguien que pudiera ser dura y plantarle cara".

Ally es hija de un policía de Queens y era importante que resultara creíble que tenía algo de esa actitud propia de Queens.

Coulter explica: "Asiste a la Universidad de Nueva York y eso ya la pone muy por delante de su padre. Al mismo tiempo, su madre era enfermera, así que viene realmente de una familia de clase trabajadora y necesitábamos que resultara creíble. Me pareció que Emilie podría tener aspecto de provenir de esos orígenes".

De Ravin irradiaba, además, un gran encanto, que resultaba irresistible. "Pensamos que era algo bueno para el personaje, Tyler tiene que fijarse en ella, pero también debería tener cierta dureza. Y, ciertamente, cuando rodamos las escenas con Chris Cooper, en las que Ally planta cara a su padre, podía verse que no es de las que se amilana fácilmente", asegura.


Acerca de Pierce Brosnan como Charles Hawkins
Coulter empezó a interesarse por Pierce Brosnan a raíz de la película The Matador, en la que Brosnan demostró que estaba dispuesto a correr riesgos como actor. "La verdad es que estaba pensando en ella a la vez que intentaba imaginar a alguien que pudiera ser el padre de un tipo tan atractivo y me dije: ‘bueno, Pierce Brosnan podría hacerlo’. A Nick le gustó la idea y, cuando se la presentamos a Summit, también se mostraron encantados ante la posibilidad".

Nick Osborne andaba buscando un equilibrio adecuado entre estoicismo y quizá cierta apariencia de humanidad en Charles Hawkins. Como explica Osborne: "me parecía simplemente que Charles era un hombre poderoso que no podía demostrar sus emociones, que no puede decirle a su hijo que lo quiere, que está enfadado con su hijo porque no ha sido capaz de hacer las cosas como es debido, por lo que a él respecta. Pierce encarnó todo lo que yo creo que es el personaje desde un primer momento".

En opinión de Robert Pattinson, "Pierce ofreció una interpretación muy interesante. Además, es un tipo realmente encantador. Resulta muy extraño tener a una persona tan icónica interpretando a tu padre. En serio, fue una experiencia muy extraña".

Describe la relación de su personaje con su padre, Charles, en los siguientes términos: "Creo que Tyler es muy similar a su padre y no creo que sea realmente cuestión de que eche en falta el amor de su padre. Quiere que su padre se comporte de cierto modo, pero no sabe muy bien qué modo es ese, por lo que nunca se va a sentir satisfecho con él. Creo que su padre cada vez se siente más desanimado por su actitud hacia él porque considera que se está portando como un padre perfectamente competente".

Prosigue: "Lo apoya mucho y aguanta muchas tonterías por parte de Tyler, pero no creo que eche en falta el amor. Creo que piensa que casi todo el mundo en su vida debería comportarse de forma completamente distinta a como se comportan, pero la verdad es que Tyler nunca ofrece ningún tipo de respuesta a nadie. No es capaz de decirle nunca a nadie lo que quiere, porque él mismo no sabe lo que quiere, así que no creo que sea realmente la falta de amor".


Acerca de Chris Cooper como El sargento Neil Craig
En opinión de Nick Osborne, poco más se puede decir sobre Chris Cooper salvo que es un "actor genial, genial... Todo lo que hace en esta película", explica, "desde la primera escena, en la que llora la pérdida de su mujer... el modo de mostrarse protector con Ally, lo da todo".

Allen Coulter se muestra completamente de acuerdo, y agrega: "Es sencillamente un actor increíble y tuvimos suerte de poder contar con él. Si no le hubiera gustado el guión, allí habría acabado el tema. O, incluso, si a su mujer, Marianne, no le hubiera gustado el guión, también se habría acabado todo, pero, después de que leerlo, no costó mucho".

"Antes de empezar, llamé a un amigo mío, Billy Ray, que había dirigido a Chris en la película El espía, y no dejaba de hablar de él: ‘El tipo más estupendo con el que trabajarás jamás’, y cosas así. Resultó ser cierto. Tendrían que echar un pulso entre Pierce y Chris para ver quién es el tipo más encantador, porque es genial trabajar con cualquiera de los dos".

Robert Pattinson comenta que lo que más le sorprende de Chris es lo fuerte que es, físicamente: "Es increíble, vamos. La verdad es que no se aprecia, incluso cuando vas, por decirlo así, con el piloto automático. Parecía bastante más menudo que yo cuando me ponía junto a él. Y entonces llegamos a la parte en la que me está pegando... podría darme fácilmente una paliza en realidad... Lo que me resultó sorprendente".


Acerca de Lena Olin como Diane Hirsch
Nick Osborne y Allen Coulter comentan lo que Lena Olin aporta al personaje de la madre de Tyler.

Osborne comenta: "Mientras veía el material rodado cada día, Lena me daba mucha pena. Se trata de una mujer que todavía llora la pérdida de su hijo, que hace seis años que se suicidó. Pero, a medida que avanza la película, notas cómo va recuperando vitalidad, que empieza hasta cierto punto a disfrutar de la vida, y no quieres que siga sufriendo".

"Acababa de ver la interpretación de Lena en El lector (The Reader)," explica, "y quedé tan impresionado con ella, su humanidad, su naturalismo y su falta de pretensiones, que, sobre la marcha, dije: ‘Sería una madre estupenda para este atractivo joven’... Y, con Pierce Brosnan y Lena Olin, nadie pondría en duda de dónde ha salido. Me saltó a la vista".

Pierce Brosnan afirma: "Lena me causó una impresión indeleble hace años con La insoportable levedad del ser y ha seguido haciéndolo con cada papel que ha interpretado desde entonces. Nuestros personajes comparten muy poco tiempo en pantalla pero, aun así, es una intérprete muy hermosa y seductora. La primera escena, con la familia, me dejó impresionado. Impresionado. La vitalidad, la emoción que le dio, la simplicidad de la interpretación y su propia belleza".

O, en palabras de Emilie de Ravin: "Cuando tienes familias en el cine, a veces hay cierta desconexión. No resulta creíble. Pero Lena aportó una gran sensación de realismo al elemento familiar, interpretando a la madre de Tyler".


Acerca de Ruby Jerins como Carolina Hawkins
Pierce Brosnan la ha calificado como "una pequeña belleza", y Nick Osborne también quedó entusiasmado con el talento de Ruby Jerins. Asegura: "Es asombrosa, consigue que creas que Rob y ella son realmente hermanos en esta película. Se quedó completamente prendado de ella en el rodaje y asombrado por cuánto era capaz de dar, cómo podía improvisar...".

"Creo que ella es lo que hace que Tyler sea mejor persona", prosigue, "está inmerso en sus propias neurosis y Caroline es la única persona por la que Tyler siente total y absoluta devoción, de una forma más o menos desinteresada".

Lo que Robert Pattinson ha sacado de la experiencia de trabajar con Ruby es que "Ruby tiene algo que hace que resulte verdaderamente sencillo trabajar con ella. Es muy agradable estar en una escena en la que puedes simplemente observar a alguien y no ser consciente para nada del hecho de que estás en una escena", señala.


Acerca de Tate Ellington como Aidan Hall
Tate Ellington se encarga de proporcionar cierto alivio cómico que sirve de contraste al personaje de Robert Pattinson, Tyler Hawkins.

Explica Coulter: "Tate fue en cierto modo un acto de fe, porque no era precisamente lo que teníamos en mente, ni yo, ni Nick, ni Summit. Pero Nick me animó a seguir mi instinto de optar por Tate. La última vez que hablé con Tate, cuando nos comprometimos finalmente con él, le pregunté: ‘¿No conoces a nadie así?’ Y me dijo: ‘La verdad es que sí, un buen amigo mío’, así que hablamos de ello y describió a su amigo y afirmé: ‘Así es el personaje’. Bueno, pues Tate aportó todo eso al papel, y resultó ser, además, increíble improvisando. Añadió líneas aquí y allí, a lo largo del guión, que resultaban encantadoras y adecuadas".


Atrapar al público
Uno de los principales objetivos del realizador es atrapar al espectador para que se identifique con el conflicto de los personajes.

"Todo el mundo ha sufrido algún tipo de pérdida en su vida", explica Osborne, "en un momento u otro. Todo el mundo ha sentido frustración; la mayoría de la gente ha vivido ese primer amor increíblemente apasionado, que creo que esta película nos hace recordar. Todos nos hemos sentido frustrados por nuestros padres y creo que lo que es maravilloso es que, hasta cierto punto, nuestros personajes resuelven esos problemas a lo largo de la película".

Y Allen Coulter concuerda: "Creo que la gente se identificará mucho por esa razón. E, imagino, ayudará al espectador a comprender a los personajes, cada uno de los cuales tiene algo en su pasado que les ha causado una gran agonía emocional y personal".

Osborne ve una oportunidad para que el público reflexione sobre las grandes cuestiones de sus propias vidas, tras ver la película: "Sales pensando en lo que es verdaderamente importante y en las barreras que puedes levantar contra ciertas personas y por qué están ahí dichas barreras. ¿Están por razones legítimas o porque estás demasiado enfadado, o demasiado resentido, o demasiado disgustado o celoso...? ¿Y, en definitiva, son realmente importantes esas cosas? Si pudieras deshacerte de verdad de esas cosas, quizá pudieras enmendar algunas de las relaciones que has perdido en tu vida".

En ese aspecto, Osborne y Coulter comparten básicamente la misma opinión. Comenta Coulter: "Espero que sientan que refleja fielmente cómo es enamorarse. Espero que disfruten con los giros y vueltas y sorpresas, y que disfruten con las emociones que ofrece la historia. Y, naturalmente, espero que al final se sientan conmovidos y salgan de la sala llenos de preguntas y reflexiones sobre sus propias vidas".


Conseguir el aspecto adecuado
El director Allen Coulter comenta cómo fue trabajar con el director de fotografía, Jonathan Freeman, y otros jefes de departamento, y cómo idearon el aspecto y la gama de color de la película.

"Trabajé muy estrechamente con Jonathan Freeman, con el que ya había rodado Hollywoodland y ‘Rubicon’, un piloto que hice para el canal AMC. Hemos trabajado juntos en numerosas ocasiones. Jonathan y yo somos amigos íntimos, además de colaboradores, así que hablamos mucho de ello y al final se nos ocurrió la idea de que debería parecer sencillamente real, lo que extrañamente suena algo soso, pero no queríamos que pareciera muy afectado".

"No queríamos retocar demasiado el color, o hacer que pareciera demasiado amanerado o estilizado. Hollywoodland estaba bastante estilizado, aunque resultaba apropiado para ese material. Pero decidimos darle a la gama de color una ligera pátina, para sugerir el pasado reciente, que es muy sutil. Creo que cabe la posibilidad de ver esta película y suponer que está ambientada en el presente, porque no hay una gran diferencia. No es como la diferencia entre, pongamos, los cincuenta y los sesenta, donde se produjo un cambio brusco en la cultura, que resulta evidente en lo referente a todos los detalles visuales y de época".

"Así que decidimos que fuera muy sencillo visualmente y, luego, con los responsables del diseño de producción, Scott Murphy, y del diseño de vestuario, Susan Lyall, lo que les dijimos básicamente fue: ‘vamos a mantenerlo todo algo apagado. Le daremos un ligero toque del pasado para que no parezca nada lejano, pero de formas que no creo que la gente vaya realmente a notar. Creo que quedará como una sutil sensación de ambiente que se desprende de la película".


Plasmar correctamente el habla
Rob, Emilie y Pierce tienen todos sus propios acentos autóctonos en la vida real, y esto es una película de Nueva York, con una voz de Nueva York... ¿Llegó a preocupar en algún momento que todos pudieran interpretar a esos personajes neoyorkinos?

Osborne responde: "Nunca tuvimos que preocuparnos por Rob. Hace un acento americano estupendo".

"Pero, curiosamente, a Pierce nunca le habían pedido que hiciera uno", comenta, "o, al menos, que nosotros supiéramos. Se decidió por un acento de Brooklyn, estilo Mike Bloomberg. Como si fuera un tipo que se hubiera criado en Brooklyn, pero hubiera conseguido ganar mucho dinero, aunque todavía se le notaba el acento. Creo que lo clavó".

Y Coulter agrega: "Me gustaba la idea de que el tipo procediera de las calles. Lo hacía parecer más duro, hacía que pareciera un tipo que no le aguantaba nada a nadie, y Pierce lo abrazó por completo. Le encantó la idea y contamos con un tutor de dicción muy bueno para que trabajara con Pierce ese tema".

"Y luego también con el acento de Emilie", prosigue Osborne.

"Emilie y yo hablamos sobre si debería tener acento de Queens", explica Coulter. "Pero conocimos a un policía de Queens, que fue nuestro asesor. Tenía dos hijas de edad similar a Ally y ninguna de ellas tenía acento de Queens, así que decidimos, ‘tu padre todavía tiene acento de Queens, pero tú lo has dejado más o menos atrás’, como hace la gente".

"Además, por supuesto", recuerda Coulter, "teníamos el acento de Queens de Chris Cooper, que es más bien del Medio Oeste. Así que, al final, tenemos una historia norteamericana interpretada por toda clase de actores procedentes de otros lugares. Es como Nueva York, un auténtico crisol de culturas".

"Si no tienes acentos", opina Osborne, "si no tienes actores que puedan hacerlos, tienes un problema. Pero esta gente podía hacerlo y contábamos con un tutor de dicción estupendo".


Escenas favoritas de Allen Coulter
RECUÉRDAME deparó algunos retos particulares y placeres inesperados para el director. Allen Coulter describe en mayor detalle algunos de los momentos vividos durante el rodaje:

"Hay un enfrentamiento físico muy serio entre Tyler (Pattinson) y Neil Craig (Cooper) que disfruté y en el que ambos estuvieron muy bien. Hay otra escena muy intensa entre Tyler y Charles, un enfrentamiento de gran fuerza dramática. También hay una escena de Tyler, despertando en una determinada mañana, está enamorado y disfruta de la vida y, como justo ese día del año la luz del sol entra por la ventana, está haciendo una sombra de pájaro con las manos. Creo que es una imagen muy evocadora, ese joven haciendo sombras chinescas de pájaros, porque, por un momento, ha recuperado su inocencia".

"Cualquier escena con Ruby Jerins (Caroline). Nunca había trabajado antes con una niña como Ruby, así que he de decir que todo lo que hicimos con Ruby, para todos nosotros, incluidos los actores, fue un verdadero placer. Ya puestos, lo mismo podría decirse de Emilie de Ravin. Aunque también me gustaron todas las escenas con Lena, así que cuesta quedarse con una sola".

"Hay una escena especialmente interesante, diría yo, en el andén del metro, que sucede al principio de la película y tuvimos que coordinar los trenes que llegaban y se iban, teníamos a Joe Reidy, el ayudante de dirección, que estuvo magistral, o no habríamos acabado jamás, sin duda".

"El primer plano de la película, literalmente, lo conseguimos a la primera toma, era cuestión de que un tren llegara en el momento justo, recuerdo que la cámara empezaba desenfocada y queríamos ir poco a poco enfocando una imagen concreta en el momento en que pasaba el tren, y recuerdo ponerme a rezar, porque podíamos ver el final del tren y podíamos ver cómo la cámara iba enfocando, el final del tren seguía acercándose y estábamos: ‘Por favor, termina de enfocar, termina de enfocar’ y, en el momento justo en que lo necesitábamos, terminó de enfocar, el tren pasó con un estruendo por la estación y teníamos la imagen que queríamos".

"Pero recuerdo que Jonathan y yo estábamos ambos pensado: ‘Oh, Dios’, porque no teníamos más que una oportunidad. Ni siquiera era nuestro tren, no lo estábamos controlando, no era más que un tren expreso que pasaba por casualidad, lo vimos llegar y nos dijimos: ‘¡Vamos a conseguir este plano!’. Huelga decir que esa noche fue realmente intensa".


Allen acerca de Nick
Acerca de la experiencia de Coulter de trabajar con Nick, comenta:

"Bueno, ha sido una situación de lo más complicada, complicadísima. No (ríe), Nick ha sido genial desde el primer momento. O sea, es un tipo de lo más sereno. Hay momentos, cuando estás en las primeras etapas de un proyecto de este tipo, antes de que se haga realidad, en los que empiezas a preguntarte: ‘Bueno, ¿será ésta la película adecuada para mí?’. Empiezan a asaltarte las dudas, porque te lo cuestionas todo. En este proyecto, tuve alguno de esos momentos, pero Nick no perdió la calma".

"Hubo un ambiente muy agradable y la verdad es que yo se lo atribuyo en gran medida a Nick, porque él fue quien nos juntó a todos".

Robert Pattinson comenta que "lo mejor de Nick es que le preocupa mucho no parecer el típico cliché del productor, lo que es genial. Siempre anda disculpándose cuando nos pide una estimación de tiempo o algo por el estilo. ‘Odio hacer esto, lo odio, la verdad es que no quiero tener que hacerlo pero, ¿puedes decirme cuánto tiempo necesitas? Veinte minutos. Nada más, veinte minutos, genial, estupendo’, lo que es sorprendente en un productor".


Nick acerca de Allen
"Bueno, me encantaba Hollywoodland, me pareció una película fantástica, así que le envié el guión a su agente. Es lo que suele hacerse en Hollywood. Lo habitual es enviárselo a los agentes y no volver a saber más del tema. Su agente leyó primero el guión y se lo pasó a Allen, diciéndole que le había encantado, Allen empieza a leer la primera escena y pone: ‘Callejón – Callejón exterior’. Eso es lo que ponía al empezar y Allen piensa: ‘No me voy a leer este guión, esto es una chorrada, en Nueva York no hay callejones’".

"Pero continuó leyendo y le encantó, después nos pasamos un par de años trabajando los dos en el guión con Will. Casi conseguimos financiación un año antes. No pudo ser, pero siguió adelante y ha aportado un nivel de sinceridad y realismo a esta película que no habría tenido con muchos otros directores".

"Conoce Nueva York, es un neoyorkino. Es fenomenal con los actores en el rodaje, es un tipo muy considerado, consigue que el rodaje resulte maravilloso y todos se sientan a gusto y apreciados. Ambos creemos en la misma película, queremos contar la misma historia y es una delicia trabajar con él".

"Siento el deseo de realizar buenos proyectos, por supuesto, y cada vez tengo más claro, cuanto más trabajo en esta industria, que no quiero hacer ciertas cosas que he hecho anteriormente. Lo que de verdad quiero hacer ahora son películas sobre personajes. Quiero hacer películas que conmuevan realmente al espectador, que hagan pensar a la gente y que sean sinceras".

Osborne prosigue: "Creo que una de las cosas sobre las que Allen Coulter siempre volvía en esta película, era que quería que el filme fuera lo más sincero posible, una franca historia de amor joven, no de amor adolescente, que es algo distinto, sino de amor joven, entre gente que acaba de cumplir la veintena, tu primera historia de amor de verdad. Eso es lo que estoy ahora buscando realmente, encontrar ese tipo de proyectos, que poseen una sensibilidad muy sincera, muy auténtica... y eso es lo que tiene RECUÉRDAME".

"El gran reto con esta película es lograr mantener esa sinceridad, mantener el realismo, no irse a lo excesivamente melodramático, sino creer en la historia creada originalmente por Will Fetters. No nos ha costado demasiado, gracias a Allen. Eso es lo que Allen quería desde un primer momento con esta película", asegura.

Robert Pattinson opina sobre Allen: "Es muy abierto sobre cómo se desarrolla una escena, lo que aquí resultó estupendo, porque yo no tenía ni idea de lo que estaba haciendo la mayor parte del tiempo. Pero todo marchó perfectamente. Cada vez que hablaba con él durante la preproducción, siempre estábamos de acuerdo. Cuando llegamos al rodaje, lo mejor que se puede hacer es limitarte a observar las cosas y ver qué pasa realmente, que es lo que hizo él, y funcionó maravillosamente".

Nick prosigue: "Allen y yo nos llevamos muy bien, lo que es estupendo. Estamos de acuerdo un 99% de las veces, lo que resulta muy útil, y el estudio nos ha brindado todo su apoyo de principio a fin del proyecto. A veces te preguntas si un estudio quiere llevarte en una dirección distinta, pero Summit siempre ha respaldado la película que queríamos hacer".