Robert Rodríguez presenta Predators, un nueva y arrolladora faceta del universo Depredador, rodada en exteriores bajo los creativos auspicios de Rodríguez; completada en los Troublemaker Studios, con sede en Austin y propiedad del realizador, y dirigida por Nimrod Antal.
Además de Adrien Brody, Predators cuenta en su reparto con el galardonado actor y realizador Laurence Fishburne (las películas de "Matrix"), Topher Grace ("Spider-Man 3"), Alice Braga ("Soy Leyenda") y Walton Goggins ("The Shield"). También participa encarnando a un personaje clave Danny Trejo, imprescindible en las películas de Rodríguez, que recientemente ha interpretado un papel estelar en "Machete"; completan el elenco el campeón de la UFC Oleg Taktarov ("La Búsqueda"), Mahershalalhashbaz Ali ("El Curioso Caso de Benjamin Button") y Louis Ozawa Changchien ("Fair Game").
En 1987, "Depredador" dio a conocer a uno de los personajes más populares y perdurables de la historia del cine de ciencia-ficción: un guerrero extraterrestre dotado de invisibilidad que causaba estragos en la jungla. El público recibió entusiasmado la rica mitología de la película así como su continuación, estrenada pocos años después. En 1994, buscando revitalizar el mundo "Depredador", Robert Rodríguez, un joven e inconformista realizador recién salido de "El Mariachi", su sensacional debut como director, fue invitado a escribir un guión que girase en torno al personaje, tan amado como temido, del Depredador.
"Originariamente sólo me contrataron como guionista", explica Rodríguez. "Buscaban un nuevo enfoque del material, por lo que no dejé escapar la oportunidad. Yo era un gran admirador de 'Depredador'. Cuando llegué a Hollywood por primera vez, conocí a Carl Weathers y a Arnold Schwarzenegger, así que me pareció que una nueva película sobre el 'Depredador' sería un proyecto con cuya realización disfrutaría mucho".
"Lo que verdaderamente me entusiasmaba de la película original era su carácter híbrido; empezaba como una película de acción al tradicional estilo de los comandos de Arnold Schwarzenegger, en la que los personajes se ganan nuestro afecto y los acompañamos en su odisea. Entonces empieza a transformarse en una película de ciencia-ficción del modelo 'Alien'. Personalmente me encanta realizar esta especie de mezcolanza
películas como 'Abierto hasta el Amanecer'. Me apasiona mezclar géneros".
"[Para el nuevo guión], yo sabía que quería escribir algo ambientado fuera de este mundo. Me cautivó el ambiente selvático del original, por lo que ambientando mi relato en otro planeta, podría regresar a un ambiente semejante y, pese a todo, hacer que pareciera nuevo. Así también quedaría aclarado por qué el Depredador sentía la atracción de la jungla de la Tierra [tal y como se describe en la película original], porque el planeta que le sirve de coto de caza tiene un terreno parecido".
"El guión que Robert escribió en 1994 tenía los exteriores, buena parte de la trama [que acabó siendo Predators] y los conceptos básicos de los personajes", comenta la productora de Predators Elizabeth Avellán. "Robert simplemente no volvió a pensar en ello. Le pagaron su trabajo y fue un divertido ejercicio de redacción. Debido a nuestra lista de proyectos, no hubo en realidad un momento en el que Robert pudiera haberse encargado [de la dirección]. Al mismo tiempo, creo que en su fuero más interno quería ver en la pantalla a los personajes que él había puesto sobre el papel".
"Para escribir esa película me dieron carta blanca", tercia Rodríguez. "Me limité a plantear cualquier idea atrayente que me gustaría ver en una película de Depredador y lo puse todo en un guión. Yo sabía que no tendría que dirigirla, por lo que ignoré toda restricción presupuestaria o logística de cualquier clase. Iba a dejar que ellos se encargaran de resolver todo. Entonces, como era de esperar, años más tarde tuve que pagar cara la idea. Con Predators, fui yo quien tuvo que calcular cómo realizarla", añade riéndose.
La obra de Rodríguez, que no llegó a producirse, acabaría convirtiéndose en los cimientos de esta nueva película de 2010. En el entretanto, se encargó de dirigir un buen número de proyectos distintos con los que ganó fama como uno de los realizadores más influyentes de su generación. Además, él y su socia de producción Elizabeth Avellán fundaron los mundialmente famosos Troublemaker Studios en 1997 en Austin (Tejas). Al mismo tiempo, un cinéfilo llamado Nimrod Antal cursaba estudios en la Academia Húngara de Cine, convirtiéndose posteriormente en un solicitado director.
En 2009, unos ejecutivos de Twentieth Century Fox se presentaron en Austin para reunirse con Rodríguez y Avellán a propósito de una nueva película de "Depredador". "Sin comerlo ni beberlo, Robert recibe una llamada de teléfono [del estudio] en la que le dicen: 'Acabamos de encontrar el guión que usted escribió, creemos que es excelente y que necesita algún trabajo extra, pero, ¿desea usted realizar la película?'", recuerda Avellán.
"Cuando el proyecto volvió a mis manos, fue emocionante ver que aun después de otras varias películas de 'Depredador' todavía quedaba mucho terreno virgen que explorar", comenta Rodríguez. "La idea de Predators era la de lograr que pareciera no la quinta o la sexta película de una serie, sino la primera. Esto no es una reiniciación ni una nueva representación. Cronológicamente, es posible ver esta película inmediatamente después del 'Depredador' original y tener una línea argumental ininterrumpida. Los Depredadores son personajes tan perdurables que uno podría liarse la manta a la cabeza y crear nuevos mundos completos basados en ellos. Yo sabía que quería regresar a una película basada en personajes. Y para mí tenía la máxima importancia que cada uno se sintiera como si pudiera ser la estrella de su propia película. Y para quien haya visto nuestra película sin haber visto las otras, la idea también es eficaz".
Debido al apretado programa de Rodríguez como realizador de múltiples facetas y jefe conjunto de un estudio, la dirección del proyecto propuesto no era viable dentro del límite temporal que los ejecutivos de la Fox tenían en mente. En vez de ello, se hizo cargo del proyecto como productor, con la idea de colaborar con los nuevos guionistas para actualizar el guión, y contratar a un director que realizara la película con el consolidado grupo de colaboradores creativos de Rodríguez. "Yo estaba enfrascado en otra cosa y no podía dirigir Predators, pero dije que me encantaría producir la película aquí, en Troublemaker", explica Rodríguez. "En nuestro estudio tenemos una forma especial de hacer las cosas que nos permite sacarle mucho partido al dinero en la pantalla y realizar una película grande y estupenda aunque cueste lo suyo. A todo mi equipo técnico le apasiona el 'Depredador' original y estaban tascando el freno esperando trabajar en Predators. Cuando dimos comienzo al rodaje de la nueva película, el momento más increíble para mí como aficionado al cine fue salir de mi oficina y entrar en nuestro plató trasero de Austin y tropezarme con los Depredadores", cuenta Rodríguez entre risas. "Fue de lo más impresionante".
"La decisión de contratar a un director y limitarnos nosotros a producir la película, también tuvo algo que ver con nuestro deseo de desarrollar Troublemaker Studios y ampliar lo que habíamos pretendido hacer aquí", añade Avellán.
"Disfruté de veras con la experiencia de productor", reconoce Rodríguez. "No lo habría hecho en una etapa anterior de mi carrera. Estaba enfrascadísimo dirigiendo, manejando la cámara y componiendo la música de mis películas. Pero mi equipo técnico es muy experimentado y hallé a un director inmejorable en Nimrod; lo mismo puedo decir de los guionistas Alex Litvak y Michael Finch. Ahora que me paro a pensar en ello, Predators no era mi propio proyecto. No era algo que yo hubiera creado, como la serie de 'Spy Kids'; era algo preexistente, lo que me permitió rodar la película como lo haría un verdadero admirador".
"Hay varios proyectos que yo he escrito, total o parcialmente, que no sé si tendré tiempo para dirigirlos en un momento próximo, por lo que éste fue un experimento para ver si la producción podría ser una solución viable", prosigue Rodríguez. "Mi equipo creativo podría montar la producción y yo podría, de todos modos, supervisarla como productor y jefe del estudio. Aún tendría que involucrarme mucho en la elaboración del guión, en el montaje y en los efectos visuales, pero estaría libre del peso que el director de la película tiene que llevar. También podría realizar otros proyectos".
Rodríguez pensó en muchos directores de primera fila para que tomasen las riendas de Predators, dando finalmente su aprobación a Nimrod Antal, cuyo primer largometraje, "Kontroll", había impresionado a Rodríguez. "Lo que me cautivó del trabajo de Nimrod en 'Kontroll' fue su inventiva. Habiendo acabado 'El Mariachi', reaccioné inmediatamente a lo que Nimrod logró con su limitado presupuesto en 'Kontroll'. Desde la primerísima toma de 'Kontroll', uno puede decir que, sin duda, ahí hay un realizador. Nimrod muestra una enorme sensibilidad hacia el relato y sabe cómo trabajar con actores. Cuando le conocí, pude decir al instante que sería un excelente capataz, tanto del equipo técnico como del artístico. Además, tiene su propio punto de vista. Como productor, uno quiere contar con alguien a quien poder ceder los trastos de modo que no haga falta meterse a microgestor".
Antal era un gran admirador del "Depredador" original. "Para mí, 'Depredador' es mi infancia", explica. "Yo era un verdadero obseso del cine y de 'Depredador'. Recuerdo haber asistido a la noche del estreno de 'Depredador' en el Avco Theatre de Westwood (California) con un grupo de compañeros de clase. Para mí fue toda una experiencia". Unos veinte años más tarde, Antal estaba cenando con algunos de esos mismos amigos de la infancia que le acompañaron a la proyección, cuando descubrió que había conseguido el trabajo de director de Predators.
Rodríguez y Antal descubrieron que eran almas gemelas. "Ha sido fantástico trabajar con Nimrod", afirma Rodríguez. "Nuestros gustos y antecedentes son semejantes. Cuando nos presentaban distintos diseños de criaturas o diferentes obras de arte conceptual, él siempre elegía lo mismo que yo acababa de escoger mentalmente. Nos llevamos muy bien y nuestra sensibilidad era muy parecida. Con todo, en ocasiones, al entrar yo en el estudio, descubrí que le había dado a una escena un enfoque totalmente diferente del que yo habría elegido, pero de una forma excelente".
"Nimrod presta una gran atención a los detalles", añade Rodríguez. "Viéndole dirigir, me sorprendo pensando 'A lo mejor tomo prestados algunos de sus métodos'. Eso es parte del motivo por el que uno quiere trabajar con otras personas
para aprender de ellos. Yo siempre me considero un alumno y sabía que aprendería más de él de lo que probablemente él aprendiera de mí. Tenía formada una imagen muy sólida de lo que quería lograr y lo llevaba a cabo día a día".
Los realizadores querían que Predators fuera un nuevo thriller, mezcla de acción y ciencia-ficción, que captase la magia de "Depredador". "Me atraía la idea de reunir a personajes procedentes de distintas partes del mundo, a los que se deja caer en este planeta y que tienen que utilizar sus habilidades para seguir con vida", comenta Rodríguez. "Eso nos proporcionaría un reparto de antihéroes muy internacional. Quería que el título tuviera un doble significado, que hiciera creer que es tan grande la tensión existente entre quienes aparecen en la pantalla que se matarían entre sí sin pensarlo dos veces antes de tropezarse con una de las criaturas. O sea; queríamos que dentro del grupo se establecieran precarias alianzas. Todos ellos son depredadores".
"El gran detalle que hace que ésta sea distinta de otras películas de 'Depredador' es que los personajes se hallan en un planeta extraño en el que se sienten incómodos ya que desconocen las normas que rigen el lugar", comenta Avellán. Ellos son depredadores en la Tierra y ahora se ven depredados. Los humanos están inquietos porque no tienen ni idea de lo que acaba de sucederles y porque son personas acostumbradas a sentirse muy seguras dentro de su propia piel. No se conocen; no forman un equipo ni nada parecido. Estos ocho personajes son todos machos (y hembras) Alfa. Y de repente, tienen que renunciar a parte de su carácter dominante para lograr, al menos, sobrevivir, puesto que aquello con lo que empiezan a tropezarse se torna espeluznante por momentos. Es un relato con mucho suspense que gira en torno al sacrificio y al instinto de supervivencia que hay en nosotros. Es una fantasía pero también tiene una enorme emoción humana".
Para desarrollar este concepto, Rodríguez embarcó en la empresa a los guionistas Alex Litvak y Michael Finch, quienes, basándose en un guión que habían escrito anteriormente, se formaron la imagen correcta para unir a estos personajes arquetípicos -asesinos y depredadores de hombres por derecho propio- y hacer que se enfrentaran a los Depredadores extraterrestres. "Nimrod y yo, y Alex y Michael, queríamos volver a las raíces: desmontar el argumento y hacerlo muy agobiante", explica Rodríguez. "Hace años [cuando me contrataron para escribir un nuevo guión de "Depredador"], me dejaron escribir prácticamente lo que se me antojara, pero eso habría resultado demasiado caro. Cuando Nimrod se incorporó al grupo, se sintió atraído por el suspense de la caza que contiene el guión. Hablamos mucho de eso. Yo quería economizar presupuesto y adelgazar el argumento; lograr algo que llegara directamente a las emociones".
"Cuando Nimrod se unió a la empresa, tenía formado un concepto muy claro de la película que quería rodar. Quería que fuera una película de caza por encima de todo", observa el guionista Michael Finch. "Insistía muchísimo en ello. Dicho sea en su honor, se sentó durante muchos días con nosotros discutiendo no sólo el carácter general de la producción sino el ritmo específico. Tenía mucho que aportar y se mostraba muy vehemente en su deseo de que ésta fuera una película sobria y entretenida".
"El público ha visto la película original de 'Depredador' y sabe cómo piensan y actúan los Depredadores. Nuestro trabajo consistía en tomar esa expectativa, aceptarla y, quizá, retorcerla sólo un poco cambiando la naturaleza de la caza y el motivo por el que esta gente son las piezas que hay que cobrar", dice Finch. "Pero había determinadas convenciones que teníamos que respetar: los Depredadores vienen a por ti; son invisibles; pueden golpear en cualquier momento. Pero también creamos nuevas clases de Depredadores que sorprenderán al público, como perros, halcones y distintos sistemas de armas".
"La versión más magra y más cruel surgió bajo la guía de Nimrod", añade el guionista Alex Litvak. "Nimrod quería centrarse más en cada Depredador y realizar una película mucho más sobria y visualmente estilizada".
Los "depredadores" humanos pasan la mayoría de la primera parte de la película sin saber dónde están ni por qué han llegado allí
hasta que se percatan de que ellos son la presa. "Esto es algo a lo que hemos dedicado mucho trabajo con Nimrod, cerciorándonos de que esta realización alcance su meta emocionalmente y lo logre con un giro de la trama", explica Litvak. "Hay que hacerlo de forma emocional, recogiendo la conmoción, la desolación y la desesperanza de los humanos. También pasamos mucho tiempo trabajando en lo que yo llamaría la cadena del descubrimiento, la intensificación que conduce hacia éste de modo que uno tenga la sensación de estar tratando de resolver un misterio".
A medida que el misterio y el terror se van desvelando, los miembros del equipo de circunstancias que forman los asesinos comienzan a descubrir lo mejor de sí mismos. "Los monstruos de Predators no son forzosamente quienes uno piensa que son", dice Antal. "La película trata fundamentalmente acerca de un grupo de personas con las que uno no querría pasar un rato y que, en sus propios mundos, son monstruos. Están desorientados, confusos y paranoicos, y se ven lanzados a una situación que no pueden controlar, lo que les resulta aterrador. Los 'monstruos' humanos se enfrentan entre sí, sólo para aprender que en la jungla hay un monstruo [extraterrestre] más grande que los espera. Su odisea saca a relucir su humanidad".
Asignando los papeles de los depredadores [Humanos]
En el guión, un hombre cae en picado a través del vacío a velocidad terminal, abriéndose su paracaídas sólo segundos antes de una muerte cierta. Adrien Brody, ganador del Oscar®, recibió el papel del ex soldado Royce, el reacio jefe de los humanos, que comienza la película sin la menor idea de dónde está ni de las circunstancias que le han llevado allí. "En mis películas siempre trato de 'elevar el reparto' y conseguir los mejores actores posibles", explica Rodríguez. "Cuando estaba rodando 'Sin City', una película basada en una historieta, me hice con los servicios de Bruce Willis, Benicio del Toro y Mickey Rourke. Simplemente con eso se eleva el nivel del material hasta un extremo en que no puede ser ignorado ni desechado diciendo que 'no es más que una película sobre una historieta'. Es de mucho más peso. Así que en ésta, tenemos a un actor galardonado con el Oscar, Adrien, que quiere participar en una película de acción y dar todo lo que tiene para lograr una interpretación destacada y hacer que la película resulte creíble. Es una opción novedosa. El espectador no quiere que se le recuerde constantemente que está viendo una película. Hacen falta actores que asienten la película en la realidad, ya que nuestro argumento es tan fantástico. La diferencia es monumental. De repente, todo lo que todos hacen y dicen se vuelve creíble".
Inevitables comparaciones con el papel de "Dutch" que Arnold Schwarzenegger representó en "Depredador" salieron a la luz casi en el momento en que Brody recibió el papel del mercenario, especialista en operaciones clandestinas, Royce. "No teníamos intención alguna de reproducir el personaje de Arnold [en Predators]", asegura Antal. "Creo que habríamos prestado a la película y al público un flaco servicio. El de Royce es un papel impresionante para Adrien. Creo que el público quedará muy satisfecho con su trabajo en la película".
"No es posible competir con Arnold Schwarzenegger, luego, ¿por qué tomar esa dirección? Es mucho mejor hacer algo que los espectadores no esperen", añade Rodríguez. "Nuestra estrategia consistía en formar un reparto con los mejores actores. No hubo que retorcerle el brazo a nadie. Con decirle a la gente que van a trabajar en una película de 'Depredador' que va a ser algo nuevo, diferente y arriesgado, acuden corriendo".
Los actores tenían que ser creíbles física y emocionalmente. "Al principio todos sabíamos que lo más importante es disponer de grandes actores", precisa Antal. "Cuando uno rueda una película cualquiera, es necesario contar con alguien que aporte un cierto nivel a la interpretación. Yo puedo hacer que cualquiera tenga el aspecto de un tipo duro. Lo que no puedo es enseñarle a actuar. Robert y yo estábamos verdaderamente entusiasmados con Adrien porque es un actor fenomenal. Comprende que el trabajo del actor es convertirse en cualquier cosa en la que el director necesite que se convierta".
"Los soldados de hoy en día tienen mi mismo aspecto", comenta Brody. "En la actualidad las películas han cambiado un poco y están más ancladas en la realidad. Los soldados no son superhombres. Creo que eso es parte de lo que me atrajo hacia este papel. Yo quería crear para la película a un héroe muy imperfecto y trágico. Royce es esencialmente un solitario. En cierto sentido, ésa es su gran fortaleza como asesino y su gran debilidad como ser humano. En esta pieza, se le pide efectivamente que elija entre dirigir a unas personas y preocuparse de esas mismas personas, algo que, está firmemente convencido, le costará la vida o, como mínimo, algo que estará constitutivamente incapacitado para realizar. De modo que, básicamente, nos gustó la idea de crear a un personaje que tuviera que optar por una posibilidad que se oponía a su carácter básico e inherente".
Otro celebrado actor, Laurence Fishburne, encarna a Noland, un recluso humano al que hallan sobreviviendo en el planeta. Su cueva secreta contiene numerosos artefactos y armas. La misma existencia de Noland en el planeta extraño da indicios de una rica historia de Depredadores ajenos a ese mundo. "Una vez creado este planeta, es mucho lo que puede ocurrir ahí; y una vez vistos personajes como Noland, se sabe que hay un gran número de posibles historias que contar", dice Rodríguez.
El guionista Michael Finch añade: "Noland es un tipo que puede contarnos un fragmento completo de la historia y desempeñar una función muy específica, que es la siguiente: demostrar a estos elementos que morir en este planeta quizá no sea lo peor que te pueda ocurrir. Vivir en él pudiera ser lo peor".
"Podíamos haber tomado distintos caminos a la hora de asignar el personaje de Noland", reconoce Rodríguez. "Laurence y Nimrod habían trabajado juntos anteriormente [en el thriller de 2009 "Blindado"], pero el nombre de Laurence fue en realidad mencionado por el estudio porque también ellos le admiran mucho. Laurence estaba a la cabeza de su lista y yo dije: '¡Bueno! Eso es fácil'. Yo ya había oído a Nimrod contar cosas fantásticas de Laurence. Parecía bien. La primera vez que vi a Laurence, él ya estaba delante de las cámaras interpretando a Noland, y me quedé de una pieza; fue uno de esos momentos mágicos. Una experiencia inolvidable".
Fishburne respondió a pedir de boca a la orientación que los realizadores estaban imprimiendo al material. "Lo bueno de esta película es que en realidad es una vuelta atrás hacia el viejo 'Depredador'", explica el actor. "Su estructura es parecidísima y los arquetipos de los personajes son semejantes. Son distintos, pero se parecen lo suficiente como para que el espectador perciba una sensación de la vieja película. Mi personaje es una de esas piezas que enlazan con la vieja película. Creo que el personaje de Noland es una especie de gran guiño dirigido al público".
"Noland les revela lo que está ocurriendo y por qué están todos allí, pero también levanta para el público la liebre de la broma que se esconde en la película. Cuando se estrenó 'Depredador', jamás habíamos visto nada como él [la criatura], y era un espectro verdaderamente aterrador y de lo más puesto", añade Fishburne. "Esto supone un auténtico regreso a la tensión y la emoción de la primera película. En ésta, tenemos una nueva raza de Depredador, pero los realizadores se han tomado su tiempo viendo la primera película, tomando sus mejores elementos y tratando de mejorarlos; y de respetarlos de cualquier forma que podamos. Opino que eso se ha logrado de forma verdaderamente efectiva en lo que hace al guión, así como en lo relativo al reparto y a los arquetipos que estos personajes representan".
Un personaje muy fuera de lugar entre los mortíferos bravucones que han sido arrojados a este extraño mundo es Edwin, un doctor de misterioso pasado. "Se necesita un personaje que no acabe de encajar con el resto del equipo, con el fin de que dicho personaje pueda convertirse en los ojos del público. Los espectadores no podrían identificarse con los demás personajes porque éstos son asesinos profesionales", explica Rodríguez.
"El personaje de Edwin fue el último para el que encontramos actor porque era verdaderamente difícil", apostilla Avellán. "Hace falta dar con alguien que pueda vender esa idea de 'no se sabe bien qué hace ése en este planeta'. Topher Grace es ese muchacho típicamente norteamericano. Sin duda es una excelente elección porque los espectadores no lo perciben como una amenaza".
Al igual que otros muchos miembros del equipo de Predators, Grace era un antiguo admirador de "Depredador". "Me encantó la primera película. Cuando leí este guión, cada página descubría información nueva que era más impresionante que la anterior. Todo actor desea encarnar a un personaje que actúa en dos o tres niveles a la vez: es todo un gustazo. Entonces descubrí que Adrien Brody ya estaba en el reparto. ¿Vamos a contar con un actor que ha ganado el Premio de la Academia®? Eso es demasiado. Así que tuve suerte de que me dejaran incorporarme y actuar".
"Todo lo que me cautivó de aquella primera película se conserva en ésta", prosigue Grace. "Me gusta pensar en Predators como en una auténtica continuación de la primera película. Me parece que Robert Rodríguez y Nimrod Antal lo están haciendo con brillantez; tienen toda la información facilitada por la primera película del 'Depredador' y por una ambientación semejante, pero van más allá, introducen algunos nuevos elementos e intentan algunas cosas nuevas. Si les gustó la primera ración, éste es un manjar mejor, distinto y más delicioso".
Otra figura central de esta nefasta alianza de asesinos es el único miembro femenino del grupo, Isabelle, una tiradora selecta de las Fuerzas Israelíes de Defensa. "Nunca había interpretado a este tipo de personaje", dice Alice Braga, que encabezó junto a Will Smith el cartel de "Soy Leyenda". "Isabelle es una mujer de armas tomar, pero no se muestra dura con todos. Creo que en su vida hay algunas cosas que le hacen ser más fuerte, pero al mismo tiempo es tierna y sólo intenta sobrevivir. Está entendiendo mucho sobre sí misma en esta situación".
Isabelle, al igual que sus nuevos compinches, se encuentra metida en una odisea para averiguar por qué los han juntado a todos en este inmenso desolladero. "En mi opinión, cada personaje descubre por qué ha sido escogido", prosigue Braga. "Isabelle está tratando de averiguar el motivo por el que ella se encuentra en este lugar, combatiendo contra estos monstruos. Se pregunta si no estarán sufriendo un castigo por crímenes anteriores. Nosotros siempre éramos los que matábamos a la gente y ahora somos los que estamos siendo cazados".
La investigación realizada por Braga para su papel la condujo a una especie de guía para francotiradores. "Me enteré de que los tiradores selectos tienen que ser precisos, metódicos, organizados, y de que no pueden abrigar sentimientos encontrados", nos cuenta Braga. "Hay que ser muy específico acerca de lo que uno quiere, de lo que hace y de aquello en que consiste la misión. Es una tipa durísima y dentro de esa banda, Isabelle es un elemento de auténtica importancia porque sabe lo suyo acerca del movimiento del viento y de todo lo demás que hay en la jungla. Su pericia es muy necesaria".
Rodríguez se puso contentísimo de contar con Braga para la película. "En mis películas, me gusta que haya mujeres verdaderamente fuertes. ¡Tengo cinco hermanas! Yo quería que el personaje femenino tuviera auténtica fuerza; no sólo en la película, para la que crearían a un personaje masculino y luego le cambiarían el nombre. Era importante que fuera un personaje creíble de verdad. Insistí en ello con todas mis fuerzas. Era todo un reto escribir esa parte pero quería hacerla realidad para esta película. La posibilidad de conseguir que Alice Braga honrara nuestro plató me dejó extático; ¡tiene tantísimo talento! Cuando realizó la prueba, le miré a Nimrod y le dije: '¿Podríamos contratarla ya, por favor? ¿Acaso hace falta que veamos a alguien más?' Era tan estupenda que podía percibirse cómo la calidad de la película subía diez puntos sólo eligiéndola a ella. Se podía sentir lo que ella aportaría, que ella sería la verdadera alma de la película. Nimrod dijo: 'Desde luego. A por ella'".
Walton Goggins se quedó con el papel del despiadado y tatuadísimo Walter Stans, un asesino múltiple que se considera una estrella del rock. "Walt tiene una energía que le permite ser divertido en un momento y aterrador en el siguiente", dice Antal. "Uno se ríe con él y a continuación le tiene miedo. Cada vez que Walt se ponía delante de la cámara, todo lo que yo podía ver era al equipo técnico colocándose lentamente delante de los monitores para verle actuar. Cuando uno tiene a Walt Goggins no hace falta café."
Antal había elegido a Goggins pero Rodríguez no estaba, en ese momento, familiarizado con el aplaudido trabajo del actor en "The Shield" y en otros proyectos. Amén de ello, el personaje, tal y como figura en el guión, estaba todavía sin acabar. "Pensé que íbamos a tener que revisar por completo el personaje y tomar una dirección completamente distinta", recuerda Rodríguez. "Y eso nos ponía en todo un compromiso porque Nimrod ya había contratado a Walt. Así que dije: 'Traigámoslo hasta aquí para que, al menos, yo pueda decirle cara a cara que lo sentimos y que estamos cambiando radicalmente el papel porque no acaba de gustarme'. Walt se mostró como un colaborador excepcional dotado de un increíble talento. Era un actor de los que me gustan: dispuesto a hacer lo que sea preciso para lograr que el papel carbure. Comenzó justamente allí y entonces a intentar cosas distintas, rebotando contra las pareces con toda su alma. En dos palabras, creó nuevamente todo el personaje de Stans partiendo de cero allí mismo, en el despacho. Dio forma a alguien muy original".
"Stans se ha pasado dieciséis años en el corredor de la muerte", explica Goggins. "Las primeras imágenes que ve fuera de la celda de una cárcel, las de una selva de otro mundo, le resultan una pizca sobreestimulantes. Imagina ser la única celebridad de este nuevo planeta del terror y cree que la gente debería ir pidiéndole su autógrafo. Es siniestro, pero también, a mi parecer, un tanto divertido y pesimista".
Un mono de color naranja de San Quintín y numerosos tatuajes, entre ellos, uno de un escorpión en el cuello, ayudaron a Goggins a introducirse en su personaje. Para conservar el falso arte que adornaba su cuerpo, se pasaba por término medio noventa minutos al día en la silla de maquillaje. "Los tatuajes me hicieron sentirme muy auténtico. Ha sido interesante pasearme con ellos por Hawaii y Austin. En tiendas y restaurantes te atienden de primera. La gente no lo hace por amabilidad. Lo hace porque les das miedo", dice Goggins entre risas.
Una clase más de depredador humano catapultado a este mundo extraterrestre es Cuchillo, un sicario de una banda de traficantes de drogas, al que encarna Danny Trejo. "En realidad yo no quería que Danny estuviera en esta película", revela Rodríguez. "En el guión de Predators escribieron: 'un tipo del estilo de Danny Trejo', y yo dije que no podían poner esas palabras. No existe otro Danny Trejo. Cualquier otra persona que consigamos va a ser una decepción. Yo acababa de emplear a Danny Trejo en 'Machete' [la película de acción dirigida por Rodríguez próxima a estrenarse] y no quería meterlo a empellones en este proyecto. Así que nos pusimos a buscar a otro actor. Pero no hay ninguno que tenga esa condición de icono, que es lo que le hace grande. No hay más remedio que conseguir a Danny."
Antal siempre estuvo convencido de que Trejo era el que tenía que conseguir el papel. "Desde el principio yo quería a Danny para el personaje de Cuchillo. Ha trabajado en tantas películas que me apasionan que cuando le conocí, para mí fue un momento de los que un fanático del cine aspira a vivir. Habitualmente me muestro bastante frío con los actores. Pero, ¡bueno! ¡Éste es Danny Trejo! Además, su personaje tiene una frase inmejorable para describir el tinglado de la película: '¿Te parece que somos un grupo de individuos encauzados a la formación de un grupo?'"
"En esencia, a Cuchillo no le gusta nadie; y, a su vez, en pocas palabras, los demás no le tragan", dice Trejo mostrando su acuerdo con esa afirmación. "Es un traficante de drogas y un asesino; calza botas de vaquero y luce una camisa de chulo; lleva dos metralletas, una pistola de nueve milímetros y un cuchillo porque ése es su nombre. Todos saben que estos personajes hacen bien lo que hacen
que es matar".
Oleg Taktarov, antiguo campeón de la UFC, da vida a Nikolai, un soldado ruso de las fuerzas especiales que recorre la selva cargando con una ametralladora de varios cañones y cincuenta kilos de peso. "Oleg es como una especie de Charles Bronson ruso y con muy mala uva. Resulta ser un gran admirador de Charles Bronson", añade Rodríguez. "Hoy en día es más difícil encontrar actores parecidos [a Bronson]. Oleg aparece y transmite esa sensación".
"A Oleg le llamábamos 'El Oso Ruso'", dice Antal. "Oleg daba una fuerza a su interpretación que resultaba estimulante. En muchas ocasiones, con los atletas uno tiene que hacer trampas como director para sacar una interpretación de alguien que carece de formación dramática. Oleg aporta 'dureza' al personaje con toda facilidad, pero también una hondura y casi una pena que me parece que muchos combatientes llevan dentro. Ellos salen perdiendo en muchos otros aspectos de su vida y él lo reflejaba".
Taktarov añade: "Rodando esta película me sentí igual que después de mis combates cuando luchaba en la UFC. Me sentía como si me hubieran dado una paliza, literal y figuradamente".
"Nikolai es un personaje muy heroico", prosigue. "Nikolai representa a un legendario héroe de guerra ruso. Puedo sentirme verdaderamente orgulloso durante muchos años por haber interpretado este papel".
A Mahershalalhashbaz Ali le correspondió el papel de Mombasa, un soldado y caudillo africano. Ali estaba entusiasmado con la dinámica del personaje. "Nos reunimos los mejores combatientes y los guerreros más indeseables que la Tierra contiene en sus respectivas culturas; y los depredadores extraterrestres tratan de pulir sus habilidades y de mejorar su capacidad enfrentándose a nosotros en este planeta extraño. Como miembro del público, creo que uno tiene automáticamente que tomar partido", afirma Ali. "Júntanos a todos nosotros y tenemos un enemigo común cuya tecnología supera todo cuanto nuestra mente es verdaderamente capaz de comprender. Se crea un asombroso choque de titanes".
Louis Ozawa Changchien, en el papel de Hanzo, un asesino yakuza, completa la banda de depredadores terrícolas. "Hanzo es lo que podría denominarse un asesino a sueldo: el músculo de los Yakuza", explica Ozawa Changchien, que desciende de japoneses y taiwaneses. "Lleva una Beretta 92-FS. Hanzo ha llegado muy alto en una de las tres principales bandas del Japón. Hanzo es un hombre de pocas palabras. Peca de cauto. A Hanzo le gusta asimilar las cosas, analizarlas durante un tiempo y luego actuar. Pero cuando dice algo, los demás prestan atención. Sus palabras siempre tienen sentido".
Les presentamos a los [nuevos] depredadores
Después de haber formado un elenco impresionante, les tocaba ahora a los realizadores hacer que sus "estrellas" de otros mundos fueran dignas del legado de la película original. "Creo que lo que hizo verdaderamente grande a 'Depredador' fue que los personajes humanos fueran de la mano del Depredador extraterrestre, porque para el público ellos son el punto de entrada en la película", observa Rodríguez. "Los espectadores tienen que identificarse suficientemente con los personajes humanos, de modo que si los humanos muestran miedo, ellos hagan lo propio respecto de lo que están viendo. Por tanto, teníamos que representar a los personajes humanos con toda claridad para hacer al personaje del Depredador realmente más fuerte. Los unos sin el otro, y viceversa, no funcionan. Por tanto, nuestros esfuerzos se dirigieron no sólo a tener personajes humanos que fueran excelentes, sino a conseguir que, luego, nuestros Depredadores también tuvieran personalidades distintas y estupendas de modo que no fueran solamente los 'otros'. En verdad son personajes por derecho propio".
Mientras que las estrellas humanas hacían grupo durante las primeras semanas del rodaje en Hawaii, el elenco de Depredadores y de otras criaturas estaba siendo preparado por un amplio equipo de artistas y técnicos para el rodaje en Austin. Los viejos colaboradores de Rodríguez, Greg Nicotero y su socio Howard Berger, que lo son en KNB Effects Group, Inc., fueron los encargados de dar forma a las criaturas extraterrestres y a los efectos especiales de maquillaje. "Esta producción es verdaderamente emocionante para nosotros. Estamos creando los personajes que dan título a la película y a múltiplos de los mismos", comenta Nicotero.
Los humanos que sobreviven descubren, sobrecogidos, que el Depredador "original" ha caído víctima de esta nueva "actualización", dándose cuenta a la vez de que éste será el cazador supremo
y el Depredador definitivo. Por tanto, además de devolvernos al que afectuosamente conocemos como el "Clásico" Depredador, KNB creó tres nuevos Depredadores Desenfrenados: el Adiestrador de Perros, el Halconero y Mr. Black. Éstos representan versiones más grandes, más largas, más delgadas y más mortíferas de la especie que los espectadores recuerdan de películas anteriores. También fueron ideadas otras criaturas que ensanchan la mitología de los Depredadores, incluido el extraterrestre Ram Runner y los Perros de Caza de los Depredadores.
Rodney J. Brunet, Chris Olivia y Alex Toader, de Troublemaker Digital (TMS Digital), más el artista conceptual Joe Pepe, rompieron el fuego con unos primeros diseños que fueron afinados por los diseñadores de KNB, donde un equipo de sesenta y dos personas -diseñadores, artistas, escultores, fabricantes de moldes y pintores- trabajaron durante aproximadamente trece semanas en las instalaciones de veinticinco mil pies cuadrados que la empresa tiene en Los Ángeles.
"Cada una de esas personas estaba dedicada al 100% a dar vida a las mejores criaturas que fuera posible lograr", afirma Nicotero. "Shannon Shea, que fue básicamente mi lugarteniente en esta película, había trabajado con la empresa de Stan Winston en el 'Depredador' original, por lo que estaba verdaderamente comprometido con este proyecto". (Shea y el jefe de atrezzo Tommy "Tom" Tomlinson eran los dos miembros del equipo "heredados" que también habían trabajado en 1987 en la película original).
"Si uno se para a pensar en el nivel de trabajo, el marco temporal era una verdadera locura", explica Nicotero. "Cada pieza del total aproximado de dieciséis criaturas (incluidos los dobles) tuvo que ser creada partiendo de cero. Cada rizo, cada pieza de joyería, cada mandíbula
cada uno de los elementos de estas criaturas tuvo que ser diseñado y fabricado y encajado".
Tanto el clásico Depredador como los nuevos son alienígenas humanoides que fueron creados en gran medida mediante prácticos trajes de criaturas de última tecnología. "Poder ver al Depredador original en nuestro relato añadía un toque nostálgico, porque no se le había visto de esa forma desde la primera película", comenta Rodríguez. "Queríamos simplemente que diera la sensación de haber evolucionado; es decir, recuperar al original e introducir una nueva especie, actualizada, más cruel y más perversa".
"Robert y Nimrod dieron instrucciones muy precisas para que nuestro Depredador Clásico fuera la versión de 'casete' y el nuevo Depredador fuera el equivalente a un 'iPod'; en consecuencia era necesario que [éste último] tuviera un aspecto pulcro, elegante y feroz", comenta Nicotero. "Al instante me vino la idea de ceñir la armadura más al cuerpo, echar los rizos hacia atrás y alargar la cabeza un poco para que no tuviera un aspecto tan cuadrado. Lo más grande no es siempre lo mejor; los nuevos Depredadores tienen un aspecto elegante porque son altos, largos y esbeltos".
Nicotero da más detalles de las características de las nuevas criaturas: "Durante la mayor parte de la película vemos sus máscaras y éstas rebosan personalidad. El Adiestrador de Perros tenía colmillos que le había quitado a uno de los perros de caza; el Halconero tenía un máscara de diseño muy específico, y Mr. Black tenía una extraña mandíbula salida de otro mundo. Cada uno tiene una personalidad singular. Además, también los pintamos de forma diferente para que destacasen y fuera posible distinguir con la vista a los distintos Depredadores". Todos los Depredadores tienen la capacidad de mimetizarse que ya vimos en la primera película, pero los nuevos cuentan además con armamento de alta tecnología, incluidos un Halcón Depredador volador y un nuevo Lanzador de Plasma.
Si bien muchos de los efectos de los Depredadores eran prácticos, el equipo de efectos visuales de la película añadió mejoras clave, incluidos destellos de bocas de fuego, ampliaciones de aparatos, una nave espacial digital, elementos de la secuencia inicial de la caída libre y los paracaídas, así como los emblemáticos efectos miméticos. "Estamos creando una nueva variación del mimetismo: lo hemos convertido en un efecto digital y gana en perfección sobre la versión de la película original", explica el supervisor de efectos especiales en plató Jabbar Raisani. "Es como si su tecnología hubiera sido actualizada ya en el futuro. Hay más efectos de invisibilidad en esta película".
En el universo de los Depredadores, la elección del momento lo es todo; en especial, el de la primera aparición de las criaturas en cada relato. "En la película original, creo que la forma como el Depredador es revelado fue un éxito tan grande porque se tomaron su tiempo y le sacaron todo el jugo", comenta Antal. "La revelación a fuego lento del Depredador mantenía el pánico. Era algo que nunca se había visto. Durante la primera media hora el Depredador permanece invisible. En esta película hemos tratado de reproducir esa lenta aparición".
Como los personajes de los Depredadores correrían a cargo de actores especialistas, Nicotero colaboró con el coordinador de especialistas Jeff Dashnaw en la elaboración del elenco de actores que llevarían los trajes de los Depredadores. Dashnaw también proporcionó a Nicotero cierta información sobre los diseños en pro de la seguridad de los actores. "El arma de plasma, las armas blancas y las demás sobresalen de los trajes, lo que podría resultar peligroso durante las escenas de lucha", dice Dashnaw. "De modo que Greg los diseñó de forma que pudieran extraerse de los trajes cuando fuera necesario, y efectos visuales los añade durante la postproducción".
Derek Mears, el actor de dos metros que encarnó al arquetípico monstruo de la pantalla Jason Voorhees en la recreación de "Viernes 13", todo un éxito el año pasado, encarna al Depredador Clásico, mientras que Brian Steele y Carey Jones dan vida a los tres nuevos Depredadores.
Acerca de la producción
Después que la producción diera comienzo el 12 de octubre de 2009 en las selvas de Hawaii, el reparto y el equipo técnico completaron el rodaje de Predators en el centro de Tejas. El director Nimrod Antal, junto con su antiguo colaborador Gyula Pados, director de fotografía, se unió a muchos de los miembros habituales del equipo técnico de Rodríguez en las instalaciones de Troublemaker Studios que éste último tiene en Austin. Entre dichos miembros habituales figuran los diseñadores de producción Steve Joyner y Caylah Eddleblute, la diseñadora de vestuario Nina Proctor, el coordinador de especialistas Jeff Dashnaw, los supervisores de efectos visuales Jabbar Raisani y Rodney J. Brunet (éste último de Troublemaker Digital), y Greg Nicotero y Howard Berger de KNB EFX Group, Inc. Ya que la mayor parte del relato se desarrolla en una selva, un departamento de vegetación excepcionalmente amplio, dirigido por el Diseñador de Vegetación Richard Bell, también se convirtió en un componente fundamental de la producción.
El equipo rebosa de admiradores impenitentes de la película original de "Depredador". "Creo que lo más fantástico que tiene Predators es que éste es un proyecto que siempre ha llevado Robert en su corazón", afirma el diseñador de producción Steve Joyner. "Ésta es una película realizada por incondicionales para incondicionales".
"A todos nos inspiró el 'Depredador' original", añade la diseñadora de producción Caylah Eddleblute. "He estudiado cada fotograma del original. Tenía excelentes imágenes de primer plano: siempre había algo entre el personaje y la cámara. Todo estaba verdaderamente estructurado y tenía una excelente arquitectura. Cuando una se enfrenta a un reto de esa clase, lo que quiere es estar a la altura".
Los realizadores sólo contaban con diez semanas de preparación para disponer una enorme producción que abarcase a un elenco coral y a numerosos personajes de criaturas dentro de un relato repleto de acrobacias y de acción desbordante; desafiantes exteriores en dos estados; y considerable preparación in situ y complicada construcción de decorados. La tarea no fue menos difícil por el intento de realizar todos los efectos especiales sin ensayos o a puerta cerrada: todos, desde el humo hasta las explosiones pasando por las criaturas y las acrobacias. El equipo de efectos visuales se ocuparía de las partes sin movimiento durante la postproducción.
La productora Elizabeth Avellán atribuye la capacidad de Troublemaker Studios para producir una película de calidad a un precio razonable, al talento y la actitud de sus colaboradores habituales. "Llevamos a la mayoría de nuestro equipo habitual a Hawaii porque son asombrosos. Tenemos un ambiente de trabajo que no admite comparación. Fox ha quedado muy impresionada con el proceso de trabajo que tenemos aquí".
Gran parte del estilo visual de la película quedó definido por sus exteriores y decorados selváticos. "Al principio, Gyula, Steve, Caylah y yo nos sentamos y tratamos de pensar en otras películas que tuvieran escenas épicas de jungla que resultaran visualmente deslumbrantes y complementaran lo que el guión trataba de lograr", confiesa Antal. "Todos estuvimos de acuerdo en que nuestra selva no podía ser hermosa y exuberante; en vez de ello, tenía que complementar a los personajes de los Depredadores y el argumento. Logramos gran parte de nuestro objetivo gracias a la iluminación y a la composición, pero los exteriores de selva que encontramos eran impresionantes".
Para dar con los exteriores de selva extraterrestre que complementaran a la perfección los decorados y los exteriores de Tejas, los realizadores tuvieron en mente exteriores de Puerto Rico, Méjico en incluso China, antes de decidirse por numerosos lugares cerca de Hilo (Hawaii). "Geológicamente, la Gran Isla es una de las de formación más reciente, por lo que tiene un terreno muy escarpado y una vegetación irrepetible", asegura Joyner. "Los exteriores resultaban muy extraterrestres, muy extremos y era muy difícil trabajar en ellos".
Los exteriores hawaianos tenían que confluir visualmente con los de Tejas y con los complicados decorados de la Selva y el Campamento de Caza que estaban siendo construidos en Austin, en las instalaciones de Troublemaker Studios. Después de una breve pausa para trasladar al elenco, a los técnicos y el equipo desde Hawaii, la producción se reanudó en Austin (Tejas) en uno de los decorados más grandes jamás construidos en la historia cinematográfica del estado. Numerosos decorados adicionales de interiores, construidos en los platós de Troublemaker Studios, así como en los cercanos Austin Studios, proporcionarían protección contra una variedad de tiempo inhabitualmente malo que incluyó lluvia, un frío extremo y nieve.
El estacionamiento trasero de Troublemaker acogió un gigantesco decorado exterior de cincuenta metros por treinta que reproducía el Campamento de Caza de la Jungla. "Al crear nuestro campamento de caza, [la diseñadora de producción] Caylah [Eddleblute] y yo hicimos físicamente una ronda como si fuéramos los Depredadores", dice Joyner. "Nos preguntábamos a dónde llevarían los Depredadores a sus piezas. Dónde las limpiarían. Cómo conservarían las pieles, los huesos y los trofeos que consiguieran. En consecuencia, diseñamos zonas independientes dentro del campamento para todo eso, de modo que si uno fuera un Depredador se sentiría en casa. El campamento de caza es aterrador; todo ha sido diseñado para tener un aspecto peligroso".
"Una de las fundamentales instrucciones dadas por Nimrod el Primer Día fue: 'Quiero que el Campamento de Caza parezca un cuadro del Bosco; tiene que ser un infierno [como el imaginado por el artista]'", explica Eddleblute. También el director de fotografía Gyula Pados contribuyó a lograr el infernal aspecto del decorado. "La forma como Gyula fotografió el campamento de caza resulta casi hermosa", afirma Rodríguez. "La iluminación es suave, como si tuviera una bóveda de árboles encima; pero el humo de las llamas le da un toque de misterio".
Como el relato se desarrolla en la jungla, el departamento de vegetación dio comienzo a su trabajo con meses de adelanto sobre la mayoría del equipo técnico. En julio comenzaron a reunir material botánico en medio del calor de Tejas y trabajaron durante lo más crudo del invierno ocupándose de cada extremo que afectase a todo; desde las plantas pequeñas a los grandes árboles. Paisajistas e invernaderos de Austin ayudaron a la producción a conseguir la vegetación viva. Tres camiones de dieciocho metros cargados con aproximadamente cuatro mil plantas tropicales y exóticas fueron inicialmente transportados desde Florida, incluidas mil doscientas macetas de hierba de unos dieciocho litros de capacidad.
Como era invierno, el departamento de vegetación también utilizó miles de kilos de seda, algunos montados sobre bases portátiles. "Acabamos grapando alrededor de un millón y medio de hojas en grandes árboles falsos", explica el diseñador de vegetación Richard Bell. "Una de las primeras cosas en las que nos centramos fue el campamento principal de caza. Durante mes y medio aproximadamente, tuve a un equipo de diez miembros recorriendo Tejas y recolectando material que posteriormente sería empleado como atrezzo. Antes del rodaje, dispusimos de alrededor de una semana para decorar la parte de la jungla donde se halla el campamento de caza después de que la cuadrilla de construcción hubiera completado todos sus elementos. Teníamos todas clases de cedros y robles quemados, y de troncos muertos".
Las armas son una parte importante del universo "Depredador", pues definen tanto a los cazadores humanos como a los extraterrestres. Royce lleva un machete que es casi igual al que blandía el personaje de Arnold Schwarzenegger, Dutch, en la primera película; hasta es obra del mismo cuchillero, Jack Crane. El equipo de armas también fabricó cuchillos de desollar, lanzas, hachas, trampas, corazas y un machete para Stans. Joyner asegura que "para los Depredadores, todo gira en torno a su habilidad venatoria. Ponen a prueba su capacidad con otras especies. No se trata, por tanto, de dominar a una especie con armas o tecnología mejores. Son unos puristas. Tratamos de mantenernos fieles al legado de la película original".