Georges Duroy, un joven apuesto y sin escrúpulos, llega a Paris procedente de Argelia, donde ha pasado dos años movilizado con el ejército. Su gran atractivo físico y encanto personal pronto comienzan a abrirle puertas. Cuando toma conciencia de sus posibilidades, sus aspiraciones crecen y su ascenso se precipita de manera tan vertiginosa como su actitud moral se degrada. La maquinación y la seducción lo elevaran hasta el lugar que ha decidido le es propio: las más altas esferas de Paris. Bel Ami (como será apodado por sus sucesivas amantes) es una obra emblemática de uno de los escritores más relevantes del siglo XIX: la historia de un personaje que relega a un segundo plano los principios morales en favor de los modales complacientes. Un relato en el que la lealtad choca con la ambición.
Argumento
Georges acaba de regresar de servir en Argelia con el ejército francés y se ha instalado en París para lograr un crecimiento personal. Al gastar sus últimos francos, su vida se cruza con la de Forestier, un hombre mayor que él, al que conoció en Argelia. Forestier le dice que París está lleno de dinero y de oportunidades; le fanfarronea que es el editor de la sección de Política de La Vie Française, un periódico que se ha marcado el objetivo de derrocar el gobierno. Forestier invita a Georges a cenar a su casa.
A la cena asiste la flor y nata de la sociedad parisina. Forestier, su bella esposa Madeleine y el editor del periódico, Rousset, claman contra la situación política del norte de África, donde el gobierno planea invadir Marruecos. Madeleine sostiene que el periódico debería publicar el diario de joven soldado de Georges. Ella se ofrece para ayudarle, pero de hecho lo que hace es encargarse de la parte romántica, y sugiere que vaya a ver a dos de sus amigas: la recatada Madame Rousset y la dulce y coqueta Clotilde. Madeleine le advierte que las personas más importantes de París no son los hombres sino sus esposas, y se despide de él cuando entra el anciano Conde de Vaudrec para efectuar su visita semanal.
En La Vie Française, Georges encuentra que su diario ha sido todo un éxito y Rousset le pone en nómina. Georges va a ver a Clotilde. Su joven hija recibe a Georges de forma cálida y le llama "Bel Ami", un nombre que empieza a propagarse entre las mujeres de la sociedad. Georges y Clotilde comienzan una ilícita aventura amorosa, pero después de pasarlo muy bien durante un tiempo, ella rompe la relación.
Georges siente que su suerte se ha esfumado. A Forestier se le ha agotado la paciencia con el joven muchacho. No puede escribir sin la ayuda de Madeleine y, aunque sus colegas murmuran que la mujer de Forestier escribe todo el diario, Forestier despide a Georges. Finalmente, Georges tiene motivos para ir a ver a Madame Rousset, la mujer de su ex editor. La señora está deslumbrada con él y termina readmitido en el periódico como jefe de la sección de cotilleo.
De vuelta a los círculos sociales, Georges vuelve a reunirse con Clotilde, quien le dice que Forestier se está muriendo y que Madeleine le ha llevado a la costa. Georges siente que tiene una nueva oportunidad y les sigue los pasos, para quedarse al lado de Madeleine hasta que su marido muere y le entierran.
Georges se casa con Madeleine. Ahora que ella vuelve a escribir para él, Georges es ascendido a Editor de Política. Madeleine se sumerge en el trabajo y las historias que publica Georges tienen un papel crucial en la caída del gobierno. Rousset prepara una espléndida fiesta para celebrar lo que él ve como su victoria política. Cuando Georges trata de reclamar su parte en el golpe político, Rousset le acosa. Le dice a Georges que Madeleine está totalmente controlada por el Conde de Vaudrec.
Georges nota que ella siente atracción por el conde, y para devolverle la jugada a su jefe, fija su objetivo en Madame Rousset. Ella es presa fácil, y la seduce durante una plegaria en la iglesia. Inician un romance, a pesar de que Georges no ha abandonado su historia de amor con Clotilde.
El Conde de Vaudrec muere y lega su fortuna a Madeleine. Al verse confirmadas las sospechas de Georges sobre la intimidad de su relación, éste se llena de recelo hacia ella. Afectada por el duelo, Madeleine admite que aquel hombre lo había sido todo para ella: amigo, padre y amante.
Madame Rousset se ha encaprichado de Georges y se le insinúa. Pero Georges desdeña las acciones de la mujer, quien intenta recuperarle revelándole que el nuevo gobierno está a punto de invadir Marruecos. Su marido lo sabe todo sobre este plan y, lo que aún es peor, se ha aprovechado de la situación para hacerse rico. Georges termina expeditivamente su relación y se enfrenta duramente a Rousset y Madeleine, a las que también cree involucradas. Ambas actúan conjuntamente sacando a Georges de sus vidas.
Georges se presenta sin invitación a la fiesta de Rousset, donde todos le hacen el vacío, incluyendo Madeleine. Solo Clotilde le recibe con amabilidad y conversa con él. Georges asume que se ha portado como un imbécil. De nuevo en la fiesta, Rousset y su esposa presentan en sociedad a su hija adolescente, Suzanne, quien sonríe a "Bel Ami".
Georges viene con la policía para enfrentarse a Madeleine y al nuevo amante de ella. Ella confiesa voluntariamente que ha cometido delito de adulterio. Libre de nuevo, Georges huye con Suzanne. Cuando los padres les atrapan, Rousset insiste en que Georges debe casarse con Suzanne para salvar la reputación, pese a la insistente oposición de la madre. Cuando Clotilde descubre lo que ha hecho, le recrimina a Georges su gran crueldad. Él alega que debe hacer cualquier cosa para salir de la pobreza.
Georges se casa con Suzanne en una gran ceremonia. Mientras la pareja sale de la sala por el pasillo central, Georges pasa por delante de las mujeres que ha utilizado despiadadamente para conseguir su último objetivo: Madame Rousset, Madeleine y Clotilde, su único amor verdadero.