Nota de la directora
En Nothing Personal he querido representar una soledad autoimpuesta a través de dos personajes muy diferentes: una vagabunda y un ermitaño. Ella en constante movimiento, él varado en una isla – ambos evitando cualquier contacto humano. Cuando el mundo contemporáneo en el que vivimos solo se preocupa de unificar e integrar, estos dos personajes escogen una soledad donde se sienten cómodos y en la que encuentran la libertad personal.

Los personajes representados en Nothing Personal pueden parecer extremos en su búsqueda de la soledad pero la intimidad que se crea entre ellos sigue los mismos pasos lógicos de cualquier relación sentimental entre dos personas.

Nothing Personal es para mí un proceso de pensamiento que se expresa en la película hasta el último momento sin ocultarlo detrás de una historia. No he querido utilizar esta historia como truco o manipulación del espectador para que se identifique con los personajes. Por el contrario, he querido respetar la narración hasta el límite para que la película sea más una experiencia cinematográfica que un ejercicio intelectual.


Premios
Festival Internacional de Cine de Locarno ‘09
Mejor Actriz (Lotte Verbeek)
Mejor Ópera Prima
Premio FIPRESCI
Premio del Jurado del Joven

Festival de Cine Holandes (Premios Nacionales de Cinematografía ‘09)
Mejor Película
Mejor Director
Mejor fotografía
Mejor diseño de sonido

Festival de Cine Europeo de Sevilla
Giraldillo de Plata a la Mejor Película


Entrevista con la directora

P: ¿Cómo describirías a los protagonistas de Nothing Personal?

R: Los dos personajes son tabula rasa. No sabemos nada sobre su pasado o sus intenciones. No me gustan las películas que intentan describir complejas motivaciones humanas a través de la "psicología de los personajes". En la vida real, más que saber, adivinamos qué es lo que mueve a la gente. Nothing Personal se parece a la situación real de conocer a un extraño y lo lleva al extremo mientras sigue a un personaje que rechaza constantemente de abrirse a la otra persona, aunque se lo vaya haciendo poco a poco.


P: ¿No te preocupaba que el público encontrase difícil identificarse con alguien de quien sabe tan poco?

R: ¿Cuánto necesitamos saber de la gente para fiarnos de ellos o entenderlos? Ésta es la cuestión básica de la película, que trata sobre las relaciones humanas a un nivel muy básico. En una producción de Hollywood, sabríamos sus motivaciones y por ello la entenderíamos y nos identificaríamos con ella. No quería manipular al público de este modo, sino más bien desafiarlo.


P: ¿Ser mujer han influenciado tu modo de dirigir?

R: Siendo mujer, me siento naturalmente atraída por las protagonistas fuertes y no me gusta presentar a las mujeres como víctimas. Lotte es en la película una persona más bien activa, que elige la soledad pero no da lástima. Quería crear un personaje rebelde, que suele ser un hombre, y darle un rostro femenino.


P: ¿Qué tal fue la colaboración con el joven Daniël Bouquet, cuya fotografía desempeña un papel muy importante a la hora de crear el ambiente justo?

R: Daniel es un director de fotografía perfecto ya que anima al director a que se arriesgue. Tuve suerte de conocerlo y trabajar con él, aunque al principio me aterrorizaba la idea de trabajar con alguien que no conocía. Pero funcionó. Tiene un gran gusto, no ha sido contaminado por la publicidad o los vídeos musicales.


P: ¿En qué sentido crees que Nothing Personal es una película holandesa, irlandesa, polaca o europea?

R: Mi condición de emigrante me hace realizar historias universales. Nothing Personal es una película europea de cine de autor. Es una película que se atreve a desafiar al público y al mismo tiempo proviene de la urgencia del creador, que quiere compartir algo importante.


P: ¿Cuáles son, en tu opinión, los temas típicos de Antoniak que podemos encontrar en esta cinta y que posiblemente se repetirán en tus próximos trabajos?

R: La ironía está muy enraizada en la tradición centroeuropea, aunque es una cuestión más de tono que de tema. Para mi la ironía es la salsa de la vida y la mayor sabiduría. Me siento parte de la tradición centroeuropea mezcla de influencias judías, eslavas y alemanas. Pienso en Kafka, Musil o también en Billy Wilder y Ernst Lubitsch, que han impregnado Hollywood con este toque irónico.