Cinemanía > Películas > Colombiana > Comentario
Destacado: En cines comerciales 'Anora' Palma de Oro en Cannes
  Colombiana  Dirigida por Olivier Megaton
¿Qué te parece la película?
Gracias
Ver resultados

"Luc Besson me había hablado con frecuencia de su interés en hacer una secuela de LEÓN (EL PROFESIONAL) durante los últimos diez años, más o menos", confiesa Olivier Megaton. "El proyecto nunca llegó a materializarse, pero seguía aferrado a esa idea de una película de acción con una heroína como protagonista, que dejó madurar hasta convertirse en COLOMBIANA".

Luc abordó a Olivier en noviembre de 2009 con un guión que había escrito conjuntamente con Robert Mark Kamen, su compañero habitual en las labores de escritura desde EL QUINTO ELEMENTO. COLOMBIANA narra la historia de Cataleya, una joven que experimenta una intensa sed de venganza desde que sus padres fueron asesinados. Su tío Emilio la ha preparado para convertirse en una asesina a sueldo y su único objetivo es encontrar y matar a los responsables del asesinato de su familia.

"Por lo que a mí respecta, tenía ganas de hacer una cinta de acción al estilo de las de Jason Bourne, pero con una heroína", prosigue Olivier. "Quería hacer una película más seria, menos caricaturesca que TRANSPORTER 3. De modo que COLOMBIANA me resultaba ideal. Es como una especie de homenaje a NIKITA, DURA DE MATAR y LEÓN (EL PROFESIONAL). Quería explorar la psicología de la protagonista principal y llevarla a sus límites".

En cuanto Olivier empezó con el proceso de selección de la actriz que interpretaría a Cataleya, enseguida pensó en Zoe Saldana. Aunque en un primer momento hubiera podido pensar que esa elección fuera una apuesta arriesgada, no tardó en comprender que la actriz era, en última instancia, la candidata perfecta para el papel. "Zoe no es solo preciosa, sino también inteligente, tiene un gran corazón, auténtica humanidad y una enorme fuerza de voluntad cuando se topa con cualquier obstáculo. En cuanto leyó el guión por primera vez, ya estaba repleta de ideas. Por si fuera poco, estada deseando trabajar y es una auténtica perfeccionista, una característica que ambos tenemos en común". Olivier no tuvo que molestarse en convencer a Zoe, que quedó inmediatamente prendada de su personaje. "Cataleya es una de esas personas a las que les gusta estar solas, nunca ha sido capaz de llevar una vida normal", explica la actriz. "Vive en un estado de duelo permanente, guardando las distancias con cualquier tipo de interacción social. Posee una tremenda concentración y determinación, se mantiene permanentemente alerta". Aunque Zoe reconoce identificar de inmediato esos rasgos de la personalidad de Cataleya, confiesa que le resultó mucho más difícil entender algunas de sus restantes facetas. "La violencia a la que hace frente Cataleya y su dolor me resultan inconcebibles. Así que tuve que esforzarme mucho para llegar a comprenderlas y a sentirlas, a fin de crear e interpretar a mi Cataleya". Posee una doble naturaleza, es al mismo tiempo resuelta, atlética y astuta, pero además se siente sola, agotada y frágil, por culpa de esa venganza que la corroe por dentro, pero que también la impulsa a seguir adelante. Al tratarse de su meta principal, se debe a sí misma llegar hasta el final. Por lo tanto, Olivier necesitaba que la interpretación de Zoe aunara ese doble aspecto: el físico y el psicológico. Tenía que ser capaz de matar, pero también de llorar.

Zoe trabajó con Olivier para definir el carácter de Cataleya y se lanzó con gran entusiasmo a llevar a cabo su preparación física con el coordinador de lucha Alain Figlarz. También invirtió un buen número de horas en ver documentales de naturaleza, ya que Cataleya tiene una manera muy animal de acechar a su presa y de moverse por el escenario. La actriz aprendió también a disparar con munición real y a desmontar y volver a montar armas de fuego. "Cataleya no ha recibido ningún tipo de formación militar ni policial", recalca Zoe. "Fue su tío Emilio, que no es más que un gánster, quien la preparó, y ha desarrollado una extraña relación con las armas de fuego. Las ve menos como armas propiamente dichas y más como a sus mejores amigas".

Y esas amigas le van a resultar sumamente útiles para poder hacer frente a toda la serie de peligros y obstáculos que los guionistas han pensado poner en su camino hacia la venganza.


Tres villanos, o casi
Luc Besson y Robert Mark Kamen han ideado, de hecho, no uno, sino varios obstáculos. Dos de ellos pondrán a Cataleya en peligro desde un punto de vista puramente físico, al darle caza para eliminarla, mientras que otro la pone en un peligro más bien moral, al tratar de localizarla para que haga frente a sus actividades criminales y a su realidad, tanto pasada como presente.

Don Luis y Marco, el jefe de un cártel de la droga y su lugarteniente, estaban los dos implicados en el asesinato de los padres de Cataleya. "Don Luis se ha quedado un poco desfasado", reconoce Olivier. "Fuma cigarros malos, bebe coñac malo y escucha ópera mala. Quería hacer una parodia de la imagen del típico villano que solía verse en las películas de acción de la década de los 70. En COLOMBIANA, don Luis lleva escrito en la frente ‘malo malísimo’, pero no es la auténtica fuente de peligro". Marco es quien representa realmente el peligro y la adversidad. Es quien se encarga de hacer todo el trabajo sucio de don Luis. Es un completo psicópata. Aunque no lo aparente. Desde las primeras escenas, la interpretación que realiza el actor Jordi Mollà de Marco es de un tipo más bien delicado y refinado que de un tipo de acción. Al hacer frente a la pequeña Cataleya, justo después del asesinato de sus padres, qué él mismo orquestó, nada más producirse ese estallido de violencia, habla con ella con mucha calma, la consuela con palabras tranquilizadoras, perfectas para poder dominarla. Pero su auténtica naturaleza resurge cuando Cataleya escapa. Así que matar a un niño no parece suponer un especial dilema para él. A partir de ese momento, no hace falta volver a mostrar a Marco con un arma nunca más, porque ya representa el peligro por sí mismo, lo personifica.

El agente del FBI James Ross lleva cuatro años siguiendo el rastro a Cataleya pero, ¿es realmente justo incluirlo en el grupo de los villanos? "Ross y Cataleya se parecen bastante", señala Olivier. "A los dos les han deshecho sus vidas, los dos están solos y los dos son cazadores. Cuando por fin se ven las caras, las reacciones y la actitud de Ross lo hacen atractivo y simpático". Y también extrañamente emotivo, cuando se da cuenta de que el asesino en serie con el que está obsesionado, que ha logrado eludirlo durante tantos años, y que daba por hecho que era un hombre, resulta ser, de hecho, una mujer. "Ross se dedica a elaborar perfiles", nos explica el actor Lennie James. "Ha basado su reputación en la calidad de esos perfiles. Al descubrir que se ha equivocado desde el primer momento, se ve obligado a replanteárselo todo seriamente".


Cuando acción rima con emoción
Cataleya no deja de ser una asesina en serie, con la escalofriante cifra de 23 asesinatos en su haber. Y la masacre no ha acabado todavía. "Esta historia no tiene una lógica moral", reconoce Olivier. "Así que nuestro reto era conseguir que Cataleya conservara cierto grado de simpatía del espectador. Aun así, no deja de ser bastante retorcido mostrar a alguien que es devorado por sus propios tiburones. Así que los actores y yo modificamos cada una de las víctimas de Cataleya en relación al personaje de Zoe, con intención de que hacerla más conmovedora". Mantener el equilibrio con semejante personaje fue una lucha constante, y parte de la clave estuvo en cómo se trató el asesinato de sus padres. "No quería ‘flashbacks’ fugaces de Cataleya de niña aquí y allá, que nos fueran dando pistas sobre su personalidad. Preferimos elaborar un poco más el personaje de la niña y hacerla lo más conmovedora posible. De ese modo, cuando vemos a Cataleya ya crecida, la transferencia es instantánea. La Cataleya adulta es el resultado lógico de la Cataleya niña. Necesitábamos hacer esa conexión". Zoe y Amandla Stenberg, que interpreta a Cataleya de niña, trabajaron juntas, adoptando cada una los gestos y ademanes de la otra. Sus dos actitudes se crearon de manera que fueran una continuación una de otra, para crear así un personaje integral, único, lógico, coherente y completo.

Como mujer, Cataleya no tiene realmente más que dos hombres en su vida en relación a los cuales puede sentir emociones complejas: su tío, Emilio, y su novio, Danny.

Emilio es la única familia que le queda a Cataleya. Desde su emotiva reunión hasta su violenta disputa final, sus escenas se encuentran entre las de mayor riqueza emocional del filme. "Quería que el tío, que de repente se encuentra con semejante molestia metida en su vida, resultara conmovedor", explica Olivier, "y que siguiera siendo conmovedor, a medida que ve crecer a Cataleya, haciendo lo que ella quiere y siendo capaz incluso de engañarlo. Pero solo hasta cierto punto. Cuando Emilio descubre que Cataleya está preparando en secreto su propio plan para vengarse, se produce un choque de una gran dureza, al tratarse de un enfrentamiento entre dos fieras salvajes".

Su relación con Danny, su novio, es el segundo lazo personal de la historia de Cataleya. "Ese vínculo amoroso marca la película e impulsa a Cataleya a otro mundo", explica Olivier. "Danny no sabe gran cosa sobre Cataleya, porque ella no le cuenta nada de su vida real", recuerda Michael Vartan, que interpreta a Danny. Y ella le revela la mínima información posible sobre una vida basada en las mentiras porque, poco a poco, Cataleya empieza a darse cuenta de que siente mucho más apego por Danny del que le gustaría admitir. Siente un gran dolor y se va haciendo cada vez más duro para ella mantener esa doble vida, debatiéndose entre la venganza y el amor.


Una pelea orgánica
COLOMBIANA es una película de acción con secuencias de persecución, a pie o en coche, tiroteos y una buena dosis de explosiones, sobre todo en el tramo final de la historia, con la destrucción de la hacienda de don Luis. "La última escena es inaudita", afirma Olivier con una gran sonrisa. "Empieza con Cataleya, armada con un lanzacohetes". Pero, a pesar de todos los obstáculos mortales con los que se topa, Olivier seguía pensando que Cataleya nunca había llegado a estar en verdadero peligro, porque siempre tenía un arma a mano con la que defenderse. "Necesitaba algo de combate cuerpo a cuerpo", prosigue Olivier, "de la clase que Jason Bourne nos ha enseñado a apreciar de nuevo".

Así que Alain Figlarz y él idearon una pelea a puño limpio entre Cataleya y Marco en un cuarto de baño con un espacio muy reducido. Bueno, casi a puño limpio, ya que ambos adversarios no tardan en descubrir cómo utilizar los objetos que encuentran a su alrededor, como toallas o cepillos de dientes, a modo de armas. "Quería que Alain creara algo que utilizara los objetos disponibles en el decorado", recalca Olivier, "como ya hiciera en EL CASO BOURNE, cuando Jason Bourne usa una pluma corriente como arma mortal. También quería una pelea brutal, natural, más que algo sumamente coreografiado que no resultara realista, ni para los personajes ni para el mundo actual". Zoe se preparó con Alain durante dos meses y acabó haciendo el 98% de las escenas de lucha, lo que dota al personaje de mayor credibilidad todavía. Al mismo tiempo, Jordi trabajó con su doble especialista en España. "No estoy hecho para la acción", se disculpa Jordi. "Además, me magullo con bastante facilidad". "Zoe tuvo una preparación muy rigurosa, Jordi mucho menos", agrega Olivier. "Logró hacer bastantes cosas en las escenas de lucha, pero estaba limitado físicamente. Llevé a ambos actores al límite de sus fuerzas y se puede percibir su agotamiento, lo que realza aún más las escenas de lucha". "Zoe se preparó con un especialista y estaba acostumbrada a dar puñetazos, sabiendo que su rival podía aguantarlos", prosigue Jordi. "Pero ese no era ni mucho menos el caso conmigo. Así que le pedí que se contuviera bastante conmigo con los puñetazos. Aun así, me golpeó un par de veces, sin querer. En cuanto a mí, no sé si llegué a hacerle daño. Espero que sí", bromea.


El club de Megatón
El rodaje de la película tuvo lugar entre agosto y noviembre de 2010, en cinco ciudades principalmente: París, Chicago, Miami, Nueva Orleans y Ciudad de México. Eso obligó a Olivier a trabajar con cinco equipos de rodaje distintos, que giraban en torno a un grupo básico de quince franceses, lo que permitía a la película mantener una cierta lógica y continuidad. "En los Estados Unidos, los equipos son automáticamente más grandes", asegura Olivier. "Los norteamericanos no tienen esa idea de pasar rápidamente de un escenario a otro. Consideran que la compañía al completo debe trasladarse a la vez. Con los mexicanos, no tenían ese mismo reflejo automático, era más bien una actitud de ‘veremos qué pasa’. Así que, cada vez que había un problema técnico, teníamos que entrar en modo MacGyver, para intentar no perder tiempo. Tuve que exprimir al máximo cada uno de esos equipos, pero siempre cuesta motivar a gente con la que no vas a trabajar más que unos cuantos días, o una semana. Aunque, al final, lo logramos".

En defensa de esos equipos de rodaje, hay que reconocer que Olivier les planteó un verdadero cubo de Rubik de rodaje, que exigía a veces grabar planos para una misma secuencia en varios escenarios distintos, en ciudades distintas. Una secuencia como la de la comisaría de policía, donde Cataleya mata a un tipo llamado Rizzo, llegó a utilizar una docena de localizaciones diferentes repartidas por París, Ciudad de México y Nueva Orleans. Cataleya se detiene en un coche ante una fachada exterior de Nueva Orleans, luego entra en una gran sala de una comisaría de policía situada en Ciudad de México, y después la meten en su celda, construida en un estudio de París. Tras ello, se produce la llegada del prisionero, Rizzo, rodada en otro exterior de Ciudad de México. Y entonces entra en su celda, construida en un plató de París. Los planos de Cataleya saliendo de su propia celda se rodaron en París y se intercalaron con planos de la sala de control de seguridad, rodados en Ciudad de México, además de planos de conductos de aire, filmados en un estudio de París. La muerte de Rizzo se representó en un plató de un estudio de París. Cuando Cataleya escapa por los tejados, son tejados de un estudio de París, sobre una imagen de fondo de Nueva Orleans a un lado y Ciudad de México a su alrededor, en otras palabras, tres ciudades distintas en un mismo plano. "Todo tiene que estar meticulosamente planificado, para que no se nos pase nada por alto", confía Olivier. "Tienes que ser capaz de sintetizarlo todo, para luego recrearlo todo, de modo que se mantenga la continuidad en el diseño de los decorados, del vestuario... es un trabajo demencial". Hubo tanta acción en el propio plató como la que puede apreciarse en la pantalla.


Ante las cámaras

Zoe saldana (Cataleya)
"Estaba buscando una actriz que no fuera demasiado conocida, porque entonces mi película habría tenido indudablemente que cargar con la apreciación que existiera de ella. En mi opinión, Zoe era la mejor elección posible, porque hasta ahora no la habíamos visto mostrar verdaderamente en la pantalla el registro completo de lo que es capaz de hacer. Tiene uno de los papeles protagonistas de AVATAR, pero la verdad es que no la vemos. Si no estás familiarizado con todo lo que pasó entre bastidores en esa producción, no sabes que Zoe está detrás de ese personaje azul y no eres capaz de apreciar hasta qué extremo su trabajo sirvió para dar vida a dicho personaje. Así que COLOMBIANA era una apuesta arriesgada, tanto para nosotros como para ella, para demostrar a todo el mundo lo buena actriz que es Zoe, lo mucho que se esfuerza y que es capaz de entregarse en cuerpo y alma al aspecto enteramente dramático, así como al aspecto de pura acción". (Olivier Megaton)

"Cataleya recibe constantemente golpes, pero siempre se las apaña para caer de pie. Para ella, es una cuestión de pura supervivencia física, porque no quiere morir. Pero también es una cuestión de supervivencia psicológica, porque no es capaz de abandonar la idea de la venganza. Ha consagrado su vida a ella". (Zoe Saldana)

Jordi Mollà (Marco)
"Había visto a Jordi en ELIZABETH: LA EDAD DE ORO y en varias películas españolas y norteamericanas. Y, si interpretaba al malo, era solo de manera marginal. En COLOMBIANA, se supone que es un tipo realmente malvado, con verdadera presencia física. Pero Jordi no es así. Jordi es refinado y sumamente frágil. Dio literalmente un bote la primera vez que apretó el gatillo de un arma. Así que decidí aprovechar esa fragilidad, porque servía para que su personaje pareciera más crispado, lo que, en última instancia, lo hacía más peligroso todavía. Aportó otra dimensión que el personaje no poseía en un principio". (Olivier Megaton)

"Marco no es el típico villano. Se interpone entre don Luis y Cataleya, entre su jefe y su presa. Por un lado, odia a don Luis y únicamente trabaja para él por obligación. Por otro, respeta a Cataleya porque entiende perfectamente por lo que está pasando, ya que quizá haya pasado exactamente por lo mismo, mucho antes de que lo hiciera ella". (Jordi Mollà)

Cliff Curtis (Emilio)
"Dirigir la escena de la librería entre Zoe y Cliff es mi recuerdo más grato del rodaje, pero es al mismo tiempo el más duro. En esa escena, Cataleya y Emilio se enzarzan en una violenta discusión, pero no tienen ni idea de que es la última vez que se verán. Lo rodamos en Ciudad de México. La mujer de Cliff acababa de ponerse de parto y la habían hospitalizado en Londres. Cliff apareció en el plató enmudecido y desaliñado. Aun así, tenía que sacar fuerzas para interpretar la escena, y sabía que las encontraría en la violencia. Pero Zoe es frágil, así que tenía miedo de hacerla sufrir psicológicamente. Por ello, [Cliff] dirigió toda la energía y la violencia que necesitaba para interpretar la escena hacia mí. Y no aflojó en todo el día. En toda mi vida, jamás he sentido tanta emoción en un plató de rodaje". (Olivier Megaton)

Lennie James (Agente James Ross)
"Ross es un agente del FBI que lleva cuatro años dando caza a un asesino en serie. Está obsesionado con esta persecución, con esta investigación que, a estas alturas, es ya la única en la que trabaja, y se asegurará de llevarla pronto a buen término. Ross es un personaje muy claramente definido. No es el arquetípico agente del FBI, de igual modo que Cataleya no es una asesina en serie al uso. Olivier y yo ahondamos mucho en el personaje de Ross, a fin de evitar que fuera simplemente un actor con un determinado vestuario, para que pudiéramos ver al hombre tras la placa". (Lennie James)

Michael Vartan (Danny)
"Danny es un artista, un pintor. Es, básicamente, un tipo de lo más normal. O tan normal como pueda ser un artista, dado que todos los artistas tienen un lado oscuro, y Danny no es ninguna excepción. Cataleya entra en su vida y él, naturalmente, se enamora perdidamente de ella, porque a ella también la rodea un halo de misterio. Trabajé con Olivier para tratar de darle una voz al personaje, y con Zoe para definir la dinámica entre nuestros dos personajes y descubrir los pequeños detalles que harían a Danny más interesante. Cuando un personaje no aparece más que en dos o tres escenas, tienes que encargarte tú mismo de dotarlo de suficiente peso para que llegue al espectador". (Michael Vartan)


Tras las cámaras

Olivier Megaton (Director)
"Soy pintor y me metí en el mundo del cine más o menos por casualidad. Había realizado unos quince cortometrajes antes de mi primer largo, EXIT: EL ACERTIJO DE LA MUERTE. Luc Besson lo vio y quiso darle distribución internacional. Después de mi segunda película, RED SIREN, me encargué de dirigir las escenas de acción en HITMAN, luego hice TRANSPORTER 3, tras la que vendría COLOMBIANA. El estilo de esta cinta se acerca más a mi sensibilidad y mis gustos personales, algo que me gustaría seguir desarrollando. COLOMBIANA cuenta la historia compleja y conmovedora de una mujer, lo que, a día de hoy, sigue siendo una completa rareza en el cine de acción". (Olivier Megaton)