Robinson, un joven subsahariano llega a Almería en patera. Al naufragar la embarcación llega como puede a la playa y salva su vida.
La mente de Robinson está repleta de voces, espíritus que le confunden y le gobiernan. Para liberarse de ellos tendrá que cumplir una misión: matar a un hombre. Es un ser anónimo y un proscrito, pero no como el resto de inmigrantes subsaharianos.