Una producción de Hey Eddie / Broken Road / Happy Madison, una película de Frank Coraci, Peso pesado. Protagonizada por Kevin James, Salma Hayek y Henry Winkler. Dirigida por Frank Coraci. Con guión de Allan Loeb y Kevin James. Producida por Todd Garner y Kevin James. Los productores ejecutivos del filme son Adam Sandler, Jack Giarraputo, Jeff Sussman y Marty P. Ewing. Los coproductores son Aimee Keen y Rock Reuben. La dirección de fotografía corre a cargo de Phil Méheux, BSC. La dirección artística es de Perry Andelin Blake. El montaje de Scott Hill. El diseño de vestuario de Hope Hanafin. La música está compuesta por Rupert Gregson-Williams.
"Peso pesado es una historia heroica sobre un tío que trabaja en un instituto en decadencia y que ha perdido la ilusión, quien a través del camino que emprende encuentra la inspiración como profesor", describe Kevin James, quien a su vez es coguionista, productor y estrella en la nueva comedia Peso pesado. "A través suyo, la inspiración alcanza también a otras personas, especialmente en el instituto. Él es un hombre corriente que tiene la oportunidad de cambiar las cosas".
"Es una comedia de Kevin James, por lo que sin duda la carcajada está más que asegurada, y como está ambientada en el mundo de las artes marciales mixtas (MMA), también hay muchísima acción. Pero además es una película con corazón y con una historia inspiradora", agrega Frank Coraci, el director de la película.
James creó el personaje de Scott Voss, un profesor de biología en un instituto que se sube al ring cuando el programa de música de su colegio corre peligro de ser cancelado. "No pelea por sí mismo: lo hace por otro profesor y los chicos", aclara el productor Todd Garner.
Scott lucha por lo que muchos creen es el alma y el corazón del colegio: el programa de música dirigido por Marty Streb (interpretado por Henry Winkler). El programa es el último escalón de entre los recortes a los que se enfrenta un colegio en tiempos de estrecheces económicas, y para Scott, este recorte va demasiado lejos. Él se encargará de recaudar el dinero necesario para salvar el programa: sin importar que la cifra que se necesita, para el exiguo salario de un profesor, sea astronómica. "Por alguna razón, Scott se convence de que luchará por los chicos para salvar el programa de música: a pesar de que esto cueste 48.000 dólares", explica James.
Pero incluso la gente que está de parte de Scott, cuando este revela su plan para recaudar dinero, piensan que está loco. El plan: meterse en el ring como luchador de artes marciales mixtas y donar el dinero del premio para salvar el programa.
¿Por qué las artes marciales mixtas? "Siempre he sido un gran admirador", asegura James. Este deporte, que combina varias técnicas de lucha: boxeo, kick boxing, karate, jiu-jitsu, judo, una buena porción de lucha libre, Muay Thai y mucho más -todo en una emocionante lucha salvaje-, se ha colocado en los primeros puestos de popularidad en el mundo deportivo. "Me convertí en fan allá por el año 1993 cuando Bas Rutten peleaba, y desde entonces he visto todo lo que he podido. Tuve la oportunidad de conocer a muchos luchadores: que no son sólo gente maravillosa sino que además son tipos familiares; gente que jamás te esperarías que estuvieran peleando en una jaula o en el octágono".
"A Scott le admira la pasión que los demás tienen por la música: especialmente Marty y una de sus alumnas, Malia. Quiere hacer algo porque ve lo importante que es la música para ellos", afirma el productor ejecutivo Jeff Sussman. "A medida que Scott avanza y los retos son mayores, se va comprometiendo más y más. Los chicos lo necesitan, y él va a luchar por ellos todo lo que haga falta".
Tal como Garner destaca, emprende un viaje a través del cual cosecha recompensas que jamás esperaba. "Todos los aspectos de la misión de Scott como competir en un deporte y ser parte de algo que lo trasciende hacen que su vida se centre. Scott a lo largo de los años había perdido la motivación y se había convertido en un ser apático, pero competir y utilizar el dinero para salvar el programa de música le da una energía nueva y el empuje necesario".
"Scott Voss tiene un largo, duro y en ocasiones cómico viaje desde la clase al octágono", afirma Coraci. "Comienza con su entrenamiento y cae destruido; en su
primera pelea es noqueado en cuestión de segundos; pero nada de eso lo detiene. Esta es una historia de amor, trabajo duro y perseverancia. Es una progresión que va paso a paso y al final de la película, cuando Scott obtiene el Campeonato de Lucha Extrema (UFC), resulta creíble e inspirador que un tipo tan normal llegue hasta ahí".
Solo quedaba una pregunta por responder: ¿sería capaz Kevin James de interpretar y convencer como luchador de MMA? "La razón por la que quería hacer esta película es porque me encanta ese deporte", confiesa James. "Me encantan los atletas; creo que es genial que luchen entre sí y que cuando la cosa termina se puedan abrazar, ser colegas y tomarse unas cervezas. Y creo que se nos ocurrió una historia que va muy bien con esa situación, una que muestra cómo un tipo normal puede encajar en ese mundo. Todo eso me inspiró a ponerme en forma para generar una situación en la que fuera mucho más creíble que en realidad pudiera lograrlo. Vale, tal vez no creíble del todo: siempre quisimos hacer una película sobre un hombre corriente que se ve en una situación extrema. Tenía que llegar hasta el punto de poder luchar en el octágono y a la vez vivir una vida normal y disfrutar de una tarta de queso".
"Kevin es el tipo perfecto para transmitir todo eso", asegura Garner, que vuelve trabajar por tercera vez en una película con James. "No solo es un gran comediante, sino que además es un asombroso comediante físico. Como deporte, el MMA es muy técnico y preciso; no tiene nada que ver con la fuerza bruta. Kevin se ha entrenado durante mucho tiempo, por sí mismo porque lo disfruta y para la película, y tiene verdadero talento. Pasó 14 meses entrenando, perdiendo peso y comiendo sano. Siempre ha sido atlético y practicó la lucha libre en el instituto por lo que tiene disciplina. Fue un régimen de entrenamiento bastante duro".
"Kevin y yo nos criamos en Long Island y competimos en lucha libre con nuestros colegios. La misma dedicación obsesiva a la que nos sometimos en su día para perder peso y entrenar día y noche, es la que Kevin ha aportado a este papel. Por suerte, como estoy detrás de la cámara me ahorré la fase de bajar de peso", agrega Coraci.
Elegir el reparto de la película
Kevin James, por supuesto, es el personaje central de Peso pesado. "Scott Voss es un tío que ha perdido el entusiasmo por la enseñanza", explica el actor. "Hace las cosas de forma mecánica y así pasa la vida. A través de una serie de situaciones, se da cuenta de que necesita mejorar. Todos tratamos de ser un poco mejores".
Las cosas cambian para Scott cuando se siente impresionado por una persona que sí siente pasión y tiene empuje. "Esa persona es Marty Streb, el profesor de música, interpretado por Henry Winkler", explica. "El ver cómo es y lo mucho que se entrega a la enseñanza hace de catalizador".
Los realizadores rodearon a James de un grupo de actores muy cómicos y que además podían dar calidez y corazón a la historia.
Salma Hayek se une al reparto como Bella, la enfermera del colegio. "Bella es la enfermera que está en el instituto cuando se recibe la noticia de que se va a eliminar uno de sus programas más importantes: el programa de música", cuenta la actriz. "Todos se unen gracias al liderazgo de Scott; y ella se convierte en la enfermera que se ocupa de curarlo después de cada pelea".
"El personaje de Kevin ha intentado conseguir una cita con Bella durante años, pero ella es completamente inalcanzable", relata Garner.
"Él no le interesa a ella en absoluto porque cree que es vago y desapasionado", explica Hayek. "Y entonces, a medida que cambia logra sorprenderla".
"Salma es inteligente y divertida, y por supuesto Kevin la conoce de cuando trabajaron juntos en Niños grandes (Grown Ups). Ella agrega mucha sustancia y energía a la película: cuando la ves en las peleas, coreando el nombre del personaje de Kevin, transmite pasión", continúa Garner.
"Cuando Salma aparece en la pantalla no hay ni un instante de aburrimiento. En una de las escenas, le da algunos consejos de lucha a Scott que se convierte en uno de los momentos más divertidos "de pelea" de la película, que dejó el decorado hecho trizas, con lámparas rotas y todo", recuerda entre risas Coraci. "Bella es inteligente, graciosa y fuerte: es el contrapunto perfecto para retar a Scott, el personaje de Kevin".
Hayek disfrutó mucho de su experiencia en la película, no solo por la oportunidad de volver a formar equipo con James, sino también porque aprendió un par de movimientos de Bas Rutten. "Nunca he sido demasiado atlética, tengo bastante coordinación y tengo algún gen que ayuda, pero nunca hice demasiado ejercicio. Entonces cumplí los 40 y a partir de ahora hago lo que sea. Bas fue muy cálido y no reparó en elogios de aliento. Siento una gran admiración por las artes marciales, y la disciplina que requieren. También tienen mucho arte".
Para interpretar a Marty Streb, los realizadores llamaron a un viejo amigo. "En la película, Scott no pelea por sí mismo: lo hace por los chicos, por el colegio y por el profesor de música", explica Coraci. "Supimos que si ese era el caso, necesitábamos encontrar a alguien de quien el público pudiera enamorarse desde el primer instante. Henry Winkler es esa persona. Sabe interpretar comedia como nadie, le aporta tanto corazón a su personaje que cada día nos sorprendía con su gracia natural. Esta es mi tercera película con Henry, y en cada ocasión lo ha entregado todo".
Para interpretar al profesor de música de instituto, Winkler tuvo la oportunidad de poner sus habilidades a prueba. "De hecho pude dirigir a la orquesta del Quincy High School de Massachusetts, donde rodamos la mayor parte del filme", cuenta el actor. "Los chicos estaban muy metidos en la escena. Me encanta la música y tener la posibilidad de dirigir una maravillosa pieza escrita especialmente para la película, con cerca de 60 jóvenes tocando fue un lujo. En la escena, los jóvenes tenían que tocar instrumentos flamantes se trata de la secuencia final cuando Scott ya ha recaudado todo el dinero que necesitaba el programa y después del rodaje, nuestro productor, Todd Garner, anunció que la productora donaría todos los instrumentos nuevos al instituto. Fue un gran momento".
Winkler ya conocía a James por haber coincidido con él varias veces desde hacía años, la primera vez que se vieron fue en el rodaje de la película Click de Adam Sandler, y luego volvieron a verse por la ciudad. Un par de años después, James y Winkler compartieron la tarea de hablar sobre Sandler en la ceremonia de entrega de la estrella del paseo de la fama de Hollywood a Sandler. Esa misma tarde, cuenta Winkler, recibió una llamada. "Hola, soy Kevin. ¿Te gustaría estar en mi película? Y el resultado fue que tenemos una maravillosa conexión. Trabajar con Kevin es como deslizarse sobre un lago, cristal puro, el agua es un espejo".
Peso pesado contó además con dos entrenadores especialistas en la vida real en MMA. Amigo personal y entrenador de James desde hace tiempo, Bas Rutten, que asume el papel de Niko, se convierte en amigo de Scott y el único que puede entrenar a un profesor de biología y transformarlo en un luchador de MMA. El personaje fue escrito especialmente para Rutten. "Si tratas de escribir ese personaje y elegir a alguien sin conocer al actor, sería una tarea imposible. Bas es la única persona que podría haberlo hecho", explica Garner. "Es increíble lo gracioso que es, además tiene mucho carisma. Y por añadidura, es un legendario luchador, por lo que las escenas en las que aparece son absolutamente realistas".
"Niko es un personaje complicado", cuenta Rutten. "Es un tío amable que se ha perdido lo mejor porque se le fue un poco la cabeza: se pasó de rosca y terminó lesionado. Aun así, sigue siendo el tipo de tío que ve siempre el vaso medio lleno en lugar de medio vacío, y trata de poner una nota positiva en todo lo que la vida le presenta".
Rutten conoce a James desde hace mucho tiempo. "Llegué a Estados Unidos hace 15 años, y en menos de tres meses su agente se puso en contacto conmigo para preguntarme si podía entrenarlo", cuenta Rutten. "A él siempre le han encantado las artes marciales mixtas y es un gran seguidor de la UFC y de Pancrase, que fue una organización por la que solía pelear. Fui a su apartamento que en esa época era un piso de dos dormitorios que compartía con su hermano. Las cosas ahora son diferentes, pero él sigue siendo el mismo".
Rutten cuenta que su amigo James puede haberse inspirado en algunos eventos de su propia vida para Niko. "Niko es holandés como yo que fue luchador como yo y que está estudiando para convertirse en ciudadano, cosa que hice un año antes de rodar la película. Fue guay leer el guión y ver todas esas similitudes".
Rutten luchó durante seis años, desde 1993 a 2000, y cuando las lesiones le pasaron factura tuvo que retirarse. Seis años después, pudo recuperarse de sus muchas lesiones tendinitis, falta de cartílago en sus rodillas, una costilla salida, ingle distendida y regresó para una sola y última pelea, que ganó
con Kevin James en su rincón del ring. "Le voceaba instrucciones: ¡Patea pierna! ¡Patea pierna!" recuerda James. "En el medio de la lucha, Bas tuvo que detenerse y elevar su brazo: Ya lo tengo. Y pensaba: Oh, sí que sabe lo que hace. No solo eso, sino que le estoy diciendo a mi contrincante exactamente lo que quiero que haga, lo que probablemente no sea muy efectivo. Pero fue divertido y Bas ganó de todas formas".
En la película, a Scott también lo entrena Mark DellaGrotte, que se interpreta a sí mismo. DellaGrotte es un ex luchador de kick boxing Muay Thai y ahora es propietario y operador de la Academia Sityodtong Muay Thai, donde, como entrenador de MMA, ha ayudado a conducir la carrera de varios luchadores. "Me han dado el papel de Mark DellaGrotte porque pensaron que era poco probable que lo arruinara", confiesa el actor primerizo. "Querían que hiciera de mí mismo, que actuara como yo mismo y que hablara como si fuera el entrenador de Kevin. Me lo pusieron muy pero que muy fácil".
A DellaGrotte le picó muy fuerte el bichito de la interpretación. "He entrenado luchadores por mucho tiempo, y como en todo en la vida se va perdiendo un poco la pasión y te quedas un poco estancado, por eso es importante buscar cosas que te revitalicen", continúa DellaGrotte. "Estaba deseando hacer algo diferente, y se presentó esta oportunidad. Me dio la seguridad suficiente para creer que si realmente quisiera empezar una carrera en la interpretación, podría hacerlo".
"Tuvimos mucha suerte de contar con Bas Rutten y Mark DellaGrotte en nuestra película", asegura Coraci. "Estos tíos han vivido la vida del MMA y lograron llegar a la cima. Son ejemplos perfectos de lo que realmente es el MMA. Y además, está el plus añadido de saber que tienes a algunos de los luchadores más duros del planeta cuidándote las espaldas".
También se unió al reparto Charice, una estrella de la música en ascenso que interpreta a Malia, una estudiante de instituto a la que le afectaría especialmente si se cancelara el programa de música del colegio. Charice es un éxito online y sus videos y canciones tienen millones de visitas en todo el mundo.
"Cuando Charice llegó a la prueba, le dimos una canción para cantar que jamás había escuchado antes", relata Coraci. "Primera vez que escucha la canción y Charice la canta a capela. Estuvo perfecta. Entre la canción que interpretó y la prueba que realizó, no quedó ni un ojo seco en toda la sala".
Charice cuenta: "Estaba preparada para cantar otra canción durante la prueba, pero escuché la nueva canción, pillé el estribillo y la canté. Recuerdo que pensé que lo había hecho mal cuando me marché, tal vez porque quería el papel con toda mi alma. Pero supongo que lo hice bien, porque me llamaron esa misma tarde y me dijeron que ¡había conseguido el papel!"
Acerca de la dirección artística
El filme vuelve a reunir por quinta vez a Coraci con el diseñador artístico Perry Andelin Blake. "Las películas que hemos hecho anteriormente con Perry tenían un diseño y un look muy estilizado", afirma Coraci. "Nos entusiasmó que esta película nos permitiera trabajar con una imagen más realista, más práctica".
"La idea que Frank tenía para este filme era que pareciera muy pero muy real. Como si las cosas fueran ocurriendo a la vez que vemos cómo se desenvuelve la historia. Mucho más parecido a un documental que nuestras películas anteriores, con cámara en mano y localizaciones reales", explica Blake.
"Cuando Scott trata de lograr ser un luchador, tiene que empezar en el nivel más bajo del MMA", cuenta Coraci. "Descubrimos que esos tíos están dispuestos prácticamente a luchar en cualquier sitio que encuentren un público, así que lo incorporamos a la historia. Scott pelea en una feria comarcal donde el ring se cae a pedazos; en la recepción de una boda; en un viejo astillero; lo mezclamos todos. Y eso es parte de la gracia de la película". Por supuesto, todas esas localizaciones había que buscarlas y diseñarlas, y todo eso cayó en el campo de acción de Blake.
"Fuimos a un sitio, llamado Lombardo, donde habitualmente se festejan los bailes de final de promoción y recepciones de bodas, y que a veces tienen peleas de MMA", explica Blake. "Fue genial ver luchadores que empiezan a ese nivel. La gente estaba muy animada; cada uno de los luchadores estaba allí con toda su pandilla, y a un lado y a otro su familia y seguidores llevaban camisetas con el nombre de la escuela de lucha o el del mismo luchador, y cuando empezaron la gente se volvió loca. Todo el lugar estaba en pie y saltando". Blake ansiaba recrear esa atmósfera en sus decorados.
Cuando se encontraba buscando una fábrica abandonada que sería el sitio donde Scott mantendría su primera lucha, dio la casualidad de que también encontró el lugar para su segunda pelea: el encuentro de tropezones y caídas bajo la lluvia. "Era estupendo, un lugar de trabajo portuario en las inmediaciones de la fábrica", relata. "Simplemente cogimos el área, colocamos el ring y agregamos tribunas. Teníamos una vieja grúa y diferentes piezas de maquinaria que utilizamos para que la gente se pudiera sentar, y botamos un inmenso remolcador en el agua para que transmitiera la sensación de que la acción se desarrollaba en los muelles del Boston nocturno".
Claro que para la lucha final, Scott está en la UFC, por lo que Blake tuvo que realizar una gran localización. "Obviamente, no pudimos rodar en la Grand Arena del MGM durante dos semanas, pero Frank tenía en mente cómo podríamos hacer para que funcionase", continúa Blake.
"Teníamos que dar la sensación de que estábamos en un evento de la UFC. No existe ninguna experiencia similar del deporte en todo el mundo", asegura Coraci. "Era extremadamente importante que el público sintiera la escala del estadio y la energía y la emoción de los luchadores entrando al ring".
"Teníamos tomas que había que rodar en Las Vegas: los ríos de gente, los edificios, los grandes letreros luminosos. Pero teníamos otros planos que rodamos en el Prudential Center de Nueva Jersey: gente en los corredores y planos abiertos del estadio. Y para la lucha en sí misma, rodamos en el Tsongas Center de Lowell, Massachusetts, que es un estadio más pequeño de hockey afiliado al instituto de allí", agrega Blake. "Frank tenía la idea de rodar un evento real y luego utilizar los efectos visuales para unirlo a la lucha de Kevin en el ring de Lowell".
"En la lucha final de la UFC de Kevin contra Krzysztof, para que reflejara la energía en carne viva, me aseguré de rodarlo como si estuvieran rodeados de miles de fans del MMA gritando desaforados", explica Coraci, "Trabajé en estrecha colaboración con mi supervisor de efectos visuales, Peter Travers, para rodar planos del evento en directo de la UFC un mes antes y lo mezclamos con nuestro rodaje de la lucha de Kevin en un ring en Boston para crear la ilusión de lo que es en realidad la experiencia apabullante de más de 20.000 personas de la UFC".
Hubo otra localización clave en la película: el instituto que es el corazón de la película. Después de todo, la única razón por la que Scott se embarca en esta cruzada es su objetivo de recaudar dinero para el colegio. Estaba en manos de Blake crear la localización que requería la ayuda del personaje. "Queríamos encontrar un instituto que fuera completamente verdadero, pero que también se viera un poco desahuciado", describe Coraci. "Encontramos el ex campus del instituto de Quincy, que acababa de cerrar y que era perfecto porque podíamos ponerle todos los toques que necesitábamos. Fue muy divertido hacer algo diferente; en general construimos nuestros decorados, pero en este caso solo necesitamos encontrarlo y utilizarlo".
El viejo instituto también encajó a la perfección con la idea visual de Coraci para la película. "Al principio de la película, es invierno, y la localización es bastante descarnada. La fotografía y el diseño artístico lo reflejó utilizando colores más apagados y fríos. Pero a medida que Scott se inspira, llega la primavera por lo tanto la película se vuelve más colorida. Al final del filme, nos hallamos en el lugar más vibrante del planeta: Las Vegas. Es un viaje visual".
Si bien Blake buscaba mantener la mayor parte del instituto tal y como era, había una localización clave que requería su diseño: la sala de música. "Es uno de los elementos más importantes, porque lo que el personaje de Kevin está tratando de conseguir es salvar al departamento de música", se explaya Blake. "Así que cogimos el auditorio del instituto y allí construimos nuestra sala de música. La premisa que me dio Frank era que quería que transmitiera la sensación de ser un viejo guante de béisbol, y lo pillé de inmediato. Está desgastado, pero tiene carácter. Es cercano, es personal. Así que construimos un espacio con mucha personalidad; pusimos muchos muebles de madera y capas y capas de historia, como si por allí hubieran pasado 20 generaciones de jóvenes. Y la constante en ese espacio era el personaje de Henry Winkler: en alguna medida, ese es su hogar. Allí se siente cómodo".
Al final de la película, el departamento de música se transforma gracias al esfuerzo de Scott. "Lo volvimos a hacer, pero quisimos mantener su sensación de calidez y singularidad. Cubrimos los viejos azulejos acústicos de las paredes con paneles rojos oscuros; obtuvimos color y calidez sin que se viera demasiado elegante. Cambiamos el mobiliario y compramos instrumentos nuevos para los chicos. Pero nos quedamos con el escritorio del personaje de Henry Winkler tal y como era; para él lo importante son sus estudiantes, no se gastaría el dinero en comprarse un nuevo escritorio o arreglando sus propias cosas", describe Blake.
Acerca del entrenamiento
Para entrenar para este papel, James trabajó con algunos entrenadores del verdadero MMA que le enseñaron las diferentes disciplinas que necesitaría mostrar en la pantalla. "Ryan Parsons, el consultor de lucha de la película, organizó todo mi entrenamiento", explica el actor. "Trabajamos con tipos como Danny Perez, que es un boxeador profesional; Mel Menor, un kick bóxer Thai; y Jason Lambert, que también fue mi doble en la película. Todos bajo la dirección de Garrett Warren -nuestro coordinador de escenas de dobles y director de la segunda unidad- para planificar y esbozar todas las escenas de lucha".
"Tratamos de prepararnos para la película como si se tratara de un campamento de lucha", afirma Parsons. "Kevin se entrenó con campeones mundiales de boxeo y kick boxing. Y digo un duro entrenamiento: tuvo la experiencia verdadera. Se lanzó a ello y lo tomó como si realmente tuviera que meterse a luchar en el ring".
En el camino, James cuenta que aprendió algunas pequeñas cosas que marcaron la diferencia. "Danny Perez me enseñó mucho de movimientos de cabeza", asegura. "Mel Menor me ayudó con mis movimientos. Y Mark DellaGrotte obtuvo el papel como mi entrenador en la película después de trabajar mis golpes con él; creo de verdad que nadie podría haber hecho un mejor trabajo en ese papel y quería que fuera él quien me respaldara porque con él lo hacía mucho mejor que con ningún otro".
Tal vez el momento que más le llenó de orgullo durante el entrenamiento fue cuando noqueó al entrenador Mel Menor. "Estábamos entrenado en un salón de bodas; estábamos en camino y ese fue el único sitio que encontramos y que podía servir", recuerda James. "Estábamos mezclando estilos y cuando fui a por su cadera accidentalmente lancé todo el peso de mi cuerpo sobre Mel. Él es un poco más pequeño que yo, y lo dejé fuera de combate por un segundo. Fue un accidente, pero lo tomo como un nocaut".
Acerca de las peleas
Desde el principio, afirma el coordinador de escenas de dobles Garrett Warren, James y Coraci tenían muy clara la idea de cómo querían que se desarrollasen las secuencias de lucha. "Kevin y Frank fueron muy claros: querían escenas de lucha que fuesen cómicas pero también realistas", explica. "Sabían exactamente cómo querían que fuera cada una de ellas, si más grandes o más pequeñas, el grado de comicidad o de realismo. Kevin tuvo un papel muy activo en la coreografía, la verdad es que nos ha hecho quedar muy bien a todos".
Y en cuanto a las luchas en cámara, Garner asegura: "Kevin era un firme defensor de que las escenas de lucha se viesen todo lo real que pudieran hacerse. Quería que el público se sintiera como si estuviera dentro de la pelea".
"La parte más importante de nuestro enfoque era: ¿Cómo es estar dentro del ring?" asegura Coraci. "Todo el mundo lo ha visto en la televisión, y allí se utilizan ciertos objetivos y ángulos de cámara. Y yo quería que nuestro público se sintiese como si realmente pudiera entrar dentro del octágono. A Garrett esta idea le apasionaba tanto como a mí. Atamos las cámaras a los cuerpos de los luchadores para obtener ángulos de los forcejeos. En ocasiones era gracioso, pero los golpes son grandes golpes. Kevin trabajó muy pero muy duro porque una gran parte de sus peleas las hizo el mismo, y la verdad es que obtuvimos nuestra recompensa. El MMA de esta película no se parece a ninguna otra que se haya hecho. Es verdaderamente increíble y divertido".
Para logra que las peleas se vieran verdaderas, el coordinador de escenas de dobles Garrett Warren se valió de expertos. "Una de las cosas más inteligentes que hicimos fue contar con la ayuda de verdaderos luchadores de MMA", confiesa. "Lo enfocamos todo como si fuera real. Vimos al personaje de Kevin como lo que era, un exluchador de instituto, si estuviera en una pelea de verdad, lanzaría el puño, lo dejaría en el suelo y no cejaría hasta lograr la victoria. Esto ocurría en cada pelea, constantemente nos preguntábamos que haría su personaje, cuáles eran sus puntos fuertes, y avanzábamos a partir de esas premisas. Fue genial trabajar con Kevin y Frank, porque para cada uno de los enfrentamientos, sabían exactamente lo que querían: si querían una gran pelea o no, o lo graciosa que querían que resultara".
Otra forma que tuvieron los realizadores de lograr que se mantuviera dentro de los límites de lo real fue preguntarse cuál sería el resultado más probable de cada pelea. Un buen ejemplo es su primera pelea: "La pensamos como una pelea alucinante, solo para tener a Scott con una rodilla en la cara y ponerlo fuera de combate en un solo movimiento", elabora Warren. "Scott cae al suelo como si fuera un saco de patatas. Lo gracioso fue que cuando estábamos ensayando tuvimos que inventarnos tres o cuatro formas diferentes en las que una persona puede recibir un rodillazo en la cara y caer al suelo. Se nos ocurrió una caída hacia adelante, hacia atrás, al costado, y cómo rodarla desde arriba y desde los lados. Después de todo eso, soy uno de los mayores expertos mundiales en ser golpeado en la cara con la rodilla y caer desplomado al suelo".
El personaje de James tiene ocho peleas en la película. En cada una de ellas, el actor se enfrenta a un luchador de MMA verdadero.
En todas las peleas, Warren tenía el doble objetivo de hacer que la lucha se viera real y al mismo tiempo transmitir la sensación de que el profesor de instituto iba encontrando su camino en la lucha; pero la apuesta inicial fue superada con la pelea de la UFC como si fueran luchadores que estuvieran en lo más alto. "Pusimos pequeñas cámaras en la cabeza, estómago y pecho de Kevin para que el público estuviera en el medio de la pelea", revela Warren.
De todas formas, la creación de las peleas no fue necesariamente para que fueran reales sino para que parecieran reales; una pelea que se percibiera como verdadera aunque no fuera la forma en que los verdaderos luchadores lo hacen. "Una de las cosas más importantes no era darle al tío", continúa. "Cuando estás en una pelea de verdad y te dan un golpe, tensas el cuello y apoyas la cabeza en el golpe. Pero teníamos que crear la ilusión: teníamos que inclinar las cabezas a un lado y reaccionar a los golpes, enviando el mensaje al público de que el personaje ha sido herido. Entre golpes, es cuando buscamos tener el movimiento más real posible, una verdadera coreografía en el ring".
Acerca del MMA y el UFC
Las artes marciales mixtas es uno de los deportes de crecimiento más rápido en el mundo, y si se le pregunta a Coraci, opina que existe una muy buena razón. "Cuando se asiste a una pelea, todo el mundo que está allí se involucra", expone el director. "Es como un coliseo romano de la era moderna: con humo, luches y estridente música de rock. La experiencia no tiene paralelo con ningún otro evento deportivo. Esto es lo que quería reflejar en esta película".
La mayor organización de MMA en Estados Unidos es la Ultimate Fighting Championship (UFC), y en la película, el personaje de James tiene una oportunidad en una de las grandes peleas de la UFC. "Ser capaces de involucrar a la UFC fue un gran paso para nosotros", asegura James. "Tuvimos la posibilidad de llenar el filme de verdaderas personalidades de la UFC. Tenemos a Stitch Duran, el cutman más grande del planeta. Y por supuesto tenemos a Joe Rogan y Mike Goldberg, los comentaristas de lucha de la UFC. También a Herb Dean, el gran árbitro. Y a Bruce Buffer, la voz del octágono. Contar con todos elementos tan genuinos hacen que se parezca muchísimo al evento verdadero".
"No queríamos que fueran solo unos carteles y el octágono", explica Garner. "Al tener a toda esa gente en el proyecto, y utilizar a verdaderos luchadores, le agregamos peso a la historia de Scott; y ayuda a creer que eso, tal vez, ¿por qué no? podría ocurrirle a un profesor de biología de instituto. Incluso rodamos en un verdadero evento de la UFC y utilizamos efectos visuales para poner a nuestro octágono dentro de la acción. Cuando todos estos elementos se combinan, crean la ilusión de que eso está sucediendo realmente y se tiene la sensación de cómo sería estar de cuerpo presente en la UFC".
"Fue vital contar con la participación de la UFC para que la competición cobrara vida en todo su esplendor", opina Coraci. "No importa si se es un fan o no de la MMA, lo será después de ver esta película".