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  Cuerpos especiales  (The Heat)
  Dirigida por Paul Feig
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A través de los ojos de Paul Feig, ganador del Premio del Sindicato de Directores (DGA) y candidato al Emmy®, director de La Boda de mi Mejor Amiga (ingresos mundiales brutos en taquilla: casi 300 millones de dólares), CUERPOS ESPECIALES examina la extraña pareja que forman dos agentes de la ley, que, para su eterna sorpresa, descubren lentamente que están en la misma onda. Protagonizada por la ganadora del Oscar® Sandra Bullock, cuyas películas han alcanzado una recaudación bruta en taquilla de 2.900 millones de dólares en todo el mundo, y por la candidata al Premio de la Academia® Melissa McCarthy, que ha intervenido consecutivamente en dos comedias de enorme éxito –La Boda de mi Mejor Amiga y Por la Cara– en otros tantos años, CUERPOS ESPECIALES tiene golpes cómicos muy subidos de tono y experiencias verdaderamente conmovedoras.


Me he pasado los últimos 30 minutos pensando en formas de mandarte al otro barrio
Cuando la conocemos, Sarah Ashburn está esperando un ascenso y sale a toda velocidad desde su centro de operaciones de Nueva York camino de Boston, para ayudar a resolver el misterio que se oculta detrás de varios asesinatos. Interponiéndose en el camino de Ashburn se encuentra una implacable agente de la policía de Boston, Shannon Mullins, a la que no le hace ninguna gracia que el FBI –en especial la estirada Ashburn– se meta en su territorio. Ashburn está decidida a arrebatarle el caso a Mullins, pero la desmelenada, malhablada y agresiva agente resulta ser una formidable adversaria. Pronto descubrirán que tienen más cosas en común de las que jamás se les ocurrió que pudieran compartir, incluidos su condición de inadaptadas y sus respectivos conjuntos de habilidades complementarias.

La dinámica Ashburn-Mullins es semejante al eterno problema de física en el que una fuerza irresistible tropieza con un objeto inamovible. Sólo que, en este caso, es difícil decir cuál es cuál. Ashburn es ambiciosa, tiene talento, es inteligente y posee unos poderes de deducción e intuición dignos de Sherlock Holmes. Siempre es la más lista del grupo y no se priva de decírselo a todo el mundo. Ashburn, una auténtica patosa en sociedad, no tiene familia ni media naranja ni siquiera amigos. Su único compañero es un gato… que pertenece a su vecino.

"La eficacia de Ashburn como agente del FBI es resultado de su meticulosidad, su tozudez y su esmero", explica Bullock. "Pero a la hora de establecer cualquier interrelación social, es una completa inepta. Se esfuerza tanto en compensar esa debilidad específica que se convierte en insufriblemente arrogante en su trabajo. A Ashburn la respetan pero no la aprecian porque no trabaja en equipo. Cada vez que abre la boca, la gente siente vergüenza ajena".

Si Ashburn necesita que le bajen los humos, Mullins está encantada de hacerle ese favor.

Mullins, dice Melissa McCarthy, es "de las que ladran a rabiar pero no muerden, aunque, a decir verdad, bien podría soltar un mordisco". Mullins se crió en las calles de Boston y es de las que disparan (y hablan) sin apuntar cuando se enfrenta con el delito y los delincuentes. Si Ashburn es el "yin", ella es su "yang".

A Ashburn le gusta meterse en el cerebro de la gente; Mullins prefiere aporrearlo.

No resulta sorprendente, observa el director Paul Feig, que la dinámica entre Ashburn y Mullins sea, al principio, antagónica, porque "Ashburn quiere demostrar su valía resolviendo un caso importante, pero Mullins no quiere a Ashburn en su terreno. Y Mullins no es de las que se vuelven atrás. A decir verdad, está acostumbrada a que la gente retroceda ante ella".

De modo que Ashburn no tiene otra que aguantar a Mullins, pero la agente especial del FBI acaba dándose cuenta de que su nueva compañera –curtida en la calle– puede suponer una ventaja en la persecución de su presa criminal. "Aprendiendo de Mullins cómo ser más instintiva, cómo actuar al momento y ser menos cerebral, Ashburn sale de su cascarón, amplía su forma de pensar y se convierte en una agente mejor", dice Feig.

Al mismo tiempo, Mullins aprende de Ashburn cómo ejercer un poco de autocontrol y respirar hondo antes de darle una somanta a alguien.

Luego, sucede algo completamente inesperado. "Bromeamos con ello pero CUERPOS ESPECIALES es una especie de historia de amor", asegura McCarthy. "Mullins y Ashburn luchan la una contra la otra, lo superan y, a continuación, comienzan a disfrutar de verdad trabajando juntas. Eso aporta a la película su pizca de alma. Nadie quiere ver a dos bobaliconas hacer mal las cosas. Pero Ashburn y Mullins, juntas, son más que la suma de sus habilidades particulares, así que acabamos deseando que tengan éxito".

Su floreciente amistad nace en parte de su condición de inadaptadas, pero Feig observa que, principalmente, es el resultado de que las dos son realmente buenas en su trabajo. "Me encanta trabajar con esta clase de personajes, mujeres fuertes que tratan de hallar su lugar en el mundo. Se establecen lazos entre Ashburn y Mullins porque ambas sobresalen en su trabajo, las dos han renunciado a mucho por sus carreras y nunca transigirán".

Por divertidos y estrafalarios que resulten personajes y situaciones, Feig insistió en que transmitieran autenticidad. "Si alguien va a ser un agente de policía de barrio o un brillante agente del FBI que se hace cargo de las misiones más difíciles, acabará teniendo muy malas pulgas. Puede que tenga debilidades y temores, pero en el fondo tiene que tener algo especial para sentirse atraído por este trabajo. Mullins y Ashburn tienen esa cualidad".

"Mullins y Ashburn son enormemente distintas pero lo que las une es que se toman su trabajo muy en serio", reconoce McCarthy. "Sus personalidades podrían haber retardado el progreso de sus carreras, pero sus habilidades hablan por sí mismas. Su respeto mutuo evoluciona hasta transformarse en amistad".


Poniendo a punto los cuerpos especiales
CUERPOS ESPECIALES es el primer guión cinematográfico de Katie Dippold que llega a ser producido. La autora ha escrito para televisión programas como Parks and Recreation y MadTV. La película nació de la afición de Dippold por las películas sobre policías que son amigos. Tiene muchas favoritas pero destaca entre ellas la película cómica y de acción de 1986, Apunta, Dispara...y Corre, interpretada por Billy Crystal y Gregory Hines en los papeles de unos ingeniosos policías callejeros de Chicago. "Siempre he disfrutado con esa clase de películas", dice Dippold, que recientemente firmó un contrato para escribir una comedia para el director Paul Feig. "Siempre parecía que personajes y actores se estaban divirtiendo de lo lindo".

La afición de Dippold por las películas sobre amistad entre policías fue el cimiento de un guión que acabó transcendiendo el género con un humor y una emoción extravagantes. Feig se sintió inspirado por el guión al que definió como "uno de los más divertidos que jamás haya leído".

"Pone al género cabeza abajo añadiéndole unas pechugas", bromea Bullock. "La gente va a sorprenderse de lo que las mujeres pechugonas son capaces de hacer".

Cuando el realizador dijo a Dippold que CUERPOS ESPECIALES iba a ser su próxima película, la neófita guionista quedó desconcertada. "Pensé que me estaban gastando una broma", reconoce Dippold. "Recibí un correo electrónico en el que me decían que Paul quería almorzar conmigo. Después de leer el mensaje, me quedé helada durante varios minutos. Luego, pensé que era una broma".

"¡Bueno! Así es Katie", explica la productora Jenno Topping. "Extraordinariamente humilde y auténtica".

Con el primer borrador de Dippold en la mano, Feig se movió tan rápido como le fue posible para confeccionar el reparto de la película, tarea facilitada por haber imaginado su "equipo de ensueño" en el guión. "Siempre he sido admirador de Sandra Bullock, y a medida que iba leyendo el guión, sentía que, sin duda, Ashburn es Sandra. Ashburn daba la sensación de ser ella. Sandra es divertidísima en las películas y en la vida real. Tiene confianza en sí misma y serenidad, pero también enfoca todo de un modo analítico que llega al extremo de resultar cómico, y que me encanta. Eso era lo que yo sentía sobre el personaje de Ashburn".

"Sandra aporta dulzura a lo que habría sido un personaje desagradable", añade Katie Dippold. "Transmite perfectamente la sensación de ser una alumna de ‘Matrícula de Honor’, y es muy graciosa". Y McCarthy apunta que "Sandra es fabulosa, divertida y extraña. Estamos muy en onda".

No hizo falta mucha persuasión para que Bullock se incorporase a CUERPOS ESPECIALES. Era una gran admiradora de La Boda de mi Mejor Amiga, y ansiaba trabajar con su director, Feig. "Ver La Boda de mi Mejor Amiga fue uno de esos raros momentos en los que pensé en mi interior que [Feig] era una persona con la que querría trabajar, porque una sabe que va a mejorarla, y que podía convertir CUERPOS ESPECIALES en algo memorable".

Para el papel de Mullins, Feig no tuvo que buscar más allá de Melissa McCarthy, la estrella revelación de La Boda de mi Mejor Amiga. "En La Boda de mi Mejor Amiga , Melissa se convirtió en mi heroína", dice. "De modo que, habiendo leído unas 15 páginas del guión de CUERPOS ESPECIALES, la idea de darle el papel se me vino de pronto a la mente. El guión, que ya era divertido, lo fue diez veces más cuando lo leí imaginando a Melissa en el papel de Mullins".

"Melissa se mete tan a fondo en un papel que conmociona", prosigue Feig. "Es difícil darse cuenta de que, dentro de ese personaje, está Melissa".

La química entre Bullock y McCarthy saltó a la vista desde la primera sesión de lectura. "Cuando leímos el guión [juntas] por primera vez, Melissa y yo poníamos las mismas caras al mismo tiempo", recuerda Bullock. "Nuestros ritmos son diferentes, pero trabajamos tan bien juntas que comenzaron a encajar. Establecimos muchas conexiones; es algo que nunca pensé que podría lograr a semejante nivel".

La fuerza de la dinámica Bullock-McCarthy, evidente incluso entonces, inspiró una puesta a punto adicional del guión. "Al final de esa primera lectura, era evidente que Sandy y Melissa realmente habitaban dentro de esos personajes, y que a Katie Dippold y a mí nos tocaba recoger toda esa magia e incorporarla al guión, y dejar que nuestras mujeres alzaran el vuelo", dice Feig.

Dippold permaneció con CUERPOS ESPECIALES durante la producción, aportando chistes nuevos y diferentes matices a los personajes. "Siempre permito improvisaciones", observa Feig, "pero siempre es necesario partir de un gran guión".

Para Dippold, el proceso fue liberador. "Sandy y Melissa cogieron el material de las páginas y lo convirtieron en algo más divertido de lo que jamás pensé que podría ser", afirma. Un momento especialmente preferido se produjo durante una filípica que le lanza Mullins a su capitán (interpretado por Tom Wilson), en la que le acusa de no tener lo que tienen los hombres, cuando rechaza su petición de expulsar a Ashburn del caso. "Melissa sacó realmente el máximo partido a una línea del guión -‘¿Habéis visto las pelotas del capitán?’– y la convirtió en algo espectacular".


Pasemos a lo físico (o… "¿Quiere jugarse el escroto y los huevos? ¡Adelante! ¡A jugar!")
"Me he pasado dos meses zurrando gente; es muy purificador", afirmó, bromeando, Melissa McCarthy durante la producción de CUERPOS ESPECIALES.

Un blanco favorito de Mullins es Rojas, un traficante y chulo de poca monta, interpretado por la sensación de YouTube, Spoken Reasons (alias John A Baker Jr.). Durante un primer encontronazo, Mullins lanza una sandía al granuja cuando éste huye. Tan singular derribo demuestra la decisión y la rapidez mental de Mullins, y el humor sin restricciones de la película. "Quiero decir que ¿quién le tiraría una sandía a alguien?" pregunta, sin salir de su asombro, Spoken Reasons.

Caer al suelo por el impacto de una sandía voladora no es más que el principio de los problemas de Rojas con Mullins y, al cabo, con Ashburn. Tratando de sacar información del desafortunado matón, Ashburn y Mullins ofrecen a Rojas algún incentivo para cooperar…balanceándole cabeza abajo desde un balcón. La interpretación del joven actor también recibió otro estímulo al estar colgado a una altura de tres pisos, con sólo un cable especial para evitar caerse.

Feig, por su parte, valoró que Spoken Reasons aceptara prescindir de la Creación Informática de Imágenes y de su pantalla verde. "Nunca antes había trabajado en una película, y me dejó impresionado su deseo de hacer que la escena transmitiera tanta autenticidad como fuera posible. Nunca había conocido a nadie que simplemente se pusiera delante de una cámara de cine por primera vez y tomara el mando de forma tan magistral".

Las palizas perpendiculares sólo son una parte de los números obligatorios cómico-físicos de la película, entre los que también destacan unos pasos de baile ejecutados por Ashburn y Mullins en un antro de Boston, en una escena en la que las dos policías estrechan relaciones tomándose unos tragos. "Sí. Coreografiamos la escena con todo cuidado… para los tres segundos y medio que dura", reconoce McCarthy. "Es imposible coreografiarla", añade Bullock, "porque tenía que parecer tan estúpida e improvisada como fuera posible".

El rasgo de improvisación alimentó la diversión y reforzó la relación dentro y fuera de la pantalla. "Melissa logra excelentes pasos", asegura Bullock. "Cuando la vi bailar, supe que íbamos a ser grandes amigas".

A lo que McCarthy añade: "Sí. Yo sé ejecutar los pasos pero no sé pararme, sea lo que sea lo que estén tocando".

Lista para la acción de cualquier clase, Mullins va de punta en blanco luciendo un aspecto hip-hop/Patti Smith, al que complementa perpetuamente un chaleco, funcional ("para meter cosas", dice Feig) y a la última a más no poder. Ashburn, la que siempre da más de lo que de ella se espera y jamás lleva desabrochado un botón, va enfundada en un traje de calle, debajo del que lleva algo que desconcierta del todo a Mullins: lencería Spanx. Cuando Ashburn le explica a Mullins, una prehistórica de la moda, la finalidad de de las prendas moldeadoras, su compañera, muda de asombro, exclama "Pero, ¿qué c**o es lo que se te puede salir?"


Todo queda en familia
La ceñidísima Ashburn no es el único dolor de cabeza de Mullins. También tiene que ocuparse de su descontrolada familia. Después de haber detenido a su propio hermano (interpretado por Michael Rapaport, miembro de un reparto estelar) por tráfico de drogas, Mullins es condenada al ostracismo por los demás miembros del clan, incluidos su madre, su padre, sus cuatro hermanos y, para que nada falte, las novias de sus hermanos. Feig explica que "Mullins detuvo a su hermano y lo metió en la cárcel para salvarlo, sometiéndole a una especie de rehabilitación forzosa. Pero el resto de su familia lo considera una traición imperdonable, y ella es la traidora. La familia está muy estrechamente unida, pero tienen una forma muy interesante de demostrarlo".

Con tan explosiva dinámica, podemos imaginarnos lo que sucede cuando Mullins invita a Ashburn al nefasto torbellino de una cena familiar con los Mullins (a base de pepitas de pollo [o "nuggies", que es como ellos llaman a semejante manjar], un guiso de judías verdes y una fuente de embutido). Las palabras "aniquilar" y "destripar" no valen ni para empezar a describir lo que Ashburn sufre incluso antes de sentarse. "Es un baño de sangre verbal", dice McCarthy. "Meterse en una habitación con la familia Mullins es como tropezarse con el demonio de Tasmania", asiente Bullock. "No hay más opción que aguantar los insultos. No hay nada que uno pueda decir; sólo puede reaccionar. Nunca puedes contestar porque te hacen tiras con toda naturalidad".

"Los actores que daban vida a la familia Mullins eran nada menos que una habitación llena de portentos", prosigue Bullock. "Con sólo dirigir la cámara hacia uno de ellos, ya teníamos una gran historia".

"Todos la tomamos con Ashburn", comenta el cómico Bill Burr, que encarna a Mark, un hermano de Mullins. "A decir verdad, forzamos los límites de lo que es una arremetida. Era una especie de loco concurso para ver quién era capaz de decirle a Sandy [Bullock] la mayor grosería a la cara".

Peter, otro hermano de Mullins, es interpretado por Joey McIntyre (famoso gracias a New Kids on the Block); mientras que del papel de otro hermano más joven, Nate, se encarga Nate Corddry. Jane Curtin, incondicional miembro del programa televisivo SNL, y Michael Tucci son los padres que presiden semejante locura, encargándose Jessica Chaffin y Jamie Denbo de dar vida a las novias.

La mayoría de los actores son de Boston, lo que reforzó el lado cómico y la autenticidad de la escena. "Los acentos y la actitud tienen algo", dice Feig. "Le dan a la reunión una especie de ‘salsa especial’".

La capacidad de los actores de meterse en estos personajes señala la "salsa especial" característica de la formación del reparto de Feig". "Para elegir a los actores, Paul combina el instinto y la memoria", dice Topping. "Está tan enamorado de la comedia que lo absorbe todo –películas, monólogos cómicos, televisión– para descubrir quién está haciendo cosas interesantes. Siente un hambre insaciable de nuevas voces cómicas".

Los estelares componentes del reparto se encargan de añadir diversión; por ejemplo, Demian Bichir en el papel del superior de Ashburn, el capitán Hale; y Marlon Wayans en el de Levy, un agente del FBI. Bichir, reciente candidato al Oscar por su papel secundario en Una Vida Mejor, y protagonista en la próxima serie dramática de FX, "The Bridge", disfrutó de sus escenas con Bullock. "Ashburn le vuelve loco a Hale", dice el actor, "pero creo que también la anima para que alcance el éxito".

El agente Levy, del FBI, encarnado por Marlon Wayans, abriga lo que él llama "una cosa" por Ashburn, "pero ésta es dura de pelar". Pero Wayans, cuya destacada carrera incluye Scary Movie, dice que si alguien está a la altura de la tarea, ése es Levy.

La misma ciudad de Boston también pasa a primer plano, y los exteriores utilizados en la producción, incluido el viejo edificio del Boston Herald, así como una comisaría de policía ya clausurada, "nos cuentan una historia sobre la ciudad", afirma el diseñador de producción Jefferson Sage. "Todos ellos eran edificios hermosos".