El director: Santi Amodeo
Santi Amodeo (Sevilla, 1969) es un realizador, guionista y músico que debutó en el cine formando pareja con el también director Alberto Rodríguez. Se dieron a conocer juntos con el corto "Bancos", tras el cual llegaría su también trabajo en común con el largometraje "El factor Pilgrim". Poco después deciden lanzarse en solitario con sus respectivas óperas primas y es cuando Santi Amodeo estrena "Astronautas" y "Cabeza de Perro", ambos filmes avalados por numerosos premios. Santi, que también es responsable de la música de sus películas, nos presenta ahora su tercer largo y primera comedia: ¿QUIÉN MATÓ A BAMBI?, una divertidísima y alocada comedia.
Notas del director
Desde el principio, mi idea con ¿Quién mató a Bambi? era hacer una película más cercana a las comedias americanas actuales que a la comedia Made in Spain. Se trataba de seguir los pasos del cine de Terror o el Thriller nacional que en los últimos años ha sabido evolucionar y crear sin complejos un cine que el público percibe como una opción a la altura de las producciones americanas.
En nuestro caso eso obligaba a un plus de espectacularidad, que nosotros hemos intentado usar para exprimir la comicidad de las situaciones. Es decir, lo importante no es que haya una persecución que acabe con un coche volando dentro de un estadio de fútbol, sino que esa persecución sea el punto climático de un plan que debía ser discreto y rápido, pero acaba así, de la forma menos discreta posible.
Lógicamente, en una comedia de este tipo hay diferencias culturales que salvar. Por ejemplo, es raro ver un arma en España y si alguien consigue una, posiblemente no sabría usarla. En cualquier caso siempre pensé que esas diferencias jugaban a favor. Si giramos la cabeza hacia algunos de los directores de comedia más aclamados últimamente, como Judd Apatow o Todd Philips, vemos que precisamente una de las constantes a lo largo de sus carreras es la creación de personajes convencionales, a menudo antihéroes, sometidos a problemas insólitos. En realidad esto responde a una de las bases de la dramaturgia clásica, especialmente de la comedia: "personajes ordinarios en situaciones extraordinarias".
Agarrados a esa línea hemos usado el contexto de la crisis económica, que empuja a dos amigos a intentar algo tan desesperado como un secuestro exprés. Por supuesto nunca lo han hecho y en otras circunstancias nunca lo harían. Saben cómo se hace... de oídas. Y así les va. Del otro lado de la trama, dos empleados corrientes que por una serie de extrañas circunstancias acaban con el Presidente de la empresa para la que trabajan, y suegro de uno de ellos, metido en el maletero de su coche, desmayado y en ropa interior. No es un tamagotchi moribundo, es una persona, o mejor dicho La Persona.
Para jugar a este juego ha sido muy importante el trabajo con los actores. Por mi parte les planteé, que a pesar de lo idiota de las situaciones estaría muy bien que nos lo tomáramos totalmente en serio, como si estuviéramos haciendo una obra de Gorki o Chejov, esforzándonos porque los personajes funcionaran de la forma más orgánica posible. Lo demás, todo lo demás, ha sido cosa suya y sus indudables talentos.
Bajo mi punto de vista, el resultado es un cóctel a medio camino entre un "Pez llamado Wanda" y "Resacón en las Vegas" (con tres cucharadas de "El Gran Lebowski"). Todo agitado y servido bien frío.
Lo que cuentan los protagonistas
Quim Gutiérrez
"Tener una novia rica y guapa pero saber que su padre te odia, intentar convencerlo pero acabar metiéndolo inconsciente en el maletero de tu coche con la ayuda de tu mejor amigo, estrellar ese coche, ir a parar a comisaría y salir de ella en manos de un ser extravagante que dice ser abogado pero que trafica con drogas. Todo ello es sólo parte de lo que ocurre cuando un personaje, con la mejor de las voluntades, no puede evitar tomar la peor opción ante todas las decisiones que se le presentan. Y ha sido nuestro el reto de tomarnos con gravedad realista la sucesión de eventos absurdos y disparatados que protagonizan David y Mudo, este matrimonio de amigos, que nos hemos tomado tan serio como hemos podido a fin de que sea el espectador el que se ría tanto como pueda con sus peripecias."
Ernesto Alterio
"Cuando pienso en el rodaje me vienen imágenes de peleas, revolcones por el pavimento, golpes de todo tipo, coches a toda velocidad, choques violentos, disparos, cristales estallados
Yo solo intentaba no hacerme daño ni hacérselo a mis compañeros, cosa que no conseguí del todo. Lo siento Julián.
Unos compañeros maravillosos, les cogí mucho cariño. Aprendí y disfruté mucho con cada uno de ellos.
Un equipo técnico fantástico, grandes personas y grandes profesionales. Y un delicioso savoir faire andaluz.
Fue un placer trabajar a las órdenes de Santi Amodeo, me encanta su espíritu. Siento que su mirada y su aporte hacen que la película tenga una atmósfera muy especial.
Sevilla estaba hermosa el invierno pasado y por un par de meses fui un vagabundo más."
Julián Villagrán
"Haber participado en ¿Quién mató a Bambi? ha sido una experiencia muy gratificante. Repetir con el equipo sevillano que tantos años llevamos juntos haciendo películas y ver cómo hemos evolucionado todos, desde los primeros cortos que hicimos, me hace sentir cierto orgullo. Hemos crecido juntos.
Siempre volver a Sevilla, ver a mis amigos y a mi familia, e ir haciendo lo que más me gusta, es otra manera de estar en la ciudad dónde me crié.
A Santi hace más de 20 años que lo conozco, hemos tocado en grupos, estudiado y dado nuestros primeros pasos en teatro juntos. Habernos conocido casi en la adolescencia y estar ahora haciendo películas -con esta ya van tres- es bonito. Además, se da la peculiaridad de que soy fan de su cine, así que no me puedo sentir más afortunado.
A Enrico y Joaquín, ya los conocía bien. Con el italiano ya he tenido mis andanzas cuando los dos vivíamos en Sevilla hace más de 15 años, y hemos seguido teniendo contacto en Madrid; y con el malagueño me une un delicioso sabor de boca por coincidir con él en Grupo 7, con nuestras sendas nominaciones y nuestros cabezones.
Mi gran descubrimiento han sido Quim y Ernesto. Ambos me parecen actorazos. Pero, aunque los conocía algo, no sabía que eran tan buenos tipos. Con Quim fuimos como una pareja de hecho durante todo el proceso, mi trama era entera con él, así que nos cuidamos y nos mimamos el uno al otro como lo harían dos abuelitos que llevan toda la vida juntos, ja, ja.
En fin, espero que el público reciba el amor y el buen rollo que hubo en ¿Quién mató a Bambi?, una comedia comercial dirigida por uno de los directores más indi de nuestro país, respaldada por Rodar y Rodar y distribuida por Sony, no se puede pedir más...bueno, sí, que el público la disfrute!"
Enrico Vecchi
"Lo más duro de todo ha sido meterse en la piel de un italiano, con ese acento tan raro que tienen... por suerte Ernesto tiene antepasados napolitanos, así que me echó un cable, sobre todo a la hora de pronunciar las "eses"... aunque luego los sevillanos se las comían todas. Las pizzas que salen en la pantalla las cociné yo personalmente: harina, agua, sal, tomate, mozzarella, albahaca, anchoas, un chorrito de aceite picante y voilá. Oh! Qué bien lo hemos pasado, qué lujo poder trabajar con tus amigos. Qué bonito es poder sacar el idiota que hay en ti. Pero ¿cómo me quito yo ahora este acento?"
Clara Lago
"El rodaje de "¿Quién mató a Bambi?", como cabe esperar, fue una experiencia fluida y MUY divertida. Contar con un director con sentido del humor me parece esencial sea cual sea el género que se esté trabajando; pero en comedia, con más razón. Y por suerte Santi entra en este saco. Es un hombre que sabe reírse de la vida y que conoce bien la comedia (como buen sevillano que es). Puso mucho amor y energía en el proyecto y esto supo transmitirlo a cada persona del equipo. Así pues, aunque suene a peloteo: mis felicitaciones al señor director.
Por otro lado, el elenco de actores no podía ser más acertado. Lástima que, al ser dos tramas separadas, sólo pude trabajar con una parte del reparto y no pude coincidir con el resto... con los que también me hubiera encantado trabajar.
Sin embargo, he de decir que no tengo NADA de lo que quejarme ya que mis dos compañeros principales de escena, Ernesto Alterio y Enrico Vecchi, son dos monstruos de la comedia que no sólo me provocaron infinitos ataques de risa, sino que además aprendí de ellos (o eso espero... hubiera sido un desperdicio por mi parte no hacerlo).
Creo que son un tándem que no sólo funciona por sí sólo, sino que enriquecieron enormemente nuestra trama de guión, solamente por ponerse juntos delante de la cámara.
En definitiva, me hubiera gustado tener más participación en este rodaje para disfrutar más, tanto del equipo, como de Sevilla, que es una maravilla!!"
Úrsula Corberó
"¿QUIÉN MATÓ A BAMBI?" ha sido, sin duda, uno de los rodajes más divertidos que he vivido! He tenido el privilegio de compartirlo con actores que, aparte de tener un don para la comedia, tienen una energía cargada de dinamismo y optimismo. Creo que eso es lo más importante a la hora de trabajar en el cine.
Amor al arte! Disfrute!
El rodaje estaba repleto de risas que se complementaban con la profesionalidad y la disciplina en los días de trabajo, y eso no sólo pasaba entre actores, sucedía con cada uno de los departamentos de la película.
Creo que eso se palpa en el resultado final.
A parte, me hacía especial ilusión trabajar con Clara Lago, teníamos muchos amigos en común pero no habíamos coincidido hasta entonces. Ella es divina, nos hemos hecho uña y carne! Y trabajar con Quim, Julián y Joaquín (con los que comparto casi toda la trama) ha sido una motivación increíble. No quería que terminara la jornada, me lo pasaba tan bien con ellos y aprendía tanto!
Una anécdota que recuerdo especialmente sucede en la primera escena; Quim y yo estábamos en una piscina. Todo se ve precioso en la peli... Pero tengo que reconocer que pasamos un frío que ni en Siberia!
Era abril, el agua de la piscina estaba granizada: Empezaba la escena que Quim estaba ya metido y segundos después me tiraba yo. Decidimos tomárnoslo con humor y empezamos a subir fotos en las redes sociales simulando que nos habíamos quedado congelados y otras con las toallas puestas como hábitos en la cabeza rezando para que pasara el frío. Lo más gracioso es que tuvimos que repetir esa escena un mes después, ya que por luz se veía poco soleado!"
Joaquín Núñez
"Sólo tengo buenos recuerdos de esta Gran Comedia, Grandes Compañer@s con los que he disfrutado de ensayos y rodaje.
Trabajar de nuevo con la familia de técnicos de "Grupo 7" y conocer al aventurero y carismático Santi Amodeo que todo lo disfruta, un regalazo.
Regalazos como mi personaje (Adelardo: un friki "carpe diem") y como la exquisita canción en inglés que fue supergratificante además de aprenderla, cantarla en directo en la peli, en un momentazo inolvidable de la fiesta en un jardín maravilloso (mis felicitaciones a los técnicos de Arte por esas "pinceladas" tan bellas y originales) donde, a pesar del frío, la figuración disfrutaba el momento; y al "corten!" del director había un despliegue de compañer@s arropando con abrigos y bufandas a la figuración mientras yo, flipado por el clímax, flotando en una nube y sin abandonar el micro, cantaba canciones de Kiko, de Silvio y de Pablo, dedicándolas a tod@s l@s alli presentes...
"Esto no puede ser no más que una canción
quisiera fuera una declaración de amor..."
Una noche de ensueño y... una película de risa muy divertida.
La anécdota:
Santi nos propone nadar entre tiburones, con la garantía de que no nos comerán, puesto que ya han almorzado. Belén y yo, con plena confianza y una fe absoluta en el dire, nos lanzamos a la "piscina" y nadamos como pez en el agua, nunca mejor dicho. Pero sucedió algo escalofriante...los tiburones se estresaron con nosotros y tuvimos que parar el rodaje. Increíble pero cierto!"