Notas del director
Siempre hay algo fascinante en las situaciones imposibles, en los planteamientos improbables sobre los que planea la duda del desenlace. Eso es KAMIKAZE, una fábula entrañable, empática, emocionante.
Slatan es un hombre corriente con una complicada misión; pero el vuelo en el que viaja es cancelado en el último momento por un temporal de nieve y el destino le obliga a ser realojado en un hotel de montaña junto al resto de pasajeros. Hasta que se reprograme, Slatan tendrá que convivir con un grupo de personas que no han tenido vidas afortunadas, al igual que él.
De la nieve que invade ese hotel surge un canto a la calidez humana, una terapia colectiva en una torre de Babel improvisada, que nos irá descubriendo que la superación de la adversidad es realmente la unidad de medida del ser humano.
KAMIKAZE es una comedia dramática en tono de fábula, conmovedora, original, provocadora, diferente, actual, contemporánea, pero no reivindicativa, ni denunciadora porque se abre camino en el espíritu del espectador a golpe de sonrisas. Es un canto a las segundas esperanzas, a la reconstrucción de vidas dañadas gracias al amor, a la amistad, a la solidaridad y al optimismo. En definitiva, una celebración de la vida misma.