La película está protagonizada por Mark Strong (EL TOPO, SHERLOCK HOLMES), Brian Cox (TROY, EL MITO DE BOURNE) y Taissa Farmiga (American Horror Story, THE BLING RING).
Génesis del proyecto
Peter Safran, productor de Buried o The Conjuring entre muchos otros títulos, empezó a desarrollar junto al guionista Guy Holmes la historia de un thriller psicológico sobre el universo de la memoria y los recuerdos. Inmediatamente pensó en Jorge Dorado para dirigir esta historia, un joven director madrileño que había sido recientemente nominado a los premios Goya por sus cortometrajes La guerra y Nuevos tiempos.
Jorge Dorado comenzó a trabajar junto a Guy Holmes en una versión del guión más cercana a su visión como director y, al mismo tiempo, elaboró un tratamiento visual para la historia. Jorge Dorado entregó personalmente esta nueva versión a Jaume Collet-Serra (director de La Huérfana y Sin Identidad) en el Festival de Sitges de 2010, donde Jaume ejercía de jurado. A partir de ese momento, Jaume Collet-Serra y su socio Juan Solá se embarcaron en el proyecto a través de su productora Ombra Films.
Jorge y Jaume trabajaron durante meses entre Barcelona, Madrid y Los Angeles tratando de que el proyecto fuera lo más sólido posible y que combinara comercialidad con personalidad.
Con esta nueva versión del guión se sumaron al proyecto Studiocanal (socio estratégico de Ombra Films), como partner financiero y agente de ventas internacionales, así como Miguel Á. Faura como co-productor y encargado de la producción del proyecto desde España.
A continuación, durante el Festival de Sitges de 2011, un año después del primer encuentro entre Jorge y Jaume, se presentó el proyecto a Mercedes Gamero de Atresmedia Cine, quien también se entusiasmó con el proyecto.
Finalmente se sumaron al proyecto Canal + y Televisió de Catalunya.
Notas de producción
Mindscape se basa en un concepto muy sencillo: ¿qué pasaría si un detective fuera capaz de adentrarse en los recuerdos para llegar hasta la verdad?
Uno de los motivos por los que fundé mi propia productora fue para poder trabajar con otros cineastas y así colaborar y aprender de las experiencias de otros compañeros. He estado trabajando en Hollywood durante muchos años y, cada vez que vuelvo a España, descubro nuevos realizadores con gran talento. Siempre he querido poder devolverles algo, así que creé Ombra Films para abrir un camino hacia Hollywood a estos directores.
Fue un placer trabajar con Jorge. Él tenía experiencia en publicidad y en la realización de cortometrajes, además de buen gusto cinematográfico. Al mismo tiempo, tiene un gran estilo visual, habla un fluido inglés y tiene gran sensibilidad por la naturaleza humana. Todos estos elementos fueron indispensables para llevar Mindscape a la gran pantalla.
Mindscape no es sólo un complejo thriller lleno de giros argumentales, sino también una aproximación a la psique humana y a la oscuridad de nuestras emociones. Cuando Jorge se involucró en el proyecto tenía muy claro lo que quería hacer con la película. Juntos trabajamos en el guión y, gracias a mi experiencia, pudimos adaptar esta gran historia al presupuesto.
Además, rodeamos a Jorge de un gran equipo, empezando por los ganadores del Goya Óscar Faura, en la dirección de fotografía, y de Alain Bainée en la dirección artística. Era muy importante para el éxito del film, además del guión y del equipo, encontrar un gran casting. Inmediatamente pensé en Mark Strong para el papel de John por su versatilidad como actor. Mark es uno de esos grandes actores que tienen la habilidad de interpretar cualquier personaje. Él se toma su tiempo para entender al personaje y fue capaz de hacer realidad las complejidades de John, un detective de la memoria que está atrapado por sus propios recuerdos. Cuando Mark y Jorge se conocieron, tanto para él como para mí, nos quedó claro que Mark Strong era el actor perfecto.
Taissa Farmiga, que es una brillante y joven actriz, interpreta el papel de Anna. Tiene un gran talento y fue un placer trabajar con ella. Ella aporta emoción natural al film y calidez a su personaje. Taissa dio vida propia a un personaje que todos amábamos.
Mindscape es un excitante thriller que explora un mundo que nunca antes ha sido visto. En él, podemos acceder a la memoria y ver cómo recordamos el pasado de una forma totalmente nueva, pues el detective es, de hecho, testigo y parte de ese recuerdo. Creo que este detalle hace a la película algo realmente único, y es por eso que enseguida pensé que esta idea se traduciría inmediatamente en una gran película. El público joven se identificará con el sufrimiento de Anna, una adolescente muy inteligente y con grandes habilidades. Ella es el centro de esta historia y sus recuerdos son la llave para resolver el misterio que se esconde tras Mindscape.
Notas de dirección
Mindscape es una película donde nada es lo que parece y nadie es quien dice ser. Un laberinto mental lleno de peligros, un puzzle de astucia que pone en juego la inteligencia del espectador. Una aventura de poder, inteligencia, mentiras y misterio.
Lo que más me atrajo del guión fue la posibilidad de desarrollar el tema principal que había tratado en todos mis cortometrajes: las dos caras del ser humano (luz y oscuridad) y llevarlo a un nuevo nivel: los recuerdos.
Mindscape parte de la idea de la existencia de un sistema de visión remota que permite a ciertos individuos viajar a los recuerdos de las personas. Pero
¿realmente recordamos las cosas como sucedieron? ¿o como nos gustaría que hubieran sucedido? La película plantea la posibilidad de viajar en el tiempo y poder observar lo que ocurrió "realmente" en nuestras vidas.
Pero más allá de su envoltorio narrativo, Mindscape es una película que trata sobre la libertad. John vive encerrado en su pasado, culpándose de la muerte de su mujer, mientras Anna vive encerrada en su habitación, una cárcel impuesta por sus padres. Ambos necesitarán enfrentarse a sí mismos y a sus miedos y obsesiones para conseguir ser libres.
Si hay una palabra que defina bien a Anna (Taissa Farmiga) es seducción. Una de sus armas más poderosas con las que despista al enemigo mientras urde complejos planes para lograr sus propositos.
John (Mark Strong) es nuestro héroe. Un hombre de gran corazón que ayuda a las personas a superar traumas y facilitarles una vida mejor. Sin embargo el don de John es al mismo tiempo una condena ya que es incapaz de ayudarse a sí mismo.
Mi mayor reto como director era conseguir el universo adecuado para la película. Por ello opté por una narración atemporal. He planteado la película como una historia clásica de detectives, partiendo de lugares fácilmente reconocibles del cine negro: un investigador con vicios y pasado tortuoso, una femme fatale y un caso aparentemente sencillo
Para la ubicación geográfica de la historia, buscaba una ciudad que pudiera representar cualquier urbe americana pero que al mismo tiempo tuviera un carácter indefinido y confuso como es la memoria. Montreal apareció como el espacio ideal por su mezcla arquitectónica y su gran influencia europea.
Diferenciar visualmente las diferentes capas de "realidad" era otra de las exigencias narrativas. Para mí era muy importante no definir mucho, ya que la memoria no es precisa, no es rica en detalles sino en sensaciones. Por eso los espacios debían ser extensiones de la psique de los personajes: la casa de John, desordenada y caótica; la habitación de Anna, limpia, llena de ángulos y monocromática
He utilizado los efectos visuales para modificar espacios, agrandarlos, extenderlos o acotarlos pero siempre de un modo casi imperceptible.
Mindscape es, en resumen, un thriller muy apegado a los personajes. Una película llena de emoción e intriga con ciertas dosis de terror psicológico. Un "tour de force" entre sus protagonistas. Una gran partida de ajedrez donde todos los movimientos están permitidos.
El reparto
Mark Strong, actor de La noche más oscura, de Kathryn Bigelow, El Topo, de Tomas Alfredson, o Linterna Verde, de Martin Campbell, se reúne con Jorge Dorado a principios de 2012. Tras ver su trabajo previo como director y escuchar de primera mano su visión sobre la película, quedó convencido de involucrarse en el proyecto. "Necesitas confiar en que el tipo que está detrás de la cámara viendo lo que haces sabe cómo mejorarlo. Y Jorge me ha transmitido esa confianza", aseguró el actor. Además, añade que "trabajar con Jorge ha sido increíble. Nos conocimos en Londres cuando vino a hablarme del guión y hablamos a través Skype. Realmente tenía un completo conocimiento de todos los temas, de los momentos de conexión y emoción de la historia. Me dio un trozo de papel que literalmente monitorizaba el camino emocional de toda la película, y aquí vi que lo tenía muy bien trabajado. Estuvo dos años preparando la película, así que tenía muy claro lo que quería". Asimismo, Mindscape suponía para Mark un reto tan grande como el de Jorge, ya que se trataba de su primer papel como protagonista absoluto, y se involucró muchísimo desde el primer momento, aportando desde el principio muchas ideas para su personaje.
A continuación arrancó la búsqueda de un personaje tan complejo como el de Anna, el cual tenía que ser interpretado por una adolescente. Fue Vera Farmiga quien, durante el rodaje de The Conjuring, sugirió a uno de los productores el nombre de su hermana Taissa. "Vi la primera temporada de American Horror Story de un tirón y Sofia Coppola tuvo la gentileza de enseñarnos material de The Bling Ring, que en ese momento estaba en fase de montaje", apunta Jorge. "A todos nos fascinó la mirada única y penetrante de Taissa y de inmediato se convirtió en nuestra principal candidata". Para la propia actriz ha sido también un gran reto. Como ella misma indica, "estaba muy emocionada porque era la primera vez que tuve que investigar en profundidad para un presonaje. Estuve una semana en España para la preproducción: pruebas de vestuario y maquillaje, y ensayos con el director y Mark. Jorge estaba muy preparado, había hecho un gran trabajo y esto es una muy buena sensación para una actriz ya que dependes del director".
La confirmación de la pareja Strong/Farmiga dio luz verde definitiva al proyecto, de modo que arrancó así la fase de pre-producción. Para completar el resto del reparto con actores británicos que estuvieran a la altura de los protagonistas se confió en la agencia de casting Reg-Poerscout-Edgerton (responsable del casting de películas como Sherlock Holmes o La mejor oferta). Gracias a ellos se involucraron en el proyecto actores como Indira Varma, Noah Taylor, Richard Dillane o Saskia Reeves.
Por último, para el importante papel de Sebastian se buscaba a un actor sólido que pudiese encarnar a un personaje complejo. Finalmente surgió el nombre de Brian Cox (El origen del planeta de los simios, Red, Troya, X-Men 2 o El caso Bourne), que casualmente ya había trabajado en varias ocasiones con Mark Strong. Como Jorge Dorado apunta, "Mark empezaba en teatro cuando Brian protagonizaba El Rey Lear y ese pasado en común resultó perfecto para la dinámica mentor/alumno entre los personajes de John y Sebastian".
Además del cast internacional, un actor español participa también en Mindscape. Se trata de Alberto Ammann, que interpreta a Tom Ortega. Según apunta el director, "para Alberto era un gran reto porque era la primera vez que interpretaba en inglés y la cuestión del acento lo tenía muy torturado. Pero ha trabajado muchísimo, con varios coaches y en diferentes talleres, para poder dar una interpretación de gran calidad que ha aportado muchísimo a Mindscape". A lo que el actor añade de su experiencia que "ha sido un placer. Mark fue muy generoso, como compañero me dio la libertad de que yo (habiendo él rodado ya sus planos) en mis planos pudiera tener más libertad y de repente darme permiso para retomar o hacer algunas cosas que necesitara, que en muchos otros casos podría sacarlo a él de concentración".
Las localizaciones
Uno de los retos a los que se enfrentaba la historia era la construcción de su propio universo. Como apunta el productor Juan Solà, "contábamos con un guión muy sólido, con una estructura y unos personajes muy bien definidos y un concepto muy novedoso (viaje a los recuerdos), pero éramos conscientes de que podíamos caer en el error de crear un thriller al uso, una película con giro y elemento fantástico según los cánones del género pero con escasa originalidad, si no éramos capaces de crear ese mundo fascinante". Y añade Jorge, "el primer ladrillo que pusimos para conseguirlo fue pensar dónde podía suceder esta historia. Partiendo de la base de que la película sucede en su mayor parte en la mente de un personaje nos decantamos por un ambiente americano, pero algo especial".
Tras barajar varias opciones, finalmente nos decantamos por la ciudad canadiense de Montreal. Tal y como apunta Alain Baineé, director artístico del film, "Montreal es una ciudad que combina modernidad e historia con una fuerte influencia europea. Otro elemento que nos acabó de cautivar era su escala, y su concentración de estilos arquitectónicos. Nosotros le llamábamos el Nueva York en miniatura". Además los exteriores en Montreal encajaban a la perfección con los interiores naturales de Barcelona.
Una vez elegida la ciudad, se centró la energía en encontrar el exterior de la casa de los padres de Anna, sobre la que pivota toda la película. En este Miguel A. Faura apunta: "aunque en un principio pensamos que la podríamos encontrar en los alrededores de Montreal, tuvimos que rastrear también Toronto y el Norte de España. Al final, acabamos encontrando la casa perfecta en el sur de Francia".
Así, finalmente el decorado principal de la película es el resultado de sumar un exterior en Francia más dos interiores naturales en Barcelona más construcciones en plató.
El rodaje y el equipo
A pesar de que Mindscape partía de un presupuesto moderado entorno a los cuatro millones de euros, se realizó un esfuerzo descomunal en todos los apartados para que la película pudiese competir en el mercado internacional con producciones de mucha mayor envergadura.
No sólo se puso el énfasis en el casting y las localizaciones, como se ha apuntado anteriormente, sino también para rodear a Jorge Dorado de un equipo técnico de incuestionable calidad, tanto técnica como humana. Así, se pudo contar con Óscar Faura en la Dirección de Fotografía (Lo imposible), con Alain Bainée en la Dirección de Arte (The Machinist, Goya por Blancanieves) o Clara Bilbao en el diseño de vestuario (Goya por Blackthorn), entre muchos otros talentos.
Además, el film se logró rodar en película de 35mm durante ocho semanas. En relación a esto, Jorge Dorado apunta: "aunque los avances digitales son considerables, la captura en 35mm todavía no es comparable en cuanto a textura y versatilidad en el proceso de etalonaje con el digital". Y es que, como explica Óscar Faura, "Jorge y yo hablamos de buscar cierto tono expresionista para lograr una luz un tanto extraña; un acercamiento al cine negro sin hacer nada exagerando y siendo sutiles. El celuloide era fundamental para lograr ese look".
La postproducción
La empresa de efectos digitales Usert38 (Mama, Hierro) se ha encargado de la postproducción de efectos visuales y créditos de Mindscape. David Heras, supervisor de VFX, comenta que "Jorge tenía una clara intención de clasicismo, intentando huir de clichés fantásticos e hicimos un especial esfuerzo para hacer nuestro trabajo prácticamente invisible". Pero su trabajo empezó ya desde el primer momento, ya incluso en el diseño de producción. El film cuenta con elementos propios de la ciencia ficción, como las pantallas que tenían que mostrar un diseño 15 años más avanzado del actual. De manera que, junto al departamento de Arte de la película, Usert38 ayudaron a completar también aspectos muy creativos de la puesta en escena. La sintonía era perfecta, ya que estos equipos coincidieron también en Intruders, de Juan Carlos Fresnadillo. Los diseños arrancaban en manos del equipo creativo y de diseño de Usert38, luego pasaban a la ilustración y de ahí al director.
Mindscape tiene un gran trabajo de postproducción de más de 400 planos con algún tipo de retoque o efecto digital. Por lo que se ha comentado anteriormente, todo tenía que estar muy mesurado, ya que la consigna general era que cualquier retoque permaneciera prácticamente invisible al espectador, otorgando así una sensación de naturalidad.
En cuanto al sonido, Álvaro López (Tres metros sobre el cielo), responsable de sonido de prácticamente todos los trabajos anteriores de Jorge, trabajó muy al detalle cada capa de la película para que tuviera su propia personalidad. Según él, "el sonido es una herramienta más para narrar y Jorge quería que muchas cosas se sugirieran a través del sonido, sobre todo para guiar al espectador sobre lo que era real y lo que es falso en la historia".
Con el fin de aspirar nuevamente a los mejores estándares del mercado, se optó por realizar la mezcla en Dolby Atmos, logrando así un sonido envolvente e impactante poco habitual en producciones de nuestro país.
La guinda de calidad para completar la película como deseábamos la puso el joven compositor Lucas Vidal (Fast & Furious 6) que creó una enigmática partitura grabada en Macedonia y mezclada en L.A. por Steve Kempster (La búsqueda, Enemigo público).