Grace Trevethyn ve como su marido muere al mismo tiempo que nace una nueva situación económica en su vida, de difícil solución: sin dinero y con deudas. La situación es grave, y no vale de nada culpar al difunto, por lo que decide sacarle mejor partido al invernadero del jardín.
Junto a Matthew, su jardinero, monta el negocio de la marihuana, pero la cosa no se queda en cultivarla, después hay que venderla.