El día que Kate Dickson (Kerry Fox) termina su primera novela, el médico le comunica que se le está acabando el plazo para quedarse embarazada. Mientras vuelve a casa para darle las malas noticias a su marido Rob, estrella su coche contra el reluciente Jaguar nuevo que pertenece a Dave (Ray Winstone), un amigo de la pareja. Precisamente Dave iba camino del pub donde había quedado con Rob para que éste le explicara, (protegido por un lugar público) que ha tenido un lío con su mujer, Samantha. Rob decide dejar a Kate por Samantha y vaciar la cuenta corriente común, dejando que Kate se enfrente con las numerosas deudas de la pareja, y forzándola a buscar un nuevo inquilino que le ayude a pagar la hipoteca y la factura de la reparación del coche. Dave se ha quedado en la calle, y entonces se le ocurre la solución perfecta: ser el inquilino de Kate hasta que la deuda de la reparación sea cancelada. Kate no puede resistir la idea de vivir con un alguien tan chovinista, pero, ¿qué puede hacer?.