Formentera, playas de arena blanca, Mediterráneo de aguas cristalinas, naturaleza virgen y cinco amigos con sus mochilas buscando pasar las vacaciones de su vida en este lugar idílico. El segundo día en la isla, Celia, Iván, Begoña, Carlos y Jaco descubren la entrada a una cueva escondida en un acantilado. Con ganas de aventura se adentran en la cueva por estrechos e incontables pasadizos sin apenas mirar atrás, entre bromas y risas. Pronto descubren que se han perdido. Tratan de encontrar la salida durante horas pero es inútil. Sin agua ni comida, sin pilas suficientes para las linternas, y sin medio de comunicarse con el exterior, se ven abocados a realizar actos inimaginables en pos de la supervivencia. A los pocos días, cada uno de ellos tiene un sólo objetivo: sobrevivir a cualquier precio.