Justi&Cia es una película que tiene su origen en la crisis económica y social. Un minero en paro que decide convertirse en un justiciero enmascarado y actuar por su cuenta contra políticos y empresarios corruptos. Esta producción es la respuesta directa a la crisis de su director, Ignacio Estaregui, quien después de quedarse en paro unió sus ganas de hacer cine con su toma de conciencia social para dar la voz en una película a los perdedores. "Ellos", afirma, "también tienen algo que decir".
La historia que hay detrás de la producción de JUSTI&CIA podría ser el guión de otra película. En abril de 2013 Estaregui es despedido junto a otros compañeros de la productora audiovisual en la que trabaja. Días después se le ocurre la idea básica de la película
y, como él mismo explica, se lanza al abismo sin red: capitaliza los 10.000 euros del paro, invierte 15.000 euros ganados en el concurso televisivo Atrapa un millón, solicita un crédito y, contando además con la ayuda de amigos y familiares, financia la producción de JUSTi&CIA. Sin ninguna subvención. Pagando a todo el equipo. Y pasando por la Seguridad Social. Como asegura el propio Estaregui: pobres, pero honrados. Y además contrata a cinco excompañeros de la productora.
Sólo cinco meses después, con Hovik Keuchkerian y Álex Angulo como actores protagonistas, y desarrollada la idea de Estaregui en un guión escrito por Enrique León y Borja Monclús, comienza el rodaje de una película planteada y levantada al margen del sistema. Aunque como explica Estaregui, no es que seamos anti-sistema, es que estamos fuera de él. Eso sí, tiene claro que JUSTI&CIA transcurre en el aquí y el ahora. Y para rodarla, asegura, "no nos hemos encomendado a nadie".