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  Sicarivs: La noche y el silencio  Dirigida por Javier Muñoz
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Un sicario recibe el encargo de matar a una mujer. Un trabajo más. Sin embargo, cuando está a punto de ejecutarla, no lo hace. A partir de entonces inicia una carrera contrarreloj para acabar con quienes le han contratado, sabe que en su profesión, quien no termina el trabajo, está muerto. Una tras otra, va acabando con ellos, sin piedad. Sólo al final, sabremos por qué no mató a la mujer.


Sinopsis larga
Estamos ante un asesino a sueldo. Un sicario. Como tal, está acostumbrado a matar por dinero. Es su profesión y lo tiene asimilado. Sin aspavientos ni teatralidades. En apariencia es un tipo normal y corriente, muy alejado del típico estereotipo de los sicarios. No es musculoso, no es sudamericano, ni siquiera tiene una pinta amenazadora. Es alguien como cualquiera de nosotros que de vez en cuando mata. Así de simple. Y lo hace siguiendo a rajatabla las indicaciones y consejos que una vez le dio otro sicario, mayor que él, cuando estaba empezando.

Su siguiente encargo es matar a una mujer. Aparentemente, un trabajo más. Sin embargo, cuando está a punto de ejecutarla, descubre que la mujer está embarazada de casi nueve meses. Tras un segundo de duda, decide no hacerlo. No por lástima, sino porque hay algo dentro de él que se lo impide. Es entonces cuando recuerda las palabras de su maestro: “Esta profesión sólo tiene una regla: si no haces el trabajo, estás muerto”.

A partir de entonces inicia una carrera contrarreloj para acabar con quienes le han contratado, en un intento de no dejar ningún cabo suelto. En una sola noche, irá acabando con todas sus víctimas y de vez en cuando, con los testigos que las rodean. Fríamente, sin piedad. Policías corruptos, empresarios corruptos, políticos corruptos… El sicario existe porque ellos existen. Y sin embargo, no los mata por un afán de justicia poética o arrepentimiento tardío. Simplemente los mata porque es lo que ha de hacer, porque no tiene otro camino. Y sólo al final, en el último instante de la película, sabremos por qué no mató a la mujer.