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  El hombre que quiso ser Segundo  Dirigida por Ramón Alòs

Presentación
Los años convulsos que marcaron el paso del siglo diecinueve al veinte aportaron al ser humano una cantidad de cambios tan enorme como pocas veces hemos experimentado. Fueron años de revoluciones: revoluciones sociales, industriales, tecnológicas, militares, artísticas y científicas. Años en los que, además, alguien inventó el cine.

La sociedad que conocemos hoy se forjó en esa época y la versión oficial de aquellos hechos tiene ahora carácter de dogma: el 28 de diciembre de 1895 los hermanos Lumière realizan la primera sesión de cine de la historia. Una historia escrita con borrones y tachaduras. Una de las más injustas fue la que oscureció para siempre el nombre de Segundo de Chomón.

Pionero entre pioneros, hombre de técnica minuciosa y de imaginación inagotable, fue un inventor autodidacta en tiempos de grandes empresas, pero también un empresario incapaz de enfrentarse, en tiempos de violentas batallas comerciales, a gentes sin escrúpulos que amasaron grandes fortunas y escribieron las reglas por las que se rige el mundo en que vivimos.

Segundo de Chomón no fue el primero, pero sí el que contribuyó en más ámbitos del lenguaje cinematográfico. Fue maestro de trucajes, efectos especiales, iluminación, elipsis, montaje paralelo. Desarrolló nuevos sistemas de coloreado de las películas, fue el padre del travelling y realizó una gran cantidad de cortos y mediometrajes de animación empleando por primera vez el método de muñecos articulados.

'El hombre que quiso ser Segundo' es un tributo a la memoria de Segundo de Chomón. Es un paseo por unos años locos y geniales, de exposiciones universales, de guerras, de los primeros pasos del hombre entre las nubes y de las primeras muertes masivas por gas entre el barro. Años en los que, además, alguien inventó el cine.