Cuatro años después de su anterior trabajo, Gracia Querejeta se pone de nuevo tras la cámara, dando un giro en su tono narrativo habitual para acercarse a la comedia. Con guion de Luis Marías, OLA DE CRÍMENES cuenta con un reparto encabezado por la actriz fetiche de la directora, Maribel Verdú, junto a Luis Tosar, Paula Echevarría, Juana Acosta, Raúl Arévalo, Antonio Resines y Raúl Peña. Completan el casting dos jóvenes: Asier Ricarte y Miguel Bernardeau.
Una historia que se mueve por la comarca del Gran Bilbao de negocios y residencial en el que vive la protagonista, pero también por el enclave más turístico y cosmopolita surgido tras el "efecto Guggenheim". El Palacio de Olabarri, el paseo de Botika Vieja, las calles de Getxo, Portugalete y la propia ría son algunos de los exteriores en los que transcurre la película, que tiene una secuencia clave en el emblemático Puente Bizkaia, el centenario puente colgante que une las dos márgenes.
Notas de la directora
OLA DE CRÍMENES es la primera película que dirijo sin responsabilidad sobre el guion. Mi intervención en ese aspecto ha estado encaminada a acercar el texto de Luis Marías a mi manera de narrar en la pantalla.
Entiendo que una de las preguntas que sin duda van a hacerme es por qué he elegido este trabajo para convertirlo en mi octava película. Confieso que empecé a leer el guion no exactamente con escepticismo sino más bien con miedo: nunca acababa de sintonizar con las historias que me ofrecían, viniesen de aquí o de allá.
Afortunadamente, a las pocas páginas me pillé a mí misma riendo mientras me preparaba un té para proseguir la lectura. Buena señal. Sobre mi mesa de trabajo tenía una comedia muy alejada del humor negro de alguno de mis trabajos como Cordelias o Felices 140. Y sin embargo, conecté enseguida con el ritmo trepidante y con el tono agridulce de OLA DE CRÍMENES. Pero, sobre todo, conecté con la protagonista - Leyre - una mujer cercana a los 50 tan perdida en la vida, tan cercana a caer sin remedio por un precipicio abismal, que inmediatamente me produjo una extraña ternura.
Conclusión: sin pensarlo dos veces, me tiré a la piscina. Y ahí empezó el periplo. Porque ha sido una aventura acercarse a unos personajes extremos, patéticos y divertidos a partes iguales, unos personajes que rozan el absurdo en muchas ocasiones. Y ha sido todo un viaje sumergirse en una comedia burbujeante que transita por diferentes tonos y colores, desde el negro profundo y doloroso, hasta el blanco inocente y feliz.
Buscar y encontrar el equilibrio, ese fue desde la primera lectura el reto de esta película.
Muy cerca ya del estreno, muchos meses después de aquella primera lectura, puedo decir que rodar OLA DE CRÍMENES ha supuesto una experiencia de esas que merecen ser vividas.
Notas del guionista
Hay una línea muy delgada que separa el bien del mal. Tan delgada que a veces cuesta decidir en qué lado estamos.
Una madre quiere proteger a su hijo adolescente que ha cometido un asesinato sin premeditación. Hace todo lo que puede por protegerlo. Seguramente entendemos que ese es un acto de bondad maternal y que cuenta con nuestra simpatía. Pero esa misma madre pretende echar la culpa de ese asesinato a otro adolescente, un colgado que se ha enamorado de ella y así librar de toda culpa a su hijo. ¿Podemos decir que esto también es un acto de bondad? Esto es lo que hace Maribel Verdú en OLA DE CRÍMENES.
Una mujer cuyo marido ha sido asesinado. Ella es completamente inocente. Y quiere que detengan al autor del crimen. Claro que, puesta a elegir, prefiere que la investigación judicial pertinente no llegue nunca a descubrir los múltiples casos de corrupción en los que estaba metido su marido. Y ella. Esta es Paula Echevarría en OLA DE CRÍMENES.
Un buen policía durante 30 años de servicio. Siempre actuando dentro de la ley y con una hoja de servicios impecable. Antes de jubilarse, cae en la tentación de aceptar un dinero fácil que no debe aceptar, pero que necesita por apuros económicos. ¿Es un mal policía? Este es Antonio Resines en OLA DE CRÍMENES.
Un mal policía, borracho, pendenciero y corrupto. Un día decide comportarse como un agente de la ley ejemplar y aclara una ola de crímenes en Bilbao. Pero para ello debe entregar a la justicia a su único amigo de verdad. ¿Es un buen policía? Este es Raúl Peña en OLA DE CRÍMENES.
Luego hay una abogada con el mismo concepto de moral que un mejillón rebozado. Siempre defendiendo a su cliente, incluso mucho más allá del deber. Esto incluye extorsión, asesinatos, ocultación de pruebas, malversación, etc, etc... Esta es Juana Acosta en OLA DE CRÍMENES.
Como hemos dicho al principio, ¿de verdad está tan claro lo que está bien y lo que está mal?
Notas de la producción
Cuando leímos por primera vez el guion de Luis Marías, entendimos enseguida que teníamos en nuestras manos algo muy divertido y, a la vez, muy especial: una comedia negra cuyos personajes principales, interpretados por Maribel Verdú, Juana Acosta y Paula Echevarría, son tres mujeres a las que la norma y lo establecido les importa un pimiento con tal de conseguir su objetivo. Y si a estos tres personajes extremos les sumas una pareja de adolescentes hormonados, y otra pareja de policías con métodos poco ortodoxos... la combinación no puede acabar en otra cosa que en una OLA DE CRÍMENES por las calles de Bilbao.
Trabajar con Gracia Querejeta ha sido muy gratificante. Ha sabido darle a los personajes ese punto de locura y de humor que les convierte en excéntricos a la vez que en fascinantes. Y es que todos los personajes de OLA DE CRÍMENES están pasados por el filtro del humor negro y sometidos a un disparatado enredo, una gran bola de nieve que parece en todo momento que va a atraparles y de la que no podrán escapar.
Hemos tenido la fortuna de rodar en Bilbao, ciudad que se ha entregado y que nos ha facilitado en todo momento nuestro trabajo. Contar con un equipo técnico y artístico de primer nivel ha hecho las cosas aún más sencillas y el resultado se refleja en la pantalla. Esperamos que OLA DE CRÍMENES consiga atrapar al público en los enredos de su trama y que se divierta con unos personajes tan peculiares.
Ghislain Barrois y Álvaro Augustin,
Consejero delegado y director general, respectivamente, de Telecinco Cinema
Historias del Tio Luis y Bowfinger hemos tardado en ver hecho realidad este maravilloso guion de comedia negra escrito por Luis Marías y protagonizado por tres personajes femeninos (Maribel Verdú, Juana Acosta y Paula Echevarria), cada cual mejor construido por su creador. Luis, Eduardo y yo no podemos estar más agradecidos a MEDIASET España por haberse subido al barco y confiado en el proyecto y haberlo hecho grande. Al igual que estamos entusiasmados con que una directora con la trayectoria de Gracia Querejeta nos aceptara serlo de este pedazo de guion porque, sin duda, su magnífica realización se ve en la pantalla.
Sobre el rodaje
El rodaje de OLA DE CRÍMENES tuvo lugar en otoño de 2017. La película recorre diferentes localizaciones de Bilbao y Vizcaya, escenarios naturales convertidos en elementos fundamentales de la historia, que se mueve por la comarca del Gran Bilbao de negocios y residencial en el que vive la protagonista y por el enclave más turístico y cosmopolita surgido tras el "efecto Guggenheim".
Las localizaciones se completaron en diversos puntos de la Comunidad de Madrid.