Con Josh Brolin, Miles Teller, Jeff Bridges, James Badge Dale, con Taylor Kitsch y Jennifer Connelly. Dirigida por Joseph Kosinski. Escrita por Ken Nolan y Eric Warren Singer. Basada en el artículo de GQ "No Exit" (Sin Salida) de Sean Flynn. Producida por Lorenzo di Bonaventura, Michael Menchel, Erik Howsam, Molly Smith, Thad Luckinbill, Trent Luckinbill, Dawn Ostroff y Jeremy Steckler. Productora Ejecutiva Ellen H. Schwartz. Director de Fotografía Claudio Miranda, ASC. Diseño de Producción Kevin Kavanaugh. Edición Billy Fox, ACE. Diseño de Vestuario Louise Mingenbach. Banda Sonora por Joseph Trapanese. Supervisor Musical Jonathan Watkins. Consejero Creativo Brendan McDonough. Casting por Ronna Kress.

"Esta es una historia sobre héroes de todos los días" dice Josh Brolin, quien protagoniza HÉROES EN EL INFIERNO, basada en la historia real de los Granite Mountain Hotshots, la brigada de bomberos locales que hicieron lo que ninguna otra brigada había hecho antes al combatir el terrible incendio forestal de Yarnell Hill, que ocupó todos los titulares y portadas. La película, profundizando en la historia de los propios bomberos, se centra en el día a día de estos hombres que, cada uno por sus propias razones, se alzarían para protegernos a todos.

"En una época de superhéroes, HÉROES EN EL INFIERNO es una película que trata sobre héroes reales" añade el director Joseph Kosinski. "Explora los conceptos de amistad, sacrificio y redención, todo ambientado en un mundo de incendios forestales, algo que nunca antes se había visto en cine. Es una historia que necesita ser contada y un mundo que necesita ser visto en la gran pantalla".

"¿Qué atrae al hombre el fuego? ¿Qué hace que estos hombres quieran hacer eso?" se pregunta el productor Trent Luckinbill. "Estos tipos están arriesgando sus vidas todos los días para salvar a otros, para salvar comunidades enteras y su forma de vida, y esta historia trata de explicar el porqué de lo que hacen. Trata sobre quiénes son y su sentimiento de hermandad".

El productor Lorenzo di Bonaventura coincide en que la experiencia compartida entre los héroes es lo que les une realmente. "Empiezan siendo individuos, y al formarse el grupo y completar el duro entrenamiento al que les someten, crean unos lazos que les unen más allá de sus diferencias. Su sentido del deber crece con su fama, como la gente muy trabajadora que se va obsesionando más y más con lo que hacen".

"Estos tipos son los guardianes de la naturaleza" dice el productor Michael Menchel. "Principalmente están luchando contra el fuego a ras de suelo, intentando apagarlo con picos y palas. Es increíble pensar en ello, sobre todo si eres de los que pasas tiempo en la naturaleza".

La película profundiza en la vida de esta brigada de héroes, como bien recalca Dawn Ostroff. "Estos héroes merecen que se cuente su historia, para que la gente sepa lo que hicieron, cómo salvaron su comunidad y se pusieron literalmente en la línea de fuego".

La película está basada en el artículo escrito para GQ por Sean Flynn, "No Exit" (Sin Salida). Los productores Dawn Ostroff y Jeremy Steckler de Condé Nast Entertainment vieron en la historia un posible largometraje y empezaron el proceso de desarrollo, trabajando con el director Joseph Kosinski y el guionista Ken Nolan. Mientras tanto, el productor Michael Menchel, quien también había estado desarrollando el proyecto después de los eventos de Arizona y había estado visitando a los bomberos Brendan McDonough (interpretado por Miles Teller) y Amanda Marsh (interpretada por Jennifer Connelly), se acabó juntando con Condé Nast y el productor Lorenzo di Bonaventura. Llegados a este punto, le llevaron el guion a Black Label Media, con los que unieron fuerzas para seguir desarrollándolo y poner la película en marcha.

Muchos espectadores no estarán familiarizados con el término "hotshot". Como se explica en la película, es un título especial: los "Hotshots" son los mejores bomberos forestales de Estados Unidos. "La forma que tienen de combatir el fuego es muy distinta a lo que imaginamos. Combaten el fuego con fuego" explica Kosinski. "Cavan zanjas y talan árboles para crear un borde. Crean cortafuegos para combatir el incendio descontrolado".

Lo que hizo que los Granite Mountain Hotshots destacasen no fueron sus habilidades, sino la forma que tuvieron de llegar a la cima. "’Hotshot’ es un término normalmente reservado para los equipos especiales del Servicio Forestal" continúa Kosinski. "Pero los Granite Mountain Hotshots eran una brigada municipal, un puñado de hombres locales que Eric Marsh soñaba en convertirlos en una unidad de élite. Ninguno de ellos había hecho eso antes. Fue un proceso muy complicado que les llevó años de entrenamiento y evaluación. Al final lo consiguieron, convirtiéndose en la primera brigada de élite municipal en los Estados Unidos que viaja a través del país combatiendo incendios forestales".

Aunque mucha gente recuerda la historia de los Granite Mountain Hotshots (la brigada de bomberos que luchó contra el fuego de Yarnell Hill en 2013), las vidas de los 20 miembros del equipo son en su mayoría desconocidas. HÉROES EN EL INFIERNO es la historia de estos 20 héroes.

Es un reconocimiento claramente merecido, pero algo que una brigada de élite nunca buscaría. "Muy poca gente sabe realmente qué es un Hotshot, la mayoría ni siquiera ha oído hablar de ellos, y eso es algo que lo define. Quieren ser invisibles, trabajar duro y crear lazos con el resto del equipo. Todos los que han colaborado en esta película tenían alguna razón por la que involucrarse, pero en su mayoría querían contar lo que los bomberos forestales hacen" dice Pat McCarty, un antiguo Granite Mountain Hotshot que dejó la brigada en 2010 para convertirse en ingeniero del Prescott Fire Department y que fue consejero técnico en la película. McCarty, junto con otros Granite Mountain Hotshots como Brendan McDonough, Amanda Marsh y Duane y Marvel Steinbrink aportaron un conocimiento de incalculable valor para la película, pero no sólo de carácter técnico sino también dieron su opinión sobre cómo un bombero real hubiese manejado ciertas situaciones.

Estos 20 hombres son muy distintos entre sí, pero comparten un vínculo. "La historia se centra más en el nivel personal, en cómo se forman los equipos y las amistades" explica Luckinbill. "Necesitas esa hermandad, esa confianza y respeto para poder luchar contra el fuego. Es esa dependencia que vemos en las grandes historias bélicas".

Kosinski lo lleva aún más allá: "HÉROES EN EL INFIERNO podría ser vista como una película de guerra, pero es una batalla contra la Madre Naturaleza. Me parece que es un punto de vista muy refrescante de lo que puede ser un héroe".

Es una comparación que también comparte el guionista Ken Nolan, quien anteriormente adaptó el libro Black Hawk Derribado y que se convirtió en un éxito. "Muchos de estos bomberos forestales son una clase aparte, como los Rangers o los soldados Delta Force en Black Hawk Derribado" explica. "Motivados, infatigables, pero con un nivel de humanidad con el que todos nos identificamos: estaban cansados, asustados y bromeaban unos con otros".

Nolan fue a Prescott, Arizona, y pasó un tiempo con las familias de los Hotshots, donde conoció al superviviente Brendan McDonough y a Amanda Marsh, la viuda del supervisor Eric Marsh. "Prescott da la sensación de ser un pueblo pequeño" explica Nolan. "La gente pasea con sus familias e hijos y es una ciudad amistosa y acogedora, aparte de ser muy pintoresca. Disfruté mucho dando paseos y tomando café en mi sitio favorito, el Wild Iris Café, que se convirtió en mi oficina".

A medida que Nolan pasaba más tiempo en Prescott, empezaba a ver más claramente la historia de los Hotshots, algo que haría que los espectadores lo entendieran mejor. "Lo que me interesaba era la forma en la que el equipo acabó convirtiéndose en una brigada de élite y lo que ello implicaba. También podríamos ver el mundo a través de los ojos de Brendan McDonough" dice Nolan. " Era un chico que estaba metido en líos y quería dar un vuelco a su vida, así que se unió al equipo. Así pues, la audiencia tiene la oportunidad de conocer el mundo de los Hotshots desde su punto de vista".

Esto les dio la oportunidad a los guionistas de explorar la relación entre Brendan, el recluta que tiene que ganarse la confianza, y Eric Marsh, un veterano supervisor con 20 años de experiencia. "Este era un trabajo difícil, jugándose la vida todo el rato, así que Eric Marsh se aseguraba de tener un equipo de gente con el que se llevase bien. ¿Conseguiría Brendan pasar el corte? Esa era la historia que quería explorar".

"No es la relación tradicional entre mentor y aprendiz" aclara el productor Lorenzo di Bonaventura. "En la película, Eric ve algo en Brendan que le recuerda a sí mismo. Esa es la clave emocional de la película, la relación entre un chico muy joven y un veterano. Trata sobre aceptar las debilidades de sus vidas y sobre cómo el equipo se convierte en algo más importante incluso que luchar contra el fuego, eso es lo que les va a convertir en las personas que quieren ser. En la película, eso mismo le había ocurrido a Eric Marsh y por eso ahora ayuda a otros a rehacer sus vidas, en especial a Brendan".

Esa relación, entre Marsh y McDonough, y entre el resto de los hombres era lo que realmente interesaba al guionista Eric Warren Singer. "Me interesaba la cultura que se crea alrededor de esta hermandad" explica el escritor, nominado a un Oscar por su trabajo en La Gran Estafa Americana.

"Entrevisté a muchos Hotshots y les pregunté que es lo que más les gustaba. Todos dijeron básicamente lo mismo" dice Kosinski. "Es la camaradería. Es estar con tu equipo, viajando por el país, y saber que van a cuidar de ti de la misma forma que tú de ellos. Esa era la clave de la película, asegurarnos de transmitir eso".

Para traer la historia a la gran pantalla, los productores contactaron con Kosinski, quien había dirigido con anterioridad Tron: Legacy y Oblivion. "Si has visto las películas de Joe sabes lo visualmente espectaculares que son. Es uno de los mejores directores visuales del mundo" dice el productor Erik Howsam. "Fue la mejor elección para transmitir la escala épica de uno de estos incendios forestales".

"Cuando leí el guion, pensé que nunca había visto algo así antes, me parecía increíble que estuviese basado en una historia real" dice Kosinski. "Me atrajo la forma única en la que la historia nos presenta dos puntos de vista: el del superintendente Eric Marsh, y el novato Brendan McDonough. El punto principal de la historia está en el contraste entre ellos, pero también en su parecido".

Para redondear la película, la estrella del country Dierks Bentley se juntó con S. Carey y el compositor de HÉROES EN EL INFIERNO, Joe Trapanese, para crear un tema titulado "Hold the Light".

La historia de los Granite Mountain Hotshots ocupa un lugar especial en el corazón de Bentley. Bentley emprendió su primera acción en 2013 cuando organizó el Country Cares Concert en Arizona, que recaudó más de medio millón de dólares para las familias de los Granite Mountain Hotshots.

Para componer la canción, Bentley y Carey trabajaron estrechamente con el compositor de HÉROES EN EL INFIERNO, Joe Trapanese. En esta colaboración, los compositores usaron la música de la banda sonora de la película para la canción, lo que resultó en un tema que se integra a la perfección con la propia película.

"Esta es una de las más, sino la más significativa experiencia de la que he formado parte" confiesa Bentley. "Me impacta mucho más que ninguna otra canción de la que haya formado parte. Estos últimos años he conocido a Brendan, el único superviviente, y mi madre ha conocido a algunas familias de los héroes, y todavía me parece imposible ponernos en la piel de ninguno de ellos. Pero nuestro objetivo era el de crear un mensaje de esperanza y amor. Me siento honrado de haber participado en este proyecto".

"La historia afectó a Dierks desde el principio" añade Kosinski. "Él fue uno de los primeros en recaudar dinero para las familias de los Granite Mountain Hotshots y su compromiso ha sido total desde entonces. El tema surge de la banda sonora, pero la letra viene del corazón, así que ha encajado con la película a la perfección".

S. Carey admite que "trabajar en esta canción junto a Joe, Dierks y el resto del equipo ha sido un honor. Mi cuñado ha sido bombero forestal durante los últimos años así que de alguna forma tenía un punto de partido en todo el proceso creativo. Estoy eternamente agradecido de haber podido honrar a estos hombres, estos héroes reales, en la forma de una canción en esta preciosa y poderosa película".


Sobre el reparto
El papel de Eric Marsh, el superintendente de la brigada, es interpretado por el nominado a un Oscar Josh Brolin.

"Tengo un apego especial por esta historia" dice Brolin. "Cuando tenía 20 años, estuve apagando fuegos durante tres años con un cuerpo de bomberos de voluntarios en Arizona. Era algo que me llamaba la atención. Me gustaba la idea de dar algo de ti para ayudar a preservar algo de otra persona, incluso si fuese peligroso".

Es de esperar, por tanto, el respeto que Brolin tiene por los bomberos. "Es la última profesión que queda sin corromper". Y con esto se refiere en especial a esta brigada. "Son duros y están muy motivados, tienen una meta, que es llegar a ser una brigada de élite. No hay ninguna brigada municipal que lo haya conseguido antes que ellos. Se enfrentan a obstáculo tras obstáculo, un momento crítico tras otro en el que se juegan el todo o nada".

Brolin se sintió atraído también por las relaciones entre el equipo, especialmente con la de su personaje, Marsh, y el de Miles Teller, Brendan McDonough. "Es una película a gran escala, pero tiene una gran base emocional" explica. "He trabajado con gente que necesita descansos, que necesita a alguien que le dé una oportunidad, y a veces funciona y otras no. Los guionistas han hecho un gran trabajo explorando este tira y afloja. E introdujeron todo esto en la mitad de las dinámicas de equipo, y así se ve cómo afecta a los otros 18 miembros de la brigada".

Miles Teller interpreta a Brendan McDonough. Teller explica cómo, al haber crecido en un pueblo pequeño, entiende la fascinación por una brigada contra incendios. "Crecí en una zona rural en Florida, y Prescott me recordaba mucho a mi pueblo. Combatir incendios hubiese sido el tipo de oportunidad laboral que mis amigos habrían tenido. No hubiésemos pensado que estábamos arriesgando nuestras vidas. Éramos un puñado de chicos que disfrutábamos pasando tiempo en el bosque, talando árboles varios meses al año. Cuando pienso en ello me siento como en casa".

Teller confiesa admirar la representación del trabajo en equipo de la película. "Si no estoy haciendo un buen trabajo o no le estoy poniendo suficientes ganas, le estoy haciendo más complicada la vida al que venga después. Es un trabajo que filtra a la gente que tiene una actitud egoísta. Todo tu trabajo lo haces para los tipos que tienes a tu izquierda y derecha".

"Miles es sensible, fuerte e ingenioso" reflexiona la productora Molly Smith. "Hemos sido muy afortunados de tener a alguien como Miles interpretando este papel tan complejo. Brendan es un chaval que estaba muy perdido, sin autoestima y que sentía no encajar en ningún sitio. Eric Marsh y el resto del equipo le acogen y le dan una oportunidad y eso le cambiará la vida para siempre".

"A Brendan le apodaban ‘Donut’ porque decían que al empezar era como un gran cero" explica Teller. "No tenía fuerza y no aportaba nada al equipo. Entraba y salía de la cárcel y tenía un problema con las drogas. Así que su trayectoria es única: no le quedaban muchas opciones, su madre le había echado de casa, acababa de ser padre y estaba buscando una oportunidad para dar un vuelco a su vida. Pasó por el campo de entrenamiento en vez de ir a rehabilitación. Marsh le dio una oportunidad y él la aprovechó".

Kosinski le ofreció a Taylor Kitsch un papel central, el del provocativo Chris MacKenzie. "Obviamente no soy imparcial, pero creo que es un tipo estupendo" dice Kitsch. "Me lo pasé genial interpretándole. Mac es el payaso de la clase, pero la profesión corre por sus venas, es un veterano de más de 10 años y su padre lo fue durante más de 25. Tenía una relación muy estrecha con sus padres, y eso me parece algo muy importante, aunque si de verdad quieres saber cómo es alguien no le preguntes a los padres, sino a sus mejores amigos. Me sentaba a hablar con Donut durante dos o tres horas cada vez e intentaba quedarme con lo máximo posible".

MacKenzie al principio parece que no aprueba la inclusión de Brendan al equipo. "Le llamaban el guardián. Pertenecer a la brigada era una cuestión de vida o muerte, y la hermandad lo era todo para él, así que se proponía filtrar a todo el que no se lo tomase con la misma seriedad que él. Creo que es algo que puedes ver en cualquier grupo de élite. Tienes que estar comprometido".

"La forma de ser de Taylor ayudó a traer a su personaje a la vida" dice Ostroff. "Al principio, su personaje está enfadado y no entiende porqué tienen que molestarse con Brendan, con toda la razón del mundo. Y aun así, al final puedes ver cómo ha evolucionado su relación y lo cercanos que acaban siendo".

Interpretando a Amanda Marsh, la mujer de Eric Marsh, encontramos a Jennifer Connelly. "Tuve mucha suerte de poder pasar tiempo con Amanda. Fue muy generosa al compartir conmigo historias y detalles sobre su vida con Eric. Pasamos mucho tiempo juntas hablando por teléfono y en persona. Fuimos a montar a caballo juntas y me mostró sus herramientas y me enseñó cómo le corta las pezuñas a los caballos. Hasta me dejó sus botas de cowboy, que por cierto son las que llevo en la película".

Connelly y Brolin representaron a una pareja que está muy enamorada pero que también está sometida bajo mucho estrés. "Comparten una gran pasión por las actividades de exterior, senderismo, escalada, montar a caballo" puntualiza Connelly. "Obviamente, son marido y mujer, pero también me dio la impresión de que eran mejores amigos. Pero todo se complicaba, ya que el trabajo de él afectaba mucho a su matrimonio. Cuando estaban juntos aprendían el uno del otro, y después se pasaba semanas fuera de casa por trabajo, en zonas remotas, sin forma de contacto y casi siempre en situaciones de alto riesgo. Es complicado estar enamorada de alguien tanto cuando estáis juntos y luego llevarlo bien cuando estáis separados".

"Jennifer es una fuerza de la naturaleza" dice Smith. "Obviamente es una gran actriz dramática, pero también tiene garra y puede estar a la altura de alguien tan duro como Josh Brolin. Aportó una gran pasión al personaje y se esforzó totalmente para ser lo más parecida a Amanda".

En el papel del jefe de bomberos Duane Steinbrink encontramos a Jeff Bridges. "Cuando leí el guion por primera vez me impresionó cómo trascendía el género de una película de acción" dice el ganador de un Oscar. "Había mucha emoción y me pellizcó el corazón de verdad".

Bridges invitó al Steinbrink real a su rancho de Santa Bárbara, donde le pidió que trajese mucha de su ropa con él. Bridges entonces pidió que el diseño de vestuario para la película fuese similar. Bridges se cortó el pelo como Steinbrink y se metió en el papel de una forma increíble.

"Jeff tiene algo de vaquero moderno, creo que por eso acaba interpretando papeles que muestran eso" observa el productor Trent Luckinbill. "Jeff el hombre americano por antonomasia. Tiene interpretaciones que todo el mundo considera excelentes, y cuando le toca un papel como este en el que le toca mostrar su amor por el Oeste, es el mejor".

La última en entrar en el reparto fue Andie MacDowell, quien interpreta a Marvel Steinbrink, la mujer de Duane Steinbrink. "Estaba muy familiarizada con la historia. Vivo en Montana, rodeada de parques nacionales, y he tenido contacto directo con incendios enormes" explica. "Estos tipos son héroes, y vamos a contar su historia al mundo entero".


Sobre los hotshots y los actores que los interpretan
Josh Brolin interpreta a "Supe" Eric Marsh, el superintendente y fundador de los Granite Mountain Hotshots. Marsh era el miembro más mayor del equipo. Nació en North Carolina, se graduó en la Appalachian State University y también ayudó a fundar la Arizona Wildfire Academy.

"Este hombre no sólo estaba en forma para tener 43 años, es que podía dejar a todo el mundo atrás con su resistencia y fuerza" aclara Brolin, cuya preparación para el papel le llevó a perder 18 kg trabajando con un entrenador personal y a meterse en el rol leyendo libros de Norman Maclean y viendo vídeos de bomberos reales.

Cuanto más investigaba sobre Marsh, más sentía Brolin que se identificaba con él. "No tuvo un comienzo estelar. Tuvo que trabajar mucho desde el principio. Era muy humano y fallaba mucho, pero aprendió a ser un líder increíble de Duane" dice Brolin. "Aprecio de verdad cómo de duro tuvo que trabajar para llegar a donde estaba. Significaba mucho para él".

Por supuesto, Brolin también admiraba de Marsh la forma que tenía de sacrificarse por otros. "Se quieres autoestima, haz cosas admirables" dice. "No vas a conseguir autoestima tirado en la cama preguntándote porqué no la tienes. Si de verdad la quieres, sal ahí fuera y haz algo por alguien".

Brolin se metió en el papel, convirtiéndose en un líder también en el set de rodaje, donde sus compañeros le llamaban "Supe" tanto delante como detrás de las cámara. "Josh entendió que en realidad esta era una historia sobre trabajo en equipo y pasión, y lo ha llevado hasta el final" observa el productor Jeremy Steckler. "El tipo estaba muy preparado, a punto para lo que viniese. Estaba liderando un grupo de chicos mucho más jóvenes que él y conseguía ir un paso por delante de ellos cada día".

"Josh se convirtió en Eric Marsh" coincide el productor Eric Howsam. "Les cogía y explicaba qué es lo que tenían que hacer y cuál era el equipamiento. Y ellos hacían justo eso".

Miles Teller interpreta a Brendan "Donut" McDonough, quien se une a los Granite Mountain Hotshots en un intento de encauzar su vida. "Brendan es la última incorporación al grupo. Al principio de la película todavía no está involucrado en la comunidad de bomberos, le encontramos vagando sin dirección, en un punto de inflexión en su vida. La brigada de bomberos le ofrece la oportunidad de mejorar como persona y convertirse en un hombre responsable por primera vez en su vida".

Brendan no tenía muchas opciones de entrar a formar parte de los Granite Mountain Hotshots en un principio. "Al principio de la película vemos que ha tocado fondo. Creo que la brigada de bomberos era algo que el siempre admiró, pero que pensaba que le darían la patada directamente en el momento que dijese que quería formar parte del equipo".

La oscarizada Jennifer Connelly interpreta a Amanda Marsh, la independiente mujer de Eric Marsh que busca su propia carrera profesional como herradora de caballos y supervisa el rancho cuando su marido está viajando por trabajo.

Quiso colaborar en la película cuando el director Joseph Kosinski le aseguró que quería contar toda la historia. "Joe quería explorar la complejidad del trabajo, pero también la complejidad de sus vidas y relaciones, y del impacto que esta profesión tiene en ellas" explica Connelly. "Esto recalca lo humano de todo lo que consiguieron hacer".

El ganador del Oscar Jeff Bridges interpreta al Jefe de Bomberos Duane Steinbrink, un vaquero cuya tosca dignidad y curtida sabiduría le convierten en el mentor de Eric Marsh.

"Representa la figura de un padre para el personaje de Josh Brolin, Eric Marsh, y el resto de los chicos le respetan como tal" explica Bridges. "Resulta que también tiene una banda de música llamada The Rusty Pistols".

James Badge Dale interpreta a la mano derecha de Marsh, Jesse Steed, quien es también capitán de los Granite Mountain Hotshots. En la vida real, Steed era un antiguo artillero de la marina y antiguo miembro del Cuerpo de Bomberos de Prescott.

"Este hombre era todo lo que yo no soy. Medía 195 cm, pesaba 100 kg, era gracioso y enrollado" bromea Dale. "Jesse Steed era el hermano mayor que te hubiese gustado tener. Era como un rayo de luz. Una actitud ejemplar. Ayudaba a la gente y era inquebrantable. Una fuerza de la naturaleza en el trabajo y manteniendo a la gente feliz. Mantenía a la comunidad unida y aún le quedaba energía para volver a casa y estar con su familia. Hay mucho a lo que aspirar ahí".

Taylor Kitsch interpreta a Chris MacKenzie, quien llevaba tres años en los Granite Mountain Hotshots y tenía más experiencia que muchos del equipo.

Kitsch estaba emocionado de unirse al proyecto por la oportunidad de representar la relación entre MacKenzie y McDonough. "Son totalmente opuestos" dice Kitsch. "Mac ya le ha visto abandonar antes, no le da a Donut ningún crédito ni beneficio de la duda. Y honestamente, no le culpo. Pero Donut, a través de sus acciones, se acaba ganando la confianza de Mac, tanto que al final son compañeros de habitación y mejores amigos. La película cuenta suficiente de la historia como para ver cómo la relación cambia y evoluciona".

En el papel de Marvel Steinbrink, la mujer del Jefe Steinbrink, está Andie MacDowell. MacDowell llegó a conocer a la Marvel Steinbrink real, y hasta tomo prestado un collar suyo con una cruz que vemos a Marvel llevar. "Es muy enérgica y fuerte, y tiene un gran corazón" dice MacDowell.

El actor australiano Alex Russell interpreta al bombero Andrew Ashcraft de 29 años. Padre de cuatro hijos, Ashcraft también patinaba, hacía senderismo, nadaba, hacía salsa de manzana, tocaba la guitarra y la batería. "Ha sido un placer cada día que pasado interpretándole ya que siempre estaba contento y era una persona maravillosa. No importaba lo duro que hubiese sido el día, él siempre estaba sonriendo y contando chistes" dice Russell. "Solía recoger un piedra curiosa para sus hijos en cada fuego que apagaba".

El actor inglés Ben Hardy interpreta al aprendiz idealista de 22 años Wade Parker. "Es un tío joven, muy atlético" explica Hardy. "Creció jugando al béisbol. Toda su familia coincide en que hubiese llegado lejos jugando el béisbol, pero él decidió convertirse en un Hotshot ya que su padre es bombero y quería seguir con la tradición familiar".

Scott Haze interpreta al religioso Clayton Whitted, un joven párroco de 28 años que orientaba a jóvenes. "Introduce en la historia un mensaje de esperanza, coraje y fe en Dios" dice Haze.

Geoff Stults interpreta al jefe de equipo y ex marine Travis "Turby" Turbyfill, de 27 años y padre de dos niñas a las que a menudo les leía el libro "Goodnight Moon". "Era un bromista" confiesa Stults.

Thad Luckinbill aparece como Scott Norris, gran conocedor de historia y, fuera de temporada, trabajador en una tienda de armas. "Es el aserrador, así que le toca llevar su sierra al hombro y aserrar árboles" explica Luckinbill. "Es un trabajo duro, un trabajo muy duro. Se hace evidente la pasión y dedicación que tienen que tener por la naturaleza".

Jake Picking interpreta a Anthony "Baby-G" Rose, el tipo de 23 años de mejillas rosadas cuya prometida está embarazada en el momento del Incendio de Yarnell Hill. "Él era uno de los más jóvenes" aclara Picking.

El antiguo Granite Mountain Hotshot en la vida real Brandon Bunch interpreta a su mejor amigo Garret Zuppiger de 27 años, quien tenía un título de administración de empresas y era un ávido pescador. "Garrett era un tipo genial. Era aventurero, muy trabajador, súper gracioso y siempre haciendo reír a todo el mundo. Siempre positivo" recuerda Bunch.

El antiguo marine de las fuerzas especiales Scott Foxx interpreta a Travis Carter de 31 años, que creció con su familia en un rancho. "Nuestras formas de ser se parecen bastante. Es un tipo callado, como yo. Era un tipo seguro, muy duro, pero muy listo cuando te sentabas a hablar con él. Era una bestia con la motosierra, el mejor que tenían en Granite Mountain. Nadie podía seguirle el ritmo" comenta Foxx.

Dylan Kenin es Robert Caldwell, de 23 años. Un jefe de escuadrón. "Se acababa de casar y caía bien a todo el mundo. Era un tipo muy inteligente al que le gustaba leer y le encantaba estar en el exterior" dice Kenin.

Sam Quinn interpreta a Grant McKee de 21 años, que acababa de sacarse el certificado de técnico en emergencias médicas y estaba prometido. "Vivió con su tía durante el instituto y le ayudaba con su tienda de ropa" puntualiza Quinn.

Matthew Van Wettering es Joe Thurston, graduado en la Universidad Southern Utah en las especialidades de química y zoología. Según Van Wettering, "Era un tipo muy humilde, mantenía su cabeza gacha y que trabajó muy duro desde joven".

En su debut en pantalla interpretando al pelirrojo Dustin DeFord vemos a Ryan Busch. DeFord creció en Montana junto a 10 hermanos y trabajó como misionero. "Fue educado desde casa" explica Busch. "Tenía un buen sentido del humor, pero le costaba un poco coger confianza".

En el papel de Sean Misner vemos al actor Kenneth Miller. Misner venía de Santa Ynez, California, donde creció rodeado de ranchos y viñedos. "Era un tipo callado. Amaba a su mujer y a su perro y esperaba a un hijo. Estaba sin duda orgulloso de ser americano" dice Miller, quien lleva accesorios patrióticos en la película, como un pañuelo bajo el casco, exactamente igual que el Misner de la vida real.

Ryan Jason Cook interpreta a Billy Warneke de 25 años, un antiguo marine que creció en Hemet, California. "Billy solía hacer lo que fuera por ayudar a otros" dice Cook. "Vivía con su mujer en una caravana a las afueras de Prescott".

Michael McNulty interpreta al excavador Kevin Woyjeck, el hijo de bomberos que creció en el sur de California. "Kevin amaba pescar, no dormía mucho y trabajaba muy duro" recuerda McNulty.

Nicholas Jenks es John Percin Jr., nacido en Oregon y que estaba en su primer año como Granite Mountain Hotshot. Antes había trabajado lavando platos en un restaurante mexicano para poder pagarse la academia de bomberos. "Le encantaba estar en el exterior y viajó un poco antes de asentarse en Prescott" dice Jenks. "Le apodaron Diesel porque trabajaba muy duro, era obstinado y nunca paraba de esforzarse".


Sobre la producción
Antes de empezar a rodar, los 20 actores que interpretan a los Hotshots formaron parte de un campo de entrenamiento de bomberos en las montañas a las afueras de Santa Fe. El entrenamiento fue conducido por el consejero técnico Pat McCarty y otros antiguos Granite Mountain Hotshots.

"Crearon un campo de entrenamiento que enseñaba a los actores a ser, no sólo bomberos forestales, sino también Granite Mountain Hotshots" dice Kosinski. "Les metimos de lleno en la naturaleza y aprendieron cado uno de los distintos trabajos de un bombero forestal. Durmieron bajo las estrellas y dieron cursos sobre incendios forestales. Pero lo más importante es que comprendieron la camaradería que hay en un equipo así".

"Mandé a 20 actores al campo de entrenamiento y volvieron como una brigada forestal" continúa Kosinski.

"Les hicimos trabajar, y trabajaron duro" dice McCarty. "Muchos de ellos jamás habían hecho algo así, y aunque tenían ampollas enormes en los pies y les dolía todo, ninguno se quejó. Se esforzaron mucho, durmieron sobre el suelo y se alimentaron con comida militar. No había nada glorioso en todo ello, pero mantuvieron una sonrisa en todo momento y adoptaron la mentalidad de un Hotshot".

De los 60 días de rodaje casi todos ellos contaban con escenas de exterior en terreno difícil. Cuando había una escena con fuego, aparte de tener una brigada de bomberos de verdad en espera, eran los propios actores los que tenían la responsabilidad de construir líneas de fuego reales. "Trabajamos, usamos sierras, excavamos, construimos una caja de contención para el fuego, y todo fue hecho por los actores" dice McCarty. "Cuando llegaba el momento de trabajar ellos simplemente cogían sus cosas y se ponían a ello. Era importante para ellos poder ver el fuego, y ver cómo el fuego se comporta con combustible".

Teller asegura que el campo de entrenamiento no sólo les enseñó lo básico de la profesión sino que también fue una experiencia que les unió de la misma forma que la hermandad de Hotshots. "El entrenamiento fue intenso" dice Teller. "Tienes que cortar en línea recta durante kilómetros y sin poder erguirte. Un tío tiene un rastrillo, otro un pico. Es como hacer paisajismo pero con esteroides. Es un trabajo muy duro pero no hay nada que una más que el sufrimiento colectivo. Sientes que no puedes defraudar al que tienes al lado, no puedes dejarle hacer trabajo extra sólo porque tú falles".

Para McCarty, "el realismo fue mi mayor preocupación a lo largo de todo el proyecto. Realismo en los personajes, en la forma de caminar, hablar, actuar y todo lo demás, pero también en las herramientas, en la forma en la que las escenas de fuego se desarrollaban, la forma en la que interactuaban con las radios, la forma de comunicarse entre ellos".

El hecho de insistir en el realismo hizo que la producción se complicase bastante, pero los actores lo aceptaron sin problemas. "Combatir incendios forestales, como profesión, no se ha visto en la gran pantalla antes, y Joe quería que la película fuese lo más realista posible" explica Teller.

"Dormíamos juntos, caminábamos juntos. Teníamos las peores ampollas que jamás hayas visto" añade Brolin. "Pero estábamos juntos en ello, nos ayudábamos unos a otros".


Localizaciones escabrosas
La producción se rodó en las mismas montañas donde los Granite Mountain Hotshots habrían combatido incendios. Las primeras cuatro semanas las pasaron en una de las localizaciones más accidentadas, donde había que escalar bastante.

La primera semana de rodaje fue en Pueblo de Nambé, un pueblo indio en la Montañas Sangre de Cristo al norte de Santa Fe. Aquí rodaron complicadas escenas de entrenamiento que tuvieron lugar en el Parque Nacional de Prescott, así como como escenas donde los Granite Mountain Hotshots combaten el incendio de Duck Lake en Michigan.

Después, la producción se trasladó durante dos semanas a la Montaña Pajarito, rodando en fuertes pendientes a más de 3000 m de altura y con caídas de 400 m. En estas montañas se encontraron con osos, arañas y ciervos mientras prendían fuegos o escalaban laderas para rodar las escenas de Cave Creek, los entrenamientos y la acción del incendio de Chiricahua Mountain.

Más tarde la producción se movió al rústico Chavez Ranch en las Montañas Ortiz, hogar de bisontes, yaks, aves de caza, ovejas y serpientes venenosas. Este entorno se utilizó para las escenas de montaña donde los Granite Mountain Hotshots combatieron el incendio de Yarnell Hill.

Las escenas que cuentan la vida privada de los bomberos se rodaron en varias localizaciones. El pueblo de Pecos se convertiría en Yarnell. Los exteriores del rancho de los Marsh se rodaron en una residencia de Eldorado, mientras que la casa Steinbrink y el corral se rodó en Galisteo. Otras escenas se rodaron en Los Álamos y en White Rock.

Algunas escenas clave se rodaron en Prescott, Arizona.

Uno de los hitos de la producción ocurrió en Santa Fe, en el Evangelo’s Cocktail Lounge, donde se rodaban las escenas que ocurrieron en la vida real en el Matt’s Saloon en Prescott cuando The Rusty Pistols Cowboy Band actuaron. El grupo que aparece en la película es el de Duane Steinbrink en la vida real, con Jeff Bridges tocando la guitarra y cantando.

Bridges hizo que el productor de música T Bone Burnett fuese a Santa Fe para grabar una sesión con Bridges para los temas que suenan en la película, incluida la canción "Ghost Riders in the Sky", que es el tema más famoso de The Rusty Pistols.

El Paseo a caballo de Marsh y Amanda y las escenas de acampada en Arizona se rodaron en Diamond Tail Ranch, cerca de Placitas. El restaurante donde Steinbrink y Marsh se encuentran con el alcalde es en realidad el histórico Legal Tender Restaurant and Saloon en Lamy.

Para las escenas en las que aparece en antiguo enebro en el Parque Nacional de Prescott, la producción construyó un decorado en el Bonanza Creek Ranch, al sur de Santa Fe, y juntaron varios enebros en uno.

Por último, se hizo un decorado en los Estudios Santa Fe, donde se construyeron los interiores del rancho Marsh y las oficinas centrales de los Hotshots. También grabaron ahí las escenas con fuego que requerían equipo especial.


La estética: Diseño de vestuario y de producción
La paleta de colores de la película enfatiza los tonos tierra, en especial los azules, grises y marrones, junto con el negro carbón. Tanto el diseño de vestuario con de producción se basaron en datos reales para dar autenticidad.

Diseño de vestuario
En gran parte de la película, los bomberos son vistos con un equipo contraincendios similar. Este incluye cascos, camisetas negras o de los Granite Mountain Hotshots, trajes amarillos CrewBoss Nomex, pantalones CrewBoss Nomex verde caqui, y botas de cuero negro de Spokane, Washington. "Es un equipo, un esprit de corps, y queríamos que eso se viese en sus uniformes" dice la diseñadora de vestuario Louise Mingenbach.

Cuando no están trabajando, los bomberos llevan camisas de cuadros, camisetas y vaqueros, de marcas como Wrangler, Ariat y Carhartt. "En Prescott, esa es la estética del vaquero" explica Mingenbach. Josh Brolin y Jeff Bridges aparecen a menudo como camisas de Carhartt y Jennifer Connelly suele llevar vaqueros de la marca Ariat.

Diseño de producción
Al crear la estética de la película, el diseñador de producción Kevin Kavanaugh se alió con Kosinski para crear una imagen potente. "Apuntábamos a una escala épica, con los encuadras más grandes que pudiésemos encontrar, para mostrar el poder, la belleza y destrucción de la Madre Naturaleza" explica el diseñador.

Los actores llevan unas mochilas customizadas que pesan unos 20 kg cada una, como los bomberos de verdad. Cada mochila lleva un equipo de supervivencia y herramientas para excavar y crear cortafuegos.

La producción se hizo con los camiones que pertenecían a los Granite Mountain Hotshots, alquilándoselos a la ciudad de Prescott. Son camiones Ford F-750 con taquillas para equipamiento encima de los asientos.

La sede de The Crew 7 se construyó fiel a la original en Prescott. Aquí es donde los Granite Mountain Hotshots trabajaban y entrenaban.


Capturando el fuego
Hay cinco incendios que se ven en HÉROES EN EL INFIERNO: el de Cave Creek, Arizona; Chiricahua Mountain, Arizona; Grand Canyon National Park, Arizona; Doce Fire, a las afueras de Prescott, Arizona; y el de Yarnell Hill, al sur de Prescott. "Tuvimos que encontrar la estética de cada uno" explica Kavanaugh. "Todos tienen características distintas y se ven de forma muy diferente".

Las secuencias del incendio de Granite Mountain son una mezcla de fuego real, efectos especiales y efectos visuales.

Para Joseph Kosinski, la clave residía en que los incendios fuesen lo más realistas posible. Durante la preproducción, colaboró con brigadas forestales para grabar incendios controlados, donde oficiales prenden fuego a una zona en concreto crear cortafuegos.

"El fuego es un personaje más en la película" dice Kosinski. "Hay gente que describe el sonido de un incendio forestal como un tren de carga o el respirar de un dragón. Un incendio grande en realidad respira, y eso lo puedes oír. El sonido acabó siendo una parte muy importante de la historia".

"Combatir un incendio es casi como una batalla aérea" comenta el productor Lorenzo di Bonaventura. "Hay todo tipo de helicópteros y aviones soltando agua y otras sustancias que sofocan el fuego. La batalla se orquesta desde la sede central. Pero en el campo de batalla está la infantería, los bomberos intentando hacerse paso. Puedes ver la bestialidad en lo que hacen, el gran reto que es tratar con el fuego a un nivel tan elemental".

El departamento de arte construyó un bosque de dos acres detrás de los Estudios Santa Fe, donde replantaron más de 600 pinos, enebros y demás árboles, junto con arbustos, hierba y piedras, e instalaron un sistema de regadío. Se instalaron tuberías contra incendios y se crearon arbustos adicionales de acero. Miles de camiones descargaron tierra para crear una base montañosa junto con otros 50 que traían ramas, troncos, palos y demás desechos.

Los incendios se iniciaron prendiendo tanques de propano líquido, donde las llamas llegaron alcanzaron alturas de 30 m y la temperatura era tan intensa que el reparto corrió huyendo la primera vez que lo vio. Los árboles eran una mezcla de árboles reales y otros de acero con pequeños conductos por los que se bombeaba el propano líquido para que explotase. Los árboles reales se cubrieron con un protector ignífugo para que cuando cortasen la llave del propano el fuego se disipase.

Los árboles estaban rodeados de turba y musgo mezclados con combustible diésel para crear los fuegos a nivel del suelo. Se usaron grandes ventiladores para proyectar polvo y humo. "Hemos puesto todo el polvo, tierra, mugre y humo que hemos podido" admite Kavanaugh. "Es como si nada fuese suficiente".

Además de orquestar los distintos fuegos localizados, el supervisor de efectos especiales Mike Meinardus creó incendios completos acompañados de efectos especiales como humo blanco y negro. Supervisó al equipo que controlaba el flujo de propano hacia los árboles y arbustos de acero. Había números tanques de propano de 2.000 litros y alguno de 10.000. Había camiones con tanques de agua cerca siempre que se encendía un fuego.

La construcción del bosque en la parte de atrás del estudio tardó cuatro meses, y los incendios más grandes ocurrieron en agosto. "Les dimos a los actores la mayor realidad posible" dice Meinardus. "Creamos una mezcla de combustible y turba que rociamos por el suelo y eran los propios actores los que encendían el fuego con unas antorchas. El bosque era tan real que conejos, serpientes, arañas y lagartos se mudaron a él".


Sobre los Granite Mountain Hotshots reales
Los Granite Mountain Hotshots reales fueron un equipo de Hotshots fundado en un principio municipalmente, certificado en 2008 y liderado por Eric Marsh. En sus memorias Granite Mountain (escrito junto a Stephen Talty), Brendan McDonough describe a Eric Marsh: "Era de North Carolina, le encantaba el exterior, era un guapo de película, antiguo jugador de rugby y era biólogo por la Appalachian State".

Los Granite Mountain Hotshots alcanzaron una gran reputación por sus capacidades, habilidad y disposición durante sus seis años de operaciones, que en la película están comprimidos en un periodo más corto. "Granite Mountain fue conocido por ir donde fuese y combatir cualquier tipo de incendio" escribe McDonough. "Si les llamabas, iban. Arizona, California, Montana o Minnesota, siempre respondían. Les mandaban en helicóptero a las zonas más remotas y se quedaban ahí durante dos semanas, viviendo como Lewis y Clark en la frontera".

Los Granite Mountain Hotshots no sólo era expertos bomberos forestales, también eran conocidos por el respeto que tenían hacia las distintas comunidades a las que visitaban. Como Sean Flynn describe en su artículo de 2014 para la revista GQ, "los hombres de Marsh se metían la camisa por dentro, no escupían y limpiaban el lavabo después de lavarse. Trataban a las camareras y desconocidos con respeto".

En 2013, su última temporada, la edad media de la brigada era de 27 años. McDonough llevaba formando parte del equipo tres años.

El trágico incendio de Yarnell Hill se originó por un rayo en junio de 2013. A medida que aumentaba el viento, el fuego se propagó. Entonces, en el 30 de junio, el viento cambió de dirección impredeciblemente, torciendo y girando el avance del fuego. McDonough, que era el vigilante de los Granite Mountain Hotshots durante ese día, contactó por radio con el capitán alertándole sobre el viento. Cuando el fuego avanzó hasta su posición, alertó al equipo y se retiró montaña abajo.

A medida que los vientos soplaron cada vez más fuerte y el fuego avanzaba más rápido, el superintendente Eric Marsh guio al equipo en consecuencia, cambiando su trayectoria a zonas que fuesen seguras. El frente de fuego se acercó más rápido de lo que nadie anticipaba. La comunicación con la radio de Marsh se interrumpió por el viento. Entonces, el viento cambiante sopló fuerte y la vía de escape de grupo fue bloqueada. En medio del infierno de llamas sacaron sus protecciones contra el fuego.

Fue la mayor tragedia del cuerpo de bomberos desde el 11 de septiembre. En el acto de recuerdo por las víctimas, el vicepresidente Joe Biden aseguró que "todos los hombres son creados iguales, y después hay alguno que se hace bombero". La brigada de Granite Mountain Hotshots se desarmó después de la tragedia.


Breve historia sobre los bomberos forestales reales
Las agencias federales financian y supervisan la mayoría de brigadas forestales, muchas bajo la jurisdicción del Servicio Forestal de Estados Unidos. Una clase de bomberos especialistas, los Hotshots combaten incendios forestales en la línea de fuego y su estrategia suele consistir en cercarlos con cortafuegos. Ahogan el fuego y fuerzan su extinción en el perímetro. Llevan las herramientas sobre la espalda: motosierras, picos y hachas. Cuando combaten un incendio, los equipos retroceden hasta las zonas frías y libre de combustible, como son árboles, arbustos y hierba.

En el artículo de 2014 para GQ Sean Flynn escribió que "lo que hace que sean un grupo de élite es que tienen mucho aguante. Aguante físico, ya que tiene hacer un trabajo duro, llevando una mochila que pesa al menos 18 kg con pendientes ridículas, en barrancos o en cimas de montaña, y casi siempre tienen que escalar varios kilómetros antes de llegar ahí. Pero también aguante mental, ya que son capaces de hacer todo eso durante 16 horas, dormir en el suelo, levantarse y hacer lo mismo durante otras 16 horas, día tras día tras día, sin rendirse, o por lo menos, sin que les afecte el hecho de que lo que hacen es casi siempre deprimente".

Hay aproximadamente 107 brigadas de Hotshots en Estados Unidos, cada una compuesta de 20 bomberos. Los 2.000 bomberos forestales certificados de élite deben estar entrenados completamente en tácticas de combate contra incendios, estar siempre preparados y siempre bien equipados para viajar a zonas remotas en cuanto les avisen en la temporada de incendios durante el verano. Los equipos normalmente llegan, montan el campamente, crean una estrategia para abordar el incendio y luego saltan a la acción.

En su libro The Fire Line, Fernanda Santos comenta como "las brigadas de élite son equipos muy unidos de 20 bomberos, extremadamente entrenados, increíblemente en forma y con mucho coraje, pero, como suelen decir, sólo tan fuertes como su elemento más débil. Si el incendio forestal es visto como un campo de batalla, ellos son la infantería, abordando al enemigo a pie".

Es un trabajo extremadamente peligroso, y cada vez más con los incendios creciendo en tamaño en el oeste de Estados Unidos y en el resto del mundo.