Músculo, sudor y sacrificio. Faltan 48 horas para el campeonato mundial de culturismo, para el que Lea Pearl ha entrenado duramente bajo la pedregosa mano de su entrenador Al (Peter Mullan), mentor y antigua estrella del bodybuilding que cuida celosamente de ella, con la esperanza de que su “perla” le devuelva las luces del escenario. A pocas horas de la final a Léa le asaltan las sombras del pasado: su expareja reaparece trayendo consigo al hijo de ambos, de seis años que Lea lleva cuatro años sin ver.