La película nos acerca a la vida cotidiana de esos miles de refugiados de larga duración que aguardan a que Europa les acoja luchando por mantener viva la esperanza a pesar de las precarias condiciones bajo las que subsisten. En edificios ocupados en Atenas o en campos de refugiados repartidos por todo el país, estos hombres y mujeres siguen a la espera de una documentación que les permita continuar con sus vidas.