Héctor, de 17 años, interno en un centro de menores, participa en una terapia de reinserción con perros donde establece un vínculo indisoluble con uno tan apocado y esquivo como él. Cuando un día su perro no aparece porque por fin ha sido adoptado, Héctor, lejos de alegrarse, decide escaparse para buscarlo. Así empieza un viaje inesperado, en el que participan su hermano mayor Ismael, su abuela Cuca, dos perros, una vaca y otros animales.