«Hacer esta película fue como un juego colaborativo. Creábamos secuencias con storyboards hechos a mano, que luego criticábamos y desechábamos. En algunos casos, comenzamos de cero con las ideas. En otros casos, trabajábamos en base a algún concepto. Hay que forzar en busca de ese momento que no esperarías que los personajes expresaran, eso que sabes que la mitad del público estaba sintiendo..., pero que nadie es capaz de articular hasta que un personaje lo suelta. O eso, o usar pedos de purpurina sin pudor ninguno. Y lo de que un tipo desnudo ponga un huevo también parece funcionar». - Gina Shay, productora.
DreamWorks Animation presenta TROLLS 2-GIRA MUNDIAL, la secuela de la comedia musical de animación estrenada en 2016 que vuelve protagonizada de nuevo por ANNA KENDRICK y JUSTIN TIMBERLAKE en su versión original, con RACHEL BLOOM, OZZY OSBOURNE, JAMES CORDEN, CAROLINE HJELT, AINO JAWO, RON FUNCHES, y KUNAL NAYYAR. MARY J. BLIGE, GEORGE CLINTON y ANDERSON PAAK se encargan de dar la nota de color al mundo del funk. Representando el mundo del country, KELLY CLARKSON ponde voz a Delta D, SAM ROCKWELL a Hickory y FLULA BORG a Dickory. J BALVIN aporta el toque de reggaetón, mientras que ESTER DEAN deja su huella en la tribu del pop. ANTHONY RAMOS marca el ritmo tecno y JAMIE DORNAN se ocupa de dar a la película unas pinceladas de jazz. La cinta también cuenta con el renombrado director musical y violinista GUSTAVO DUDAMEL en el papel de Trollzart, y con CHARLYNE YI en el de Flautina, en el reino de la música clásica. Por último, KENAN THOMPSON rapea a ritmo de hip-hop interpretando al bebé Troll Mini Diamante.
Dirigida por WALT DOHRN, que codirigió la anterior entrega de Trolls, mientras que GINA SHAY repite como productora. Además, la película está codirigida por DAVID P. SMITH y coproducida por KELLY COONEY CILELLA, ambos de vuelta en la saga tras trabajar en Trolls. TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL contará con temas musicales compuestos para la ocasión por Justin Timberlake, que estuvo nominado al Oscar® por su canción de 2016 de Trolls «Can't Stop the Feeling!», y una banda sonora original de Theodore Shapiro (Last Christmas y El diablo se viste de Prada).
Lejos, muy lejos de casa
Hace mucho tiempo, según la leyenda que se ha transmitido de generación en generación hasta Poppy y sus amigos, todos los Trolls vivían en perfecta armonía, y las seis cuerdas de una lira irrompible mantenían unido su multiverso musical.
Los Trolls Pop, así como los de las tribus del country, el tecno, la música clásica, el rock y el funky, exploraban sus melodías increíblemente innovadoras y ejercitaban los creativos músculos que rodean la gema de su ombligo.
A medida que cada género comenzó a sentirse menos escuchado por sus semejantes y se sofocaba creativamente, los sonidos perdieron frescura y los músicos se hicieron cada vez más recelosos. Y así, llegó un momento en que los guardianes de cada una de las seis tribus Troll, así como los errantes miembros del clan del reggaetón, el hip-hop, el k-pop e incluso el smooth jazz, se dispersaron por el reino. Se dice que la historia la escriben los ganadores, y por eso los libros de los Trolls Pop tienden a narrarla con tintes poperos.
Los tomos de los Trolls Funky ilustran una historia muy distinta, en la que otros Trolls les robaron sus sonidos y presentaron ese trabajo de sus imaginativos semejantes como sus propias creaciones.
Cuando en la tribu del rock se cansan de hacer de segundones frente al pop y se embarcan en una aventura que debieron emprender hace tiempo para conquistar el mundo, Poppy, recién coronda reina de los Trolls Pop, deberá intervenir para salvar la situación. Del único modo que sabe, Poppy se pone manos a la obra para unir a las tribus de nuevo y demostrarle a Barb lo mucho que se equivoca con su modo de hacer las cosas.
Alentada por un optimismo contagioso y una visión del mundo un tanto limitada, Poppy, que siempre ha vivido en su minimundo al margen de dificultades, no sabe gran cosa de la complejidad de las variadas dificultades tribales de sus semejantes, problemas históricos que ella piensa poder solucionar a base de abrazos.
Acompañándola en su aventura para unir a las tribus tenemos nada menos que al negativo Branch, cuyos crecientes sentimientos por su determinada reina son más difíciles de esconder cada día que pasa. También contará con la improvisada compañía de Grandullón y su eterna adicción al algodón de azúcar, y de su habitual camarada el Sr. Dinkles, tan valiente como parco en palabras, a quienes además les preocupa que su regente esté empezando a llevarlos por el mal camino.
Ahora Poppy, con su corazón de oro, deberá aprovechar la oportunidad para afrontar un proceso de maduración muy necesario para ser una líder efectiva (y extraordinaria). ¿Se transformará en una reina a la altura del cargo, dispuesta a escuchar los diferentes sonidos... o volverá a la actitud del ancestral pasado de su tribu? Temiendo ser excesivamente blanda si cede y acabar abocada a la perdición si no, esta joven Troll deberá aprender que la lección más valiosa que puedes aprender es confiar en tu corazón y saber escuchar.
Poppy evoluciona y aprende
La primera película de la saga Trolls nos enseña a sentir la alegría que experimentamos forjando lazos interpersonales en nuestra comunidad. Si la película gira en torno a un eje, es el de «conectar con la fuente de felicidad que tenemos dentro y no conformarse con soluciones externas rápidas», reflexiona la productora Gina Shay.
Si en la primera película, Poppy muestra a los gigantes Bergens la forma de buscar su luz interior, en la segunda película es la nueva reina quien se convierte en estudiante. Este capítulo del director Walt Dohrn y el codirector David Smith los temas principales de la saga alcanzan una nueva dimensión. Llegan más allá y expanden sus horizontes para incluir a todas las comunidades, con poblaciones musicales cuya existencia no se habían ni planteado nuestros Trolls Pop.
Cuando Poppy descubre que todas las voces importan y que todos necesitamos aprender a escuchar más que nunca, empieza a entender mejor a sus camaradas Trolls y decide que su tribu debe vivir en paz y armonía musical... con el resto del mundo Troll.
Hablando sobre su deseo de trastocar las expectativas del público, Shay nos cuenta que su equipo aspiraba a ampliar el mundo de Trolls, especialmente en el ámbito lírico y sonoro, para lo que crearon todo un mapa de reinos basados en géneros musicales.
«No queríamos seguir el mismo esquema», nos cuenta Shay. «La película trata sobre que todas las voces se unen para crear una armonía. Todo procede de la historia, o no destilaría autenticidad. En aquel momento, con la película Trolls, había una canción que ponía contento a todo el mundo. Te hacía literalmente ponerte a cantar y bailar. En TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL, el objetivo es unir a todos».
Para los actores que interpretan a Poppy y Branch, los desafíos que afrontan sus personajes resultaron bastante inesperados. En lo que respecta a Anna Kendrick, que le ha dado tanta profundidad a su querido personaje, la siguiente aventura de Poppy será la más relevante hasta la fecha. «Anna es increíblemente inteligente y muestra una gran consideración por los temas que exploramos y por cómo se pueden aplicar a Poppy sin que resulten embarazosos para nadie», nos dice Smith.
Dohrn trabajó en estrecha colaboración con Kendrick y Justin Timberlake para desarrollar a los dos personajes, y se mostró entusiasmado con que este último aceptara expandir sus responsabilidades. «Justin tenía una gira mundial en la agenda cuando comenzamos la producción, pero ha estado superinvolucrado desde el principio, desde que le presentamos la historia y hablamos de los momentos donde podrían incluirse las canciones», nos explica el director. «Estaba muy emocionado de poder trabajar con todos esos géneros y artistas diferentes».
Poppy y Branch cuentan con otros compañeros en la Bolsa de Chuches. Dohrn explica por qué fueron elegidos para la aventura: «Grandullón y el Señor Dinkles eran dos de nuestros favoritos. Queríamos incorporar a varios de nuestros antiguos personajes al viaje, y como Grandullón es tan divertido, se llevó el premio. No es solo por el propio Grandullón y James Corden, que es alucinante, sino por su relación con el Señor Dinkles. El público lo llama “su compañero”. A la gente le recuerda a su propia relación con sus mascotas».
Acompañando a los Trolls está Cooper, que es el único miembro de cuatro patas de la tribu pop y que tiene muchas ganas de saber más sobre su gente y las influencias que inspiran el ritmo que siente en el cuerpo. Para poner en el buen camino este viaje profundamente personal, se contó con la ayuda del Dr. DARNELL HUNT, decano de Ciencias Sociales en la Universidad de California en Los Ángeles y reconocido por sus conocimientos sobre razas, medios de comunicación y culturas. Hunt, antiguo jefe de la cátedra de Sociología en esta universidad y líder del Centro de Estudios Afroamericanos Ralph J. Bunche, es un experto en diversidad e inclusión, y quería ayudar a los cineastas a componer un mosaico adecuado para explorar temas complejos de un modo adecuado para todas las edades.
Hunt valora positivamente que no todo sea lo que parece en lo que respecta al origen de los Trolls. «Me resultó muy imaginativo que la película pudiera decir algo importante sobre celebrar nuestras diferencias y las consecuencias negativas del sentido de la justicia y el orgullo mal entendidos dentro de un grupo particular, algo que puede derivar en marginar a otros», explica. «Me pareció una lección muy apropiada para niños, jóvenes y familias».
En opinión de Hunt, el modo de vacunarse contra los riesgos de ahondar en estereotipos es apostando por una humanidad total. «Poppy acaba dándose cuenta de que vivía demasiado ensimismada y ajena a la diversidad de valores de otra gente y culturas, casi como en un imperialismo cultural», dice el Dr. Hunt. «Cooper también tiene sus fallos, además de sus atributos y contribuciones valiosas. Hay que equilibrar ambas facetas para hacer personajes que conecten con el público. Deben tener deseos, necesidades... Que no sean meros objetos, sino sujetos de verdad. Eso te permite explorar su humanidad y hace mucho menos probable caer en estereotipos».
Fue crucial para todos los implicados no limitarse a dar voz a esta narrativa. «Nos dejamos la piel trabajando en el viaje de Cooper», dice Smith. «Cooper tiene una vida propia en la serie de Netflix, y Ron Funches, que es un cómico y actor increíble, lo ha acompañado desde la película Trolls a la serie, donde ha evolucionado hasta convertirse en ese adorable tontorrón. Ha aportado todo eso a TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL, pero lo cierto es que ver a Ron sumergirse en ese viaje de autodescubrimiento... ha sido una experiencia extraordinaria».
Para Funches, dar vida a este personaje es como completar un ciclo. «Ha sido un sueño hecho realidad ponerle voz a Cooper», confiesa el intérprete. «De pequeño, muchas veces se burlaban de mi voz, y es increíble comprobar que, a menudo, las cosas que más nos avergüenzan pueden ser nuestros mayores dones. Trabajar con Walt, Dave y todo el equipo de DreamWorks ha sido una auténtica bendición. La cantidad de amor que invierten en cada personaje y la libertad que me han dado para interpretar al personaje y meterme en su piel crean un entorno de trabajo realmente maravilloso. Espero poder trabajar con ellos en Trolls durante muchos años».
Mini Diamante es su nombre
Los Trolls Pop han llevado la alegría a nuevas cotas con el nacimiento de la última incorporación a la familia, Mini Diamante. ¿De dónde ha salido? De un huevo que puso Guy Diamante, cómo no. Inseparable de papá desde que rompió el cascarón, Mini Diamante tiene una voz de barítono increíblemente grave. También es un rapero de enorme talento, con una enorme variedad de influencias musicales hip-hop.
Teniendo en cuenta que el equipo ha expandido el mundo para añadir tantas sociedades Troll en esta entrega, y que todas ellas cuentan con atributos únicos definidos por su género musical dominante, Mini representa a la próxima generación de Trolls Pop.
Para dar vida a Mini Diamante, el equipo contó con la voz de Kenan Thompson, que eleva el nivel de comedia de Villa Pop. Según Thompson, «Mini Diamante es el bebé que manda en casa. Si rompes algo, él lo arregla. Y se acabó. Cuando Walt y Dave describieron el personaje, surgió hablar de la voz de Mini. Les dije que yo lo visualizaba como un niño despreocupado que ha nacido con una infinita seguridad en sí mismo y un don como rapero. ¡Además, a mi mujer y a mis hijas les encanta la purpurina, y ahora a mí también! Verme cubierto de purpurina es un sueño hecho realidad para todos en casa. ¡Ja, ja! ¡Buen rollito!».
Para el codirector Dave Smith, fue todo un golpe de suerte en lo que a casting respecta. «No recuerdo ni un momento de mi vida sin Kenan», dice. «Siempre nos estamos riendo de sus sketches de SNL».
Al ser todos padres, los cuatro principales cineastas vieron a sus hijos reflejados en el descaro de Mini. La productora Gina Shay, que puso nombre al pequeño diablillo, nos cuenta: «Tenemos que dar al público lo inesperado. Kenan hizo de Mini una auténtica estrella antes de que surgiera la película».
Tanto el director Walt como Smith están especialmente orgullosos de Mini, por haber gestado la idea desde el comienzo. «Sin pedirles ni preguntarles nada, los niños escribían en las tarjetas en letras grandes MINI DIAMANTE durante las proyecciones de prueba», nos cuenta Dohrn riéndose. «Su creación tuvo lugar tras un primer pase... en la que había una escena inicial en la que Guy Diamante salía bailando y se tiraba pedos de purpurina. Tras la visualización, los del estudio nos dijeron que podíamos aspirar a algo mejor. Al principio nos ofendimos un poco. A nosotros nos encantan los pedos de purpurina. Es un elemento nivelador. Seas quien seas, te tiras pedos. Todo el mundo se puede sentir identificado con ese un humor tontorrón».
Tras lamerse las heridas durante un par de semanas, los cineastas tuvieron una revelación. Dohrn recuerda: «Dijimos: “¡Lo tenemos! Guy Diamante hace su baile... y tiene un bebé”. El bebé le nace del pelo y sale de un huevo. En cuanto Mini emerge, se pone al cargo con su carácter hosco. Tengo tres hijos, y siempre están al mando. En un abrir y cerrar de ojos, aparece este minihombre-bebé».
El propio Papi Diamante, Kunal Nayyar, ha vivido con su avatar durante casi cinco años y fue el primero en recibir con los brazos abiertos a Mini en la resplandeciente familia. «Tener la libertad creativa de interpretar a un personaje que habla en auto-tune y se tira pedos de purpurina ha sido más divertido de lo que nunca hubiera imaginado», confiesa. «Y ahora, ¿dar vida a través de mi pelo a un hijo rapero? Gracias, Walt y Dave, por cumplir mis sueños de Hollywood y despertar a mi niño interior».
Cuando Poppy corta el cordón y emprende su aventura para unificar el Reino de los Trolls, lo hace viajando con estilo: en un globo de aire caliente orgánico enteramente fabricado de flores. Pero, además, no es un dirigible cualquiera.
El globo de flores de Poppy, llamado Sheila G (con voz en VO de DA'VINE JOY RANDOLPH), tiene sus propios sentimientos e ideas, y avisa de vez en cuando para mantener a su reina, Branch, Grandullón y el Señor Dinkles en ruta (e impedir que se la peguen mientras tratan de dar con el complejo manual del usuario).
Sheila G es un perfecto ejemplo de vehículo que también es un personaje, sumando a la deliciosa extravagancia del mundo de los Trolls. «La cantidad de objetos inanimados que se han convertido en personajes es una auténtica locura», dice la coproductora Kelly Cooney Cilella. «Comenzamos pensando que teníamos 40 y acabamos con más de 100. Le pusimos ojos a todo lo posible. A veces, los veíamos en una reunión de storyboards y nos preguntábamos: “¿De verdad vamos a hacer esto?”. La respuesta solía ser que sí».
Para los responsables de crear los modelos artesanalmente, todos los personajes de TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL están inspirados en las creaciones que alcanzaron la fama mundial en los 60 y los 70. «El diseño de los Trolls procede de los muñecos, esos personajillos rechonchos con una mata de pelo de lana de colores brillantes», confirma la diseñadora de producción KENDAL CRONKHITE SHAINDLIN. «El idioma de formas estaba ahí. No tenemos ni una sola línea recta elegante en la película, como sucede con los muñecos».
Asimismo, la sensibilidad fue la chispa para generar un universo inspirado en fibras. «No solo es el pelo, sino también las prendas de textura afelpada que solían llevar estos muñecos», comenta Cronkhite Shaindlin. «También nos inspiramos enormemente en la época de los Trolls de la Suerte, en la que dominaba lo multicolorido y la variedad de texturas. Seguimos esa idea».
Cuando Sheila G pone en camino a sus amigos, pronto descubrirán mundos que nunca soñaron que existían. «En cada género (y territorio) dominan los colores que los representan», dice Cooney Ciella. «Mientras que el pop siempre ha sido turquesa y rosa, el rock es rojo, negro y azul oscuro. El funky es morado y dorado. El country se caracteriza por tonos tenues y cálidos. La música clásica es dorada y el tecno luce colores neón chillones».
Como prueba de que los parámetros de este universo son ilimitados -y de que puede pasar cualquier cosa en una peli de Trolls-, está la escena del smooth jazz, un triunfo de los cineastas, en la que un peludo Chaz surge de la nada y se camela a Branch, Poppy y Hickory con el suave estilo de su género musical. Arrullados hasta una amodorrada rendición, es seguro que los Trolls Pop caerán en las manos de Barb... a no ser que puedan escapar de esa pesadilla.
Según creaban la historia, los miembros del equipo observaron que no había villanos en la película, pero que sí podía haber un género musical auténticamente malvado. «Nos preguntamos: “¿Cuál es el estilo musical más maléfico?”», cuenta el director Walt Dohrn. «Esa música inofensiva que escuchas en el dentista mientras te están haciendo una endodoncia, o mientras presentas tus impuestos».
Diseñada para ser un viaje psicodélico en una playa cósmica con luna llena, la escena combina imágenes de acción real con fotos de archivo, todo ello mezclado con los personajes. «Era un collage de cosas tan diferentes que era difícil saber cómo resultaría», confiesa la coproductora Kelly Cooney Cilella. «Teníamos las pinturas del artista de desarrollo visual PETER ZASLAV como objetivo, pero la escena no tomó forma hasta que llegamos a la fase de iluminación».
Gran parte del diseño de Chaz surgió tras dar con el humor necesario para esta secuencia. «El aspecto de Chaz nace de un cruce entre la portada de una novela romántica y un baño de burbujas a la luz de las velas», cuenta el director de arte y diseñador de personajes Tim Lamb. «Queríamos que fuera seductor, pero de una forma un poco absurda. Su pelo del pecho con forma de corazón, sus apretados pantalones de cuero sintético y su mostacho contribuyen a lo absurdo de la escena».
¿Y quién mejor para dar vida a este heraldo del postapocalíptico mundo del género musical que la superestrella de cine Jamie Dornan? «La suave y sensual voz de Jamie es perfecta para Chaz y su demoníaco smooth jazz», dice la productora Gina Shay.
El equipo quería que este cazarrecompensas fuera de la ley fuera alguien que te sedujera con su saxo. «Eso es lo que piensa Chaz de sí mismo, de todas formas», puntualiza Dohrn. «No sabíamos que Jamie fuera un tipo tan encantador y dispuesto a hacer reír y trabajar en una película que sus hijos puedan ver».
Para Dornan, de unirse a la producción fue una decisión muy personal. «Las únicas personas más emocionadas que yo mismo por estar en TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL son mis hijas», cuenta el actor. «¡Para ellas va a ser divertidísimo!».
El intérprete descubrió que sus compañeros apoyaban con entusiasmo sus improvisaciones. «Me encanta el proceso, aunque en realidad estaba aterrado», confiesa. «Mi personaje encarna el smooth jazz, y tomé como inspiración los anuncios que solía escuchar en la radio en Irlanda del Norte, en los que todo el mundo ponía unas extrañas, sedosas y americanizadas voces que yo encontraba de lo más divertidas».
Aunque al final Chaz toca el saxofón, estuvo a punto de tener el fiscorno como arma. El compositor Theodore Shapiro cuenta que aportó un poco de sensatez a sus directores. «Cuando vinieron a mí, ya tenían una canción metida en la escena que resultaba bastante divertida», recuerda. «Pero yo sentía que el tipo de smooth jazz que Chaz tocaría no tenía que ver exactamente con aquella canción. Así que intenté tocar lo que creo que es la versión más pura del smooth jazz, homenajeando un poco a Kenny G, y afortunadamente todo el mundo quedó contento con esta apuesta».
Chaz no fue el único rompecorazones, ya que el codirector Dave Smith resultó elegido para interpretar al sirviente de los pantalones cortos. «Dave es el exhibicionista, y estaba disponible», cuenta Dohrn. «Este fue uno de esos casos en los que los ejecutivos son tan cuidadosos con el elegante universo que se está creando, que Dave y yo tuvimos que rogar: “Ya que la escena es una fantasía, y funciona fuera del mundo Troll, ¿podemos por favor hacer que parezca sacada de una televisión local? ¿Podemos hacerla con mala calidad?”».
Aunque la escena estaba en el guion y contaba con bocetos, el equipo no terminaba de dar con lo que quería hasta que JC WEGMAN hizo una propuesta creativa. «JC es un dibujante freelance con una imaginación sorprendente, que no es tradicional en ningún modo, forma o manera», dice Smith. «Lo primero que propuso es lo que finalmente aparece en la película».
La escena, de apariencia engañosamente simple, exigió que todos los creativos se pusieran manos a la obra para conseguir que funcionara a la perfección. «¡Fue una locura tan grande como los propios bocetos!», afirma el responsable de composición Todd Jansen. «Antes de empezar, los responsables de los diferentes departamentos hablamos para asegurarnos de que todos remábamos en la misma dirección. Una parte importante de la secuencia iba a ser un fragmento muy breve de imágenes reales. Era importante porque íbamos a poder incorporar esas imágenes muy al comienzo del proceso de composición, para asegurarnos de que funcionaban. Así, la idea quedó clara para el resto del proceso».
Animados por la fe puesta en estas locas ideas, el equipo también pidió añadir imágenes de archivo igual de raras. «El metraje que incluimos del tigre era algo cutre y no tenía la misma resolución que el resto de la película», cuenta Smith. «Querían que la resolución coincidiera, y dijimos: “¡No, por favor!”».
«Perdí la cuenta de las reuniones tuvimos acerca de aquel tigre...», recuerda Dohrn con un suspiro.
El guion gráfico
Los cineastas principales aprendieron el oficio trabajando en la saga Shrek, donde los artistas de guion gráfico interpretaban con libertad el guion literario, y quisieron trasladar esa libertad a esta producción, permitiendo que se aportaran ideas. «Mientras se desarrollaba el guion gráfico de la escena del smooth jazz, insistieron en que el viaje que la película propone se viera a través de los ojos de Poppy. «Es su historia de maduración», asegura el director Walt Dohrn, «y del público principal que crece con ella».
La mayoría de cambios tiene lugar durante la fase de guion gráfico, ya que resulta más difícil cambiar elementos cuando la producción avanza. Desde que la visión de JC Wegman diera forma a la escena del smooth jazz -y los directores quedaran encantados por su inventiva-, la secuencia no dejó de retocarse hasta quedar perfecta.
TIM HEITZ, que fue artista de guion gráfico en Trolls, es el responsable de desarrollo de la historia en TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL. «Los artistas de guion gráfico le proponían ideas locas a Tim, que respondía: “¡Sí, vamos a mostrarle esto a los directores!”», cuenta la coproductora Kelly Cooney Cilella. «Tim retaba a los artistas a tomar caminos inesperados».
Como los bocetos de composición ofrecen expansiones de la historia, el equipo experimentó con secuencias en la que Chaz descendía por el arco que dibujaba el salto de un narval. «Con ellos hacemos versiones tempranas de previsualización de los decorados», explica el responsable de composición Todd Jansen, «y después colocamos cámaras con personajes provisionales, luces y movimientos, y comprobamos que todo esté a su debido tamaño».
Una vez que el equipo de Jansen llegó a la fase de la composición final de los planos individuales, la atención se centró en la necesidades de la historia. «Por ejemplo, en un momento íntimo entre Branch y Poppy tiene sentido simplificar los ángulos de cámara», dice Jansen. «Se trata de tener un rango dinámico de altos y bajos que esté al servicio de la narración».
Modelado y superficies
Ya sea el enorme sombrero de Hickory o el pelo del pecho de Chaz en forma de corazón, parece que pudieras extender la mano y tocar los diferentes elementos de la escena. Esto se consigue gracias a modelos intrincadamente detallados y la creación de superficies de fieltro; y fueron el supervisor de modelado CHARLES ELLISON y el supervisor de superficies ANDY HARBECK los encargados de estas dos áreas claves de la producción.
Sobre el proceso para crear el estilo visual para esta secuencia, Ellison comenta que «la escena del smooth jazz fue siempre un caso de colaboración e iteración. Nuestra meta era capturar la esencia de los maravillosos diseños de personajes de Tim [Lamb, director de arte y diseñador de personajes] y asegurarnos de que trasladábamos de la mejor forma posible sus diseños al 3D».
La primera entrega de Trolls presentó un mundo hecho de tejidos, y esta segunda parte ha aumentado los procesos de modelado para crear las superficies. «Además de arreglos de cabello y pelaje, construimos herramientas fáciles de usar para los artistas que permitían a los creadores de texturas generar curvas personalizadas para hacer bordados, punto, rotos y puntadas», explica el supervisor de efectos visuales Matt Baer. «Cada puntada consiste en miles y miles de curvas, lo que permite que las fibras atrapen la luz de forma realista».
Movimientos de los personajes
MARTIN COSTELLO, responsable de los movimientos de personajes, fue el líder del equipo responsable de crear el esqueleto y la geometría añadida que aportaran movimiento creíble a 84 personajes y 94 variaciones en 398 semanas. Esta monumental tarea creció tanto no solo por la existencia de varias especies nuevas de Trolls, sino porque cada tipo de Troll en cada mundo debe interpretar su papel de forma personalizada, desde los que tienen cuatro patas a los que tienen dos brazos sumados a las cuatro patas, pasando por Trolls con dos brazos y aletas en lugar de piernas. Y a nadie le gusta más la interpretación que a Chaz.
El director de arte Tim Lamb tenía en mente un aspecto muy específico para nuestro villano, así que se realizaron muchas iteraciones y rediseños para que el movimiento casara con las ilustraciones. Como Chaz tenía como base un Troll Pop masculino genérico, los animadores de movimientos de cara y cuerpo tuvieron que adaptarse a los diseños de Lamb usando los controles de animación (por ejemplo, haciendo su nariz más ancha, alargando la forma de su cabeza y torso, y haciendo que su mandíbula fuera más recta). El voluptuoso pelazo y la romántica mata de pelo en el pecho de este músico de smooth jazz fueron obra del departamento de superficies.
Estos elementos se «cocinaban» en el departamento de movimientos y se pasaban a los animadores para que comprobaran que funcionaban. El director de animación CARLOS PUERTOLAS revisaba y aportaba cambios en los diseños antes de que Chaz regresara al departamento de movimientos para el afinado definitivo. ¿Cuál fue el mayor desafío de Costello durante la producción? «Hubo que trabajar mucho la boca y la lengua de Chaz para esos momentos en los que toca el instrumento, y su pelo era un personaje en sí mismo», responde riendo.
Animación
El director de animación Carlos Puertolas no solo creó una «escuela de marionetas» para sus animadores, también ayudó a todos los departamentos con las interpretaciones, posturas y expresiones, así como a generar ideas. Cuando los directores veían cualquier escena, especialmente la escena del smooth jazz, estaban dispuestos a darle luz verde, ya que había pasado por «el filtro de Carlos».
Puertolas subraya que la realización de las pruebas diarias estaba llena de risas y colaboración. «Todo el equipo sentía la confianza de Dave y Walt, y eso nos empujaba a querer dar en el clavo con lo que buscaban», dice. «Nos animaban a dar ideas, sin importar lo locas que parecieran, y siempre aceptaban y valoraban nuestras aportaciones a la historia y los personajes».
Antes, los departamentos estaban muy compartimentados; Puertolas recuerda que una simple decisión lo cambió todo. «Tim Lamb diseñaba a los personajes, Charles Ellison los modelaba, Martin Costello les daba movimiento, y finalmente los animadores jugaban con ellos», explica. «Pero todos los departamentos tenían la misma meta: dar vida a los diseños de Tim. Así que durante la preproducción creamos una “sala de personajes” que nos permitiera trabajar codo con codo. Éramos capaces de mirar a nuestro lado, llamar la atención sobre algo y arreglarlo al instante. Gracias a esto no solo aceleramos el proceso, también nos ayudó a conocernos mejor. Fue genial poder aprender de unos artistas tan talentosos».
La pantalla verde
Debido a la buena respuesta global que tuvo Trolls, el director Walt Dohrn reflexiona que, durante la producción de TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL, su equipo sintió que la secuela pudo hacerse sin que el estudio los presionara. Subraya también que él y el codirector Dave Smith, compañeros de fechorías desde sus años de estudiantes en el Instituto de las Artes de California, comparten su devoción por la comedia arriesgada que va de la mano de un relato emocionante. Así que, ¿qué puede haber más heterodoxo que colocar a un humano dentro de una animación?
«Contábamos con su guía, pero no nos vigilaban, ni nos ponían en duda o se asustaban», cuenta Dohrn. «DreamWorks confió en nosotros y, gracias a eso, la película es más salvaje de lo que esperas. La secuencia del smooth jazz -y meter a Dave en la escena, especialmente- fue la prueba de que los locos se habían hecho con el control del manicomio. «Nos preguntamos: “¿Podemos hacerlo? Bueno, nadie nos está diciendo que no...”».
La coproductora Kelly Cooney Cilella recuerda a miembros del equipo preguntando quién iba a hacer del camarero en la playa: «Respondí: “¡Pues Dave Smith!”. Compramos un espray de bronceado, alquilamos un traje de marinero y le grabamos delante de una pantalla verde. Esas son las atractivas piernas de Dave, que de hecho aparecen de nuevo en los créditos. Es un gran ejemplo de que no nos pusimos límites. Es la escena favorita de todos, y la prueba de que en esta película puede pasar literalmente de todo».
Smith está de acuerdo en que era mejor insertarlo a él en la secuencia un momento que añadir todo un mundo humano en la película. «JC [Wegman], nuestro artista de guion gráfico, dibujó a un camarero de cintura para abajo», recuerda, «y Kendal [Cronkhite Shaindlin, la diseñadora de producción] y el equipo de diseño preguntaron: “¿Vamos a hacer un humano por ordenador?”. “¡No!”, respondimos. “Hagamos lo que haría una tele local y pongamos las piernas de alguien sobre una pantalla azul”. Y resulta que yo soy fácil de convencer».
Efectos
Explorar ideas en escenas claves ayudó a llevar a buen puerto ese minimundo en el que un forzudo Señor Dinkles surge de la arena y un avergonzado Chaz se marcha flotando; todo mientras, en una secuencia paralela a la del smooth jazz, Cooper descubre un oasis hecho de purpurina.
En conformidad con las decisiones de los animadores -crear un contraste entre la presencia y la ausencia de desenfoque de movimiento, enfrentar una animación sincopada con otra suave-, el supervisor de efectos visuales Matt Baer trabajó con los departamentos de creación de imágenes por ordenador para dar con las ideas que permitieran integrar a los Trolls en localizaciones minúsculas.
Simular un montón de purpurina exigía integrarla apropiadamente con el movimiento de los personajes en la escena. «Resultaba que ver la simulación de una partícula repetida cada dos fotogramas quedaba bien», explica Baer. «Nuestro departamento de efectos dio con una técnica que permitía que la mayor parte del montón de purpurina de Cooper estuviera animada de forma repetida cada dos fotogramas. Esto lo combinamos con que los granitos de purpurina que caían estuvieran animados a un fotograma, lo que ayudaba a que casara con la fluidez de la animación del personaje».
Baer comenta que la misión de su trabajo conjunto con la diseñadora de producción Kendal Cronkhite Shaindlin a lo largo de la producción era encontrar el punto donde la creatividad se encuentra con la tecnología. «Kendal y yo terminamos dando con el enfoque y el ritmo de trabajo adecuados», dice. «Una secuencia tenía una escena completamente cubierta de purpurina, mientras otra pedía un estilo de animación de dos dimensiones y renderizada con un aspecto como de aerógrafo».
Iluminación
Aunque el mundo de los Trolls Pop fue el más difícil de iluminar, la secuencia del smooth jazz tampoco fue un camino de rosas. Como explica al director Walt Dohrn, «cuando el entorno es tan denso y hay tantas texturas es muy complicado llegar a la fase final».
Bajo la batuta de SCOTT MCKEE, responsable de iluminación en esta producción (y que fue supervisor de efectos generados por ordenador en Trolls), la fase final de la escena subraya los colores que dan vida a cada grano de arroz de esas piezas de sushi en las que Poppy y Branch se convierten. La escena tiene lugar al atardecer junto al mar, y el equipo de McKee no solo tuvo que hacer frente a los innumerables detalles del atardecer, también a que Chaz flotara sobre el sol.
Afortunadamente, a la iluminación le vino bien que hubiera planos de imágenes reales. Como cuenta el supervisor de efectos visuales Matt Baer, «nuestro departamento de efectos reunió telas para cada plano y construyó pequeños decorados que permitían una iluminación personalizada y el control de golpes de aire. Grabamos en alta velocidad y con un objetivo macro, al tiempo que éramos fieles al comportamiento y la escala de cada material. Scott contribuyó a iluminar estos pequeños decorados de forma que estuvieran en consonancia con lo que íbamos a renderizar».
La reconciliación del Reino de los Trolls
Sin duda, la secuencia más compleja -tanto para narrar como para ejecutar- de TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL fue la reunión de las tribus del reino en la escena conocida como «Just Sing». Se trata del final del camino para nuestros héroes, donde los Trolls de los diferentes géneros descubren que sus sonidos distintivos siempre han estado dentro de ellos.
«Cuando los latidos del corazón de Cooper y su hermano gemelo les hacen darse cuenta de que la música está en sus corazones, espíritus y cultura -y no en las cuerdas-, se hace posible la reconciliación de los Trolls, que reconoce y celebra la diferencia», explica el Dr. Darnell Hunt, consultor de sociología en la producción. «Es la idea opuesta a asumir que todo el mundo tiene que ser igual, que es lo que ha provocado la tensión entre Poppy y Barb».
Al ser preguntado, el director Walt Dohrn admite que este momento es su favorito de la nueva entrega. «El ritmo en mitad del silencio», cuenta. «¿Cuando en mitad del silencio los corazones laten y comienza el beatboxing? Los Trolls Country empiezan con el zapateo. Espero que a estas alturas nos hayamos ganado vivir un momento así. Puede haber pedos de purpurina y juegos y diversión, pero es necesario que se dé un momento así. Cuando llegamos a ese punto, siento que lo hemos tenido éxito en nuestro cometido».
Con tantas voces talentosas de casi todos los géneros musicales, así como aclamados intérpretes de drama y comedia, los cineastas tenían por delante una tarea hercúlea para mezclar todo de forma armoniosa en el clímax.
La productora Gina Shay reflexiona que TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL ha conseguido que hacer la primera película pareciera pan comido. «Este es el musical más complicado que jamás haya emprendido, y nunca he tenido un compañero más increíble con el que comentar ideas -desde la grabación y el reparto hasta cómo acometer siete canciones originales de multitud de géneros- que Justin».
Para que «Vamos a cantar» funcionara, era necesario que todos los géneros destacaran, no solo el pop. También se necesitaban las voces de casi todo el reparto, lo que supuso que el equipo viajara por todo el mundo para grabar a prácticamente todos los intérpretes. «Anna, Justin, Anderson, Mary y Kelly son las voces destacadas del tema, pero ellos son solo parte de todos los que están en el tema», dice Shay.
«Incluso volé a Corea del Sur solo para grabar una noche a la banda de K-pop Red Velvet», continúa. «Esta película se ha grabado literalmente por todo el mundo».
Un temazo relajado
Justin Timberlake, que creó el éxito «Can't Stop the Feeling!» para Trolls, vuelve como productor ejecutivo musical. Aunque se unió a la producción de la primera parte cuando las versiones ya estaban decididas, para TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL los cineastas pudieron ampliar su participación e incorporarlo a todos los aspectos musicales de la producción.
Al hablar de la escena en la que Branch y Poppy se separan, y Branch canta anhelante sobre ella, el director Walt Dohrn reconoce que no puede reprimir las lágrimas al verla. «A la canción “Perfect for Me” la llamamos el “solo de Justin”», cuenta. «Notamos que los espectadores se emocionan con la canción, y nosotros hemos llorado mucho con esta parte».
La productora Gina Shay añade que cuando Timberlake se sentó a escribir, sus palabras nacían del corazón de la película. «Creo que no se puede estar más cerca de escribir la canción correcta para el momento adecuado», dice, «que siendo la persona que actúa en la película y, además, crea las canciones».
Junto a Timberlake está en TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL el ganador del Premio Oscar® LUDWIG GÖRANSSON, que estaba trabajando en la banda sonora de Black Panther cuando empezó la producción de TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL. El que terminaría siendo el otro productor ejecutivo musical de la película no tardó en estar en la cortísima lista de talentos que Universal manejaba como posibles compañeros de producción musical de Timberlake.
«Al añadir a Ludwig a la ecuación -con su compromiso por encontrar lo único e inesperado-, hemos conseguido una banda sonora alucinante», dice Shay.
Göransson, sueco de nacimiento, es un entregado fan de su compatriota MAX MARTIN, pero nunca había tenido la oportunidad de compartir estudio con el experto autor de incontables éxitos pop. Para los temas originales, Timberlake y Göransson colaboraron con Martin y una talentosa joven, la compositora SARAH AARONS.
«Juntos crearon dos canciones asombrosas, una de ellas un temazo relajado titulado “The Other Side”», cuenta Shay. «La otra canción está hecha para la mitad del tercer acto. Es el mismo momento que ocupaba «Can't Stop the Feeling!» en la primera película, pero esta vez la canción tenía que tener una resonancia emocional más profunda..., así que transmite una sensación muy diferente».
Göransson emocionó a sus compañeros. «Es genial tener productores como Ludwig, que no tiene miedo de ir hasta el final para hacer que cada canción sea lo más especial posible», afirma Ramos. «Con el trabajo que ha hecho con Kendrick y Childish Gambino, Ludwig es un genio. Su oído para la música es increíble».
La voz y alma de Poppy se muestra por completo de acuerdo con Ramos acerca de su compañero creativo en la película: «Justin es un músico supertalentoso; yo estaba muy nerviosa porque quería estar a la altura», confiesa Kendrick. «Él me tranquilizó y fue un productor vocal increíble. Fue genial poder contar con alguien tan sensato. Saber que se adapta con gran facilidad a los diferentes estilos de cada persona me dio confianza para volver a trabajar con él. Sé que con él estoy en buenas manos; es como contar con el mejor paracaídas».
Componer el musical
Theodore Shapiro, que ha dado vida musical a éxitos de taquilla como Tropic Thunder, ¡una guerra muy perra!, El diablo viste de Prada y La vida secreta de Walter Mitty, o la serie de HBO Game Change, es el compositor de TROLLS 2 - GIRA MUNDIAL.
«Para hacer que todo quedara cohesionado», cuenta la productora Gina Shay, «Teddy tejió una banda sonora única entre canciones originales y versiones, insertando y acentuando los puntos claves de la historia con una orquesta completa».
Sobre su trabajo, Shapiro dice que «este equipo tenía muy claro hacia dónde querían ir con la historia. Esta es, desde el principio, una película sobre la música y los géneros musicales. Así que desde el minuto uno cuentas, para componer la banda sonora, con una paleta increíble de la que tomar prestados elementos. Me encantó la idea de dejar que el relato de la banda sonora fuera la yuxtaposición de los diferentes géneros».
Shapiro agradeció que las transiciones del pop al funk y del funk al country lo ayudaran a señalar los puntos narrativos. «Los cineastas han articulado de forma magistral sus ideas acerca de los géneros y adónde querían llegar», dice. «Ha sido divertidísimo».
El compositor cree que, ya que la historia trata acerca de aprender a respetar las diferencias, tenía sentido distinguir el mundo de cada tribu en su propio género. «Tratas de establecer un lenguaje musical que funcione para toda la película, al tiempo que diferencias claramente un género de otro», explica. «La banda sonora ilustra el mundo de cada tribu y, a la vez, subraya el tema de la película en su conjunto».