Michel Poiccard roba un automóvil de Marsella. De camino hacia París mata al motorista que le persigue. Buscado por la policía, encuentra refugio en casa de Patricia, una joven americana de la que está enamorado. Al ser interrogada por el Inspector Vital, Patricia se ve inducida a denunciarle para conservar su pasaporte. Cuando ella le previene, ya es demasiado tarde. Michel es abatido en la calle por los disparos de la policía.