Un largometraje de Carlos Saura, un proyecto largamente soñado, contando con su mayor cómplice en la direccion de fotografía, Vittorio Storaro.
Cuarenta años se cumplen en 2021 desde que comenzó el idilio entre Carlos Saura y los musicales. Cuatro décadas desde aquel "Bodas de sangre" junto a Antonio Gades en los que el cineasta oscense ha transitado, siempre con éxito, por el flamenco, las sevillanas, el tango, los fados, la ópera, el folclore argentino y, por supuesto, la jota aragonesa. Ahora llega el turno de la música popular y tradicional mexicana en El Rey de Todo el Mundo.
El casting lo componen Ana de la Reguera, Manuel García-Rulfo, Greta Elizondo (primera bailarina del Ballet de México), Isaac Hernández (primer bailarín del English National Ballet, reconocido con el máximo galardón internacional de su disciplina el Benois de la Danse que otorga la Asociación Internacional de Moscú al mejor bailarín del mundo), Enrique Arce, Damián Alcázar, Manolo Cardona, Izaak Alatorre, Giovanna Reynaud y Eulalia Ramón y la participación de los cantantes Carlos Rivera, Carlos Cuevas, Fela Dominguez y Eugenia León. La coreografía corre a cuenta de Edgar Reyes y la banda sonora original de Alfonso G. Aguilar y Carlos Rivera.
Notas del director (Carlos Saura)
Escucho música mexicana desde niño y ha tenido un gran impacto en mí y en mi amor por la música popular de este país. Fue la época en que Jorge Negrete, Vargas, Los Panchos, Cantinflas e Indio Fernández fueron estrellas en nuestro país. Posteriormente tuve la oportunidad de ir a México varias veces. La primera vez fue durante el Festival de Acapulco con La Caza (La Caza), que recibió un premio. Luego, hice una película en México: Antonieta, basada en el guión de Carriere, protagonizada por los actores mexicanos y franceses, Isabelle Adjani y Hanna Sygula.
En ese entonces investigué a fondo la música popular mexicana: corridos, rancheras, boleros, danzones y algunos más. Hay suficiente material de origen en México para hacer una película musical de ficción fascinante. Se trata solo de tener una visión moderna y no solo histórica. Significa, un enfoque de vanguardia, por ejemplo, sin usar ropa del folclore, sino ropa moderna para mariachis y algunos de los bailes. Reinventar los corridos podría ser parte de una historia donde el amor, la pasión y la venganza se mezclan con la realidad y la ficción, con nuevas voces frescas y rindiendo homenaje a estos relevantes representantes de la música mexicana, sin necesidad de reescribir la historia del país. Siempre he defendido la idea de que la imaginación es una de las herramientas de la realización de películas. Por eso insisto en seguir avanzando con esta línea de escenografía, buscando una renovación, evitando soluciones tradicionales comunes, utilizando las diferentes posibilidades que nos ofrecen las nuevas tecnologías: luz, cámaras digitales de alta calidad, potentes proyectores de bajo consumo, posibilidad de grabación. suena en vivo con pequeños micrófonos ...
La idea de realizar el musical El Rey de Todo el Mundo en un estudio adecuado, con el fin de tener control sobre la historia de ficción que se narra, los bailes y las canciones, así como el rodaje en los apartamentos, cafés, subterráneos, plazas y otros públicos. lugares en la Ciudad de México no es caprichoso. Se trata principalmente de integrar dos mundos, la realidad y la ficción, en un juego visual en el que puedes entrar y salir fácilmente.